Cap. 3

Otra hermosa y tranquila mañana en ciudad Gotham, aunque en la mansión Wayne, hogar de una de las familias más adineradas, caritativa y dueña de la empresa más importante de esta, no se encontraba tan tranquilo que digamos, ya que un pequeño de ojos verdes escapaba de sus hermanos mayores para no tomar su medicina.

Verán, ya ha pasado una semana desde que Damian se había enfermado, con los frutos que la Mujer Maravilla les dio pudieron hacer una clase de antídoto para su bien estar, y se lo tenía que tomar seis veces al día, ya que así podía seguir comiendo dulces pero ya no le afectaría en lo más mínimo en su sistema...pero el problemas es que desde que Damian se ha curado de su enfermedad, sus poderes se descontrolaron un poco, y se dieron cuenta ya que sus ojos cambiaban de color constantemente, y cada vez que intentaban darle el antídoto a Damian, sus ojos se ponían azules y huía como cualquier niño pequeño que no quiere su medicina. Y así es donde nos encontramos ahora, con tres muchachos corriendo y utilizando todas las habilidades que poseían para atrapar a ese pequeño y darle su medicamente para su salud.

-¡NOOOOOOOOOOO!- Grito Damian corriendo.

-¡VUELVE AQUÍ ENANO DEMONIO! ¡O YA VERAS LO QUE TE ESPERA!- Grito Jason muy molesto y arto por la persecución de media hora que tenían con el menor.

-¡VEN ACA PEQUEÑO GRENLIN! ¡TOMALO DE UNA VEZ!- Grito Tim igual que Jason.

-¡Vamos Dami! ¡Vuelve, Te Juro Que No Es Tan Malo!- Dijo Dick siguiéndolos.

Pero Damian no escuchaba, solo seguía corriendo a todo lo que sus piernas podían dar, claro que en algunos casos usaba su poder para perderlos, pero igual con el entrenamiento que tenían de años podían encontrarlo no importa cuántas veces escape. El menor de la familia estaba asustado, ni el sabia por que huía si sabía perfectamente que era para su bien, pero no importaba, solo tenía ese sentimiento de escapar y de seguir corriendo para no probar de nuevo esa "Medicina" como él lo llamaba, Luego al voltear en una esquina choca con alguien, alguien que sí o sí lo obligaría a tomar esa cosa.

-¡DAMIAN VUELVE AQUÍ!- Grito Tim molesto volteando también y encontrándose con la persona.

Pero al detenerse de repente, Jason y Dick chocaron con él, haciendo que todos cayeran y Dick quien tenía el frasco donde tenían el antídoto también cayera pero no se rompió, luego todo ven a la persona que los quería a todos como hijos cargando a Damian en los brazos.

-¿Por qué tanto alboroto?- Dijo Bruce serio pero calmado.

-Bruno- Dice Jason y es el primero en levantarse-¡Dile a este pequeño demonio que se tome la medicina de una vez!- Dijo molesto y cansado.

-Antídoto- Dijo Tim levantándose.

-¡Esa Cosa!- Dijo Jason arto.

Luego de decir eso, Bruce ve a sus hijos y luego agarra el frasco con el líquido morado un poco oscuro, para luego ver a su pequeño que se aferraba a él como si fuera un koala bebé.

-Dami- Dice Bruce y el mencionado lo mira-¿Por qué no quieres tomar el antídoto? Sabes que te hace bien y evitas que te enfermes y también evitas tomar esas feas medicinas que no te gustan- Dijo calmado.

-Pero tampoco me gusta eso- Dijo Damian señalando el frasco.

-¿Ha sí? ¿Y por qué no te gusta?- Dijo con una leve sonrisa.

-Po que es feo- Dijo inflando sus mejilla y mirando a otro lado.

-Pero aun así tienes que tomarlo, es por tu bien Dami- Dijo calmadamente mientras lo bajaba y abre el frasco.

-No, no, no, no, no, nooo- Dijo en un tono infantil tapándose la boca con las dos manos.

-Damian, es por tu bien- Dice pero él sigue negando-¿Bien que te parece si después de esto comes una galleta?- Dijo con una vele sonrisa.

-¿Una galleta?- Dice y su padre asiente-¿De chocolate? ¿Con leche también?- Dijo tiernamente y Bruce vuelve a asentir.

Luego de eso, Damian acepta tomar la medicina y al hacerlo saca la lengua en una señal de disgusto, aunque eso no lo entendía muy bien los mayores para que en realidad era muy dulce, pero a los segundos después de tomarlo ya Damian estaba dando bostezos y tambaleándose un poco.

-Muy bien, ahora hay que llevarte a la cama para descansar un poco- Dijo Bruce para así acariciarle la cabeza suavemente.

-Nosotros nos encargamos Bruce- Dijo Dick con una sonrisa.

-Ven enano- Dijo Jason cargándolo y poniendo su cabeza en su hombro.

-Quiero mi Galleta- Dijo Damian bajo pero oíble.

-Después tendrás tu galleta, ahora hay que descansar un poco- Dijo Tim calmadamente.

-Sí, sobre todo después de lo mucho que nos hiciste correr- Dijo Jason un poco burlón.

Después de eso, Bruce ve a sus hijos irse del pasillo para que luego él valla a su oficina a terminar su trabajo. Mientras que los chicos van a la habitación del menor, Jason lo puso en la cama y Dick le quito los zapatos para que estuviera más cómodo, mientras Tim apaga la luz y pone el aire a una temperatura adecuada, pero en eso, cuando Damian ya estaba arropado y cómodo, él se levanta mirando a todos sus hermanos.

-Dami, tienes que descansar- Dijo Dick dulcemente.

-No...no quiero estar solo- Dijo Damian tiernamente con cierta timidez.

-Bueno una siesta no hace mal a nadie- Dice Jason quitándose los zapatos y acostándose al lado del menor.

-Dicky- Dijo Damian mirando al mencionado fijamente.

-¡¿Qué Yo?!- Dice Dick entre sorprendido y nervioso-Esta bien Dami, te acompañare un rato- Dijo y se acuesta del otro lado de la cama.

-Timmy- Dijo Damian mirando al mencionado.

-Lo siento pequeño grenlin, pero tengo mucho trabajo que hacer- Dice Tim y se acerca a él para darle un beso en la frente-Sera para la próxima- Dijo y se va de la habitación.

Luego de que el tercer Robin se fuera, Damian mira a sus hermanos mayores y se acuesta con una gran sonrisa, para así cerrar los ojos y dormir un rato.

Mientras que en otra parte del mundo, se encontraba un chico que cabello rojo en una inmensa oscuridad, la cual salían criaturas que querían atacarlo, pero él pudo defenderse fácilmente, este proceso se repetía una y otra vez, ese era su entrenamiento, para así poder tener su cuerpo listo para tener todo el poder, con la mano se quita la capa de sudor en su cara.

Muy bien...has mejorado, veo que verlo en persona te ha motivado.

El chico no dice nada, solo da un suspiro y se sienta en el suelo para así descansar un momento.

-Aun no entiendo por qué no me dijiste sobre su mirada- Dijo el chico entre cansado y molesto.

La mirada de Muerta, sabes del dicho "Puedes matar con la mirada" bueno es por él. Sinceramente no pensé que lo usaría contigo, solo utilizo eso una sola vez conmigo, supongo que el niño en donde está atrapado debe de tener otro tipo de pensar.

-¿Otro tipo de pensar?- Dijo confundido.

Los poderes de un Dios mayormente se basan en el pensamiento, pensamos en el mundo el cual queremos crear y así lo creamos...pero...aun así...ese chico logro de alguna manera hacer una mirada de muerte y créeme que eso es difícil de lograr.

-¿De qué estás hablando ahora? Dices que alguien lo está ayudando, que yo sepa solo tú, él y ese Dios Todo Poderoso son los únicos que saben de su poder- Dijo serio, arqueando la ceja.

En efecto, solo nosotros sabemos de este poder, pero de alguna forma está más adelantados de nosotros-Dijo molesto.

-Sí- Dice y se levanta-En ese caso tengo que poner mi plan en marcha- Dijo serio.

Luego de eso el chico cierra sus ojos para luego respirar profundo, al abrirlo él ahora estaba en una especie de cuarto, parecía un cuarto normal de un adolecente, pero algo oscuro, algo solitario, en un estate cerca de la cama estaba en objeto, un amuleto con una piedra de color rojo, estaba agrietada, golpeada, no se veía en un buen estado, aun así era necesario, el chico fue a un armario saco de ahí una traje completamente negro, una capa con una capucha y se la puso para luego salir tele transportarse y llegar a la torre de los titanes, cerro nuevamente los ojos y empezó a caminar hacia una dirección que o llevaba directo al patio de la torre y ente algunos árboles ahí estaba ella, levitando mientras meditaba.

-Parece que te gusta meditar- Dice el chico y ella lo mira algo sobresaltada- Es entendibles considerando el gran poder que tienes y que se puede descontrolar por simples emociones- Dijo acercándose a ella.

-Tú otra vez- Dijo Raven entre seria y un poco sorprendida.

-Sí yo de nuevo, solo quería saber si a tu amigo lo sigues considerando amigo- Dijo ya en frente de ella.

-¿Por qué dices que Damian es peligroso?- Dijo curiosa.

-¿Has oído de la leyenda de los dos Dioses rebeldes?- Dijo calmado.

-¿Los dos Dioses rebeldes?-Dice y se pone a pensar un poco-Sí lo es escuchado, pero no lo conozco del todo- Dijo seria pero calmada.

-Bien, entonces te la contare, había dos Dioses rebeldes, uno no debió existir ya que su existencia casi acaba con todo lo que es conocido, el otro era un viva copia de él, pero su misión era acabar con ese Dios, así que pelearon, pero también esa pelea causo daños en el universo, así que El Dios Todo Poderoso los encerró en dos criaturas terrestres para que ellos vieran lo importante de la vida...pero no todo se podía quedar así...ambos no podían existir en el mismo mundo, así que ellos que hicieron una profecía, cuando el brillo de la luna indique la partida y ellos se liberen de sus cadenas el juicio comenzara y solo sobrevivirán so que están salvados-Dijo muy seriamente.

-Solos los salvados- Dijo en susurro-Ya me habías contado de eso ¿Qué significa?- Dijo curiosa.

-Bueno la pelea será intensa, como dije antes casi pudieron acabar con todo el universo ahora si eso llegara a pasar, solo las personas que tiene la salvación de los Dioses sobrevivirán al impacto- Dijo calmado.

-Entiendo...pero...Tú me diste esa salvación ¿Por qué?- Dijo algo confundida.

-Deja responder tu pregunta con otra pregunta- Dice y se cruza de brazos-¿Tú supuesto amigo ya te ha hablado sobre esto? ¿Sobre la leyenda? ¿Les ha dicho el cómo o el por qué tiene sus poderes? ¿Incluso les ha dado su salvación a alguno de ustedes?- Dijo muy seriamente.

Raven se quedo callada, la verdad no sabía que responder, no sabía que pensar, bajo la cabeza para analizar toda esa información, teniendo un sinfín de pregunta en un mar de pensamientos, ¿En serio esto era verdad? ¿Damian los a engallado todo este tiempo? ¿Por qué no nos dio su salvación? ¿Acaso está consciente de eso? De repente siente como el chico agarra su mentón para hacerlo ver, y con una sonrisa se acerca lentamente a ella.

-Déjame mostrarte algo- Dijo el chico y le da la mano.

Insegura, lo piensa un poco pero al ver esa sonrisa tenía la sensación que podía confiar en él, así que toma su mano y se levanta, para luego ambos tele transportarse a ese mismo cuarto, el peli-rojo agarro la mano de Raven para guiarla a donde estaba el amuleto.

-¿Qué es eso?- Dijo Raven confundida.

-Es un amuleto maldito...veras ya había peleado con tu amigo, pensaba que si lo atacaba cuando él aun no sabía de su poder podría matarlo y así salvar incontables vidas, sí tal vez me precipite al hacerlo y no tenía un plan muy sólido que digamos- Dijo el chico serio pero calmado.

-Lo que paso con esos demonios- Dijo mirándolo.

-Sí eran una especie de apoyo por si las cosas si ponían malas y como veras ya paso...después de la pelea el uso su poder para encerrar al mío en ese amuleto para tener ventaja, suerte pude salvar un poco de mi poder y cómo puedes ver he intentado de sacarlo por completo pero no suficiente, el poder que tengo ahora es muy débil y necesito un golpe potente, necesito un golpe con mucho poder, es decir que...te necesito a ti Raven- Dijo mirándola fijamente a los ojos con una expresión de suplica.

-No lo sé...Damian no....- Dice pero la interrumpe.

-¡Ho Por Favor! Abre tus ojos...ese amigo tuyo es el Dios rebelde que si le diera la gana de destruir el universo o matar la humanidad lo haría solo porque quiere, para él toso es un simple juego, y créeme que es un muy mal perdedor...debes creerme, yo soy el Dios con la misión de detenerlo, para salvar vidas, para evitar que él por capricho destruya todo o existente...vamos ¿¡Qué No Lo Vez!?- Dijo entre molesto y desesperado.

-No...no lo sé...no sé si creerte- Dijo entre confundida, nerviosa y algo asustada por su expresión molesta y lo fuerte que apretaba su mano.

-Está bien- Dijo más calmado y deja la mano de Raven-No te obligare hacerlo si no quieres, pero si estas dudando que lo que te estoy diciendo entonces ve con tu amigo y dile Era Mob Turato- Dijo seriamente.

-¿Y qué significa?- Dijo un poco más calmada.

-Es como un hechizo de la verdad, dices eso en su cara y él será incapaz de mentirte, pregúntale lo de la profecía y luego veras que yo soy quien dice la verdad- Dice serio pero calmado-Bueno...ya debería irte a casa- Dijo y da un suspiro.

Luego de eso, el chico pone una mano cerca de la cara de Raven y la tele transporta de nuevo en donde la encontró, la chica de ojos amatistas se quedo muy confundida pero también muy pensativa, toda esa información sobre los Dios y sobre el poder, se preocupaba que todo eso fuera verdad...aunque...una pequeña parte de ella le decía que era cierto...

Devuelta en la mansión Wayne, ya pasaron algunas horas donde los chicos seguían estando acostados en la cama del menor de la familia, ya ellos se avían despertado, pero no podían dejar de mirar a la pequeña volita de odio durmiendo, se veía tan tierno que no podía evitar sonreír por eso.

-Se ve tan tierno- Dijo Dick en susurro.

-Sí- Dijo Jason pero más como un suspiro.

-Oye Jason- Dice y el mencionado lo mira-Quería preguntarte...es decir, he notado que la estas pasando más tiempo con Damian desde que fuimos al parque de diversiones- Dijo curioso.

-Ho...Bueno...no quería decírtelo pero...cuando me dejaste buscarlo al baño...en realidad el se perdió- Dice y Dick abre la boca muy sorprendido-Cuando me vio me abrazo, pero de una manera que jamás pensé en toda mi vida que lo haría, luego me dijo que estaba salvado por que yo sea su hermano y...no sé...solo tengo ese sentimiento de que...debo protegerlo- Dijo con voz suave mirando al menor.

-Hay Jay Brit- Dijo pero no pudo decir más por un pequeño movimiento.

Damian se movía y se retorcía de un lado a otro, parecía que tenía una pesadilla, en eso los hermanos mayores reaccionaron, Jason se acerco más a él intentando despertarlo, mientras que Dick le daba caricias suaves en la cabeza, hasta que el pequeño de ojos verdes se despierta todo agitado, haciendo que algunas cosas se cayeran al piso.

-Tranquilo Damian Tranquilo- Dijo Jason con una voz suave.

-Solo fue una pesadilla Dami, no paso nada- Dijo Dick siguiendo con las caricias.

Luego de eso Damian lo abraza con fuerza, lo cual Dick corresponde el abrazo con gusto, mientras le daba caricias suaves por su espalda y Jason por su cabeza.

-Salvado- Dijo Damian bajo pero oíble.

-¿Qué dijiste Dami?- Dijo Dick un poco confundido.

-Me salvaste del monstruo- Dijo con un tono infantil y hundiendo su cabeza en el pecho del mayor.

-Hay Dami- Dice y lo abraza más fuerte-No debes de preocuparte, siempre puedes contar con tu hermano mayor- Dijo con una sonrisa.

-Querrás decir con Tusss Hermanosss Mayoresss- Dice Jason algo burlón, causando que se riera un poco el menor-Hey enano...no le des importancia a esa pesadilla ¿Está Bien?- Dijo calmado.

-Sí, el tiene razón...¿Quieres hablar de eso?- Dice Dick mirando al pequeño, el cual niega-Esta bien...¿Quieres ir afuera y jugar un poco?- Dijo y Damian lo mira con una pequeña sonrisa y asiente muy emocionado.

-Bien andando- Dijo Jason y se levanta.

Luego de decir eso Jason le pone los zapatos aDamian, mientras Dick busca el frasco con el antídoto y darle una cucharadaantes de salir, se sorprendieron cuando esta vez acepto tomarla sin quejaalguna, aunque sí hizo el gesto de asco sacando la lengua, cosa que le diocierta gracia a los mayores. Después el día transcurrió con calma, entre juegoy risas, diversión y como siempre para los Wayne, uno que otro problema sea portrabajo o por un pequeño inquieto de ojos verdes son súper poderes.

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