Hola!!!! y perdón por el retraso T.T 

La universidad es bastante pesada y como ya solo me falta un año pues todo es aun más complicado, pero bueno, aquí les traigo este cap, espero les guste :)

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-Aléjense lentamente hacia la puerta- indicó Zoro mientras mantenía su arma apuntando hacia Enel- ¡vamos!

Hace no mucho que había llamado a Tashigi por lo que seguro sus camaradas estaban cerca de su posición. Debía mantener la calma y pensar una manera en alejar a Sanji y Luffy de aquel sujeto hasta que pudiera apresarlo.

-No seas tonto, Roronoa- habló Enel mientras dirigía su mirada hacia Luffy- debes saber muy bien que no me encuentro solo y déjame decirte que en este momento estas rodeado, así que será mejor que bajes tu arma

-¿Me crees idiota? En este momento el rodeado eres tú, así que alza las manos y tira toda arma que tengas

Enel sonrió divertido y cruzó los brazos mientras seguía mirando a Luffy.

-¿Quieres que esto se convierta en un tiroteo?- habló- ¿Sabes lo que eso significaría o no?

-Tsk...

Zoro lo sabía. En muchas ocasiones había tenido que estar en medio de operativos muy delicados y cuando ocurrían ese tipo de cosas, las bajas y heridos de gravedad eran inminentes.

"No puedo permitir que Sanji y Luffy salgan heridos"

-¡Será mejor que te rindas, Enel del Clan Shinto!-gritaron al unísono el escuadrón que Zoro había llamado como refuerzo, al parecer estos habían llegado ya al lugar indicado por Tashigi- acabamos de llamar a los demás grupos, somos superiores en número así que ríndete

-Luffy- habló por primera vez dirigiéndose al pelinegro- ¿entiendes ahora porque te pedí que nos fuéramos?- el tono de su voz se hizo suave y su expresión se suavizó- ¿ahora lo entiendes?

Luffy se había mantenido hasta ese momento en silencio y tan solo mirando completamente confundido cómo Zoro y Enel discutían. ¿Tiroteo? ¿Por qué Zoro estaba apuntando con un arma a su novio? ¿Qué estaba pasando?

Al escuchar la voz de Enel, detuvo sus pensamientos y lo miró fijamente. ¿Por qué la expresión del rubio se veía tan lastimera? ¿Estaba triste?

-Luffy...- Sanji trató de tomar de la mano a su amigo pero este le rehuyó y se alejó de donde se encontraban él y Zoro

-Ahora lo entiendo- los ojos de Luffy comenzaron a llenarse de lágrimas mientras miraba a sus amigos y seguía alejándose lentamente de ellos- ustedes... lo que todos quieren es alejarme de él

Zoro estaba desesperado para ese momento. ¿Qué le sucedía a su amigo? ¿Qué le había hecho ese maldito para que dijese esas incoherencias?

-Por supuesto que queremos que te alejes de él, Luffy ¿Qué no entiendes?- Zoro apretó el agarre de su arma y siguió apuntando a Enel, pero miró de reojo al su mejor amigo- Es un maldito desgraciado que te secuestró y quiere alejarte de tu familia... de tus amigos

-¡No!- gritó Luffy cerrando los ojos- No es cierto, Enel... él me ama, él solo quiere que estemos juntos

-Luffy, vamos a hablar ¿Te parece?- Sanji a pesar de sus heridas y del cómo se encontraba trató de acercarse al pelinegro, pero este le rehuyó aún más

-No los escuches, Luffy- Enel no dejaba de observarlo y le sonrió con una dulzura que pocas veces mostraba- ven conmigo, vámonos juntos de aquí, ve lo que quieren hacer- dijo señalando con un gesto hacia Zoro- quieren matarme para separarnos ¿Quieres eso?

-¡No!- Luffy tembló del solo escuchar lo que Enel había insinuado- ¡Zoro¡ ¡Baja el arma, por favor!- sin pensar en lo que hacía, fue corriendo hacia donde se encontraba Enel y se colocó frente a él, para luego extender los brazos y mirar fijamente a su mejor amigo- ¡No le hagas daño! Él es la persona que amo

-¡¿Qué haces?!- Zoro comenzó a temblar y el agarre en su arma se hizo muy doloroso, no podía apuntarle a su mejor amigo, era demasiado cruel para él algo así- ¡Aléjate de él, Luffy, te hará daño!

-¡No lo hará, Zoro! ¡Él me ama! ¡¿Por qué quieres separarme de él?!

Enel se acercó por detrás y abrazó a Luffy para luego darle un beso en la mejilla.

-Porque me odia, Luffy, todos ellos me odian

-¡Zoro! No le haga daño, él...

-¡No lo escuches, Luffy!

Aquella voz fue suficiente para que el pelinegro se mantuviese en silencio. Su corazón comenzó a latir desesperadamente y su cuerpo comenzó a temblar de sobremanera.

"¿Por qué? ¿Por qué me siento así?"

Lentamente giró su mirada hacia la persona que había gritado su nombre segundos antes y cuando sus ojos hicieron contacto con los contrarios sintió sus piernas perder toda su fuerza y cayó de rodillas en el suelo. Esos ojos grises, aquella cabellera negra, aquel rostro mostrando una expresión llena de ansiedad y preocupación, dolor y miedo pertenecían a la persona que jamás creyó volvería a ver... no después de la última vez que conversaron fuera de su departamento.

-T-Torao

...

...

Había prometido quedarse y esperar que Zoro rescatase a Luffy, pero Trafalgar no pudo mantener la cordura. No después de que aquella policía de gafas recibiera una comunicación del peliverde indicándole que necesitaba que los refuerzos ingresasen de forma inmediata.

"Luffy está en peligro"

Su mente solo se llenó de ese pensamiento y su cuerpo actuó sin que pudiese detenerse a pensar en nada más. Para cuando se dio cuenta, le había quitado un arma a uno de los agente que resguardaban la zona de operaciones en donde se encontraba y luego de liarse a golpes con varios otros que trataron de impedirle el paso, llegó a la entrada de aquel lugar donde se encontraba la persona más importante de su vida.

"Luffy, espérame"

Corrió sin tener la más mínima cautela, no le importaba nada en ese momento, solo encontrar a Luffy, abrazarlo y pedirle perdón, eso era lo único que le daba fuerzas para seguir adelante.

Durante algunos minutos estuvo dando vueltas por el lugar hasta que escuchó voces a lo lejos. Estas sonaban exaltadas y supo entonces a donde debía dirigirse.

"Luffy... Luffy"

Cuando llegó hacia donde se encontraban Roronoa y los demás observó a lo lejos algo que jamás imaginó. Luffy estaba...

-¡No lo hará, Zoro! ¡Él me ama! ¡¿Por qué quieres separarme de él?!

Aquel desgraciado se acercó por detrás y abrazó a Luffy, para luego darle un beso en la mejilla.

-Porque me odia, Luffy, todos ellos me odian

-¡Zoro! No le haga daño, él...

-¡No lo escuches, Luffy!

No pudo contenerse más, caminó rápidamente hacia donde se encontraba Zoro sacándose de encima a algunos agentes que quisieron impedirle el paso por su seguridad.

Observó a Luffy en todo momento y mayor fue su preocupación cuando este cayó de rodillas al suelo.

-T-Torao

Escuchar su nombre dicho de una forma tan lastimera desgarró su corazón. Luffy comenzó a llorar silenciosamente, pero manteniendo su mirada fija en él. Pasaron varios segundos de esa forma y el doctor no pudo aguantar más. Trafalgar corrió hacia donde estaba el menor, sin importarle nada ni nadie más que Luffy, pero en el instante que iba a agacharse para llegar hacia él, fue recibido por un arma apuntando directamente a su pecho.

-No te atrevas a dar un paso más

Aquel yakuza desgraciado lo miraba tétricamente mientras que con una de sus manos tomaba a Luffy del brazo y lo levantaba bruscamente del piso.

-¿Por qué estas llorando?- se dirigió esta vez a Luffy- ¿es por este idiota?- Enel apretó fuertemente el brazo del pelinegro provocando que este emitiese un quejido de dolor

-¡No lo toques, maldito!- Law apretó fuertemente los puños y usó todo el autocontrol que aún le quedaba para no abalanzarse contra el rubio. Debía recordar que él tenía un arma y podía herir a Luffy, no se perdonaría si algo le pasase por su culpa.

-¿Qué no lo toque?- Enel lo miró burlonamente y acerco a Luffy de forma brusca contra su cuerpo- ¿quieres escucharlo de sus propios labios?- acercó su rostro al cuello del pelinegro y le dio un casto beso- anda, Luffy, dile que me amas, tal como me lo dices cada noche mientras te hago mío

Law mataría a ese maldito, no sabía qué era lo que había hecho con Luffy, pero sabía que el menor no estaba en sus cinco sentidos en ese momento, su mirada perdida y su rostro cubierto de lágrimas así se lo afirmaban.

-Yo...- "¿lo amo?" Luffy no sabía que responder, su cabeza le dolía mucho y se encontraba totalmente confundido

-Suéltalo y ríndete, desgraciado- habló Zoro, quien seguía apuntando al yakuza

-¡Luffy!-Esta vez gritó Sanji- tú no lo amas, él te está manipulando

El pelinegro tomó su cabeza con ambas manos y la apretó fuertemente. ¿Por qué sus amigos estaban diciendo eso de Enel? ¿Acaso tenían razón? ¿Enel lo estaba engañando?

-¿Por qué no respondes?- Enel apretó aún más el agarre en el brazo del menor y su mirada se fue haciendo cada vez más sombría- dije que les dijeras quien era la persona que amas ¿acaso no me escuchaste?

-...- Luffy seguía en silencio, no podía responder, su mente estaba en blanco totalmente

-¡Obedece!- Enel soltó el brazo de Luffy y le propinó una fuerte bofetada que hizo que cayese al suelo

-¡No le hagas daño, hijo de puta!- Law no aguantó ver como aquel miserable golpeaba a Luffy y se abalanzó contra él. Poco le importaba que tuviese un arma, no podía quedarse inmóvil viendo cómo maltrataba al menor.

Tanto Law como Enel comenzaron a pelear en el suelo forcejeando con el arma a la expectativa de todos. Los agentes de la policía y los subordinados del yakuza se apuntaban sin titubear, pero no se metieron en la disputa frente a ellos, después de todo, se movían frenéticamente y si disparaban podrían herir a la persona equivocada.

Luffy observaba la pelea desde el suelo completamente inmóvil. Su cabeza no dejaba de dolerle y todos sus recuerdos y pensamientos viajaban a mil por hora en ese momento. ¿Amaba a Enel? ¿Por qué Torao estaba allí? ¿Por qué todos le repetían que debía alejarse del rubio? ¿Enel le había hecho algo?

Estaba tan sumido en su mente que no notó cuando fue jalado bruscamente hacia el lado donde se encontraba su amigo peliverde. Sanji había llegado sigilosamente hasta donde estaba y lo alejó de donde Torao y Enel se encontraban peleando.

-Todo va a estar bien, Luffy- Sanji lo abrazó mientras lloraba intensamente- él no te hará más daño

En ese momento se dejó oír un disparo y el tiempo pareció detenerse por unos instantes. Luffy dirigió su mirada hasta donde se encontraban Enel y Torao y al ver cómo el rubio se levantaba del suelo con el arma en la mano, dejando hincado sobre sus rodillas al pelinegro, quien tomaba con ambas manos su estómago, supo inmediatamente lo que acababa de pasar.

"No... Torao, tú no..."

En ese momento miles de recuerdo vinieron a su mente. Primero fueron las épocas felices que pasó con el rubio en la universidad, luego aquel día donde este abusó de él en grupo y luego lo marcó en el pecho. Tras esto recordó el día que conoció a Torao, aquel día donde descubrió que vivía a su lado, los momentos felices que compartieron juntos, su confesión, sus besos, su calidez, su voz. El momento en el que lo vio entrar a un hotel con aquella mujer, el momento en el que terminaron, la noche en la que Enel lo encontró y abusó de él nuevamente, cuando lo amenazó y lo obligo a dejarlo todo. El día en que Torao lo vio junto a él y le deseó felicidad... los golpes, los abusos de Enel, su pérdida de cordura, el cómo fue obligado a despedirse de su hermano, de su familia... todo... todo cruzó su mente en fracciones de segundos.

-¡¡¡TORAO!!!

El grito desgarrador de Luffy se dejó oír por todo el lugar. El pelinegro luchaba por zafarse del agarre de Sanji e ir junto al doctor, pero era inútil. Sanji tenía mucha más fuerza que él y no podía permitir que Luffy regresase hacia donde estaba aquel maldito yakuza, podía hacerle daño y no podía permitirlo.

-¡¿Por qué carajos gritas su nombre?! ¡Deberías gritar el mío, Luffy!

Enel gritó sumamente irritado, quiso ir hacia donde se encontraba el menor, pero un rápido y brusco movimiento a su lado lo hizo caer al suelo. No supo cómo de un momento a otro tenía a aquel doctor sobre él apuntándole con su propia arma en la frente. ¿No se suponía que estaba agonizando?

-¡Di tus últimas palabras, malnacido!- Law lo miraba colérico, con una de sus manos presionaba la herida de su estómago y con la otra apuntaba con el arma la cabeza de Enel

-Estás al borde de la muerte ¿A quién quieres engañar?-sonrió el rubio, quien a pesar de su situación, no mostró ningún tipo de arrepentimiento

-Quizá, pero te llevaré conmigo al infierno, maldito

-No tienes las pelotas para hacerlo

Law afianzó el agarré en el gatillo y miró fijamente a Enel. Iba a matar a ese desgraciado allí mismo.

-¡Law!- Zoro debía idear en ese momento algo para evitar que se armase un tiroteo entre ambos bandos, no quería que Sanji o Luffy quedasen en medio de esta. Recordó entonces una táctica que los grupos especiales bajo su mando habían usado una vez cuando tuvieron una misión para combatir la mafia de trata de personas en China, era la única forma de salir de aquella situación, si bien no podría evitar el tiroteo, al menos...- Un nuevo disparo se dejó oír e inmediatamente después, la voz del peliverde- ¡1, 2 y 3... cubrir!

En ese momento 3 escuadrones portando grandes escudos se abalanzaron desde los extremos del y se colocaron frente a Law y las balas comenzaron a resonar en todo el lugar, pero ninguna logro entrar hacia donde se encontraban. Zoro, sin ningún aviso previo, le había disparado en la cabeza a Enel desde su posición antes que Law lo hiciese, después de todo no podía permitir que un civil matara ni siquiera en esa situación, era su deber.

"No mereces ni siquiera unas últimas palabras, desgraciado, moriste sin saber quien acabó con tu miserable vida"-pensó el peliverde

-¡E-Enel!- gritó Luffy

"¿Por qué Enel ya no se movía? ¿Acaso...?"

Desde el centro de aquella "coraza" formada por los escudos, Zoro y otros policías lograban disparar cada cierto tiempo hacia donde se encontraban los yakuza, mientras que al mismo tiempo retrocedían lentamente hacia la salida del lugar.

Dos agentes apartaron a Law del cuerpo sin vida de Enel y lo protegieron con sus cuerpos, él era un civil y era una prioridad, por más que hubiese roto todas las reglas e ingresado al lugar sin autorización.

El tiroteo duró varios minutos hasta que por fin Zoro y los demás pudieron salir del lugar. Al ser ellos mayores en número a los yakuza, pudieron deshacerse de ellos sin lamentar alguna baja.

-¡Lleven al herido al helicóptero, ahora!

Apenas se encontraron en zona segura, Zoro ordenó que atendiese a Law inmediatamente, el moreno había perdido bastante sangre y era urgente que fuese intervenido.

-E-Enel... T-Torao- Luffy seguía llorando en los brazos de Sanji, mientras observaba como varios agentes trasportaban al doctor al helicóptero.

- Luffy- habló Sanji- te prometo que Trafalgar va a estar bien ¿me oyes?

-E-Enel... T-Torao- era todo lo que repetía el menor

-Luffy, Sanji- Zoro se abalanzó hacia ellos en ese momento y los abrazó mientras comenzaba a llorar como un niño- maldición... perdón por demorar tanto

Otras voces se dejaron oír en aquel instante. A lo lejos venían corriendo, Mihawk, Shanks, Ace y Marco, quienes al escuchar que la operación había terminado, no dudaron un segundo para ir en busca del pequeño pelinegro.

-¡Luffy!

...

...

Abrió los ojos algo aturdido y al observar a su alrededor, supo inmediatamente que se encontraba en el hospital Grand Line.

"No estoy muerto"

Aquella afirmación lo alegró en demasía, porque eso significaba que podría ver a Luffy de nuevo, aun si fuese solo para arrodillarse y pedirle perdón, no le importaba.

"Luffy"

En ese momento la puerta de la habitación se abrió y dejó ver a la doctora Robin, quien sonrió al ver que Law ya se encontraba despierto.

-Me alegra ver que ya recuperaste la conciencia

-¿Cuánto tiempo llevo inconsciente?

-Dos días- Robin se acercó hacia la camilla donde estaba recostado el doctor y se sentó en una silla a su lado- la operación fue bastante difícil, pero eres muy fuerte

-Luffy...

-No está herido- respondió Robin intuyendo la pregunta de Trafalgar- al menos no físicamente

-¿Qué quieres decir?

-Escucha Law- Robin suspiró y su rostro se encogió mostrando una profunda tristeza- Luffy se encuentra en un estado post-traumático muy fuerte

-¡D-Dónde...-Law intentó levantarse de la camilla, pero fue detenido por un fuerte dolor eh su abdomen.

"Maldita sea"

-No te muevas, aún estás muy débil y aunque pudieras salir de aquí no podrías ver a Luffy

-¿Por qué? ¿Dónde está?

-Se encuentra sedado, cuando llegó aquí al hospital tuvo un ataque y tuvimos que sedarlo para que no se hiciese daño, todo lo que gritaba era el nombre de aquel yakuza y el tuyo

-¿Su nombre?

"¿Por qué Luffy gritaría su nombre?"

-Law, escucha- Robin suspiró, esto iba a ser bastante complicado de explicar- por todo lo que Zoro, Sanji y Ace me contaron respecto al comportamiento de Luffy desde la aparición de ese sujeto hasta el día de su rescate, puedo inferir dos cosas, y no son nada buenas

Law la miró expectante, Robin era una excelente psiquiatra, sabía que sus diagnósticos nunca erraban.

-La primera es que Luffy y aquel hombre se conocían desde hace tiempo. No sé qué clase de relación hayan tenido, ninguno de sus amigos más cercanos ha oído hablar de él, pero de lo que estoy segura es que aquel hombre le hizo algo terrible a Luffy, algo que lo dejó marcado hasta hora y que no fue capaz de superar.

-Tsk...-Law apretó fuerte los puños y se mantuvo en silencio esperando a que Robin continuara

-La segunda es que...- Robin se mordió el labio inferior y prosiguió- tras encontrarse con él nuevamente y considerando la situación en la que se encontraba luego de que su relación contigo terminara, aquel sujeto hizo algo para que Luffy lo obedeciera. Lo mantuvo cautivo tanto tiempo, manipulo tanto a Luffy que... ni siquiera es un síndrome de Estocolmo, no..., es peor que eso. Luffy se auto convenció de cosas irreales, su mente se volvió un completo caos y debido al trauma que sufrió en el pasado y el trauma del presente, Luffy no sabe distinguir entre lo real y lo verdadero, en pocas palabras... no está cuerdo en este momento

-Q-Quieres decir...

-Necesita de atención psiquiátrica, Law- Robin apretó los puños fuertemente- superar todo esto, necesita de todos nosotros

-¡Maldición!- no supo desde cuándo, pero sus mejillas ya se hallaban húmedas en ese momento. No podía creer que Luffy estuviese tan mal, que hubiese sufrido tanto hasta el punto de perder la cordura- ¡Es mi culpa! ¡Todo es mi culpa maldita sea!- Law colocó ambas manos sobre su cabeza y comenzó a jalar sus cabellos con brusquedad- ¡Soy un desgraciado! ¡Un maldito!

-¡Law!- Robin lo tomó por las muñecas y le tiró una fuerte bofetada- ¡Tienes que calmarte! ¡¿Crees que echándote la culpa podrás ayudar a Luffy?! No... de esa forma no se solucionará nada, tienes que se fuerte por él ¿entiendes? Para que Luffy pueda mejorar... para que pueda superar todos estos traumas te necesita a su lado, así que quédate quieto, recupérate lo antes posible y se un apoyo para él... ¡entendiste!

El moreno nunca había visto tan seria a Robin desde que la conoció, dejó de hacer fuerza y solo asintió como un niño pequeño siendo regañado por su madre tras haber hecho algo malo.

-¿C-Cuándo podré verlo?

-Mañana se le retirará el sedante, y toda esta semana quiero tener sesiones con él, para evaluarlo con más detalle y tener un mejor diagnóstico. Paulatinamente podrá ver a miembros de su familia y cuando esté listo para verte... no dudes que te lo haré saber ¿Está bien?

-Está bien- Law suspiró resignado y se recostó nuevamente en la camilla

-Muy bien, es hora de irme- Robin miró su reloj de muñeca- debo atender a un paciente, descansa ¿ok?

-Si

Robin estaba por salir de la habitación, pero la voz de Law la detuvo.

-Robin...

-Dime- la doctora no giró, se mantuvo inmóvil en su lugar esperando a que Trafalgar prosiguiese

-Te lo encargo...- un sollozo casi imperceptible se dejó oir- ayúdalo, por favor

-Lo haré

Y sin decir, Robin cerró la puerta del lugar.

...

...

-Ha pasado un mes, Zoro

-Lo sé

-No puedo esperar por verlo, lo extraño mucho ¿sabes?

-Yo igual, pero hoy es el gran día

-Sí- Sanji se recostó sobre el hombre de su novio mientras caminaban juntos hacia el ascensor del hospital- solo debemos seguir las indicaciones de Robin y verás que todo marcha bien, después de todo, ella nos dijo que Luffy ha progresado mucho, que se encuentra bastante mejor

-Lo sé... eso realmente me alivia

La pareja entró al cuarto metálico y presionó el botón que indicaba el número cinco, solo hacían falta unos minutos más y podrían ver a su amigo

...

...

-Zoro, Sanji

La sonrisa de Luffy al pronunciar sus nombres fue suficiente para que los mencionados se abalanzasen sobre el pelinegro para darle un fuerte abrazo

-¡Luffy!

-¡Te extrañamos tanto!

Tal como les había dicho Robin, Zoro y Sanji hablaron de temas divertidos junto a Luffy, quien solo sonreía ante las anécdotas de sus compañeros y el cómo estos pasaban de miradas dulces a comenzar a pelearse en segundos por cosas triviales, sin duda ellos jamás cambiarían.

Habían pasado ya dos horas, cuando la mención de una persona dejó inmóviles a Zoro y Sanji.

-Chicos... sé que la doctora Robin no quiere aun que sepa de él, pero...- Luffy los miró con súplica- podrían decirme ¿cómo está Torao?

-Luffy...

Sanji quería decir algo, pero Robin les había prohibido hacerlo, no estaba bien el desobedecerla.

-Por favor- Luffy agachó la cabeza- solo quiero saber si está bien, no se nada de él desde...-apretó los puños y levantó la mirada hacia sus amigos- por favor

-Él está bien- habló Zoro- no te preocupes por nada Luffy ¿está bien?- el peliverde acarició gentilmente los cabellos azabache de su pequeño amigo y sonrió- te aseguro que muy pronto sabrás más de él

-G-Gracias- Luffy sonrió genuinamente después de mucho tiempo

...

...

El sonido de su celular lo despertó y tras luego de fijarse de quien era la llamada, la respondió inmediatamente.

-Hola...

-Hola, Law ¿Cómo has estado?- contestó Robin

-Físicamente bien, creo que pronto podré volver a trabajar- suspiró- pero emocionalmente hecho un desastre

-Lo sé

-Lo extraño demasiado ¿sabes? Son ya casi tres meses

-Sí, pero estoy segura que la noticia que te daré hoy te dará mucha alegría

Law se reincorporó rápidamente de la cama al escuchar lo dicho por su colega.

-Quieres decir...

-Ven al hospital en una hora, Luffy te está esperando

-Sin esperar siquiera que Robin cortase la llamada, Law fue rápidamente hacia el clóset de su habitación para buscar algo que ponerse. Una hora... una hora y podría ver a su amado Luffy.

...

...

No podía estar más nervioso en ese momento, sentía todo su cuerpo temblar y su corazón querer salírsele del pecho. Respiró profundamente por casi un minuto y juntado toda su determinación, giró el pomo de la puerta y entró en la habitación. Una vez allí, lo único que sus ojos se detuvieron a observar fue el hermoso rostro de Luffy, quien sentado en la camilla de la habitación, lo miraba intensamente. Sus cabellos se encontraban un poco más largos desde la última vez que lo vio, su piel un poco más clara por el tiempo que llevaba dentro del hospital y sus ojos... dios... sus ojos eran perfectos.

-Luffy

Law se quedó inmóvil en su lugar y luchó por limpiar sus mejillas de las lágrimas que las recorrían. De nuevo había comenzado a llorar sin siquiera preverlo.

-Torao- Luffy se levantó rápidamente del lugar donde estaba y se acercó hacia Law- ¿por qué lloras?

-De alegría- Trafalgar le sonrió, acercándose a Luffy hasta quedar frente a él- soy el hombre más feliz del mundo por tener la oportunidad de verte, Luffy

El menor se sonrojó notoriamente y desvió la mirada avergonzado.

-También estoy feliz de verte- fue lo único que dijo para después girarse y dirigirse a la camilla, indicándole con un gesto a Law que lo siguiese para que ambos se sentasen en ella.

Durante la hora siguiente, no hicieron más que conversar de cosas triviales, tal como lo hacían antes incluso de siquiera comenzar una relación. El estar de esa forma se sentía bastante bien para ambos, les daba la paz y tranquilidad que necesitaban.

-Torao...

-Dime

-Creo que es momento que hablemos de lo que sucedió

Aquella frase dejó a Law en silenció por un largo rato. Sabía que iba a llegar el momento en que debían hablar sobre eso, pero saberlo no era lo mismo que experimentarlo.

-Sí, tienes toda la razón- Law observó fijamente al menor y le sonrió tristemente- hablaré primero ¿está bien?

Luffy asintió y esperó a que el moreno prosiguiese.

-Yo nunca me enamoré antes. Toda mi vida siempre viví siendo un playboy a quién solo le importaba el placer y nada más. Tenía muchos compañeros y compañeras sexuales que no significaban nada para mí más que eso. Pensé que toda mi vida iba a seguir así, que nunca iba a tener la necesidad de sentir aquello que las personas llamaban amor, pero fui un completo estúpido, Luffy- Law quiso tocar la mano del menor, pero se detuvo a medio camino. No, el no merecía siquiera tocarlo- todo cambió cuando te conocí. Al inicio quería divertirme contigo, solo llegar a intimar y después dejarte como muchas veces había hecho con tantas personas antes, pero no pude evitar enamorarme ¿sabes? Eres una persona tan especial, tan hermosa y adorable que no pude evitar caer completamente por ti y eso... eso me aterró- Law apretó fuertemente los puños- no quería sentir lo que sentía, no quería ser vulnerable frente a ti, fui egoísta, cobarde y estúpido. Después de que nos hicimos novios, yo quería probarme todavía que era el mismo de siempre, que podía ir y acostarme con cualquiera como antes y que no pasaría nada, que todo estaría igual, como siempre. Pero no fue así. Aquel día que me enviaste aquel mensaje, cuando me viste entrar a un hotel con aquella mujer, yo traté de ser como antes pero no pude. Mi cuerpo no reaccionó en lo más mínimo, ni con ella ni con nadie. Me fui de ahí sintiéndome una porquería y cuando llegué a mi departamento, recibí tu mensaje y... bueno todo lo que sucedió después ya lo sabes- Law se reincorporó de la cama, se colocó frente a Luffy y se arrodilló frente a él.

-T-Torao

Trafalgar colocó su cabeza en el suelo y comenzó a hablar nuevamente.

-Perdón, Luffy, te pido perdón por todo el daño que te hice, sé que no lo merezco, pero... perdóname, por favor

Luffy se arrodilló frente a él y de forma delicada hizo que Law levantase la cabeza y lo mirase a los ojos.

-Te perdono, Torao, así que...- Luffy comenzó a llorar- ya no llores

Con las yemas de sus dedos, Luffy retiró lentamente las lágrimas de las mejillas del doctor. Dedicándole una tierna sonrisa, una sonrisa hermosa y genuina.

-Gracias, Luffy- temblando y lleno de inseguridad- Law llevó una de sus manos a una de las mejillas de Luffy y la acarició con ternura- Muchas gracias

...

...

-Se está haciendo tarde, es hora de que me vaya o Robin me regañará

Law no quería irse, por supuesto que no. Si fuera por él, permanecería junto a Luffy durante toda la eternidad, pero sabía que eso no era posible. El menor se encontraba aun en tratamiento y a pesar que mostraba ya bastante mejoría, todo debía ir con tranquilidad, todo a su tiempo.

-Sí, tienes razón- Luffy se entristeció, pero sabía que eso era lo correcto. Robin se lo había dicho muchas veces su salud era y siempre debía ser lo primero para él

-Antes de que me vaya- Law tomó la mano de Luffy entre las suyas y lo observó fijamente- quería agradecerte nuevamente, Luffy. Sé que no tengo el derecho de pedirte nada, pero yo... quiero que me permitas seguir viniendo a visitarte- Law se mordió el labio inferior y continuó- No me importa guardar para siempre el amor que siento por ti, no me importa si jamás vuelves a amarme, no me importa si rehaces tu vida con alguien en un futuro... no me importa- hizo una pausa y continuó- lo único que me importa es que me permitas estar a tu lado, ya sea como un amigo, como un conocido o como un compañero de trabajo, pero por favor...permíteme seguir a tu lado, poder verte de vez en cuando, saber que estás bien... para mí eso es más que suficiente.

Luffy lo observó por varios segundos y tras suspirar profundamente se soltó del agarre del doctor.

-No me mientas, Law

Escuchar su nombre de esa forma dicho por Luffy lo sorprendió muchísimo. Él no lo llamaba así.

-No estoy mintiendo, Luffy yo...

-¿No te importa?- Luffy lo miró dolido- si en el futuro me caso con otra persona... ¿no te importa?

-Luffy...

-¿Es suficiente para ti el solo verme?

-Luffy...

-¿Eso significa entonces que no me amas?

Trafalgar entendió entonces que había expresado mal lo que quería decir. Por supuesto que le importaba si Luffy en el futuro rehacía su vida con otra persona y por supuesto que no era suficiente para él solo verlo de vez en cuando, pero no tenía derecho de pedirle nada al menor, maldición, si Luffy no quería verlo jamás en su vida, era algo que se merecía y con creces.

-Por supuesto que no Luffy- Law lo miró fijamente- te amo, más que a mi vida, te amo demasiado

Luffy frunció el ceño.

-Entonces por qué...

-No tengo derecho a pedirte nada- Law sonrió tristemente- te he hecho tanto daño que... si en este momento me dijeses que no quieres volver a verme, no tendría fuerzas para oponerme, porque me merezco eso y más, merezco que me odies, porque soy un desgraciado que...

Todo fue tan rápido que solo sintió su mejilla arder y observó la mano de Luffy a pocos centímetros de su cara. Luffy lo había abofeteado, había hecho enojar tanto al menor que hasta había llevado a Luffy a aquello.

"Soy un idiota"

-¿Realmente me amas?- Luffy lo miró molesto- si lo hicieras no hablarías de esta forma tan cobarde, Law

Trafalgar tomó su mejilla izquierda con una de sus manos y agachó la mirada.

-Si me amas no puedes darte por vencido así de fácil, si te digo que te vayas tú debes de quedarte, si te digo que te alejes, tú debes mantenerme cerca, si te digo que no me toques tú...- Luffy hizo una pausa y acercándose hacia al docto levantó su barbilla suavemente y obligó a que este lo mirase- si digo que no me toques, tú debes besarme

Después de eso Law sintió los labios del menor tomar los suyos de una forma dulce y casta. Fue un roce, pero solo eso fue suficiente para que el corazón de Law se derritiese por completo.

-¿Sabes por qué debes hacerlo?- habló Luffy una vez ambos se separaron- porque yo también te amo, Law

-L-Luffy...

-Te amo y no me quiero dar por vencido, no quiero huir, quiero recuperarme completamente para ser feliz, al lado de mi familia, de mis amigos- hizo una pausa y tomó las manos de Law- a tu lado

-No merezco tu amor

-No puedes evitar que sienta lo que siento- Luffy le sonrió- si me amas, lucha junto a mí ¿estás dispuesto, Torao?

Law sonrió y llevó las manos con las que el menor tenía sujetas las suyas hacia sus labios y besó tiernamente sobre sus dedos.

-Lo estoy, lucharé junto a ti- Law atrajo el cuerpo del menor hacia el suyo y lo abrazó con todas sus fuerzas- Te amo, Luffy

-Yo también te amo, Torao

"Si todo pereciera y él quedara, yo seguiría existiendo, y si todo quedara y él desapareciera, el mundo me sería del todo extraño, no me parecería que soy parte de él"

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Espero les haya gustado :)

El próximo capítulo sí es el final final, porque en si quiero que aparezcan todas las parejas, al menos un pokito <3 y obviamente ver como temina el LAWLU <3 Lo publicaré cuando este ciclo acabe, ya que estoy gaciendo mi Trabajo de investigación y me quita tiempo eso también :( Pero de que lo vyo a subir lo voy a subir :)

Gracias a tod@s por sus comentarios y votos.

L@s adoro!!!!

Besos!

pd: La frase "Si todo pereciera y él quedara, yo seguiría existiendo, y si todo quedara y él desapareciera, el mundo me sería del todo extraño, no me parecería que soy parte de él"  es de Emily Bronte, todos los créditos.