Mandy: Hola mi amor -le dijo a Drake-.

Drake: No soy tú amor.

Mandy: ¿Y esta qué hace aquí? -me levante y luego Drake me imitó-.

Drake "Esta" tiene su nombre -me defendió-.

Tú: Sí, me llamo (tn) para tu información.

Mandy: Tú ni te metas golfa -grito-.

Tú: ¿Perdón? Más golfa eres tú por perseguir a Drake que bien sabes que jamás te hará caso -¿oh por Dios? ¿Yo dije eso?-.

Mandy: Eres una... -interrumpí, estaba verdaderamente enojada-.

Tú: ¿Una que...? Anda dímelo, que no te tengo miedo.

Mandy: ¡Ash! Solo te advierto que te alejes de una vez por todas de Drake, él es mío quieras o no -mencionó, yo me reí-.

Tú: Pues eso va a estar un poquito difícil -señalé con mi mano y le guiñe el ojo-, porque tú no eres nadie para prohibirle ¿o sí, Drake? -lo miré-.

Drake: ¡Claro que no! Ni siquiera mi mamá hace eso.

Tú: ¡Listo! -Simulé que me sacudía el polvo de las manos-. Creo que no eres nadie para venir a prohibirnos, aparte solamente somos amigos, si quieres andar con él adelante ¡eh! Por mi no te detengas, yo no me voy a meter, solo falta que él quiera -me encogí de hombros-.

Drake: Mmm... creo que la respuesta es más que obvia, solo quiero ser tú amigo -fingió una sonrisa-.

Mandy: ¡Ash! Pues tú te lo pierdes -le dijo a Drake y nos empujo para abrirse paso, iba muy molesta-.

Debido a que nos empujo, Drake y yo quedamos de frente. Por alguna extraña razón comencé a temblar, tal vez era de coraje o de miedo, de todo el miedo que me guarde... hasta ahora.

Drake: ¡Woow! -me tomó de los hombros-.

Tú: ¿Qué?

Drake: No creí que fueras tan agresiva -sonrió-.

Tú: Bueno... -reí-. Realmente no lo soy, pero si buscan me encuentran.

Drake: Ya veo, pero aún así sigo muy impresionado -mencionó-.

Tú: Es que ya me harte de ella, de escondernos, de no poder hablar y todo eso.

Drake: Tienes razón.

Tú: Alguien tenía que decirle algo, ya me debía muchas.

Drake: ¿En serio? -se sorprendió-.

Tú: Sí, desde que la conozco me ha molestado ya era hora de ponerle un alto.

Drake: Por supuesto -sonrió-.

Tú: Ya no hablemos de ella, mejor vamos a desayunar -animé-.

Drake: Claro.

De nueva cuenta nos sentamos y desayunamos, es domingo, nunca hay mucho que hacer. Seguido de eso cada quien se fue a su habitación, yo llame a Anna para hablar con ella necesitaba un consejo.

Anna:-Entrando a mi habitación-. ¿Qué pasó? Te escuchabas muy angustiada.

Tú: Primero siéntate -eso hizo, se sentó a mi lado en la cama-.

Anna: ¿Y...?

Tú: Es que ¡pff! Tengo que contarte algo raro que me paso ayer -me mordí el labio-.

Anna: ¿Raro? ¿Qué fue? Dime ya.

Tú: Es que... Drake... -interrumpió-.

Anna: ¿Drake qué?

Tú: Me beso -dije sin más-.

Anna: ¿Queeeeeeeeeeeeeeeeeeeeé? ¿Estás hablando en serio?

Tú: ¡Eso! Y estoy muy confundida -me levante y caminaba de lado a lado-.

Anna: Pero... ¿por qué? -pregunto sin entender-.

Tú: Porque lo correspondí, no duro mucho, te advierto pero no... - negué con la cabeza- Drake y yo jamás llegaremos lejos.

Anna: ¿Por qué dices eso? ¿Quién se los impide? -cuestionó-.

Tú: Muchas cosas, el colegio, mi papá, Mandy, James, Richard... TODO, yo no puedo con eso -dije exasperada-.

Anna: Pero si se quieren lo superaran.

Tú: No creo que esté lista para eso.

Anna: Entonces quieres decir que ¿Drake te gusta? -inquirió-.

Tú: No sé, te digo que estoy confundida.

Anna: ¿Sientes algo por él?

Tú: ¡Es raro! Tal vez sí pero si lo sintiera, no podríamos... prefiero que seamos amigos.

Anna: Hay (tn), deberías de darle una oportunidad.

Tú: Mejor después, dejemos que las cosas fluyan.

Anna: Está bien.

Seguimos platicando y después de un rato Anna se fue, mañana empezaba de nuevo la semana. Por más que buscaba una solución a mi problema, a mi confusión, de plano no la encontraba y así pensando me fui quedando dormida.

Un mes más pasó rapidísimo.

Drake y yo seguíamos siendo amigos y Anna insistía en que debería de darle una oportunidad, pero no, algo me lo impedía. No sé qué...

El mes pasado fue confuso y divertido, espero que este sea igual o mejor. Había empezado bien aunque con James más unido a mí y con Drake pasaba al contrario, ya no estábamos tan juntos, hasta que un día James me tomo por sorpresa, era un sábado. Pasó por mi temprano y me dijo que me llevaría a un lugar lejos pero con el que conviviéramos con la naturaleza y acepte, sonó relajante.

Llegamos y comenzó a poner una manta, sacar comida y demás. Comimos, caminamos un rato, platicábamos hasta que James comenzó a portarse raro, me pareció extraño... se puso serio y comenzó a decirme cosas que me sorprendieron.

Habíamos regresado al mismo lugar donde habíamos comido, nos sentamos.

James: (tn) necesito hablar contigo -dijo con firmeza-.

Tú: ¿De qué? ¿Qué pasa? -me alarme-.

James: No es nada grave, no te alarmes.

Tú: ¿Entonces?

James: Es que... yo sé que me dijiste que no querías tener compromisos porque estabas concentrada en el colegio, pero ya lo no soporto.

Tú:¿De qué hablas?

James: No soporto estar tan alejado de ti, me has ayudado mucho y te lo agradezco como no te imaginas, pero quiero ser algo más que tú amigo, quiero ser tú novio. Y te pregunto ¿quieres ser mi novia? Por favor, dame la oportunidad, prometo ser el mejor -suplico-.

Tú: Yo no sé... -interrumpió-

James: Está bien, no me digas ahora, puedes pensarlo... solo quería decírtelo porque ya no podía tenerlo más tiempo dentro -explicó-.

Tú: Pues gracias por tu sinceridad -comenzaba a sentirme incomoda-.

Nos quedamos un momento callados.

Tú: -Observe mi reloj-. Deberíamos de regresar al colegio -mencioné-.

James: Sí, ya es tarde.

Nos pusimos de pie y comenzamos a levantar las cosas que ocupamos para el día de campo. Hayamos el auto y subimos, todo el camino nos la pasamos callados, llegamos al colegio y James me llevo hasta mi edificio y volvió a irse, ahí me encontré con Drake.

Tú: Hola -salude-.

Drake: Estaba esperándote -dijo-.

Tú: ¿Y llevabas mucho tiempo? -inquirí-.

Drake: Como 20 minutos.

Tú: ¡Bien! ¿Para qué me buscas?

Drake: Para platicar, salir, ver películas -solto una risita-. Lo que sea, estoy un poco aburrido.

Tú: De acuerdo -reí-.

Drake: ¿Qué haremos entonces?

Tú: ¡Ver películas!

Drake: Algo me decía que dirías eso -sonrió-.

Tú: Vamos.

Ahora me toco ir a la habitación de Drake, llegamos y preparamos todo a media película Drake puso pausa ya que tenía que ir al baño, entro y justo en ese momento sonó mi celular, era Anna.

Tú: Hola Anna...

Anna: ¿Cómo que andas con James? -grito-.

Tú: ¡¿De qué rayos hablas?!

Anna: Medio colegio ya lo sabe, ¿por qué no me dijiste? -reprochó-.

Tú: Tal vez no te dije porque no ando con él.

Anna: ¿Cómo pudiste decirle que sí?

Tú: ¡Escúchame! No ando con James.

Anna: ¿Entonces esos rumores?

Tú: No sé, pero yo lo voy a arreglar.

Anna: ¿Segura?

Tú: Sí.

Anna: Está bien.

Colgué, se pone histérica. Bueno con toda razón, seguro James ya está diciendo que somos novios cuando ni siquiera le di el sí.

Drake.

Escuché a (tn) hablando por teléfono no sé quien era exactamente, pero después escuche... ¿James? Ahora que pretende ese y ¿cómo qué anda con (tn)? No sé qué está pasando y me preocupa. Si ella le dice que sí, lo haría para molestarme, no creo que realmente lo quiera. No como a mí.

Tú.

Después de que colgué Drake salió del baño.

Tú: Creí que ya te habías atorado -dije entre risas, él también-.

Drake: Muy graciosa.

Tú: Un poco -sonreí-.

Drake: No quiero ser chismoso pero,¿quién te llamo?

Tú: Pues lo estás siendo.

Drake: Un poco -me imitó y reí-.

Tú: Era Anna.

Drake: ¿Todo bien?

Tú: Sí, solo eran tonterías -le resté importancia-.

Drake: ¿Segura?

Tú: Ajá...

Drake: Bien -dijo no muy convencido-.

Tú: Vamos a seguir viendo la película.

Drake: ¡Claro!

Le quito la pausa y continuamos viendo la película hasta que termino, eran como las 6 de la tarde, salí de su habitación para buscar a James y aclarar esa tontería.

Tú: Hola de nuevo, James.

James: ¡(tn)! Siéntate -ofreció-.

Tú: Estoy bien, gracias, solo tengo una duda. ¿Es cierto que estás divulgando que somos novios?

James: ¡No! Jamás haría algo así, bueno a menos que sea cierto.

Tú: ¿Entonces como saben?

James: No lo sé -se encogió de hombros-.

Tú: ¿Seguro no fuiste tú?

James: Segurísimo.

Tú: Mmm... bueno, solo eso quería preguntarte.

James: Está bien.

Tú: Me voy, cuídate.

Di la media vuelta y me hablo de nuevo.

James: ¡Espera!

Tú: ¿Qué pasa?

James: ¿No quieres tomar algo?

Tú: No, gracias.

James: Ándale -insistió-.

Tú: De verdad no.

James: Entonces te acompañó.

Tú: No, no es necesario. Sé el camino.

James: Déjame hacerlo.

Tú: Como gustes.

Caminamos hasta mí habitación, él hablaba y yo simulaba escucharlo. La verdad es que mis pensamientos estaban más lejos que en mi propia cabeza.

James: No pienses que te presiono, ni mucho menos pero, ¿ya lo pensaste?

Tú: ¿No crees que es muy pronto?

James: ¿Lo piensas?

Tú: Por supuesto.

James: ¿No podrías darme un adelanto?

Tú: Amm...

Miles de cosas pasaron por mi cabeza, empezando por el beso que tuve con Drake de acordarme se me enchino la piel, para ser honesta fue hermoso pero, también recordé que Drake y yo no podríamos llegar muy lejos.

No mientras estemos aquí en el colegio.