Capitulo 27
Las chicas miden cada reacción que tiene Samanta, me parece que están exagerando, ella es muy buena, están locas y sus celos no las dejan ver con claridad.
- ¿Quieres almorzar con nosotras?- las chicas taladran literalmente mi cuerpo con la mirada, pero es la única forma que tengo para que se conozcan.
-Si claro me encantaría- sonrío y las cuatro nos encaminamos a comer pizza, hasta que al fin.
- Debes de estar feliz por tu aniversario- Cami y Ki no han dicho nada desde que llegamos, creo que fue mala idea invitar a Samanta.
-Sí, la verdad estoy demasiado emocionada en dos dias estaremos de fiesta- no miento cuando digo que él tiempo pasa demasiado rápido, ya casi llega el tan esperado día, mañana me reuniré con mi suegra para que me ayude, única y exclusivamente con la comida, mi madre se encargará de invitar a las personas.
-Debes estar muy enamorada, es lindo espero que te dure- noto algo en su tono de voz, pero decido no darle importancia ya que yo sé que este tipo de cosas no le debe de gustar mucho, la pobre sí que sufrió en el amor.
-Claro que le va a durar, ellos están hechos el uno para el otro- eso es verdad lo estamos, aunque en mi cabeza sigue rondando la conversación que tuve con Sebas.
-Eso es lo que uno piensa, pero puede que el estuviera destinado para otra persona mas antes de que ella llegara- la miro sin poder creer lo que esta diciendo, entiendo que su dolor no deje ver que el amor para toda la vida existe, pero no por eso va a decir esas cosas.
- ¿Qué quieres decir Sara?- Cami se está exaltando, lo mejor será dejar el almuerzo hasta aquí y volver a casa.
-Chicas lo mejor será que nos vayamos estoy un poco exhausta- las chicas asientan y al mirar a Samanta veo que esta algo enojada, mejor nos vayamos así la dejamos sola para que pueda pensar y recomponerse de su enojo.
-Hasta pronto Samanta- ella cambia sus facciones en segundos y una cara tierna aparece en ella, esta mujer es algo extraña pero aun así me cae bien.
-Nos veremos pronto querida- su tono no es de mi total agrado pero lo dejo pasar y camino con las chicas, el ambiente estaba tenso y después de eso se puso peor.
-Esa mujer esta loca, como se le ocurre decir ese montón de estupideces- Camila esta molesta y no es para menos, si yo no conociera su historia estaría igual aunque no justifico su actitud la entiendo, ella esta amargada y rota por dentro, así estaría yo sin mi Sebas.
-Esa mujer lo único que quería era una golpiza de padre y señor mío- suelto una carcajada por su comentario, me las imagino peleando por todo el centro comercial.
- ¿Olvidemos eso quieren? Ella está herida y no justifico su comportamiento pero así actúan ese tipo de personas- ellas ruedan los ojos (como las adoro este par de locas son mi vida) caminamos y vemos ropa mientras pasamos.
-No deberíamos de justificar nada, esa mujer esta celosa de lo que tienes con Sebas ¿En dónde la conociste?- miro el piso recordando el día en que la conocí.
-Fue un día a casa, pensó que la estábamos vendiendo y se interesó en comprarla, de ahí fue donde la conocí, después compró la casa del frente- ellas me miran con horror, su expresión me causa gracia seguimos caminando y me detengo al ver un vestido hermoso que llama mi atención.
Miro el vestido azul que se encuentra enfrente de mí (es hermoso), en la parte de arriba es de color plateado y con lentejuelas, abierto en su cuello con forma de V, en el escote trae una tela transparente, viene caído abajo y es azul intenso muy hermoso, entro a la tienda ese vestido me llama.
-Buenas me gustaría comprar el vestido que se encuentra en la vitrina- la muchacha levanta su mirada y sin decir nada se va por el vestido, llega y al tenerlo de cerca me lo imagino puesto, miro que sea de mi talla, lo pago y me retiro del lugar, esas mujeres ni hablan que maleducadas.
- ¿En dónde estabas?- las chicas vienen corriendo hacia mi, es que no se dieron cuenta que me fui.
-Andaba en una tienda, pensé que me vieron- niegan y retomamos el camino, buscamos el auto -Chicas ¿Que les parece si vamos a mi casa?- se miran entre si debatiéndose entre ir o no ir, el dilema radica en que no quieren ver a mis pequeños saltamontes.
-Me da flojera ver la cara de Samuel- Camila esta resentida por las palabras de Samuel pero así se tratan los dos, siempre se hieren.
-Que ni se diga yo no quiero ir a ver a Aaron -estas mujeres están locas, ruedo los ojos y resoplo, estas parejitas tienen que saber lo que sienten y dejarse llevar a ver si podemos estar todos tranquilos.
-Van a ir a mi casa y punto, no me importa si no quieren, ya les he dicho que no le tienen que dar gusto a ellos, si de verdad no les importan como dicen ¿Qué tiene que ellos estén en casa?- se miran entre si y miran la calle, las agarre ¡Ja! ahora les tocará ir, me tienen que demostrar que no les importa, como si fuera posible.
-Bien iremos pero solo por ti, yo no necesito demostrar que no me interesa ese patán- resoplo, estas niñas acabaran conmigo.
Estoy deseando darme una ducha y comer como Dios manda, las chicas están nerviosas y no dicen palabra alguna, no tengo idea si mis pequeños querubines estarán en casa pero no me preocupa en absoluto, las chicas son las que están preocupadas se los nota lo que sienten, llegamos a la casa y bajamos veo el carro de mis suegros, entro a la casa y escucho una fuerte discusión ( ¡Genial! Bienvenida a casa) ruedo los ojos.
- ¡COMO ES POSIBLE SEBASTIÁN!- las cosas en la casa se sienten tensas no sé de que hablaran tanto.
-Mamá te tienes que calmar, los cuatro deben hacerlo, no es mi culpa- me asomo y todos están de pie menos Sebas, esta sentado con todos a su alrededor, tiene las manos en su rostro, ninguno se percató de que estamos aquí, su rostro refleja enojo y decepción.
- ¿Esta todo bien?- todos me vuelven a ver, Sebas levanta su cara y veo que tiene los ojos llorosos, sin importarme nada boto las cosas que traigo y camino hasta él, me arrodillo para quedar a su altura -Amor ¿Qué te sucede? ¿Por qué estas llorando?- todos están callados, Sebas pone una de sus manos en mi mentón y lo comienza acariciar.
-No es nada mi amor, me asusté cuando te desmayaste- no me creo ni una sola de sus palabras, algo me están ocultando todos.
- ¿Crees que soy tonta? Dime que esta sucediendo aquí ¡Ahora!- baja su cabeza, de un momento a otro se levanta y se va, me siento en mis talones para descansar las rodillas.
Estoy harta de tanto misterio, me cansé de esperar a que Sebastián me diga que tiene un pasado doloroso y no se pueda abrir a mí, no soporto el echo de saber que puede estar asi por el regreso de alguna ex, las cosas estaban bien ¿Por qué el destino quiere que las cosas se derrumben? Estoy decidida a buscar explicaciones después de la fiesta de aniversario.
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Aquí les dejo este capítulo espero que les guste😘 cada vez falta poco para terminar el libro 😭😭😭😭 así que sigas leyendo, comentando y votando 💕💕💕💕
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