Mini-maratón.

Tú.

Al día siguiente.

Me levante temprano a las diez, era domingo, me metí a bañar y cuando salí me cambie, para después salir a la cafetería por algo de desayunar, cuando llegue vi a Drake sentado en una mesa con Anna.

Anna.

Drake me había llamado temprano para desayunar y acepte, supongo que (tn) aún no le dice sobre su secreto. Pero prometí ya no meterme más.

Anna: ¿Te pasa algo Drake?

Drake: ¿Qué? No, nada.

Anna: No me mientas, te conozco.

Drake: Mmm... bueno es que James y (tn) andan.

Anna: ¿Qué? No te creo.

Drake: Sí, bueno eso me dijo ayer James.

Anna: ¿Y no crees qué lo haya dicho para molestarte?

Drake: Tal vez.

Anna: Mejor deberías de preguntarle a (tn), yo no confiaría mucho en James.

Drake: Tienes razón, eso haré.

Teníamos como media hora de estar en la cafetería cuando vi que entro (tn) y le dije a Drake ya que él estaba de espaldas.

Anna: Ahí esta (tn), voltea disimuladamente -me obedeció-.

Drake: ¿Crees que ya nos haya visto?

Anna: No... ya, ya nos vio.

Drake: Hay no.

Anna: Viene para acá.

Drake: ¿En serio?

Anna: Sí, ¡shh!

Tú.

Fui a la barra y pedí un jugo de naranja, me lo dieron y llegue a su mesa.

Tú: Buenos días chicos -me senté a un lado de Anna-.

Anna: Hola (tn) buenos días.

Drake: Buenos días (tn) -contesto muy seco, sin ganas-.

Tú: ¿Cómo están?

Anna: Bien, pero bueno yo tengo que irme los dejo solos.

Tú: ¡No! ¿Por qué?

Anna: Tengo cosas que hacer.

Drake: No Anna -dijo con voz suplicante-.

Anna: Nos vemos luego -se levanto y se fue-.

Tú: ¿Qué le pasa, eh?

Drake: No lo sé -parecía que no tenía ganas de hablar-.

Tú: Mmm... más bien debería preguntar, ¿qué te pasa?

Drake: ¿A mí? Nada, ¿por qué lo dices?

Tú: Estás actuando muy raro, como que tratas de huir de mi.

Drake: No, como crees.

Tú: Drake te conozco, ayer estabas bien no sé qué paso.

Drake: Nada, todo está bien de verdad.

Tú: ¿Te hice algo?

Drake: No, nada -tenía miedo de que Anna le hubiera dicho algo de mi secreto-.

Tú: ¿Anna te dijo algo?

Drake: Nada.

Tú: ¿Nada, nada? ¿Sobre mí?

Drake: No, ¿por qué, debería de haber dicho algo?

Tú: Mmm... no nada.

Drake: ¿Segura?

Tú: Sí, pero insisto algo tienes.

Drake: Está bien... te diré.

Tú: Lo sabía, ¿qué pasa?

Drake: Es que ayer te llame acerca de las seis y me contesto James.

Tú: ¿En serio? -saque mi celular y lo revise-. No tengo ninguna llamada contestada.

Drake: Pues no te miento y James me dijo que... no pienses que estoy celoso o algo así -su voz sonaba rara, no era como otros días que estaba alegre, sino triste-.

Tú: No, ya dime.

Drake: Ok, me dijo que es tu novio y que no quería que te molestara, por eso ya no iba a hablarte.

Tú: ¿Qué? -me dio un ataque de risa-. Lo siento, -apenas si podía hablar-.

Drake: ¿De qué te ríes? Esto es serio (tn).

Tú: Perdón, es que jaja obviamente no es mi novio.

Drake: ¿No?

Tú: No y no sé porque te lo dijo, pero no, el sigue saliendo con Mandy.

Drake: ¿Y qué hacías con él?

Tú: Amm... pues yo estaba muy aburrida y como no llamabas ya no sabía qué hacer, entonces me llamo James y me invito a salir y pues acepte, de hecho estábamos aquí conversando.

Drake: ¡Ahh! Con razón.

Tú: Sí, lo que no entiendo es ¿por qué no me marca la llamada?

Drake: Tal vez James la borro para que no la vieras.

Tú: No había pensado en eso.

Drake: Sí, bueno perdón por comportarme como un tonto.

Tú: No te preocupes pero, ¿si pensabas dejar de hablarme?

Drake: Mmm... sí.

Tú: ¿Por qué?

Drake: Porque no quiero tener problemas con James, ni mucho menos con el colegio.

Tú: ¡Ahh! Pero mejor cuando sean esos casos, antes de que te pongas histérico, consúltamelo primero. Aparte si yo llegara a andar con alguien aquí, al primero que le diría sería a ti, porque te has ganado mi confianza amigo.

Drake: //¿Amigo? Eso dijo creo que eso me hirió más de lo que me hirió escuchar que "era novia" de James, pero tuve que disimular// Claro amiga, gracias.

Tú: No tienes nada que agradecer, más bien yo te agradezco a ti por soportarme.

Drake: -Reí-. Es un placer.

Tú: Bueno y ya que estamos hablando bien y que no habíamos tenido tiempo, vamos a caminar, te invito que tengo algo que decirte.

Drake: Claro.

Nos levantamos y salimos de la cafetería, caminamos por todo el colegio, nos reíamos, contábamos chistes y miles de cosas más. Le pedía a Drake que pasáramos rápido a mi habitación por algo que olvide.

Drake: ¿Y qué olvidaste?

Tú: Algo muy importante, una herramienta con la que podré decirte lo que te voy a decir.

Drake: Mmm... bueno -dijo no muy seguro y sin comprenderme seguramente-.

Tome mi diario y volvimos a salir, llegamos a uno de los tantos jardines, el más alejado de todo el colegio y ahí nos sentamos. Estoy lista para ya por fin decirle a Drake mi secreto.

Drake: Bueno y ya puedo saber ¿qué es lo que quieres decirme?

Tú: Sí, bueno antes que nada espero que no me odies pero no tenía más opción que esa.

Drake: Mmm... comienzas a preocuparme.

Tú: No es nada grave o bueno al menos eso pienso yo.

Drake: Bueno, pues te escucho.

Tú: De acuerdo... -tome mi diario y lo abrí para comenzar a leerlo-. Otra cosa, por favor solo escucha, cuando termine puedes decir y preguntar lo que quieras.

Drake: Está bien -me regalo una sonrisa-.

Tú: Gracias -comencé a leer-.

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Segundo de cinco.