Capítulo 49: Tengo que esconder mi amor.

Tú.

Termine de lavarme las manos y salí al comedor, Drake no estaba, supuse que estaba con su mamá y no los interrumpí, en lo que salían me entretuve viendo unas fotos que la señora Robin tiene en la pared de toda su familia y como Drake, estaba muy bonito de bebé inmediatamente lo reconocí...

Robin: (tn) -me llamo-.

Tú: -Brinque-. Me asusto -reí con nerviosismo-.

Robin: Lo siento, pero ya siéntate por favor.

Tú: Está bien, gracias.

Me senté y después llego Drake, y su mamá nos servía.

Tú: ¿Dónde estabas Drake? -inquirí-.

Drake: En el baño -se sentó a un lado mío-.

Tú: ¿En serio? Y ¿por qué no te vi? -pregunte confundida-.

Drake: Estabas demasiado entretenida viendo las fotos -reí, esta vez muy apenada-.

Tú: ¿Me viste?

Drake: Sí.

Tú: ¡Woow! Creí que si me entretuve mucho -dije eso y salió su mamá de la cocina-.

Robin: Espero que les guste -también se sentó-.

Drake: Yo digo que sí.

Tú: También lo creo, huele muy bien.

Robin: Pues provecho.

Nos pusimos a comer y platicábamos aunque no mucho, tiempo después cuando terminamos.

Tú: Señora Robin, su comida es excelente -halagué-.

Robin: Gracias hija -sonrió-.

Tú: Drake olvido advertirme que me podría gustar mucho.

Drake: ¿No te lo dije? -pregunto riendo-. Lo siento.

Levantamos los trastes sucios y ayude a lavarlos, como aún era temprano las cinco de la tarde, para ser exactos pues nos pusimos a ver una película. Cuando termino, nos despedimos pues iríamos a casa de mi mamá.

Drake: Bueno mami, gracias por todo pero ya nos vamos.

Robin: Creí que se quedarían aquí, ya hasta había preparado una habitación para (tn).

Drake: No mamá, es que queremos ir a visitar a la mamá de (tn).

Tú: Sí, Robin... pero mejor otro día volvemos a venir y ahora si me quedo -reí-.

Robin: ¿Me lo prometes? -inquirió-.

Tú: Claro -acepte sonriente-.

Robin: Bueno pues gracias por venir.

Tú: Un placer Robin, me la pase muy bien y al contrario gracias a usted por todas sus atenciones.

Robin: De nada, espero que regreses pronto -nos dimos un pequeño abrazo-.

Tú: Eso espero también.

Robin: Cuídate hijo y ven más seguido.

Drake: Claro mamá, tú también cuídate, te amo.

Robin: -Se abrazaron-. Y yo a ti.

Drake: Después vengo -se separaron-.

Robin: Está bien.

Tú: Hasta luego.

Robin: Que les vaya bien.

Salimos de su casa y subimos al auto, en camino hasta mi casa. Como dos horas después llegamos y bajamos, para darles una buena sorpresa a Carlos y mamá. Bajamos del auto e íbamos de camino a la puerta cuando alguien me llamo de la casa de al lado.

James: ¡(tn)!

Voltee y vi a James parado en su cerca, Drake se volteo dándole la espalda a James.

Tú: Hola James -dije extrañada-.

James: No pensé encontrarte por estos rumbos hoy.

Tú: Ni yo -reí-. Y ¿qué haces?

James: Pues vine a visitar a mi familia y ¿tú?

Tú: También.

James: ¿Y con quién vienes?

Antes de que respondiera, Drake se giro para tener de frente a James y me gano las palabras.

Drake: Conmigo, ¿algún problema? -pregunto molesto-.

Tú: Drake no empieces por favor -suplique-.

James: ¿Cómo puedes hablarle después de lo que me hizo (tn)?

Drake: Mira quién empieza -se cruzo de brazos-.

Tú: Lo siento James, pero Drake es mi amigo y ese día solo fue un mal día para mí.

Drake: La amistad puede más -dijo entre dientes-.

James: Tú, ni te metas profesorcillo de quinta.

Tú: Tranquilo Drake -me presuré a decir-.

James: O sea (tn) que estas queriéndome decir que cada que estés mal, me vas a buscar y cuando estés bien, ¿no?

Tú: No James, no lo tomes así.

James: ¿Entonces, cómo quieres que lo tome?

Tu, Podemos hablar en otro momento, no quiero pelear, vine a visitar a mí mamá.

James: Está bien, lo siento.

Tú: No te preocupes, nos vemos luego... vamos Drake.

Drake: Claro linda -dijo en tono de burla-.

Lo ignoré, mientras más les digo que no peleen más lo hacen y es estresante, llegamos a la puerta y tocamos. Tania abrió.

Tú: Hola Tania, ¿está mamá?

Tania: Señorita (tn), ¡qué sorpresa! Sí, están aquí en la sala, pasen.

Tú: Gracias Tania, pasa Drake.

Drake: Con permiso.

Tú: Espérame aquí y cuando te hable entras, será una linda sorpresa.

Drake: Está bien.

Entre y efectivamente estaban mamá y Carlos en la sala, como siempre viendo televisión, ni se lo esperaban.

Tú: Buenas noches -salude-.

Mamá: ¿(tn)? -volteo, me vio y corrió a abrazarme-.

Tú: Hola mamá, ¿cómo estás?

Mamá: Bien y ¿tú mi niña? -nos separamos-.

Tú: ¡Qué bueno mamá! Yo también bien... vengo con alguien.

Mamá: ¿Quién es?

Tú: Ya verás -camine a donde deje a Drake y lo jale de la mano-. Ven -entramos-.

Mamá: ¡Drake, qué gusto! -También lo abrazo-.

Drake: Señora, el gusto es mío ya sabe.

Mamá: -Se separaron-. ¿Cómo estás?

Drake: Bien gracias, a usted ni le pregunto se ve que bien.

Mamá: Gracias Drake.

Drake: Nada que agradecer, solo digo la verdad.

Mamá: No me lo esperaba.

Tú: Es que era una sorpresa.

Carlos: ¡Pulgosa! Drake, hola.

Drake: Hola Carlos.

Tú: Hay duende, deberías buscar algo que hacer.

Carlos: Pues mis tareas ya están hechas.

Tú: Bueno menos mal.

Mamá: ¿Y ese milagro?

Tú: Es que fuimos a casa de Drake con su mamá y él me pregunto que como estabas, entonces le dije que bien, pero aún así quiso venir a verlos y me pareció genial -explique-.

Drake: Gracias a mí, estamos aquí -reí-.

Mamá: ¡Qué bien!

Carlos: ¿Y ya son novios?

DrakeyTú: No.

Mamá: ¡Carlos! -exclamo mamá-.

Carlos: Lo siento, pero que mal que no lo sean.

Tú: Estás loco duende.

Drake solo comenzó a reír y yo también, no sentamos de nuevo en la sala.

Mamá: ¿Y ya cenaron o preparo algo?

Tú: Comimos con la mamá de Drake.

Mamá: ¿Drake?

Drake: Sí señora.

Tú: Dígamos que mi mamá no me cree mucho -reí-.

Mamá: No, no es eso solo lo confirmo.

Tú: Está bien -me encogí de hombros-.

Mamá: Bueno entonces vamos a merendar, ¿les parece?

Tú: ¿Quieres Drake?

Drake: Sí, me parece.

Tú: ¡Comelón! -me asombre-.

Drake: Lo sé -respondió apenado, mamá rió-.

Mamá: Bueno chicos vamos a la mesa.

Nos levantamos y fuimos a lavarnos las manos, regresamos y nos sentamos en la mesa, mientras merendábamos platicábamos, una linda reunión. pero siempre que estoy así, algo tiene que interrumpirlo. Tocaron a la puerta y Tania como siempre abrió, se escuchaba como si peleara con alguien y mamá iba a levantarse y no la deje.

Mamá: Iré a ver qué pasa -mencionó-.

Tú: No, quédate tranquila que yo iré.

Mamá: No como crees, yo voy.

Tú: No te preocupes mamá, yo lo hago -insistí-.

Me levante y camine hasta la puerta, desee nunca haberlo hecho... era mi papá, venía a molestarnos de nuevo.

Papá: (tn) hija, dile a esta -refiriéndose a Tania- que me deje pasar.

Tú: Su nombre es Tania y lo siento papá pero no eres bienvenido aquí.

Papá: Pues entonces entrare por las malas.

Tú: ¿Por qué no mejor te vas con tu familia o a otro lado a molestar?

Papá: Ustedes son mi familia.

Tú: Claro que no.

Papá: ¿Me vas a dejar entrar o no?

Tu, Lo siento pero no.

Papá: Te lo advertí -amenazó-.

En un abrir y cerrar de ojos, hizo como si se fuera y cuando Tania estaba cerrando la puerta se regreso y la empujo abriéndose paso y entrando, ayude a Tania a levantarse y lo seguí.

Papá: Buenas noches familia -mi mamá rápidamente se levanto, también Carlos quien corrió a abrazarlo-.

Carlos: ¡Papá! Qué bueno que vienes.

Papá: Si, aunque te hermana no me dejaba pasar -se hacía el sufrido-.

Carlos: ¿Qué? ¿Por qué le haces eso a papá (tn)?

Tú: Es que tú no entiendes Duende -trate de explicar-.

Carlos: No, no entiendo cómo puedes ser tan cruel con papá.

Tú: Pero Duende... -interrumpió-.

Carlos: Déjame solo.

Y se fue furioso a su habitación, Drake aún no se levantaba y también desearía que no lo hubiera hecho.

Papá: Ves lo que provocas (tn).

Tú: Es tú culpa, sabes que aquí no eres bienvenido -escupí con desprecio-.

Papá: Como sea... ¿y quién es este jovencito? -dirigiéndose a Drake-.

Él se levanto y volteo a verlo.

Drake: Buenas noches señor -le extendió la mano y mi papá lo ignoro-.

Papá: ¿Qué hace este tipo aquí? -pregunto molesto-.

Mamá: Es amigo de la familia.

Papá: Pues no lo quiero ver aquí, váyase -grito-.

Tú: Tú no eres nadie para venir a mandarnos.

Papá: Claro que sí, yo pago todas tus cosas y esta casa es mía.

Tú: Sólo te importa tú dinero, ¿verdad?

Papá: No, también me preocupa su seguridad y este tipo no es seguro... espera, ¿acaso él no es tú profesor?

Tú: Sí, ¿y eso que tiene que ver?

Papá: Se me hace conocido.

Tú: No, no lo conoces -dije rápidamente-.

Papá: -Lo observaba fijamente-. ¡Claro que sí! Es el cantante ese drogadicto que te prohibí, ¿cierto?

Drake: ¡No soy drogadicto! -dijo enojado-.

Papá: Mmm... entonces que eres ¿borracho? Hay mira, ¡no me importa! Pero creí haberte prohibido que lo siguieras -se refirió a mí-.

Tú: Ya papá estoy harta de tú comportamiento, ya estoy grande y puedo hacer lo que yo quiera y si a alguien le tengo que pedir permiso es a mamá... tú para mí ya estás muerto ¿lo entiendes?

Mamá: ¡(tn)! -exclamo en regaño-.

Tú: No mamá, ya estoy harta de que se cree dueño de nosotras solo porque nos mantiene, no es justo y está casa no es mía, pero te pido por favor que te ¡VAYAS! -grite, en verdad estaba muy enojada-.

Papá: Está bien (tn), pero esto no sé quedará así.

Tú: Me valen tus amenazas, ya lárgate -mencione restándole importancia-.

Y lo empuje hasta la salida, no pude más y lloré claro de coraje, regrese hasta el comedor y de inmediato Drake me abrazo.

Drake: Tranquila linda -acariciaba mi cabello y beso mi cabeza-.

Tú: No sé si hice mal o bien, pero ya no lo soporto.

Drake: Era lógico que reaccionaras así.

Tú: Y perdón por ver todo esto y porque te dijera eso... sigue obsesionado pensado que eres un drogadicto que se mete con prostitutas -expliqué-.

Drake: Lo note, pero no te preocupes como famoso te adaptas a las malas criticas.

Tú: -Nos separamos-. De verdad, perdón.

Drake: No te preocupes -limpio mis lágrimas-.

Mamá: ¿Cómo está eso de que te prohibió a Drake?

Tú: Larga historia mamá.

Mamá: Pues aún tengo tiempo para escucharla.

Tú: Está bien, vamos a sentarnos de nuevo.

Nos sentamos, Drake a un lado mío y comencé a contarte todo a mamá, justo como se lo había contado a Drake, ella no lo podía creer, no podía creer que mi papá, el hombre de quien había estado enamorada mucho tiempo se convirtiera el ser más cruel que pueda existir.

Mamá: ¡Dios mío! -se sorprendió-.

Tú: Y por eso es que viste mis fotos, posters y demás cosas en la basura aquel día.

Mamá: No puedo creerlo, sabía que tú papá había cambiado pero no que se pusiera así.

Tú: Pues sí y con la única que se desquito fue conmigo.

Mamá: Sí, lo siento mucho hija.

Tú: No te preocupes mamá prefiero mil veces esto a que te hubiera hecho daño a ti.

Mamá: Pero no es justo.

Tú: Lo sé, pero Drake va y viene tú no mamá.

Drake: Oye, sigo aquí -se quejo, yo me solté a reír-.

Tú: Es broma, sabes que te quiero.

Drake: Y yo a ti.

Nos quedamos viendo como por 5 minutos o menos, mamá lo noto pero no nos dijo nada, bueno nada que nos molestara y después interrumpió.

Mamá: Pero al final lo conociste, como tanto soñabas -volteamos a ver a mamá-.

Tú: Eso sí, aunque fue en otras circunstancias.

Mamá: Y han demostrado que su amistad puede más que todo.

Drake: Sí -sonrió-.

Tú: Bueno mamá, tenemos que irnos al colegio.

Mamá: Está bien y perdón de nuevo Drake por la escena.

Drake: No se preocupe señora, suele pasar.

Mamá: Gracias y gracias también por venir.

Drake: El gusto es mío espero poder traer a su hija más seguido.

Mamá: Eso suena perfecto, claro siempre y cuando la acompañes.

Drake: Si ella me lo permite por mí encantado.

Mamá: -Rió-. Está bien, que les vaya bien chicos mucho cuidado.

Tú: Sí mami -la abrace-. Te amo.

Mamá: Y yo más a ti cariño -nos separamos-.

Drake: Hasta muy pronto -se acerco y también la abrazo-.

Mamá: Hasta pronto.

Se separaron y mamá nos acompaño hasta la puerta, caminamos al auto y subimos, mamá se quedo ahí para vernos partir. Nos quedaba cerca el colegio y antes de llegar, Drake me sorprendió.

Drake: Tengo hambre.

Tú: ¿Qué? Drake acabamos de merendar con mi mamá, ¿quieres reventar o qué?

Drake: No. Pero de verdad tengo hambre.

Tú: ¿Y qué se te antoja?

Drake: Un pizza canadiense.

Tú: -Reí, estaba verdaderamente sorprendida-. Pues si quieres vamos por una y regresamos al colegio, ahí te la comes a gusto.

Drake: Pero no quiero comer solo.

Tú: Bueno, te ayudo con una rebanada, solo una.

Drake: Está bien.

Fuimos hasta la pizzería más cercana, Drake y yo bajamos para pedir su pizza mediana canadiense, nos la prepararon y la entregaron. Drake pago y salimos de ahí, subimos al auto y Drake manejo hasta el colegio, llegamos, entramos y Drake se estaciono, bajamos del auto y lo cerro bien.

Drake: ¿Y dónde la comeremos?

Tú: Creí que en la cafetería.

Drake: No, ahí les antojaríamos a todos.

Tú: ¿Entonces?

Drake: ¿En tú habitación o en la mía?

Tú: Mejor en la mía.

Drake: Está bien, entonces vamos para allá.

Caminamos hasta el edificio de mi habitación y entramos, es sábado y los fines de semana casi nadie esta, suelen llegar los domingos en la tarde o noche. Llegamos a mi habitación y abrí, pasamos y Drake se sentó en la cama.

Tú: ¿Y qué haremos mientras la comemos?

Drake: ¿Qué te parece si vemos una película?

Tú: Suena genial esa idea.

Drake: Sí.

Tú: Busca una la que te guste de ese mueble -señalé-, mientras yo saco unos platos, vasos y el jugo.

Drake: De acuerdo.

Nos levantamos y empezamos a armar nuestra cena, acomodamos todo en la cama a modo que no se cayera y pusimos la película. Drake se decidió por "Help!" de The Beatles, comenzamos a comer y ver la película, es muy divertida me encanta.

Drake: No pensé que fueras a tener esas películas.

Tú: Pues sí, ¿olvidas que soy fan de The Beatles? -reí-.

Drake: No, no lo olvido... pero de verdad no creí que las tuvieras.

Tú: Sí, bueno... desgraciadamente esa película me la regalo mi papá, en un cumpleaños.

Drake: ¡Ahh!

Tú: Es mi favorita, bueno no, es que no me decido entre está y "A Hard Days Night" las dos son muy divertidas.

Drake: Lo sé, a mí me gusta más esta.

Tú: Se nota.

Drake: Sobretodo por las canciones, en especial You've got to hide your love away.

Tú: Es hermosa -y entonces recordé su letra, tengo que esconder mi amor-.

Drake: Oye...

Tú: ¿Qué pasa? -seguía viendo la tele-.

Drake: Lo bueno es que solo me ibas a ayudar con una rebanada.

Tú: ¿Qué? -lo voltee a ver rápidamente-. Pero solo llevo 2 y media...

Drake: Bueno solo decía.

Tú: Estás loco.

Drake: Pero sé que así me quieres.

Tú: Por supuesto.

Continuamos viendo la película y no parábamos de reír, hasta que... nos quedamos dormidos. Al día siguiente. Desperté y creí que había sido un sueño pero no, me levante y vi a Drake a mí lado, volví a recostarme.

Tú: ¡Drake! -grite-.

Drake: -Se levanto de golpe-. ¿Qué, qué pasa?

Tú: ¡Te quedaste dormido, en mi habitación! -exclame bastante sorprendida-.

Drake: ¿En serio? -se tallo los ojos-.

Tú: Sí... más bien nos quedamos dormidos, la tele esta prendida.

Drake: Volteo a verla, cierto tienes razón.

Me levante y comencé a recoger todo, apague la tele, Drake solo me observaba.

Tú: ¿Y qué esperas?

Drake: ¿Eh?

Tú: No te corro, pero ya vete si te ven aquí nos van a regañar.

Drake: ¡Ah! Sí, sí ya me voy -se levanto y se arreglo el cabello-. Nos vemos luego (tn).

Tú: Sí Drake, gracias por todo.

Drake: A ti -y salió-.

Continué limpiando, después me daría un baño.

Drake.

Salí de la habitación de (tn) y ahí mismo le mande un mensaje, que decía así: "¿Te gustaría ir a desayunar? Bueno te espero en la cafetería en media hora. Te quiere, Drake." Y me fui a mi habitación, para darme un baño y después desayunar con (tn).

Tú.

Estaba a punto de entrar al baño para bañarme y recibí un mensaje, de Drake jaja me pregunta y me cita. Pero bueno iré, porque tengo mucha hambre, me bañe y salí, me cambie y maquille. Y justo antes de salir, tocaron a mi puerta, creí que era Drake... pero no quedo de pasar por mí, en fin, abrí y era.

Continuará...

-----------------------------

Hola, aquí capítulo bastante largo para que no me extrañen demasiado jajaja. No dejen de comentar, todas y cada una de sus opiniones me son muy importantes, ¡saludos! :)

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top