antepenúltimo capitulo

JungKook me ha despertado de mi siesta por la tarde. Al verlo me doy cuenta de que sus ropas están cambiadas y que ha salido y yo ni cuenta causa a mi pasión por dormir. El frío a ocasionado que quiera estar en cama más que antes y como negar eso, puedo hacerlo ahora que tengo la oportunidad. 

— Vamos. 

— ¿Dónde? -pregunté tallando mis ojos causa a que aún están llenos de lagañas- 

— Ven aquí dormilona. -sonreí enternecida al escucharle llamarme así- 

Nos sentamos sobre la alfombra, veo un vaso de café y no dudo en sonreír más y tomarlo para beber. JungKook sentado frente mío acaricia mi mejilla, algo va a decirme, lo conozco. 

— ¿Qué sucede? 

— He estado pensando... Mucho, mucho últimamente. -le miro atenta- No hay duda de que enserio quiero estar contigo. Y no es que le tema a tus padres, es solo que quiero que todo pare, ¿me entiendes? 

Asentí con la cabeza enseguida. Él se quedo callado por unos segundos haciéndome sentir nerviosa por lo que dirá. Tome sus manos y acaricie sus delgados dedos. 

—trago saliva- ¿Qué te parece...? -suelta mis manos llevándolas a su abrigo, mi corazón late con demasiada fuerza que no se ni que cara poner, termina sacando un sobre color blanco, aún así no me siento tranquila- Esto. 

Al tenerlo entre mis manos decido abrirlo enseguida sin esperar más. Llevándome la gran sorpresa. 

— JungKook.

— Ahora te entiendo, entiendo lo que sentías cuando viniste a casa, me pediste que nos fuéramos juntos y me negué. -hace una línea con sus labios- ¿Qué piensas ahora? 

Lo miré.

— Hyemin, vámonos juntos, lejos de aquí. 

Mis ojos vuelven a lo que se encuentra en mis manos. Dos boletos a lo que es Busan. ¿Busan? 

No esta tan lejos de Seúl pero... Nunca he vivido en otra ciudad, y no se si realmente es Busan lo que quiero, esto me toma por sorpresa. 

— Estoy sin palabras realmente. -JungKook se queda callado- ¿Para que fecha son? 

Se encoge de hombros, puedo ver el leve puchero en sus labios. Su cabello esta más largo que cuando le conocí y debo aceptar que ahora es lo más tierno del mundo. 

— Kookie, mírame. 

Sus ojos brillan, no se si porque quiere llorar o porque le encanta que le diga así. Creo que son ambas. JungKook es todo un sentimental. Por eso logro sentarme sobre él, tomando su rostro entre mis manos y dejando un casto beso en sus labios. 

— Son para el fin de semana dentro de dos semanas. 

—asentí al escuchar la respuesta de mi antigua pregunta- ¿Porqué Busan? 

— Nací ahí y me gustaría que conocieras a mi madre. A lo que voy es que no es para vivir definitivamente. Iremos a donde tu quieras ir. 

— ¿Quieres que conozca a tu madre? -asiente varias veces- ¿Hablas de algo formal? 

— Quiero algo más que formal contigo, Hyemin. -sus manos rodean mi cintura- ¿Tú no? 

— Claro que si. -sonreí- Es solo que pensar en conocerla me pone nerviosa. -solté una risita- Donde sea que quieras ir esta bien, vayamos y veamos todo a su tiempo. ¿Si? 

— ¿Entonces es un si? 

— Es un total si, JungKook. -peino su cabello con mis dedos- No huimos, solo buscamos paz. 

— Bien dicho. -besa mis labios tomando mi cabeza- Nos vamos a Busan entonces. 

— De haberlo sabido nos íbamos con tu hermano hace dos semanas. 

— Necesitaba tiempo. -asentí- Hye, ¿no veras a tus padres antes de irnos? 

—hice una mueca- No lo sé, creo que ya se resignaron a buscarme, ha pasado más de un mes y ni sus luces. Aunque eso es bueno. -suspiré- Lo pensaré, lo pensaré. 

— Tomate tu tiempo, linda. 

.

Lleva a sus manos una servilleta cuando termino de decirle todo lo sucedido con JungKook hace días. Me mira con una sonrisa y mueve su torso de un lado a otro sacándome una risa. 

— ¡Ay Hyemin! Por Dios, ¿quién lo diría? -me encojo de hombros- Se llevaban mal al principio, después gracias a una fiesta y un alboroto volvieron a casa juntos y pasó. Tuviste tu primera vez y... -le interrumpí- 

— Mmh, pudiste haberte salteado esa parte. -golpee su hombro- Estamos en publico Baek, ¿no quieres que te de un micrófono acaso? 

— Tu familia se interpone... -continua, ignorando lo que le dije- Él se aleja de ti y te rompe el corazón porque se cree toda la mierda que dijeron tus padres de él, te vas hecha un Océano Pacifico. -ruedo los ojos por la manera dramática en la que dice todo- Tu padre va y lo golpea... Tienes un accidente, gracias a eso tu y él se unen, se da cuenta de que no es nada sin ti y... 

— ¿Ya puedes terminar? Vamos Oppa, me hablas como si no se tratara de mi historia. Se todo eso y lo que te faltó por decir. 

— Vale, me emocioné demasiado, disculpa. Es solo que no puedo creerlo, a su vez me pone triste pero... -me mira y suspira- Si eres feliz, tu oppa estará más feliz. 

Sonreí con ternura, Baekhyun pocas veces es de decir este tipo de cosas. Tomo su mano sobre la mesa y le doy un leve pellizco. 

— ¡Auch Hyemin! 

— Te amo mucho. -mis ojos se comienzan a llenar de lagrimas- Perdón, no quiero hacer esto un momento sentimental. 

— Escucha. -esta vez él si toma mi mano- También te amo. Y creo que es demasiado tarde para no querer hacer de esto un momento sentimental porque estoy a nada de llorar.

Reí. Me puse de pie yendo a su lado, abrazándolo y llorando en su pecho. 

— Gracias. 

Baekhyun hizo tantas cosas por mi, demasiadas en realidad. Me ocultó en su casa y millones de veces cuando éramos niños. 

— ¿Porqué me agradeces? Todo es de corazón. 

— Eres la única razón por la que no me quiero marchar. -solloce- 

— Ouh. Hyemin. -su voz se rompió al terminar- Iré a visitarte, vendrás a visitarme, no te alejaras así de facil de mi. 

—reí limpiando mis lagrimas- Digo lo mismo. -le señalé- Oh. -mi celular comienza a sonar de repente, miro de quien se trata y no puedo tardar más de un segundo en no sonreír- Es Kookie. 

— Mmh. 

— Cállate. -me mira ofendido, tiene sus ojos rojos seguramente como los míos- Solo déjame contestar. 

— Vale, pero dile que interrumpe nuestra cita. 

—"Te escuché Baekhyun. Y no es una cita."

— Mierda Hyemin, ¿Cuándo contestaste? 

—me encogí de hombros, quite el altavoz y lo coloque en mi oreja- ¿Qué sucede, Kookie?

—"Pasare por ti. Solo dime a que hora."

— Emm. -mirando a Baekhyun asentir me decido- ¿Te parece ahora? Estaré esperándote afuera.

—"Adentro niña. -sonreí tontamente al escucharlo- Si no, no estaré cómodo. Espérame adentro de la tienda, llego en diez."

— Esta bien, ven con cuidado JungKook. ¿Escuchaste? 

—"Si mi niña. Te veo en un rato."

Cuelga.

— Si te vieras en este momento. -toma de su café- Pareces una niña, enamorada, cegada. 

— JungKook es el hombre de mi vida. -me encogí de hombros- No me veo sin él. 

—suspiró- Te hemos perdido. -sonreí- 

.

He preparado todo, hablamos con los dueños del departamento y hemos quedado en un acuerdo, como la renta es cada dos meses me regresaran el dinero del siguiente mes ya que solo vivimos uno. Me alegra no haber tenido problemas con el departamento.

Aunque sinceramente no estoy listo para dejar ir este lugar.

Aquí nos conocimos Hyemin y yo, aquí comenzó todo y es difícil dejarlo. Tarde o temprano sucedería, estando o no con Hyemin me iría de este lugar.

Extraño mi hogar, la comida de mamá, mi hermano y aunque se que no será para siempre, quiero que Hyemin se de cuenta de lo hermoso que es Busan, de lo hermoso y valioso que es para mi aunque no pensaba así al principio cuando decidí venir a Seúl. 

Namjoon tiene algunos contactos así que nos hizo el favor de pedir un equipo de mudanza ya que si son algunas cosas que no queremos dejar aquí, vender o regalar. 

Toda la semana hemos estado empacando y resolviendo algunas cosas. 

Los padres de Hyemin, ni sus luces. Y aunque estoy preparándome para si llegamos a tenerlos enfrente, no termino de estar listo porque sus padres me causan un gran miedo e inseguridad. Pero eso no es más grande que el amor que le tengo a mi niña. 

— Hye. -toque la puerta del baño- ¿Estas bien? 

Pregunto porque lleva como alguna media hora dentro y no ha salido para nada. No puedo evitar preocuparme. 

— Si, enseguida salgo. 

Escucho como baja la cadena del inodoro, lava sus manos y sale. Frunzo el ceño al mirarla algo rara. No se como describirlo. 

— ¿Te duele algo? -niega enseguida- Dime. -insisto y ella vuelve a negar- ¿Estas cansada de tanto empacar? -solo baja la cabeza- Ven aquí. 

Jalé de su mano hasta su recamara que es donde ahora dormimos. Me siento y hago que ella también para tumbarla junto conmigo en la cama, soltó una risa. 

— Vamos a descansar. 

— Estoy bien. -dice contra mi pecho- 

— Algo te sucede. -acaricio su cabello escuchándola suspirar- Dime cuando quieras, y si no quieres esta bien, solo no estés triste. 

— JungKook. ¿Vas a estar conmigo? ¿Siempre? 

— Siempre. -la abrace más a mi cuerpo- 

— ¿Pase lo que pase? 

— Pase lo que tenga que pasar, Hyemin. Te quiero a mi lado toda mi vida. Eso es lo único que quiero. 

.

— ¡JungKook! -gritó enseguida cuando lo vio a lo lejos- Por Dios, es tardísimo, te entretienes con un perro callejero y no se me olvida que perdiste los boletos del camión que nos llevaría. ¡Ya vámonos! 

La miró con una sonrisa de dientes, un tanto exagerada. Si, perdió los boletos del camión a Busan hace unos días, por lo que ahora tendrán que viajar en el auto de JungKook, sirve que no pagan extra para que lo lleven. 

— Es tan lindo. -alarga- Llevémoslo con nosotros. 

— ¡¿Qué?! -pregunta dejando la caja dentro del auto- Perdiste la cabeza, ya súbete. 

— Últimamente estas de un humor. -suelta una risa cuando ella lo ve mal- Mi linda y hermosa novia. -va a ella- ¿Podemos llevarnos el perro? 

— Aunque me mires con esos ojos Jeon JungKook. -se cruza de brazos- Tres horas de viaje sin contar las paradas que haremos. Apenas podemos cuidando que no nos roben las cosas. Tampoco es que se vaya ir en la mudanza. 

— Amor. -insiste- Lo quiero, aparte es invierno. Morirá congelado. 

— ¿Estas intentando que me de lastima y acepte? Se tus intenciones JungKook. -cerró la puerta- Ni siquiera estamos en un lugar fijo y quieres llevarlo. 

— Esta bien. -hace un puchero- Pero quedara en tu consciencia Im Hyemin. -rodo los ojos al escucharlo- ¿Lista? 

—suspira- El día llego. Nos vamos de nuestro primer apartamento juntos. 

—llega a su lado abrazándola por la espalda- También me pone triste irnos de aquí, pero miremos el lado bueno, es para algo mucho mejor, para crecer como pareja. 

— Tienes razón. -sonríe- No hay que estar tristes. Vamos a Busan. -dice emocionada- 

— Hyemin. -ella se gira para mirarlo- ¿Segura? 

—baja su cabeza- Ellos se han resignado JungKook. -sus ojos se llenan de lagrimas, no logra sostener el sentimiento y llora- Ha pasado bastante tiempo y dejaron de buscarme así que supongo que lo han aceptado y me han sacado por completo de sus vidas. 

— No digas eso. -ella se encoge de hombros- Lo siento. 

— No es tu culpa. No soy la hija que quieren que sea entonces esto iba a pasar, es lo mejor. Solo nos hacíamos daño. Estaré mejor sin ellos. 

— Haré que esta decisión sea la mejor que hayas tomado en tu vida. -acaricia su mejilla- Te haré demasiado feliz, sin importar que me cueste. -asiente dejando caer las ultimas lagrimas- Te amo. 

— Yo también. -sonríe- Ahora si, vámonos. 

Poniéndose en marcha con destino a Busan suben al auto, siguiendo a los de mudanza quienes conocen mejor el camino. 

Durante el transcurso Hyemin durmió la mayor parte del tiempo, algo que tiene angustiado a JungKook causa a todo con sus padres. No quiere que ella tenga una recaída por todo. Sabe que ama a sus padres a pesar de todo lo que le hicieron. 

Solo quiere cuidarla, pero se siente impotente al no poder quitarle esa tristeza. Ha dormido demasiado y ve su rostro diferente. Algo le angustia y sabe que no quiere decirle. 

— ¿Qué hora es? -dice Hyemin al despertar- ¿Oscureció? 

— Ni siquiera he visto la hora. -mira su celular- ¿Qué? ¿Llevamos más de tres horas? Deberíamos estar ya en la ciudad. 

— ¿Estas siguiendo al camión de mudanza? -él asiente- Deberías detenerte y llamarlos, preguntar que sucede. -abraza su cuerpo por el frío que comienza a hacer cuando se esconde el sol- 

— Eso haré. -baja la velocidad, toma su celular sin dejar de mirar a la carretera- Sostenlo y ponlo en altavoz. -ella lo toma y hace lo que dijo- 

— ¿Sucede algo? 

— Hola, si. Pasa que llevamos más de tres horas conduciendo y ni siquiera estamos cerca. ¿Están tomando otra ruta? 

— Así es joven. Por llevar mudanza tenemos que tomar el camino más largo. 

—frunce el ceño- ¿Entonces supongo que estamos por llegar no? Pronto serán cuatro horas de viaje. 

— Emm. -se quedan callados- Si, pronto llegaremos. 

— Esta bien, entonces, ¿podrían acelerar un poco? Para hacerlo más rápido. 

— Iremos en un ritmo considerado, si es lo único vamos a colgar. 

Sin esperar alguna respuesta colgaron. Ambos se miraron confundidos por su actitud. 

—suspiró- No me agrada su actitud. 

— A mi tampoco, pero Namjoon dijo que tienen experiencia, deben saber de estas cosas. 

— Espero. -la observa- ¿Tienes frío? Atrás deje una de mis chaquetas, colócatela. 

Después de tomarla y colocársela se quedan callados siguiendo al camión. La oscuridad los invade y es ahí cuando el camino se les comienza a hacer peligroso. JungKook niega, bajando la velocidad.

— No Hyemin. No me agrada esto. -detiene el auto, orillándolo- Salimos del departamento y aún seguía el sol, se supone que llegaríamos a casa de mi madre a eso de las ocho o nueve. -dice molesto- Esos idiotas no me dan buena espina. -se quita el cinturón de seguridad- 

— ¿JungKook que haces? -pregunta asustada- Ni se te ocurra bajar del auto, esta oscuro, lo único que alumbra son las luces del auto. Menos me dejes sola. 

— Amor, esta bien, no pasara nada, solo iré a decirles que... -se detiene cuando ve al camión ir de reversa hasta donde están ellos- Tomaremos el otro camino. No importa que nos lleve más tiempo ir de regreso, no conozco este lugar para nada. 

— No te metas en líos, solo diles y vámonos. 

— Así será amor, tranquila. -tomando su mano y dándole un leve apretón sale del auto y va a ellos, la noche es más fría de lo que pensaba- Disculpe. -llega a la ventana del lado del conductor- Disculpe. 

Del camión no ve a nadie salir, por lo que enseguida se alarma más de lo que ya esta. 

— Tenemos que irnos ahora. 

Regresa al auto a pasos rápidos pero al llegar al auto Hyemin no esta. Siente una punzada en pecho de angustia y enseguida la busca con la mirada. 

— No. No. ¡Hyemin! ¡Hye..! -se detiene cuando ve a dos hombres frente a las luces del auto- ¡Ustedes jodidos idiotas! ¡¿Dónde esta?! 

Se acerca a ellos siendo agredido por uno solo de ellos, haciéndolo gemir de dolor. Les da una mala mirada sin importarle que están por hacerle. 

— ¿Dónde esta mi novia? ¡Bastardos! -jadea agitado- No... No le hagan nada... -sus ojos se llenan de lagrimas- 

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lamento la tardanza, aquí tienen su capitulo y largo:)

¿Qué les pareció? ¿les gusto? 

estoy emocionada y muy inspirada:)

gracias por leer, les amo mucho 

ig. doannisoon__

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edite el capitulo porque cometí un gran error JAJAJAJ q vergüenza