Capítulo 95: Unbelievable.

Drake.

Llegamos a casa de mi suegro, bajamos del auto y posteriormente bajamos las maletas, mientras Kat y Carlos se adelantaban para abrir la puerta.

Mi suegro les indicó dónde estarían sus habitaciones y después salió conmigo a la sala, me ofreció algo de tomar y comenzamos a charlar.

-Hijo, ¿qué fue lo que pasó? -preguntó.

-Un mal entendido, pero no he podido explicarle porque no quiere hablar conmigo.

-¿Quieres un consejo...? -Asentí con la cabeza-. Lucha por ella, no permitas que todo el trabajo que les costó llegar aquí se tire a la basura tan pronto.

-Suegro, creo que está vez si lo hice mal pero también creo que puedo luchar un poco más -dije animado.

-Si en verdad la amas, hazlo -sonrió.

Se levantó del sillón, me dio una breve palmada en el hombro y se marchó iba con dirección al segundo piso a la habitación de Carlos. Entonces yo aproveché para ir a la habitación de Kat.

Kat.

Estaba en la habitación desempacando y de repente tocaron la puerta, creí que era papá así que solo avise que podían pasar. Cuando me volteé para ver qué se le ofrecía me di cuenta que se trataba de Drake.

-Hola -saludó.

-Hola... creí que te habías marchado ya -mencioné.

-Aún no. Necesito hablar contigo.

-De verdad Drake, ahorrate tus disculpas... no necesito las explicaciones -respondí de inmediato.

-Es injusto, ¿sabes? Tú más que nadie conoce mi postura ante ella -lo interrumpí.

-Sí, claro... se notó bastante -dije de manera sarcástica.

-Kat, ¡entiende! Por favor, estaba tomado, ni siquiera recuerdo eso -trato de defenderse.

-¡Con más razón! -grite-. Después vendrá a decirme que está embarazada.

-Kat -alargó.

-No Drake. Sigo creyendo que lo mejor es que nos separamos... al menos por un tiempo.

-¿Y el bebé? ¿Qué pasará con él? -mencionó preocupado y por ese lado lo entendí.

-Por él no tienes que preocuparte, estarás enterado de todo lo que pase.

-De acuerdo -dijo cabizbajo.

Drake.

Minutos después por fin salí de casa de los Williams, también tenía que descansar y asimilar todo lo que había pasado.

Llegué a casa, saludé a Linda y seguí mi camino hasta el estudio... me sentía inspirado así que me senté frente al piano y comencé a tocar.

Dime que me haces saber que si te amara te dejaría ir, porque nunca podría creer que pudieras irte. ¿Te lo estaría diciendo? No lo creo.

Y así, sin darme cuenta ya estaba creando una estrofa. Continúe escribiendo diferentes cosas al azar hasta que por fin, cree una de mis mejores canciones... o al menos eso creo yo.

Seguía ensayando la canción, no quería olvidarla y al mismo tiempo quería cerciorarme de que no tendría algún párrafo mal. De repente sonó mi celular.

-¿Todo bien con Kat? -pregunte después de descolgar, sabía que se trataba de mi suegro.

-Sí hijo, tranquilo.

-¿Entonces? -volví a preguntar confundido.

-Sé que las cosas no salieron como esperabas, pero quiero que sepas cuentas conmigo y si pasa algo yo te mantendré informado, ¿de acuerdo?

-Claro, muchas gracias.

-Te dejaré descansar, cuídate hijo.

-Igualmente -colgué.

Me sentí bien por un momento, pero sabía que nada estaba bien. Salí del estudio y caminé hasta mi habitación, más tarde llegó Linda y tocó a mí puerta.

-¿Drake? ¿Estás bien? -preguntó aún desde afuera.

-Sí nana.

-¿Puedo pasar? -inquirió.

-Adelante.

Yo me encontraba sentado en la cama, dando la espalda a la puerta. Ella entró y solo se quedó parada al filo de la cama.

-Drake, me preocupas. Llegaste, no comiste y ahora vas a dormir sin cenar. No creo que todo esté bien.

-Lo estoy Linda, solo... solo necesito descansar -mencioné.

-Te conozco bastante bien.

-La relación terminó con Kat... -comencé a explicar- Paydin vino a contarle un montón de mentiras que obviamente ya tenía preparadas.

-¿Por eso se puso mal ese día? -preguntó angustiada.

-Sí y hablé con ella, le hice ver las cosas, ella sabe que yo no confiaba en Paydin y aún así termino creyéndole.

-¿Y qué pasará con el bebé?

-Pues me dijo que me avisará cualquier cosa que suceda... ¿pero sabes lo frustrante que es no poder estar cerca? Y todo por culpa de alguien que solo regreso a hacer daño -dije cabizbajo.

-Te entiendo mi niño, ánimo. Verás que todo saldrá bien, te dejaré descansar -se acerco a mí y acarició mi cabello.

-Gracias nana.

Seguido de eso salió de la habitación y entonces yo me dispuse a dormir.

Kat.

Al día siguiente.

Desperté gracias a que mi papá se encargó de hacerlo. Tomé un baño y salí para cambiarme, baje al comedor y ya estaba mi papá junto con Carlos desayunando.

-¿Cómo amaneciste hija? -inquirió mi papá.

-Bien, gracias. ¿Ustedes?

-También -contestaron al unísono.

Me senté enfrente del plato con fruta que iba a comerme y nos quedamos en silencio.
A veces me era bastante incómodo estar con papá, realmente habíamos dejado de convivir por bastante tiempo ya. El desayuno contigo igual, en silencio, cuando terminaron papá llevo a Carlos al colegio y yo me quedé en casa lavando los trastos que habían salido sucios.

Papá me obligó a salirme de trabajar, dijo que él podía ayudarme mientras estaba embarazada. No pude rehusarme a decir que no, porque aquí no era como estar con Drake... además no debemos olvidar que mentí al decir que el estrés se había producido por el trabajo.

Termine de lavar los platos y subí a darme un baño, hice un poco de limpieza en casa y espere para ir por Carlos a la escuela. Cuando llegó la hora, tomé mi bolso y salí de casa... afuera me encontré con Robin.

Drake.

Desperté con un horrible dolor de cabeza, cómo si en la noche anterior me hubiese ido de fiesta y también tenía mucha hambre. Me levante de la cama y fui al baño, hice un par de cosas y baje con Linda a la cocina para desayunar. Finalice y regrese a mi habitación, tomé un baño y salí con dirección a casa de mi madre, necesitaba un consejo de la experta.

-Drake, hola... ¿Y Kat? -saludo y cuestionó al mismo tiempo que abrió la puerta-. ¿Está todo bien? -se notaba preocupada.

-Hola mamá, no, nada está bien... ¿Podemos hablar? -inquirí.

-¡Claro! Pasa.

Entramos y nos dirigimos a la sala, me dio un abrazo y un beso muy fugaz y seguido de eso nos sentamos.

-Bien, te escucho -mencionó mirándome fijamente.

Su tono de voz era serio, sabía que lo que le había a decir tal vez la decepcionará mucho pero realmente necesitaba un consejo. Comencé a contarle todo lo que había sucedido, ella prestaba mucha atención quizás estaba procesando mis palabras.

Continuará...

-----------------

Sí, lo sé. Probablemente me odian mucho, pero de verdad les prometo que terminaré está novela, justo hace unos días me rompieron el corazón (#badlucklupita jaja), y bueno por una parte está muy bien porque eso me ayuda a inspirarme. Tal vez los próximos capítulos estén un poco deprimentes pero todo mejorará.
¡Gracias por todo! Ya son 35k leídas y sigo sin poder creerlo, es una locura. Las adoro. ♥️

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top