Bajo las escaleras con Kilian en mis brazos, quien tiene un oso de peluche en sus manitas, mismo al que le dedica grandes sonrisas para después llevar las orejitas de aquel oso a su boquita. Fue un pequeño obsequio de Ian después de que se enterara que era un niño lo que estaba esperando, desde ese entonces el peluche es uno de los favoritos de Kilian, es decir, tiene bastantes juguetes para su edad y peluches, pero la mayoría de las veces se ha ido por el osito.

Cuando llegamos al final de las escaleras tomamos rumbo hacia la cocina donde el movimiento ya estaba presente, y en efecto. Jeimy habia llegado y en compañía de Chris y Narian mantenía una amena conversación mientras que Narian solía ayudarla con algunas cosas.

Hoy no ira a la universidad, dijo que era mejor evitar la presencia de clases ante un suceso así de fuerte para evitar cualquier comentario o dudas que surgieran en los demás estudiantes e incluso de los profesores que estuvieran enterados del asunto.

─Buenos días ─saludo al momento en que llego a la sillita en donde siento a Kilian.

─Buenos días ─responden los presentes al unisonó.

─ ¿Y Harry? ─pregunto por el hombre que no logro ver en ninguna parte de la cocina ni mucho menos de la sala al momento en que bajaba las escaleras.

─En la terraza ─responde Chris─. Rachel lo llamo antes de que tú y Narian bajaran, mami.

─Vale ─cuando senté a Kilian en su sillita ente seguía jugando con aquel osito, cosa que hizo más fácil la situación para que no gritara o se desesperara por no tenerlo cargado.

Jeimy, le agradeció a Narian por la ayuda brindada y que ya era momento de que se sentara para que desayunara algo. El chico solo asintió antes de darse la vuelta y caminar hacia uno de los taburetes que estaban frente al desayunador de mármol, taburetes en el cual uno estaba siendo ocupado por Chris quien en sus manos pasaba el salero de un lado a otro.

Cuando Narian se sentó al costado de Chris, arrebato el salero de las manos de la niña, quien rio y exigió que se lo devolviera, pero las negaciones en Narian eran tan grandes, que Chris se hinco en el taburete para darle pequeños golpes a Narian en los hombros.

Cuando Jeimy coloco un tazón frente a Chris, esta agradeció mirando a la chica y después, volvió a Narian quien le entrego el salero y Chris lo tomo gustosa para colocar un poco en su comida, después, Jeimy entrego su plato a Narian quien agradeció encantado a espera que Chris desocupara aquel salero.

─Lily ¿por qué no te sientas? ─Jeimy pregunta dulce colocando un plato a un lado de Narian─. Deberías comer algo antes de irte.

Asiento, pero le digo me quedare de pie puesto que debo cuidar a Kilian y claro, darle algunas de las verduras cosidas que tanto le gustan comer y que ahora veo se encuentran servidas justo a un costado de Jeimy. Doy algunos pasos antes de llegar hasta el pequeño platito de plástico y cuando lo tengo en mis manos me giro para caminar hacia donde Kilian.

Harry entra a la cocina con su celular en manos, mira la pantalla mientras hace muecas, me queda claro que hay algo que lo ha incomodado, conozco esas expresiones como la palma de mi mano.

Poco después, Harry guarda su celular en la parte delantera de su pantalón, acción que lo orillo a mirarme para recibir mi indicación de que se sentara a desayunar algo, dicho y hecho, se acerco hasta aquel taburete en donde se sentó a un costado de Narian, chico que estaba bastante entretenido desayunando, así como Chris.

─ ¿Cuándo llegara Rachel, Harry? ─Chris pregunta tomando un poco de comida con aquel cubierto.

─Espero que hoy por la noche o mañana temprano, Chris. Tal parece que hubo un problema con los vuelos.

─ ¿Lluvias? ─Narian lo mira tras preguntar aquello, a lo cual Harry asiente.

Pero se detuvo al momento en que vio a Narian, llevo una de sus manos a la frente del chico y solo para hacer que levantara aun más la cabeza, habia olvidado que Harry no lo habia visto bien el día de ayer y, además aquellos golpes no estaban hinchados como ahora lo estan.

Harry, baja su mano del rostro de Narian y solo para negar con una sonrisa divertida, vaya que seguramente se a alegrado de saber que Narian se pudo haber metido en un problema grande.

Lleva su mirada a mi antes de comenzar a comer del plato que tiene frente a él─: ¿Lo has castigado, Lily? ─su pregunta me hizo reír tras negaciones, no sabia como encontrar la manera de castigar a alguien de 19 años que apenas si ha comenzado a socializar con chicos de su edad, es decir... podría castigarlo con impedirle las salidas con Mario e Ian, desgraciadamente esas salidas implican más en trabajo que en ir a algún bar a beber algo o ir al muelle a formar sus desastres con la gente cercana al sitio, con los mismos trabajadores.

Narian solo se dedica a comer en silencio con una sonrisa divertida en sus labios, Chris, quien habia dejado de comer solo para prestarle atención a Narian se encontraba sonriendo de manera amplia y divertida, creo que ha recordado las veces que Harry solía golpear la cabeza de Narian tras algo que no le parecía.

Y lo hizo, cuando Narian tomo su vaso para darle un sorbo al líquido, Harry lo golpeo en la cabeza causando que el agua salpicara a Narian a tal punto de chorrearle la camisa que llevaba puesta, fue ahí que Chris soltó una estruendosa carcajada que hizo que Narian le devolviera a ella el golpe que Harry le habia dado.

Ahí estaban los tres, dándose pequeños golpes entre sonrisas y un ambiente verdaderamente relajante.

─Bien Chris, basta. Recuerda que tú si iras a la escuela así que anda, termina tu desayuno ─le digo a la niña quien vuelve a su postura para seguir comiendo entre risas.

─Nunca te metes en problemas, Narian... y si lo haces es porque es algo jodidamente grave ─Harry habla con serenidad, a lo cual, Narian solo mantiene la postura seria─. ¿Quieres hablarlo?

─Emm... tal vez otro día, Harry ─Narian resuelve en segundos volviendo su atención a su desayuno.

Tomo el plato que Jeimy habia colocado hace poco en el desayunador y comienzo a comer esperando a que Kilian termine de comer la pequeña porción de verduras cocidas que le habia dado, normalmente suele comer lo que esta a su edad experimentar, frutas, verduras, algunos cereales e incluso porciones de pollo que es lo que más le encanta comer.

Claro que la leche sigue en su rutina diaria de todas las noches y pocas veces en el día o la tarde.

Dejo el plato en el desayunador al momento en que siento el celular vibrar detrás de mi bolsillo, lo tomo y veo el verificador de llamadas, se trata de Ian lo cual, es un poco extraño que el hombre me llame a esta hora, normalmente sus llamadas son por las tardes o incluso por las noches cuando necesita apoyo en las zonas cercanas al muelle.

Jeimy, deja de comer y solo para acercarse a mi y susurrarme que atienda la llamada y que ella le dará a Kilian de comer, me siento culpable por unos segundos, pero me queda claro que debo responder al llamado.

─Ian, ¿ocurre algo? ─pregunto de inmediato.

─Collins, necesitamos tu presencia inmediata en Bushwick, tal parece que Joel se ha puesto un poco dramático, le dimos una oportunidad para que entregara el dinero faltante y nos soltó al maldito perro.

─Mierda... ─lleve mi mano a mi frente al momento en que ya estaba fuera de la cocina─. ¿Estan bien?

─Oh, sí, sí... el hijo de perra me debe un pantalón y unos putos zapatos ─negué─. Solo soy yo el afectado, estaba con el novato, Jay se llama, el que no tiene ni una semana, estamos dentro del auto.

─Vale, estaré ahí en unos minutos, no se muevan del sitio.

─Bien.

Colgué la llamada y guardé el celular al ritmo en que me dirigía a la cocina─: Jeimy, ¿puedes llevar a Chris a su escuela? ─le pregunto al momento en que baja el plato de Kilian, ella asiente.

─Claro que sí, Lily ¿esta todo bien?

─Sí, sí solo... hay un pequeño problema. Les pediré a Danilo y Eduany que los lleven ─Chris asintió al momento en que cruce mirada con ella─. Así que anda, termina tu desayuno.

─ ¿Quieres que te acompañe? ─Narian pregunta.

─Sí claro... Amm... necesito que le coloques la correa a Dalas, esta vez lo llevaremos.

─Yo también voy ─dice Harry colocándose de pie con aquel plato vacío en sus manos, recoge el de Narian -que esta igual de vacío- y se encamina al lavaplatos y comienza a lavarlos─. No tengo nada importante que hacer así que... No sería mala idea acompañarlos.

─Bien, cinco minutos y nos vamos ─digo apretando las mejillas de Kilian quien gritó desesperado en forma divertida.

***

Hemos salido de aquel lugar, en la entrada del sitio Danilo y Eduany yacen atentos a todo, pero cuando me acerco a ambos su atención se va solo hacia mí, veo a Narian llamar a Dalas quien sube de inmediato al auto, mismo que pedí a Danilo por medio de mensaje sacara del estacionamiento subterráneo.

─Necesito que en cinco minutos suban por Jeimy y Chris y las lleven al colegio.

─Claro que si Lily, lo que digas.

─Bien, Amm... no se vayan hasta que cierren las puertas del colegio ¿de acuerdo? Después de ello quiero que traigan a Jeimy aquí junto con Kilian, nada más.

─Cuenta con ello, Lily ¿necesitas ayuda en algo más? ─Eduany pregunta atento a lo cual niego de inmediato.

─Es todo, gracias chicos, los veré mas tarde.

Me despedí de ellos con una sonrisa misma acción que recibí de los dos, son de fiar, he confiado en ellos bastante. Solían trabajar para Charlie, después para Michael y por último me dijeron que si estaba demasiada ocupada y quería que ellos me hicieran los favores necesarios por Chris y Kilian podrían hacerlos, técnicamente han estado cuidando de Chris, de Kilian, Narian y de mi por algún tiempo y puedo decir que son dos chicos increíblemente atentos en lo que hacen.

Cuando ya estoy cada vez más cercas del auto, Harry sube en medio de una sonrisa torcida, Narian ya esta adentro junto con Dalas, perro que esta en medio de ambos asientos con su vista en el enorme parabrisas que tiene enfrente.

─Confías demasiado en ellos ─Harry murmura al momento en que abrocha el cinturón de seguridad, no digo nada, imito el proceso que él hace y después enciendo el auto.

─Se han ganado mi confianza, Harry ─menciono mirándolo, no dijo nada más.

Me despedí desde el interior del auto de aquellos dos hombres y por último emprendi el camino hacia la zona prevista a visitar para resolver aquellos problemas que se le presentaron a Ian y al novato.

***

Bushwick

No es extraño el olor a marihuana en este sitio, tampoco es extraño ver a cada tipo metiéndose drogas hasta por donde no. Bushwick el tipo de barrio en el que sus integrantes son todos problemáticos. El respeto por la propiedad ajena es algo que se lo vienen pasando por en medio del culo, ya que los grafitis coloridos y demasiado llamativos faltando al respeto con frases y palabras obscenas son difíciles de ignorar.

Los cristales rotos de algunas de las casas del barrio son perdidas totales mientras que otros apenas si han sido remodelados y en menos de 24 horas volverán a pasar a ser una mierda.

Otros son murales coloridos y de los cuales grupos de artistas callejeros se unieron para tapar al menos los rayones con frases y palabras obscenas, artistas callejeros de los cuales tratan de hacer del barrio algo "mejor".

Sigo las indicaciones de Narian, puesto que es él quien sabe con exactitud en donde viven Joel y sus hermanos, anteriormente Narian y Bastián eran los encargados de venir a recoger el dinero o incluso a entregar cantidades de drogas, es por esto que agradezco a Narian que ahora este acompañándome en esto.

Damos con la casa, no es difícil reconocerla, además, sobre todo porque el auto de Ian esta fuera de aquella, con un alambrado alrededor donde aquel perro de raza Rottweiler ladra con frenesí al auto estacionado.

Veo a Joel justo fuera de su casa con dos de sus hermanos, no cabe duda que su cara de asombro fue otra cuando aparque el auto justo detrás del de Ian, abrí la puerta de golpe sin siquiera apagar el auto, acción que dio la alarma total a aquellos tres hermanos quien estaban apunto de volver a abrir la rejilla para que aquel perro saliera, pero fue suficiente con apuntar el arma hacia el menor de los hermanos quien se detuvo inmediatamente.

─ ¡No quiero más putos desacuerdos, Joel! ─grite dando a notar mi completa molestia, Dalas ha comenzado a ladrar puesto que se ha inquietado demasiado con los ladridos del otro perro que sé, si no fuera porque está encerrado y Dalas encadenado, ya se hubiesen comenzado a matar entre ellos.

Ian, por fin desciende del auto apuntando de la misma manera hacia los hermanos, Harry quien estaba dentro del auto junto con Narian bajo de la misma manera apuntando hacia uno de ellos, sé que Narian también ha bajado con Dalas, los ladridos me lo dicen todo...

─ ¡Ya hay desacuerdos, Collins! ─gritó Joel─. ¡Con esos ciento cincuenta mil perdidos! ¡¿Cómo sé que tu gente no me estafo con ello?! ¡¿no te basta estar forrada en dinero?!

─ ¡Oh, claro que me basta! ¡pero existe algo llamado honestidad, Joel! Misma que sé ahora que ni tú ni tus hermanos tienen.

─ ¡Que estupidez si piensas que de alguna manera te pagaremos esa suma de dinero!

─ ¡Pues será de otra, Joel!

─ ¡Oh, por favor! ─carcajeo─. ¡No tienes cojones para hacerlo, Collins!

─No la retes, Joel ─Ian hablo apuntando hacia la cabeza del mencionado─. Aquí entre nos, los cojones que te faltan a tí, a ella le sobran ¡así que déjate de idioteces y paga el puto dinero de una vez!

Joel se dedico a reír tras negaciones, pero ese momento de risa se detuvo cuando el hombre saco de entre su chamarra su pistola, misma que apunto hacia mi dirección, sin embargo, fui mucho más rápida al tener que dispararle en el brazo, su arma cayó instantáneamente, cayó al piso cuando una segunda bala penetro en su pierna.

Comencé a caminar hacia ellos escuchando los gritos desesperados de Joel, mismos gritos de suplica mesclados con el dolor por lo causado. El menor de los hermanos tomo el collar de cuero que este alrededor de aquel perro, quien ladra y gruñe con mucha más desesperación, así como Dalas, perro que está a mi costado con Narian apuntando a la cabeza del menor.

El que estaba a un costado de Joel, simplemente arrojo su arma un poco más lejos de su cuerpo, con las manos sobre su nuca y una respiración demasiado dificultosa fue como se arrodillo y bajo la mirada dejando solo ante mi a Joel.

─Falta uno, ¿esta adentro? ─pregunto refiriéndome al cuarto hermano, Joel niega de inmediato─. Joel, de verdad que no sabes las malditas ganas que me han dado de pegarte un tiro ahora mismo en esa maldita frente que tienes.

─Lily ─Harry me llama, a lo cual giro en dirección al ojiverde.

Los sonidos de las patrullas son presenciados por todos, aquellos sonidos de las llantas derrapar y sobre todo esa emoción de llegar a tiempo a la zona de los sucesos. Un coche gris y dos patrullas pararon detrás del auto de Ian y del mío, mi sonrisa creció al ver a Jayden bajar de aquel auto gris con luces azules parpadeando debajo de los focos del auto.

Los policías -dos en cada patrulla- bajaron con armas en sus manos y aquellos perros especiales entrenados para detección de drogas, justo detrás de ellos una motocicleta de color blanca les seguía el paso, misma de la cual pertenecía a Bastián, chico, que bajo de ella quitando aquel casco que cubría su cabeza.

─El querido Alejandro, hermano de estos imbéciles de mierda, fue capturado hace unos instantes por depositar una fuerte suma de dinero a un banco, mismo que reporto lo sucedido al departamento de policías de New York y claro, lo detuvimos a dos calles del banco ─Jayden menciona acercándose cada vez más a nosotros.

Devolví la mirada a Joel quien ya estaba empuñando sus ojos, no sabia si era por el dolor o porque ahora sabía que de verdad, estaba metido en un gran problema.

Un silbido, fue todo lo que se escucho y después los perros de aquellos oficiales sueltos yendo directo a la casa de aquellos hermanos, justo detrás de ellos los policías apuntando por si surgía alguna sorpresa como hace unos meses atrás.

Solo uno se quedó en compañía de Jayden, quien por su radio pedía una ambulancia al barrio mencionado y el número de casa, me coloque de pie con ayuda de Harry quien simplemente miraba Joel con algo de rareza.

Mire a Bastián quien me guiño el ojo más una pequeña sonrisa, fue ahí que comprendí que, en realidad, fue él quien venia siguiendo a Alejandro y reporto a Jayden lo sucedido.

─Le debes una disculpa a Collins, Jayden, así como tu tío ─Bastián suelta de pronto, algo que me hace mirarlo un tanto confundida─. Fue el mismo Alejandro quien asesino al agente de policía a salidas de la ciudad ─resuelve Bastián a mi duda─. No fue ninguno de tus hombres, escuche a Alejandro comentarlo con un hombre, supongo que es alguien con quien comenzaría a realizar tratos.

─Mis hombres respetan el convenio con los policías ─miro a Jayden─. Pero creo que no todo el equipo policial lo respetan, incluyendo al jefe y al sobrino.

─Espero que no haya resentimientos, Collins ─Jayden dice en serenidad.

─Si, claro ─mi desinterés es demasiado notorio, tanto que la incomodidad en Jayden y en el policía que lo acompaña es notoria─. ¿Detendrás mi dinero por ser negro o lo dejaras libre?

─Estará libre, Collins ─baja la mirada─. Pero... me temo que estos tres y el cuarto no estarán libres.

─Por mi llama al departamento de migración, son ilegales, Jayden así que ya lo sabes.

─ ¿Le abriste fuego porque...

─Llevo su arma hacia mi ─respondí.

─ ¡Hija de perra! ─Joel grito, acción que hizo que lo mirara─. ¡Quería hacerte un favor al reunirte con el vástago de tu esposo!

Narian soltó a Dalas, lo hizo... Y Dalas se fue directo a morder la pierna herida de Joel, no podía describir los gritos de dolor del hombre que hacia lo posible por lograr darle una patada o algún golpe al perro que lo ataca con ferocidad, el Rottweiler ha vuelto a ponerse histérico ante los gritos de suplica de su dueño, pero nadie hace nada.

No es hasta que Harry toma a Dalas de aquel collar para jalarlo hacia atrás y solo para que suelte la pierna de Joel, pero no lo hace, aquella herida abrió más a tal punto en que la sangre ya escurría.

─Dalas, basta ─Fue la voz de Narian que hizo que el perro poco a poco soltara la pierna de Joel, hombre que termino hecho un mar de dolor lagrimas por lo ya sucedido.

Jayden suspira de forma pesada y devuelve su mirada hacia mi.

─Temo que migración se los llevará en estas condiciones, Collins ─Jayden respondió─. Hablare con mi tío acerca de esto.

─Habla con él lo que desees, Derek. Solo te pido, que no vuelvan a acusar a mi gente de acciones que nunca hicieron. Vámonos ya y dejemos a los profesionales "trabajar".

***

Esta vez bajamos del auto cuando estamos en el muelle, Bastián por su parte se estaciono delante de nosotros repitiendo los procedimientos típicos a quitarse el casco y apoyar su motocicleta contra la pared.

He escuchado la puerta trasera ser abierta y en segundos cerrada, Narian corre con Dalas detrás suyo hacia el almacén, habia dicho que quería lavar la parte baja del hocico del perro y el pecho puesto que llego a mancharse de la sangre de Joel, Joel... después de todo si robo el dinero.

Ian y el novato bajan de su auto caminando rumbo a Rami y Tatiana chica que al parecer ya se iba puesto que subió a su auto después de haberle dicho algo a Rami. Harry baja y yo lo sigo, esta vez le coloco el seguro al auto y me encamino hacia donde Rami, mismo sitio al que ahora va Ian y Bastián.

El auto de Tatiana sale del muelle sonando el claxon, ha estado evitando en medidas ocasiones a Harry a tal grado de que comienza a ser un poco extraño para mí a tal punto de querer preguntarle si todo esta bien.

─ ¿Qué ha pasado? ─Rami pregunta cuando ya estamos a pocos pasos de él.

─Que si era Joel quien habia robado ─Ian aclara─. No te equivocaste en tus cuentas, Malek.

─Vaya, ya debíamos esperarlo... el tipo no daba buena espina ─resuelve mirándome─. ¿Estás bien?

─Sí, sí... voy por Narian, no me siento bien.

Doy una rápida solución para darme la vuelta y caminar hacia el almacén, Harry está manteniendo comunicación con el novato que acompañaba a Ian, el chico muestra grandes sonrisas a unas pequeñas explicaciones que Harry ha comenzado a darle, no lo interrumpo, mejor sigo mi camino al lugar en donde sé, Narian esta.

Y en efecto, sentado en uno de aquellos sofás limpiando al perro, hay una botella con agua a su costado y un paño que pasa por la cara y pecho del perro mientras menciona lo genial que estuvo en ese suceso. Cuando llego al chico me apoyo contra el respaldo del sillón llamando su atención.

─Lo limpias y nos vamos, no me siento bien.

─ ¿Por qué? ─su ceño se frunce y la sonrisa que tenia desaparece.

─Tengo muchas náuseas, es todo─admito.

─Toquemos el tema de las nauseas y el cansancio de nuevo, Jane ─encaro a Rami quien luce más que divertido al estar ahora frente a mí.

─Si, tóquenlo porque las nauseas de Lily no son normales ─Narian aclara.

Le doy un golpe a Narian en la cabeza haciéndolo reír, pronto me cruzo de brazos y pongo toda mi atención en Rami, mismo que se muerde el labio inferior con un toque nervioso.

Lleva una de sus manos hasta un mechón de cabello que cubría parte de mi rostro y lo aparta con una ligera sonrisa, poco después guía sus manos a mi cintura guiándome hacia él, coloco mis manos sobre sus brazos y sonrío.

─ ¿Quieres hablarlo? ─pregunta, pero niego de inmediato.

─ ¿Desconfías de mis palabras?

─No, no... solo que me es difícil asimilarlo ─rasca su nuca.

─Bueno, es por precaución y querer evitar algo que sabes no es y será el momento.

─Y eso lo tengo claro, pero

─Son los medicamentos que tomó, el cansancio, las desveladas... El no comer incluso a mis horas ─rudo los ojos al cielo obteniendo una pequeña risa por parte de Rami.

─Así que no te asustes Rami, si eres o no fértil ─Narian responde, acción que causo que Rami le diera un jalón de cabello al chico que al ponerse de pie comenzó a darle algunos golpes a Rami.

Normalmente las náuseas, el cansancio, el dolor de cabeza son los síntomas que he presentado de estrés, estar en tantas partes al mismo tiempo es algo complicado para mí, no puedo dividirme y hacer las cosas como todo el mundo lo espera. No puedo darme ningún tipo de descanso debido a que esto es lo que debo estar haciendo, una fuerte responsabilidad es lo que Michael dejo ante mí, misma que sé no puedo dejar por nada.

La sonrisa que habia en mi rostro por ver a aquellos dos pelear simplemente fue desapareciendo al mismo tiempo en que escuchaba como me llamaban a gritos desde el exterior del almacén, gritos que no solo me pusieron alerta a mí, si no también a los dos sujetos que dejaron de jugar para ver a Harry entrar un tanto alarmado.

─ ¡Tienes que venir y rápido! ─fue lo que grito antes de darse la vuelta y tomar su arma.

No pude evitar imitar su acción y sé que Narian y Rami hicieron lo mismo que yo. Mis zancadas son largas, a tal punto que me encuentro trotando dentro del almacén para salir de este, mi mirada se va a la izquierda y luego a la derecha.

Al menos seis autos de color gris se adentran al muelle y una camioneta de color negro es la que va a la mitad de los tres primeros, es la única que resalta, la única diferente y que mayor curiosidad ha causado en mí.

Armados y apuntando es como se encuentra la poca gente del muelle, la distribución de las personas por toda la ciudad ha sido clara para todos, solo debe haber al menos quince o veinte personas en esta zona y hoy, hoy me he arrepentido de haber dicho aquello.

Se han comenzado a detener y estacionar como pueden, no es un sitio muy espacioso en donde quepan siete autos nuevos y diez más que ya tenían horas aquí, pero me queda claro que su plan, no es quedarse por mucho tiempo, puesto que solo se han parado más no han apagado los autos.

Harry, le da un pequeño jalón a Narian para que él chico quede detrás de él, sé que eso ha molestado a Narian, pero sé que Harry lo ha hecho para protegerlo si algo sale mal.

Algunos salen de los autos, armados, son hombres y mujeres que por más que lo desee no puedo si quiera identificar, su armamento es caro, las armas son largas y sé que pesadas, no solo estan equipados con pequeñas pistolas, no... al parecer esto es diferente, armas M16 y M4 son las que portan cada uno de aquellos hombres y mujeres.

De la camioneta negra, baja solo el conductor, un hombre afroamericano con traje que se dedica a abrir la puerta de atrás, es ahí cuando toda mi atención se coloca en la siguiente persona que estará por bajar.

Un par de zapatos de vestir son los que veo por debajo de la puerta de aquella camioneta, zapatos relucientes que si bien puedo ver además el tipo las ha combinado con un par de calcetas rojas con puntos blancos.

Pero al ver la figura masculina en su totalidad quedo perpleja ante la mirada perdida del hombre que se ha dejado ver en su totalidad.

Un traje color azul marino esta sobre su cuerpo, mismo del cual sus manos tomaron el saco para acomodarlo mejor y desaparecer toda pequeña arruga que este tuviera, debajo del saco noto una camisa negra y una corbata del mismo tono con una guía de cuadros de color rojo, negro y azules.

Un reloj en su muñeca izquierda y anillos de oro en ambos dedos anulares y una potente mirada que ahora a cruzado conmigo.

Es alto, demasiado alto... el hombre posee unas mejillas tan afiladas que fácilmente podrían cortar los dedos si alguien llegase a tocarlo, me da escalofríos el tan solo verlo a los ojos, el ver cada acción que realiza con un rostro totalmente sereno, no hay líneas de expresión en ese blanco rostro, tan solo una mirada penetrante, un perfil sereno y bajo y una postura para nada amenazante.

Un segundo hombre baja del auto, de la misma manera lleva un traje, negro en su totalidad, pero este sin corbata, sus manos estan en los bolsillos del pantalón y su mirada puesta en mi...

─Busco a Michael Jackson ─el tipo habla─. ¿Está por aquí?

─No, no esta ─respondo sin dejar de verlo.

─Oh, no importa... esperare.

─Siento decirle que su espera será inútil ─respondí─. Falleció hace dos años.

Parecía sorprendido por mis palabras, pero, así como lucio sorprendido quiso seguir insistiendo, pero... algo no se lo permitía.

─ ¿Usted quien es? ─preguntó con otro tono de voz menos impaciente.

─Lily Collins ─le digo─. ¿Y usted? ¿Quién es?

─Bill ─ esboza una sonrisa pequeña─. Mi nombre es Bill Skarsgård... Por fin la conozco, Sra. Jackson.