REAL LIFE

❝ our coming-of-age has come and gone, suddenly the summer, it's clear, i never had the courage of my convictions as long as danger is near. . . ❞

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"EXPLICACIONES"

ROWAN ERA DE ESAS PERSONAS QUE SIEMPRE ERAN atacadas por los nervios antes de comenzar algún evento importante como una entrega de premios o sus conciertos con miles de espectadores. Pero a veces aquella sensación la invadía en momentos tan pequeños y quizás para algunos casi insignificantes o normales.

Por eso, mientras esperaba que Evans llegara a su casa, no dejaba de caminar de un lado a otro en la sala.

Le pidió a toda su familia que por ese rato saliera para tener más privacidad. Le daba vergüenza tener oidores a la vez que ella explicaba todo su horrible embrollo.

Y cuando el timbre sonó sintió que un escalofrío subía por su espalda.

Alisó su suéter sobre su cuerpo y se repitió por última vez la explicación preparada que iba a decirle. Caminó hacia la puerta y se dio unos segundos para tomar valor y abrirla.

Cuando lo hizo se encontró con el bostoniano mirándola de frente haciendo que ella quisiera que la tierra la tragara al fijarse en lo más distintivo de su rostro.

—Ay no —cubrió su cara con sus manos—, no puedo mirar.

—Sólo diré que eres sorpresivamente fuerte.

Las palabras de Chris no hicieron otra cosa que desesperar a Hartford luego de que ella viera su nariz vendada con compresas blancas y con un pequeño tabique al medio de todo.

—Por favor no me digas eso —aún con la vista tapada se hizo a un lado para que el castaño hiciera ingreso—. Pasa.

Él soltó una suave y casi inexistente risa mientras se quitaba los lentes de sol y caminaba hasta estar en el cálido hogar de la cantante.

Aún después de cerrar la puerta detrás de ellos, Rowan se mantuvo apoyada a ésta dándole la espalda a su invitado. Se negaba a mirarle ya que cada vez que se fijaba en su nariz rota los recuerdos de esa noche la invadían.

—¿Rowan...? —murmuró él viendo que no reaccionaba.

—Te molí la nariz —susurró en un hilo de voz sin creerlo.

Evans asintió con una mueca—Hasta yo mismo me sorprendí.

Un sonido se escuchó en el silencio y fue la rubia golpeando su cabeza contra la puerta después de oír aquello.

Finalmente se volteó—¿Te duele mucho?

Frunció el ceño meditando—De vez en cuando, pero mientras no la toque todo está bien —ella asintió—. Estoy bien, Rowan. Yo...

—De acuerdo...Aclaremos esto de una vez por todas —interrumpió rápidamente sintiendo como el estrés la atacaba.

Juntos tomaron asiento en una mesa de la cocina para que luego Hartford le ofreciera un café que gustoso aceptó. Los días se estaban poniendo cada vez más fríos y él se merecía algo reconfortante después de haber ido hasta su casa.

Pasaron al menos tres minutos en los que nadie dijo nada, sólo se concentraron en beber poco a poco el café dando breves sorbos y soplándolo por su alta temperatura.

Rowan quería dar aquel primer paso para explicar su tragedia, pero tenía temor de que las cosas no sucedieran como ella esperaba.

Pero ¿Ya qué? Debía hacerlo y punto.

—De acuerdo —dejó la taza en la mesa—, honestamente no sé como comenzar ya que...Cada vez que lo recuerdo...Me da escalofríos.

—No te preocupes, tengo todo el tiempo del mundo —sonrió de lado.

Ella suspiró agradecida—Escucha... —apoyó sus codos en la madera—, tú sólo fuiste alguien en el momento incorrecto, ya que... —tragó saliva—. Yo...Yo...Yo sí iba a golpear a alguien, pero no era a ti.

—Oh...Entiendo...¿Entonces quién? No creo que tú actúes de esa manera a menos que sea algo realmente grave.

Y todos los que la conocían de verdad decían eso.

—Pues... —su mano derecha se fue a su rostro—. A...A Caleb.

Inmediatamente la confusión invadió al oriundo de Boston y frunció el ceño tratando se entender qué sucedía.

—¿A...Tu prometido? —se movió en el asiento.

Ella soltó una seca y sarcástica risa. Claro que el sarcasmo sólo era para disfrazar el dolor—Ex prometido —corrigió haciendo que el castaño se sorprendiera más—. Me terminó en la fiesta.

Chris se sintió en una encrucijada. Sabía que obtener respuestas había sido lo que lo llevó al hogar de Hartford, pero ahora el tema se estaba tornando mucho más delicado y no se lo esperó.

—Vaya...Lo siento mucho Rowan —se inclinó en la mesa—. ¿Fue...Fue por eso que querías...? —alzó su puño—. ¿...Golpearlo?

Otra agotada risa salió de sus labios—En parte, pero si sólo hubiera sido eso jamás hubiera querido hacerle daño.

Su corazón se apretó cuando la verdadera razón por su reacción estaba cerca de ser explicada. Sentía que quizás no era buena idea hablar ese tema demasiado delicado con Evans, pero si no lo hacía, no quedaría bien planteado su punto de vista y la realidad de la situación.

—¿Sucedió algo más...?

Su suave voz sólo parecía apresurar lo inevitable.

—Él...Él... —el nerviosismo la hizo jugar con sus dedos; específicamente en la parte de las uñas, como siempre lo hacía cuando estaba con esa sensación—. Él me trató horrible. Me dijo cosas espantosas aún estando ebrio, dijo que mi carrera sólo opacaba la suya y que siempre ha sido mi sombra.

—Eso es ridículo.

—Lo sé —la peor parte se avecinaba—. Pero...Además de eso, y creo que la razón principal por la que fui para darle su merecido, fue porque... —agachó su cabeza—. Rayos, es más difícil de lo que creí —rió suavemente—. Caleb...Él se sobrepasó conmigo.

Y la voz de Rowan se quebró.

No lo pudo evitar, todo sucedió de manera inconsciente. Rápidamente se llevó una mano a la boca como si buscara frenar un sollozo y por suerte comenzó a funcionarle.

Sin embargo, igual eligió levantarse de ahí para ir hacia la isla de la cocina y evitar que Chris siguiera viéndola llorar.

Éste quedó sin palabras y apretó la mandíbula antes de levantarse y seguir a la rubia para no dejarla sola.

—Rowan... —llamó con suavidad del otro lado de la isla, pero ella no respondió—. Rowan lo siento mucho, pero eso es inaceptable. Ese idiota no tiene derecho de hacerte algo así, independientemente de que haya sido tu pareja.

Ella tomó una gran respiración y se giró a verle limpiando las fugaces lágrimas.

—¿Crees que no lo sé? Yo...Yo estuve ahí, yo fui la víctima. Pero ¿Sabes qué? El mundo jamás le va a creer a la mujer, siempre al hombre empedernido que finge ser poderoso y superior a todos —obviamente esa referencia iba hacia Matther—. Además ayer publicó un artículo que me hizo quedar como una persona agresiva...Nadie me va a creer.

—Yo lo hago —aseguró—. Te prometo que lo hago y creo que no debes dejar que la situación quede así nada más —la mujer notó que su tono de voz se estaba endureciendo—. ¿Qué se cree ese hijo de perra?

—He querido hablar desde que todo comenzó —empezó a acercarse también, ahora un poco más calmada—, pero mi abogada me aconsejó que hacerlo justo ahora es demasiado apresurado, mucho más ahora que el internet y el mundo está contra mí. Sería como soltar una bomba en medio de un gentío; me haría quedar mucho peor —suspiró—. Sólo me queda esperar un poco, conseguir más pruebas, apoyo...Y el momento correcto.

Evans estuvo de acuerdo en esa parte ya que las consecuencias que ella nombraba eran posibles. Observó a la chica en silencio mientras ella, estando con las palmas de las manos apoyadas en el mueble, secaba algún rastro de lágrimas que podía haber quedado.

—Oye —la llamó despacio y ella alzó su vista—, no estás sola en esto. No se trata de una simple riña de pareja, él... —cerró los ojos—. Él cruzó una línea.

—Una línea que lo acabó todo —hizo una mueca—. He estado con mi psicóloga estos días y dice que es normal que me sienta así.

—Por supuesto que lo es. Lo que viviste es algo horrible que no deja de rondar en tu cabeza...Pero sé que podrás superarlo.

—Gracias —le miró a los ojos y por un momento ninguno de los dos habló—. Entonces...¿Me perdonas por romper tu nariz? —torció la boca.

Una tenue pero melódica risa fue emitida por el castaño—Claro que sí. Es como lo dijiste, sólo fui una persona en el lugar equivocado; un accidente... —frunció el ceño—. Pero quizás deberías pagarme la terapia.

Rowan pareció ahogarse con su propia saliva—. ¿Qué?

La risa del bostoniano se hizo más fuerte y la rubia puso los ojos en blanco con diversión.

—Obvio es broma —siguió riendo.

—Uy sí, alguien amaneció comediante —se volteó—. Mejor lavaré las tazas.

—Pero espera —la detuvo tomándola del brazo—. Ahora que sé cómo sucedieron las cosas...Y la horrible razón detrás de todo —ella hizo una mueca otra vez—. Quiero decirte que cuentas con todo mi apoyo, pero de verdad, mucho más allá de palabras moralistas.

Frunció el ceño—¿A qué te refieres?

—Quiero ayudarte a limpiar tu nombre —sus ojos se abrieron de par en par—. Con mi testimonio asegurando como realmente sucedieron las cosas quizás todo fluya de una manera más creíble.

—¿Es...Es en serio? —su rostro pareció brillar al verlo asentir.

—Claro, luego de que pasen los días que tu abogada dijo...Y se cumplan los catorce días que tengo que esperar para la operación de mi nariz.

—Eso último sonó horrible, lo lamento— murmuró cubriendo su boca pero él se le unió—. Gracias...Realmente no tienes idea como te lo agradezco.

—Tú no hiciste nada malo; todo esto fue un accidente —torció la boca—. Aunque hubiera sido genial ver como golpeabas a ese idiota.

La melodiosa y ahora más audible risa de la rubia se hizo presente y dio vuelta en la isla para acercarse al bostoniano y abrazarlo. No cabía en su corazón la inmensa gratitud que sentía hacia él y con aquello imaginaba que en un futuro cercano finalmente podría decir las cosas como realmente fueron.

Eran pequeños destellos de luz que para ella eran significantes y Chris se los había dado.

Después de unos segundos así Evans recordó otra cosa importante que deseaba hablar con ella desde ya unos meses. Tenía temor de poner ese tema sobre la mesa pero se trataba de un asunto del cual también necesitaba respuestas.

—Oye Rowan —la separó despacio de su cuerpo—. Hay otra cosa que necesito hablar contigo.

Ella alzó la vista preocupada pero asintió ya separándose completamente del hombre.

—Claro, adelante.

Su voz se oía tan normal. ¿Qué acaso no lo recordaba? ¿O el tratar de ignorarlo era un mecanismo de defensa?

—Pues... —suspiró—. De acuerdo, yo tampoco sé cómo empezar a hablar —rieron.

—No te preocupes —frotó sus brazos por el frío.

—Yo quería saber...Bueno, es una duda que he traído desde entonces —se acercó un poco más a ella—. Pero...Necesito que hablemos sobre lo que pasó después del cumpleaños de Jazzy.

Rowan palideció y su cuerpo comenzó a temblar.

—¿Por qué te fuiste?

Después de esa directa pregunta que le llegó como punta de flecha, la mente de Hartford revivió aquel recuerdo como si se tratase de una película.

Estaba en el cumpleaños de Jazmine el año pasado y a pesar de estar con el corazón roto ella no quiso defraudar a su mejor amiga.

Caleb y Rowan habían terminado. Sí, aunque no lo creyeran, lo que en ese tiempo era una duradera relación tuvo un quiebre tiempo atrás por razones diferentes a las actuales. Ambos tomaron distancia por unas semanas y se esforzaron por que la prensa no lo notara por el momento. Cosa que les funcionó.

Pero ya el tiempo pasaba y la cantante se sentía demasiado abrumada y triste por aquella ruptura. Por eso, cuando el cumpleaños de Jazzy finalizó y luego de que la castaña insistiera en que ella y Chris pasaran tiempo juntos, las cosas tomaron otro rumbo.

¿Ofrecerle beber algo en su departamento había sido mala idea de parte del castaño? Al principio no. Pero ¿Tomar muchísimo más de la cuenta para dar rienda suelta a su locura es justificable? No lo sé.

No les importó absolutamente nada. Ambos estaban ebrios y con una vida amorosa que estaba por el suelo. Simplemente conectaron al instante y la habitación de Chris conoció cada uno de sus secretos.

Pero a la mañana siguiente, cuando Hartford despertó junto al bostoniano completamente dormido la culpa la invadió.

Sentía que estaba cometiendo el más horrible de todos los pecados al haberse acostado con otro después de una semana de separación con Caleb. Si le hubiera contado a sus amigas ellas le dirían que estaba en su derecho, pero Rowan era demasiado leal y sentía que de todas formas le estaba engañando.

Antes de que Evans despertara, la cantante tomó todas sus cosas con disimulo para irse a la velocidad de la luz. ¿Que si le dolió dejarlo abandonado? Por supuesto que sí, como no tienen idea. Pero la culpa que sentía era tan grande que pensaba que se desmayaría.

Cuando Chris despertó no había nadie a su lado. El lado izquierdo de su cama estaba vacío y no dejó de preguntarse a dónde había ido la rubia. Pero aún podía sentir el perfume de aquella mujer en las sábanas.

Después de eso ninguno se buscó ni se volvió a hablar. Rowan regresó con Caleb dos semanas después cuando éste le pidió perdón de manera olímpica y Evans regresó a su trabajo.

Hicieron como si aquel día jamás hubiera pasado.

Aunque en el fondo...Ambos lo recordaban con algo de aprecio.

soltar el tecito como una bomba y luego irse sin más qué decir es mi pasión 😎

JAJAJAJAJ pido perdón, es que dejaré las explicaciones de rowan sobre esto para el otro capítulo pq,,,,hay que mantener el suspenso 🤣

qué les pareció? wey, es que chris >>>>>>>
cualquier persona la hubiera odiado por eso pero él hasta la va a ayudar, chau me fui a llorar 😭

anyway, está historia me tiene con ma emoción por las nubes que no he dejado de escribir y hacerles manips. que alguien me detenga pq tengo clases 😭🤣

espero les haya gustado bbs les AMO un montón y ojalá tengan un precioso día <333

70 votos para actualización <3

nat