🎇Veintitres🎇
YoonGi era un hombre que a pesar de su edad, gustaba de pasar tiempo con su padre.
Min JongSuk era un hombre de semblante intimidante y muy serio, pero que al mismo tiempo portaba un rostro tranquilo y podía llegar a ser muy bromista cuando se lo proponía. Claramente esa faceta de hombre amable era conocida por sus amigos cercanos y obviamente su familia. YoonGi no tenía malas experiencias en su convivencia junto a sus padres.
YoonGi recordaba a su madre con cariño y mas cuando miraba los retratos colgados en el pasillo que daban al estudio de su padre. YoonGi no puede negar lo mucho que ha admirado a ese hombre que reluce su cabello platino con orgullo, como una marca de cada una de las situaciones que ha vivido y de las cuales ha aprendido.
YoonGi siente un poco de nostalgia al ver el rostro feliz de su madre en los retratos y fotografías. Los Min eran un grupo familiar y que tenía muy buenas costumbres fraternales. Su madre era una mujer muy alegre y dinámica, una gran Directora de publicidad. Ella era inclinada a todo lo que tenía que ver con el arte y de alguna manera JiMin le recordaba a esa faceta alegre y atrevida de su madre, sobre todo cuando recordaba esa noche donde pudo verlo bailar en vivo... no dudaba de que JiMin era una expresión completa de la palabra arte.
YoonGi sigue su camino hasta la puerta color caoba, toca suavemente y entra. Su mirada se enfoca en el hombre sentado junto al gran ventanal que da al jardín que su madre cuidaba cuando estaba viva.
- Buenas tardes, YoonGi- le dice el hombre sin mirarlo pero notando el cariño en su voz.- No recuerdo la última vez que mis ojos te vieron...- dice divertido y mirando a su hijo fruncir el ceño y sentandose en la silla frente suyo. Una mesa redonda los separa, en la cual reposa un vaso de jugo a la mitad, un plato rectangular lleno de bocadillos y una jarra de agua junto a dos vasos mas.
- Siempre siendo drámatico papá- dijo YoonGi tomando uno de los trozos de frutas del platillo. - Vine la semana pasada a cenar contigo...
- Sí, y nunca me diste una respuesta...- se queja el hombre mayor- Me he enterado por allí que quizás estes saliendo con alguien...- menciona distraído y mirando de reojo las reacciones de su hijo.
YoonGi se siente un poco expuesto, sí su padre realmente supiera quizás le daría una gran charla sobre el cuidado que debe tener con esas personas, que las relaciones no funcionan así, que puede contraer enfermedades... y mucho más...
- Solo nos estamos conociendo- mencionó de manera vaga. Su padre parece tener ilusión en sus ojos. El hombre mayor insiste un poco en que conozca a alguien y pueda casarse, que lo apoyará sin pensar en el estatus social o el pasado de su pareja.- No te ilusiones... no sé siquiera sí va a funcionar...
- Por algo se empieza, hijo- le dijo el hombre- De alguna manera, creí que te vería casado hace algun tiempo...- mencionó con cierto tono nostalgico y con una expresión sombría.
- Las cosas no funcionaron- YoonGi dijo volviendo su mirada a la ventana, observando el jardín bien cuidado por el jardinero del lugar. En sus memorias recuerda haber estado en ese mismo jardín junto a su madre y también con aquella mujer que lo engañó.
- A veces me siento un poco culpable- le dijo Suk a su hijo- De alguna manera, parecía mas un negocio que una relación...- dijo con un deje triste y apenado. Quizás sientiendose avergonzado por alguna razón ante su propio hijo.
- Los negocios son relaciones, papá- le dice YoonGi tratando de quitar ese semblante culpable que baña el rostro de su padre. YoonGi no lo culpa, después de todo aprendió lo suficiente con esa situación del pasado.
- Contigo no puedo hablar en serio- le dice el hombre entre una voz quejumbrosa y divertida.
- En ningun momento creí que tu fueras culpable, es verdad, la conocí gracias a una fiesta a la cual me obligaste a ir... sigo sin entender el porque, ya estaba bastante grande para quedarme solo...- YoonGi se encoge de hombros y su padre ríe por lo bajo- Sí no hubiera sido ella, alguien mas lo hubiera hecho... NamJoon y TaeHyung intentaron advertirme, pero no podía creerlo, ¿cómo iba a saber que esa mujer solo quería mi dinero y mantener su estatus mientras me engañaba?
- Quizás debí hablar contigo antes- el hombre mayor reniega- Digo, después de todo el padre de ella fue mi socio en su tiempo, nunca dije nada al respecto...
- Porque creías que yo estaba bien- dijo YoonGi sonriendo tranquilo- Es pasado papá, ahora he estoy mucho mejor...- YoonGi mordió su labio un poco indeciso- Él me hace bien... quizás te agradaría...- mencionó en un susurro.
- ¿Él?- el padre de YoonGi le mira con una sonrisa- Vaya, quisiera saber quien te hace poner tan tímido...
- Contigo no puedo hablar en serio- repite la frase de su padre con queja. YoonGi no puede creer lo que él mismo acaba de admitir delante de su padre, ni siquiera puede decirse algo concreto a él mismo, ha intentado despejar su mente y relajarse... pero es imposible cuando la imagen de JiMin se cruza en su mente.
Y no precisamente mientras comparten una cama, la imagen es mas delicada, mira a la ventana de nuevo, perdido en sus pensamientos, pensando en qué hacer. YoonGi se había jurado no enamorarse, suficiente tuvo con una experiencia no necesitaba otra lección sobre la traición. Su padre nunca supo lo que sintió al estar bajo el ojo de la mitad de la empresa, siendo el heredero que fue engañado y abandonado. Esos días le traen recuerdos amargos...
Por eso le es dificil comprender lo que le sucede cuando esta con JiMin, aun si solo conversan después de intimar. Él ha reído con JiMin, lo ha abrazado y ha sentido una necesidad descomunal de descansar entre sus brazos... piensa que solo es una obsesión, pero sí así fuera, se convertiría en un idiota que solo lo obligara, pero en sus encuentros hay caricias y roces, claro que hay ocasiones donde ambos son unos completos desesperados, pero las últimas dos semanas, también hay caricias suaves y delicadas, YoonGi admite que le encanta la sensación que lo inunda cuando JiMin acaricia la piel de su espalda, o cuando simplemente juega con su cabello, le encanta la sonrisa que le brinda una vez acaban, y con ese pensamiento recuerda que debe llevarlo con una ginecologa para que le recomiende algun anticonceptivo seguro y confiable. Lo que menos desea es arriesgar el futuro y la vida de JiMin... y por eso se confunde... JiMin despierta en él, su lado mas humano... uno que creía perdido...
- Supongo que lo traerás para mi cumpleaños- dice el JongSuk mirando a su hijo.- A menos que me lo presentes en la cena de navidad...
- Todavía recibe clases, es universitario papá- le dice tomando mas bocadillos del plato. Su padre le mira.
- Es menor que tú- afirma. YoonGi asiente.
- Sí lo vieras, pensarías que es de mi edad o hasta mayor...- YoonGi ríe, él ha conocido tantas facetas en JiMin que cada vez esta a la espectativa de conocer algo nuevo.- No es que tenga apariencia de anciano, tiene metas y es alguien muy decidido, y tiene caracter... es raro ver a jóvenes adultos con la presencia que él carga...
- Hijo...- JongSuk mira a su hijo con una sonrisa enternecida. YoonGi le mira un poco confundido.- Sin importar como llegó a tu vida, me alegra que estés volviendo a ser el mismo chico que soñaba con darme nietos...
YoonGi abre su boca sorprendido y la cierra, mostrandose avergonzado, y mira hacia otro lado, escuchando la risa de su padre. Y lo único en su mente piensa es en la sonrisa que JiMin le brinda incluso al momento de saludarlo... como sí supiera qué hacer para siempre hacerlo sentir mejor... como sí tuviera el secreto para hacerlo olvidar sus amargos recuerdos...
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