—Te noto diferente — me decía Bin mientras arreglábamos el estandarte en donde exhibiríamos nuestras piezas

—¿Diferente? — le pregunté confundida, ella asintió

—Cómo si te hubieras vuelto, no sé — entrecerró los ojos viéndome cuidadosamente — más calmada o quizá más amable

—¿Qué intentas decir? ¿No soy amable? — pregunté a la defensiva

—Normalmente no, si te soy sincera, sólo lo eres conmigo y tus padres — bueno, debía reconocer que tenía un punto ahí — ¿será acaso que tu nueva profesora te ha cambiado? — estaba pintando mi caballete de negro así que no la observaba bien

—Es una gran persona pero no Bin, no he cambiado — le decía, de alguna forma el que me comentara aquello me hacía pensar si tenía razón ¿He cambiado?

—Te creeré — suspiró — si no te conociera diría que conociste a alguien

Por suerte ella ya se había ido así que no vio como mis mejillas se encendieron, días atrás las cosas habían quedado raras, los esposos Do me lanzaban miradas burlonas, no me molesté, es más era divertido verlos jugar como niños pero estaba tan nerviosa, Chanyeol se disculpó conmigo un millón de veces más y Xiumin seguía siendo él, supongo.

Habían quedado de venir a ver mi exposición de arte, seguramente no lo harían, no había forma que unas celebridades vinieran a mi universidad, aunque admito que hubiera sido estupendo. Ahora sólo debo afinar algunos detalles y mañana iniciará oficialmente el festival de artes y cultura en la universidad de seúl.

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El primer año que estuve en el festival había sido un manojo de nervios, dejando a un lado que todos los jueces y demás pensaban que era un chico, tener que exponer mi arte era arrolladoramente intimidante, se necesitaba mucha valentía. ¿Por qué? porque un artista expresa su visión del mundo, su personalidad y pensamientos más profundos en una pintura, así que se imaginaran como es mi arte. Normalmente hago cosas muy simples como el cuadro que le hice a Gina pero cuando quería expresarme salían cosas raras, yo debía admitirlo, este año presentaría un cuadro que quizá era demasiado retorcido.

Había pintado a un unicornio muerto, así es, uno unicornio muerto. Y no sólo era el hecho de que estuviera muerto, sino que estaba totalmente degollado en mi pintura, un poco violente pero si miraban en las esquinas veías unas manos culpables de asesinato, la sangre era un arcoíris sin vida al igual que el paisaje que le rodeaba. Profundo, lo sé, seguramente quien lo viera pensaría que tengo mal un tornillo en la cabeza pero a estas alturas me importaba muy poco o eso pensaba hasta que lo vi.

—Hola — saludó una dulce voz de repente, me giré rápidamente y juro que casi me caía, sino fuera porque las manos de él me sostenían hubiera caído haciendo el ridículo

— ¿Qué haces aquí? — pregunté chillando al verlo, así es Xiumin me observaba con sus lindos y rasgados ojos, ¿dije lindos?

—Vine a ver tus pinturas como habíamos quedado, ¿acaso hice mal? — su expresión cambió a una preocupada

— ¡No! — Ups me pasé de enérgica, calmé mi voz — es sólo que no creí que vendrías — mi mirada buscaba por todos lados para encontrar a Gina pero no habían señales de ella, luego recordé quien era — ¡Dios pueden reconocerte! — Él rió

—No te preocupes por eso — señaló la gorra que andaba — nadie se dará cuenta — me quise dar un zape, era cierto que andaba unos simples pantalones de chándal y una sudadera gris pero igual podrían — tranquila, estaré bien — fijé mi vista en él, su sonrisa despreocupada me hizo calmarme un poco, sólo un poco

— ¿Y Gina? — pregunté ya más calmada

—Dijo que nos veríamos aquí, no ha de tardar en venir — me dijo alegre pero mi cuerpo tembló del miedo, conocía a Gina, seguramente no vendría para dejarme a solas con él, lloré sangre por dentro, me las pagaría — ¿Estas son tus pinturas? — no me había fijado que él se acercó a ver mis cuadros, chillé al ver que estaba viendo mi cuadro principal, me acerqué a él para ver su reacción

Eso era peor que ver a los jueces evaluando mi trabajo, me sentía tan agobiada, quería agarrar y tirar mi pintura a la basura para esconderla, él seguía con la mirada clavada, parecía observarlo con detenimiento, luego de un rato por fin habló.

— ¿Qué representa el unicornio? — preguntó de repente, era lo que menos me esperaba de parte suya

— ¿Eh? — Solté por la sorpresa, luego recuperé la cordura — representa muchas cosas, la imaginación, la inocencia, nuestro verdadero ser, supongo que también la infancia — él asintió con una sonrisa

—Es genial Nadeshiko — ahora sí perdí la cabeza

Aquí reportándome :v hoy no subiría capítulo porque no he tenido tantas leídas pero me subieron el animo cuando vi que leyeron un poco más hoy xD seguramente están en exámenes finales, sí eso ha de ser ;n;, Bueno, dejando mis dramas, espero les haya gustado, comenten mucho y voten :D mi muñeca adolorida y yo les recordamos que lean los otros fanfics que estoy subiendo, mañana si actualizo todos, ya que el cansancio hace que mis ojos se estén cerrando ahorita, ya no estoy tan joven D:

Sólo Consuelo (Jong In Kai)

Casualidades (Oh Sehun)

Mis Pequeños Cupidos (Park Chanyeol)

EXODUS (EXO y Tú)

P.D. ¿Cómo creen que vaya a reacciona Nagi? odia que le digan así...pero... tumtumtum