Mi cabeza está un poco agitada por lo de ayer. Mis pasos son lentos y concentrados a medida que me muevo por la escuela en esta bella jornada.

Ver a Batsubami perderlo todo me produjo un fuerte dolor de cabeza durante la tarde, por lo que tuve que recurrir a algunas aspirinas para solucionar tan molesta sensación.

Y como no, si lo de Rei me obligó a pensar con más detención en cada uno de sus movimientos para no repetirlos.

En eso estuve trabajando de regreso a casa.

Tuve que analizar cada uno de los movimientos que realizó Rei en su juego, a pesar de ser prácticamente una estrategia perfecta, pero su plan se destruyó y la esperanza de ella y de las mascotas quienes habían depositado su confianza en ella se marchitó.

Gracias a ella pude obtener varias enseñanzas:

Batsubami a mi parecer cometió 2 grandes errores: La primera fue no estudiar todo su entorno, debió conocer y adentrarse más en la Academia Hyakkaou, ella actuó solamente en venganza contra el Clan Momobami que ignoró por completo a personas como Yumeko y  Saotome que son impredecibles. El segundo error fue no retirarse en cuando tuvo la oportunidad para hacerlo, tenía una gran cantidad de dinero que podría haber comprado muchos votos, pero en cambio decidió seguir para finalmente ser derrotada.

Su falta de paciencia y su codicia la llevaron a perder una apuesta que era casi suya.

Espero por mi parte no fallar en esos puntos.

Por otro lado, me siento satisfecho de haberme "conectado" en parte con Yumeko, en cierto modo, ambos tuvimos la misma idea en cuando a que Batsubami se retirara de la subasta, y eso se sintió bien.

Ya entendiendo un poco más su forma de pensar.

Sé que podré vencerla algún día, ella será mi principal desafío además de Kirari y Saotome, si es que quiero prosperar en esta escuela.

Pero cambiando de tema…

Ayer, luego de retirarme del palco V.I.P, me enteré que Batsubami pudo obtener su libertad, tal como Runa me lo hizo saber por mensaje de texto antes de irme a dormir.

Al parecer Kirari la dejó libre, la liberó de sus ataduras que no la dejaban vivir su propia vida.

Es un gesto muy noble de su parte, debo admitir. Utilizó su puesto como líder de su Clan para un acto altruista, o eso espero.

Esto podría tratarse como un final felíz para todos.

Pero no tengo tiempo para pensar mucho en ello, hoy es un nuevo día, las apuestas continuarán y los votos se moverán.

Debo cumplir con mi trabajo.

Mientras camino lentamente por los pasillos, veo a dos chicas familiares: Una es de cabello rubio y la otra de cabello blanco con su máscara puesta, ambas se mueven en dirección opuesta hacia mí.

Los tres nos detenemos al encontrarnos en un punto medio del pasillo.

— Hola, ¿Cómo están Saotome y Vicepresidenta? — Saludo ya con algo de confianza.

— Pues…bien — Responde Saotome con indiferencia —  Luego de lo de ayer, puedo decir que me siento mucho mejor.

— Lo mismo digo — Ririka se suma a la conversación.

— No quisiera ser un entrometido, pero, ¿Qué hacen?, ¿Van a algún lado? — Muestro una sonrisa.

— ¿No es obvio?, vamos a apostar — Mary toma la iniciativa de responder por ambas — Pero no seré yo quien lo haga, sino nuestra querida Vicepresidenta.

Apunta a su acompañante.

— ¿Es en serio Ririka?, ¿Apostarás? — Digo sorprendido. Es algo que no me lo habría imaginado

— Así es — Su voz se oye detrás de la máscara.

— ¿Me permitirían acompañarlas señoritas?

Realizo una leve inclinación, imitando a alguien de la realeza.

Luego de algunos segundos de meditación, recibo una respuesta:

— ¿Qué dices tú?, ¿Confías en él? — Mary le permite a Ririka tomar la decisión.

— Por mi parte está bien — La Vicepresidenta no duda en aceptarme dentro de su grupo.

— En serio gracias, será un honor verla apostar Vicepresidenta, seré totalmente neutral, solamente seré un espectador más.

— ¡Oye!, ¡Oye!, basta de jueguitos, ¿Quieres?, sólo serás nuestro acompañante en este juego, ¿Está claro? — Mary pone las condiciones de mi estadía con ellas.

— Me parece perfecto, acepto los términos. Entiendo que no sea de tu confianza Saotome y respeto eso — Llevo mi mano derecha a mi pecho.

— ¡Hum!, ya vámonos — Nos ordena a la Vicepresidenta y a mí.

Regreso por donde vine para acompañarlas a su destino.

Ambas caminan por delante de mí, yo en cambio tomo mi distancia de ellas.

Las observo mover sus caderas de un lado a otro al caminar.

No es que haya querido estar atrás a propósito para observar sus caderas, pero las circunstancias se dieron así, no tengo temas de conversación con Saotome y con Ririka por el momento.

Recorremos algunos lugares hasta llegar a la puerta de una sala.

— Ya es hora — Oigo susurrar a Ririka.

Ella abre la puerta y al ver este salón, nos encontramos que no hay nadie allí.

Tan solo algunos muebles y un sofá en donde la Vicepresidenta toma asiento.

Ririka se quita su máscara y la observa por unos segundos.

Siento como mi corazón palpita de tan solo ver su rostro. Tal vez sea el misterio que gira alrededor de Ririka lo que me atrae de ella.

De todos modos, y como un recuerdo que llega a mí de forma fugaz, la propuesta de noviazgo que le ofrecí hace ya varias semanas todavía sigue en pie.

Sería de muy mala educación echar pie atrás a ello, espero y confío a que Ririka haya olvidado esa propuesta.

— Te identificas con esa horrible máscara — Mary le comenta al verla sin ella — Oye, me da igual.

— Ya estoy aquí  — Oigo una voz femenina.

También, se escucha un ladrido.

Ririka de inmediato se coloca su máscara para jugar.

Me sorprendo un poco al verla de tan cerca junto a su perro San Bernardo. Nunca antes había tenido la oportunidad de interactuar con ella, francamente me era irrelevante.

Pero ahora, veré si vale la pena o no.

— Ririka Momobami, nunca pensé que te atrevieras a retarme. Hagámoslo, yo soy Nozomi Momobami y acabaré contigo, el juego que decidirá nuestro futuro será, pon atención, "Gin Rummy"…