Los hermanos Swiketsky ingresan por el portón principal de la escuela, para acto seguido voltear y despedirse de su padre con un pequeño saludo con la mano, recibiendo un gesto similar por parte del doctor, aunque esto fue de unos pocos segundos ya que el hombre debía manejar al hospital. Tom se quedó unos pocos segundos viendo como su padre se aleja en el vehículo, mientras que su hermana empieza a dirigirse por su cuenta al área de primaria, una iniciativa que tomo por voluntad propia desde que se reanudaron las actividades escolares tras el receso invernal ya hace una semana. El joven de cabellera rubia soltó un pequeño suspiro, y tras esbozar una pequeña sonrisa decidió dirigirse a su salón de clase, ya que al ver a su hermana menor tomar este tipo de iniciativas, a pesar de que esto ya lo ha visto y experimentado en numerosas ocasiones, de diferentes maneras, aunque es la primera vez que siente una gran disfrute al verlo.

-¿Por qué me siento así?- se cuestionó el hijo del doctor Swiketsky a sí mismo, al intentar tranquilizarse y buscar una explicación, dándose cuenta de un pequeño patrón que ha tenido en los últimos meses con respecto en su comportamiento, cosas que no ha hecho nunca-

Por mucho que quisiera tomarse unos minutos para organizar estas extrañas ideas que lo estan confundiendo, debe ir a su aula ya que este día no tiene mucho margen de tiempo, aunque es muy seguro que aproveche el tiempo libre que tenga durante el día, ya que por alguna razón no está conforme con esta nuevas inquietudes que tiene actualmente. Tras caminar cinco minutos el mayor de los hijos del doctor Swiketsky ingreso al edificio destinado al nivel secundario, como siempre el encargado de seguridad seguía pedido en su teléfono ignorándolo completamente, aunque se llevó una pequeña sorpresa al ver a Marcos y Camila esperándolo en el entrepiso junto a las escaleras, en especial al ver a su amiga pelirroja. Tom subió los escalones rápidamente quedando frente a frente con sus amigos en el entrepiso, Marcos posee una gran sonrisa, mientras que Camila se encuentra algo nerviosa, ya que desde el día que el joven de cabellera rubia evito que tomase una terrible decisión, no han podido comunicarse directamente, ya sea por nuevos tratamientos que empezó a recibir, ademas de un sobre apego de su padres que no había recibido desde hace mucho tiempo, esto fue la principal razon por la que no asistió a la primera semana de clases, aunque ya sus padres notificaron a la institución de lo ocurrido, pero en estos momentos la pelirroja se siente avergonzada por no haberse comunicado una sola vez con el hijo del doctor Swiketsky.

-Supuse que si vendrías esta semana, me alegra de verte Camila- mencionó Tom con un tono tranquilo, mientras que una pequeña sonrisa decora su rostro.

Estas palabras junto a la pequeña sonrisa tomaron por sorpresa a la pelirroja, quien no esperaba esto por parte del hermano mayor de Martina Swiketsky, pero no pudo corresponder a sus palabras debido a la interrupción del joven de cabellera oscura –Yo también me alegro de verte Tom... gracias por preocuparte- mencionó Marcos de forma burlesca, mientras se ríe un poco de la cara de confusión del rubio. Por alguna razon Camila empezó a reírse siendo seguida por Marcos, causando más confusión en Zokial, ya que el solo saludo primero a su amiga, para luego recibir un comentario sarcástico de su amigo, pero ahora ambos estan riéndose de la nada, aunque esto no le molesto en absoluto, en realidad provoco que una pequeña sonrisa se dibuje en su rostro, la cual se desvaneció rápidamente al percatarse de hay algo rondando por los alrededores de la edificación, aunque se oculta de forma sobresaliente, ya que Tom no está logrando localizarla. Ambos amigos al notar la seriedad en el rostro del joven de rizos dorados creyeron que la broma no fue de su agrado, por lo que de forma repentina lo abrazaron para tratar de incomodarlo un poco más, ya que ante su perspectiva una criatura de muchos años de molesto por un chiste de dos adolescentes, el no reírse de solo pensarlo en un gran error, el hijo del doctor Swiketsky no tuvo más remedio que intentar seguir el juego de sus dos amigos, ya que aún sigue tratando de localizar al ente desconocido.

Al no localizar nada opto por convencer a los otros dos de que ya es momento de ir al salon, recibiendo un asentimiento con la cabeza en respuesta por parte de ambos, al subir por las escaleras se encontraron de frente con la rectora, quien saludo a los tres alumnos, aunque inmediatamente se centró en la pelirroja, preguntando el cómo se siente, ademas de que no dudase en comunicarse con ella ante cualquier situación. La mujer está al tanto de la delicada situación en la que se encontraba Camila por obra de sus propios padres, quienes se comunicaron por correo electrónico, ademas de una larga llamada telefónica, sabiendo que hoy sería el día que retomaría sus actividades académicas, demostrando que es una persona que en verdad se preocupa por sus alumnos, siendo una persona estricta en varias ocasiones, pero muy empática en las situaciones delicadas. 

-Bueno muchachos, dejo que continúen su camino al salon de clase, que tengan buena jornada- mencionó la representante administrativa y educativa del ciclo secundario, recibiendo un igualmente por parte de los tres alumnos, quienes retomaron su rumbo a su salon, ya que falta cinco minutos para el comienzo de clases, ya que se perdieron el izamiento a la bandera.

Tom, Camila y Marcos llegaron al salon tras un par de minutos, teniendo tres minutos hasta el inicio oficial de la jornada, sus compañeros ya se encontraban en sus asientos hablando entre ellos, ignorando el hecho de que el trio ingresase, los cuales se dirigieron a sus respectivos asientos, justo a tiempo para escuchar el timbre, dando comienzo a otro día de clases, siendo la primera dos horas de fisica, siendo una tortura para los alumnos del último año de secundario, pero demasiado sencilla para Zokial. Los minutos transcurrieron con normalidad, ya solo faltan veinte minutos para la hora del primer recreo, los alumnos estan concentrados en hacer una entrega de filosofía, ya que pasaron las horas de fisica, por lo que al llegar el profesor este directamente solicito a los alumnos que desarrollen un pensamiento filosofico que surgieron durante la historia de la humanidad, logrando elegir uno de forma libre, aunque tiene que ser un trabajo completo, desde fechas, creador, ideas, ejemplos en la actualidad, como era de esperarse en tan solo los primeros diez minutos el hijo del doctor Swiketsky entrego un amplio informe de tres hojas completas, llamando la atención de sus compañeros menos de sus dos amigos, quienes sonrieron de forma nerviosa ante eso. El docente califico el trabajo sorprendiéndose de la complejidad y desarrollo del mismo, dándole un diez de forma inmediata ademas de solicitar al rubia para archivarlo de forma de que pueda utilizarlo de ejemplo para otros cursos, algo que no le importo a Tom, dando su aprobación, volviendo a su asiento, mirando de forma perdida la pared frente a él, esperando que el tiempo avance hasta la hora del recreo, faltando solo veinte minutos, los cuales parecen eternos para los demas, ademas de ser bastante aburridos para Zokial al no tener algo con que entretenerse como tal.

El joven de cabellera sintió algo extraño de forma repentina, sintiéndose algo confundido ya que no comprende en que momento aparecio esa extraña presencia, ya que su posición está pegada a la ventana, donde se visualiza un gran árbol del patio trasero de la escuela, el cual suele ser utilizado normalmente para los niños de prescolar con el objetivo de hacer juegos gracias al espacio limitado y algún que otro árbol presente, siendo el que se encuentra junto a la ventana de Tom el más grande. Reposado sobre una rama se encuentra un cuervo observando atentamente al hijo del doctor Swiketsky, quien se percató del animal, aunque este tambien sabe que no se trata de una siempre ave, para empezar esa clase de animales no se encuentran en la ciudad, y por otra lado un aura extraña cubre al ser por lo que el rubio sabe que ni siquiera debe tratarse de un cuervo, siendo desconocida la naturaleza del ser que se encuentra viéndolo en estos momentos, por lo que se mantendrá viendo a la pared evitando levantar sospechas de que ya se percató de la presencia de la supuesta ave. De forma sutil y relajada Zokial apoyo su antebrazo derecho en el marco inferior de la ventana cerrada, aún mantiene su vista al frente, pero esto es solo para aparentar ante sus compañeros y el supuesto cuervo, de su meñique derecho un extraño liquido negro empezó a emerger de un tamaño muy pequeño, traspasando las aberturas entre la ventana y el marco, saliendo del otro lado como una muy pequeña araña negra de patas largas, la cual desciende por la pared exterior del edificio de forma lenta soltando un pequeño camino de telaraña oscura pero imperceptible, siendo esta su conexión con la uña del rubio, el ave al parecer no percibe a la creación de Tom, por lo que puede seguir avanzando hasta conectar una nueva telaraña con el arbol. A pesar de tener la mirada al frente, el hijo del doctor Swiketsky es capaz de ver todo lo que su pequeña creación ve, la cual una vez en el árbol empezó a mutar convirtiéndose en una especie de serpiente negra la cual no es completamente sólida, permitiendo que no haga ruido, evitando alertar a su objetivo mientras asciende por el tronco reposando en la base de la rama donde reposa el supuesto cuervo, centrando su atención completamente en él, la serpiente de oscuridad lentamente empezó a acercarse enrollándose sutilmente en la rama, disminuyendo su distancia.

-¿Está todo bien Tom?- pregunto con un tono curioso la joven pelirroja mientras sujeta el hombro izquierdo de su amigo, ya que durante un rato largo lo ha visto totalmente quieto mirando un punto fijo en la pared-

Zokial ligeramente movió su cuerpo siendo casi imperceptible al sentir la mano de su amiga sujetando su hombro, pero fue suficiente para alertar a la ave, la cual rápidamente emprendió el vuelo unos segundos antes de que la serpiente de oscuridad la atrape entre sus dientes, rápidamente toda la extensión de oscuridad que creo el rubio regreso en cuestión de segundo a su cuerpo, para acto seguido voltear y cruzar mirada con Camila –Estoy bien, solo estaba pensando en algunas cosas- respondió el hijo del doctor Swiketsky con un tono tranquilo, aunque internamente está disconforme por no poder conseguir atrapar al ser que se hacía pasar por cuervo. El timbre sonó finalizando con el primer tercio de la jornada escolar, permitiendo a los alumnos dejar el salon de clase, no sin antes entregar sus actividades, estuviesen terminadas o no, siendo un total de seis alumnos a parte de Tom quienes entregaron el ejercicio completo, donde se encuentran Camila y Marcos, por lo que rápidamente sujetaron a al rubio de ambos brazos y empezaron a arrastrarlo fuera con rumbo a su ubicación favorita siendo la banca ubicada bajo la sombra del arbol central, logrando su objetivo, el joven de cabellera rubia se sentó en medio, su amiga pelirroja se ubicó a su izquierda mientras levanta sus piernas sobre las del hijo del doctor Swiketsky, cubriendo el otro lado ya que Marcos se dirigió a comprar algo para los tres.

Por suerte al ser de los primeros en bajar el quiosco no tenía fila por lo que Marcos compro tres bebidas y un paquete de galletas dulces, para luego dirigirse con sus amigos, mientras que los demas alumnos empiezan a llegar al patio, los tres amigos disfrutaron para hablar tranquilamente, aunque la que más tiempo tuvo la palabra es Camila, ya que está aprovechando para agradecer profundamente a sus dos amigos por lo que hicieron por ella, mientras se desahoga sinceramente aprovecha para recostar su cabeza en el hombro izquierdo del rubio, gesto que Marcos imito, para luego tambien agradecerle a Zokial, por lograr salvar a su amiga común. A pesar de que ambos saben un poco de la naturaleza y verdadera identidad del hijo del doctor Swiketsky pero es un hecho que tanto Marcos como Camila sienten una extraña calidez al estar en compañía de su amigo, sintiéndose seguros y muy confiados, algo de lo que Tom es consiente, sintiéndose un poco confundido de que por alguna razón la calidez que está recibiendo por parte de su familia y amigos es algo que recibió en algunas ocasiones a lo largo de su tiempo en este mundo, con la diferencia de que en esta ocasión, es algo extraño para él, como si en verdad disfrutase de lo que está ocurriendo, siendo una prioridad descubrir que era aquel supuesto cuervo, cuál era su objetivo al observarlo de forma tan constante y centrada, solo tuvo mala suerte cuando estaba a punto de atraparlo.

La jornada académica siguió su curso con normalidad llegando a la última materia del día, tratándose de la clase de literatura, por los que los alumnos tenían que continuar con la lectura de los libros elegidos para su entrega a fin de curso, a tan solo diez minutos de finalizar la clase la rectora ingreso al salon de clases para dar un aviso a la par que entrega unas hojas tratándose de las autorizaciones que deberán traer para llevarse a cabo la convivencia de final de año y de ciclo, actividad que todos los últimos años llevan a cabo, como una especie de despedida y cierre entre ellos, la cual se llevara a cabo el viernes de la semana que viene. Los alumnos en su mayoria se alegraron no por el objetivo de la salida, sino porque eso significa un día perdido de clases, mientras que Marcos y Camila se ven curiosos ante este evento, ya que normalmente no solían asistir a las organizadas en años anteriores, por otra parte Tom Swiketsky se encuentra bastante pensativo en otros asuntos, ya que asistir o no es algo indiferente para él, aunque al ver repentinamente el rostro de sus dos amigos comprendió que no le quedara de otra que asistir e intentar aparentar lo suficiente, al menos por ellos, y seguramente por sus padres que estarán alegres cuando le cuente sobre esto al regresar a casa.

Finalizada la jornada, todos emprendieron el viaje de regreso a sus hogares, durante todo el trayecto Zokial no dejaba de darle vueltas al asunto de la supuesta ave observándole por la ventada, no solo eso, sino que tambien se puso a recapitular todo los sucesos raros que estuvieron transcurriendo durante este último año, desde las extrañas presencias oscuras que aparecían y desaparecían de forma inmediata, el sentirse observado, aquella rara mujer que se aparecio en contadas ocasiones, y el comportamiento de los espectros, no tiene un explicación de por qué está ocurriendo todo este ahora. Una vez estando en su casa, el joven de cabellera rubia se dirigió a su cuarto, primero coloco la autorización de la salida sobre su escritorio, para luego tomar de forma aleatorio uno de los libros de su escritorio, ya que es su único método para perder el tiempo lo suficientemente rápido para que el día terminase de una buena vez, aunque ya haya leído los mismos libros una, y otra y otra vez, tanto en su actual vida como en las anteriores, ya comprendiendo cualquier posible punto de vista diferente que pueda existir en esas lecturas, al no ser suficiente, opto por adelantar todas las tareas posibles ademas de capítulos siguiente, en tan solo tres horas avanzo lo suficiente para terminar con sus últimos meses de clase, aunque tendría que pensar que camino tomara esta vez en la universidad, actualmente hay más carreras que antaño, pero no sabe si serán entretenidas. Tras el regreso del resto de su familia el hijo del doctor espero al mejor momento para mostrar la autorización del viaje la cual sus padres deben firmar, ya que en su país no posee autonomía hasta alcanzar la edad humana de dieciocho años, como era de esperarse al momento de mostrar la fotocopia, sus dos padres se emocionaron y alegraron, no por el hecho de que haya una convivencia, sino que su hijo haya aceptado asistir por su propia voluntad, aunque esto no es del todo cierto, ya que su mayor motivo para ir es el complacer a sus dos amigos, pero aún faltan bastantes dias para que se lleve a cabo la susodicha actividad escolar, pero sus padre ya se encargó de firmar y rellenar los datos por su hijo, para luego recibir el dinero de la madre, para que lo entregue al otro día sin demorar.

La cena familiar se sintió bastante más animada que de costumbre, ya que los cuatro miembros se dispusieron a hablar de sus jornadas, aunque ambos padres obviaron los problemas relacionados a la vida adulta, pero compartieron lo suficiente para motivar a sus dos hijos, Martina compartió sus logros académicos, al igual que Tom, demostrando que ambos hermanos a pesar de tener comportamientos y personalidades completamente diferentes, los dos poseen excelentes calificaciones, enorgulleciendo enormemente a su padre y madre. Luego de comer, el joven de cabellera rubio de postulo a lavar los platos, mientras que el resto de su familia terminaba de organizar sus cosas para afrontar el siguiente día, actividad muy rutinaria en cada uno de ellos, pero para Zokial era una cualidad muy llamativa ademas de valorarla enormemente ya que él sabe lo mucho que ese esfuerzan todos por tener la vida que tienen, es por esa sencilla razón que su idea a futuro es asegurarse que al menos esta familia y su descendencia posean las capacidades monetarias para existir y vivir sin problemas el resto de su linaje, aunque no forme más parte de él, se asegurara de verlos por respeto a estas personas.

Los dias pasaron con normalidad hasta llegar al esperado viernes de la convivencia, son las siete y media de la mañana y los alumnos del último año de secundario se encuentran en sus respectivos salones, tratándose de dos cursos distintos, estan tomando lista y comprobando si todos entregaron la autorización y el dinero, viendo que todos cumplieron en tiempo y fecha, por lo que tras quince minutos de espera, todos se dirigieron al portón principal donde se encuentran los dos micros que lo llevaran a su destino, en forma ordenada subieron por curso. Tom se sentó en los asientos delanteros del lado de la ventana, un par de lugares detrás de los profesores, junto a él se ubicó su amiga pelirroja, mientras que Marcos se colocó tras ambos, aprovechando el viaje empezaron a hablar de cosas casuales, en realidad se trataba de que el rubio escuchaba a sus dos amigos discutir, para luego responder cuando buscaban su punto de vista, aunque para Zokial era una conversación absurda, más que nada por no interesarle una discusión por personajes ficticio, pero no le quedo de otra que continuar con esto. Tras casi una hora de viaje llegaron a su destino, siendo el campo anexo del colegio marianista, un territorio bastante amplio con el cual el colegio tiene relación y suele solicitar para realizar las convivencias de forma continua durante los años, todos los alumnos junto a los cuatro docentes que asistieron con el coordinador de la salida se reunieron en el edificio central, sentándose en ronda todos juntos en sillas de plástico las cuales estaban apiladas alrededor, todos escucharon atentamente como se distribuirá la jornada del día de hoy, empezando por una actividad individual la cual le darán unos cuantos minutos, dando la libertad a los estudiantes del último ciclo de irse por su cuenta en busca de un lugar donde puedan concentrarse, aprovechado el amplio espacio del terreno.

El hijo del doctor Swiketsky decidió sentarse en una de las bancas bajo la sombra de un pequeño árbol a un lado de las pequeñas canchas de futbol cinco hechas de cemento, pegadas al sitio por donde entramos, pensaba acabar rápido con la actividad ya que no le tomara mucho tiempo en algo como esto, al levantar la vista de su hoja, vio a su amigo Marcos sentarse en medio de una de las canchas, estando a unos pocos metros de su posición. El joven de cabellera rubia frunció el ceño al sentir la presencia de espectros, rondando por los alrededores, algo que lo pone en una mala situación como si en verdad estuviese entre la espada y la pared, esa sensación se intensifico al ver a su amiga Camila bajar por unas largas escaleras al gimnasio en el subsuelo, donde se arma una gran cancha de básquet y dos canchas de vóley, la pelirroja vio que todo se encuentra bastante oscuro a pesar de haber encendido las luces. Lentamente la joven se sentó en unas pequeñas gradas ubicadas en la esquina derecha, al momento de sentarse, una extraña presión empezó a sofocar su pecho, a la par que siente que su cuerpo está temblando de forma inconsciente, lentamente levanto la vista sintiendo una extraña sensación de miedo, está viendo una silueta rodeada de una ligera aura brillosa de tonalidades amarillos verdosos, tratándose de un hombre joven demacrado, con vestimentas europeas pertenecientes al siglo diecinueve.

-¿Qué se supone que es esa cosa?- se preguntó Camila a sí misma en un tono muy bajo, mientras ve en shock al extraño ente, cuestionándose internamente de cómo es posible que pueda ver algo como eso.

-El... monstruo está aquí... venganza... venganza- mencionó la criatura, a la par que su cabeza hace movimientos exagerados viendo en todas las direcciones intentando localizar a su objetivo, para luego centrarse de forma repentina en la joven pelirroja, provocando que esta se tense y caiga sobre su trasero en el suelo por el shock.

-La esencia... del maldito... te rodea- agregó muy molesto, para acto seguido acercarse lentamente a Camila, con la intención de sujetarla del cuello.

Una mano de oscuridad viscosa, la cual desprende una ligera aura brillante morada, sujeta con calidez el hombro de la pelirroja, quien volteo y nerviosa vio una entidad de gran tamaño sin forma aparente, compartiendo la misma características en todo su ser, con la forma de una cabeza humanoide, sin boca nariz, y en la zona donde deberían encontrarse los ojos hay dos orbes brillantes de un color violeta opaco, aunque desprenden una intensa luz. El espectro esta enfurecido al ver a la extraña criatura que se encuentra tranquilizando de alguna forma a Camila, aunque antes de que el espectro intentase abalanzarse, fue atravesado por un brazo extra que surgió desde la espalda de la extraña criatura de oscuridad, pero no fue todo, ya que otros brazos aparecieron iniciando a despedazar al espectro en pedazos, provocando que este se desvanezca en pequeñas partículas de luz. La joven de cabellera rojiza está muy tensa por presenciar lo ocurrido de forma directa, para luego ver como la criatura la ayuda a ponerse de pie sujetando su mano izquierda con delicadeza y calidez, mientras que esta lentamente empezaba a cambiar su forma hasta estar con la apariencia de Tom Swiketsky, sorprendiendo enormemente a Camila, quien abrazo a su amigo de forma temerosa, quien se percató del temor que siente la joven.

-Tom... ¿Qué fue lo que ocurrió? ¿Qué era esa cosa?- cuestionó Camila temerosa estando al borde del llanto.

-Tranquila, no tienes que preocuparte, no dejare que te dañen... los espectros vienen por mí, no temas por ellos –respondió el hijo del doctor Swiketsky con un tono reconfortante, siendo la primera vez que hace algo como esto en bastante tiempo, aunque tambien siente algo de confusión del hecho de que su amiga pudiese lograr ver a un espectro, algo que no debería ser posible.

-¿Te enfrentas a cosas como esas muy seguido?- preguntó temerosa la pelirroja, lamentablemente no tuvo una respuesta como tal, solo pudo ver como su amigo de cabellera rubia de forma repentina dejo de abrazarla y bruscamente la alejo, para luego presenciar como una especie de sable agrietado perfora su pecho desde la espalda, notando que tras él hay otro espectro, con la apariencia muy similar al anterior, con ligeros detalles que lo hacen parecer mucho más joven.

Marcos llego al lugar tras presenciar como su amigo en un abrir y cerrar de ojos se desvaneció, para luego ver una extraña sombrea dirigirse a este lugar, por lo que quedo en un estado de shock al ver a su amiga pelirroja en el suelo completamente aterrada, mientras un extraño sable atraviesa el pecho de su amigo de cabellera rubia, sin pensarlo dos veces, el jugador de baloncesto corrió en dirección de su amiga ayudándola a ponerse de pie rápidamente, aunque esta parece estar en shock por el miedo. El espectro aun teniendo su arma incrustada en su objetivo, levanto al rubio dos metros sobre el suelo, para acto seguido golpearlo con fuerza contra el suelo dejándolo boca abajo, de forma inmediata piso con fuerza la cabeza de Zokial mientras ejerce continuamente una fuerza mayor, agrietando el suelo, mientras que Marcos y Camila ven con temor lo que ocurre, el joven de cabellera oscura no entiende lo que ocurre, ya que solo puede ver lo que está padeciendo su amigo, en contraparte de la pelirroja que si ve todo.

-Tu eres al que sentí... dos hermanos, si no recuerdo más eras el mayor- mencionó Tom Swiketsky con un tono completamente calmado, mientras a pesar de estar en el suelo, de reojo ve el rostro enfurecido del espectro, reconociendo de quien se trata, ya que él recuerda todas las vidas que fingió tener y a todos los que terminaron involucrados.

-Monstruo... arruinaste mi vida... desapareciste a mi padre... me quitaste a mi hermano... destruiste a mi madre... y masacraste a mis hermanas... me vengaré... me vengaré... -dijo el espectro, enfurecido con un tono tretica a la vez que desgarrador, en un idioma que el joven de cabellera rubia entendió, tratándose de polaco, por lo que Camila no entendió, y Marcos apena oye susurros como si se tratase del viento.

-Hare que sientas el mismo infierno que yo- el ente agregó a lo que dijo hace un momento, mientras levanta la mirada, prestándole atención a los dos mortales que se encuentran presenciándolo todo.

-En otra ocasión no me hubiese importado... pero estos humanos no dejare que los toques- expresó con frialdad el hijo del doctor Swiketsky, para que a continuación de su espalda un gran tentáculo de oscuridad, perfora el pecho del espectro, elevándolo en el aire quitándoselo de encima.

El tentáculo de oscuridad enrollo el cuerpo del espectro por completo dejando a la vista su cabeza, mientras que la punta de la extensión del cuerpo del rubio adquirió la apariencia de una boca de serpiente con filosos dientes pero sin ojos como tal, pero se encuentra frente a frente con el rostro del ente, mientras que Camila y Marcos ven atónitos la extraña aparición del tentáculo de la espalda de su amigo. Sin demorar un segundo más, la serpiente de oscuridad empezó a morder de forma violenta y salvaje a la cabeza del espectro, mientras que contrae aun más su cuerpo, provocando que en menos de un minuto este explotase en partículas de luz, eliminando de esta forma a las dos presencias espectrales que amenazaban la salida de Zokial, quien se puso de pie aun teniendo el sable atravesando su pecho.

-Ya no tienen de que preocuparse, no quedan amenazas en este lugar- mencionó el hermano mayor de Martina mientras le dedica una pequeña sonrisa a sus dos amigos, quienes lentamente se acercaron con rostros de preocupacion.

-¿Tom no te duele?- preguntó Camila sumamente preocupada al ver el sable que atraviesa el pecho de su amigo de cabellera rubia, quien no le presta ni una importancia, inclusive Marcos parece estar conteniendo las ganas de vomitar.

-No siento dolor, creí que lo comprendieron aquella noche, da igual que me apuñalen, desmiembren, incineren, o cualquier otra cosa, no moriré y no sentiré dolor... digamos que me acostumbre a darles la oportunidad de que me ataquen primero- respondió Tom sin darle mucha relevancia al asunto, es un comportamiento que siempre ha tenido desde siglos, mientras se quita bruscamente el sable de su cuerpo, dañando su ropa, pero demostrando que no tiene ninguna herida.

-No está bien... definitivamente no es bueno, no puedes dejarte dañar de esa forma, no me importa que seas inmortal o cualquier otra cosa- mencionó Camila asustada y sin poder contenerse sujeta con fuerza los hombros de Zokial, a la par que algunas lágrimas escapan de sus ojos, definitivamente esta situación la sobrepaso enormemente.

-Yo apoyo a Camila en esto... por más que para ti no implique una amenaza, piensa en cómo puedes preocupar a tus seres queridos- agregó Marcos a lo dicho por su amiga pelirroja, a la par que le dedica una sonrisa triste a su amigo.

Tom Swiketsky no ofreció una respuesta inmediata ante los comentarios de sus dos amigos solo se limitó a asentir con la cabeza, para luego ver como Marcos ayuda de forma cuidadosa a su amiga de cabellera rojiza a salir de este lugar a que le dé algo de sol y desconecte de alguna manera por lo que ambos acaban de vivir en este lugar, ya que deben disfrutar de esta pequeña salida, y tras lo ocurrido eso será una tarea difícil. Por otra parte Zokial se mantuvo en silencio mientras mantiene su posición, viendo a los dos humanos a los que por una vez en toda su vida siente que en verdad utiliza la palabra amigo con sinceridad, pero al parecer aún está muy lejos de entender del todo a los humanos, a pesar de haber estudiado a fondo sobre ellos durante todos estos años, ya sea de forma discreta o mucho más directa. Tras varios minutos todos los alumnos volvieron a reunirse en el edificio central para exponer un poco sobre el trabajo individual que realizaron, antes de dar paso al primer momento recreativo, donde pondrán entretenerse ya sea jugando a cualquier deporte dentro de los campos que alberga el terreno, finalizada con la actividad, los dos cursos se separaron en grupos, para divertirse en los diferentes deportes, aunque la gran mayoria de los varones eligió el futbol, incluso Marcos formo dos equipos para jugar al baloncesto, mientras que Camila y Tom se mantuvieron al margen sentados en el césped bajo la sombra de un grupo de árboles.

-Prometeme que al menos intentaras evitar que te dañen en el futuro- expresó la pelirroja con un tono decaído, a la par que de reojo ve a su amigo de cabellera rubia.

-Lamento si mi comportamiento los preocupo... no soy humano por lo que mi forma de afrontar las cosas es muy diferente, pero te doy mi palabra de tratar de evitar recibir ataques de forma innecesaria si puedo evitarlo- mencionó con sinceridad, mientras se recuesta en el suelo, mirando el cielo despejado, escuchando el cantar de las aves, recibiendo las suave caricia del viento en su cabellera.

-No es la respuesta que esperaba, aunque acepto por el momento que estés dispuesto con intentar... no seas tan idiota de que me preocupe por un ente milenario... aunque admito que tu apariencia ante la luz es bastante imponente y llamativa, como una especie de jefe final- dijo Camila Torrey con un tono un poco más animado, imitando lo mismo que hizo el hijo del doctor Swiketsky, quien soltó una pequeña risa ante el comentario.

-Lo tomare como un cumplido, ademas de que me alegra un poco que pienses así, por lo menos me queda saber de qué aunque seas una loca para el mundo eres mi amiga- mencionó el rubio con tranquilidad, recibiendo un pequeño golpe en su costado con el codo por parte de su amiga pelirroja, para que luego ambos se riesen un poco de la situación.