Anna: Bueno días Kat, ¿cómo amaneciste? -pregunto demasiado sonriente-.

Kat: Buen día Anna. Mmm... bien gracias y, ¿tú?

Anna: También -su sonrisa daba miedo-.

La noté muy rara, aunque bueno en ella no es algo nuevo. Minutos después llegó el profesor de Química, comenzó su clase.

Pasaron otras 3 materias más, y llegaron con ellas, nuestro primer descanso el cual amo. Más de mis materias y el segundo descanso, que de igual manera amo.

Anna y yo nos fuimos al comedor, yo tenía muchísima hambre, así que me forme para tomar mi comida con charola en mano. Sin querer escuche la platica que tenían dos chicas delante mío.

Chica1: ¿Viste al nuevo maestro de música? -pregunto la rubia-.

Chica2: ¡Claro! Está guapísimo -contesto entusiasmada la morena-.

Chica1: Sí, ¡sus ojos! Todo en el es perfecto, empezando por el nombre -sonrió-.

Chica2: ¿Cómo dijo que se llamaba? -inquirió confundida-.

Chica1: Jared, jamás olvidaré su nombre.

Chica2: Ni yo -concordó-.

Toda su charla se había hecho desinteresante desde el momento en que empezaron a hablar como tontas. Pase por mi comida y regrese con Anna a la mesa que aparto.

Kat: ¿Sabías que ya tenemos maestro de música? -le pregunté-.

Anna: ¿Qué? -se sorprendió-. ¡No! ¿Apoco ya tenemos? -se notaba nerviosa-.

Kat: Sí, escuche a unas chicas hablar sobre él.

Anna: ¿Y qué decían? -inquirió-.

Kat: ¡Ah! -bufé-. Ya sabes típicas chicas tontas, dicen "esta guapísimo, sus ojos, su nombre, etc"... como si fuera la gran cosa, aparte ese maestro jamás les haría caso -explique en tono molesto-.

Anna: ¿Por qué dices eso? -cuestiono-.

Kat: Porque así son todos los maestros, aparte primero tenemos que verlo.

Anna: Eso sí.

Kat: Yo no puedo decir nada hasta no verlo -sonó la campana, para la siguiente clase-.

Anna: Es hora de irnos -anunció-.

Kat: Sí.

Nos levantamos, nos tocaba Historia... Algo aburrida, después Música definitivamente ¡mi favorita! Pasó el tiempo de Historia y nos fuimos a Música, estoy emocionada más que nada ¡porque ya tenemos maestro! Iba caminando hacía el salón con Anna y de repente nos grito Richard.

Richard: ¡Chicas esperen! -nos detuvimos-.

Kat: Corre Richard ya está por empezar la clase, sabes que es mi favorita -mencione emocionada-.

Richard: Sí, lo sé -río y nos alcanzó-.

Estaba emocionada, había extrañado esta clase. El dichoso maestro se tardo un poco, yo platicaba con Richard de nuestros respectivos fines de semana, cuando de repente todos se levantaron también nosotros obviamente, y entro el Director.

Director: Buenos días muchachos -saludo-.

Nosotros: Buenos días -hizo señas de que nos sentaramos-.

Director: Sé que nos habíamos quedado sin maestro, pero hicimos lo posible por buscar uno lo más pronto y lo encontramos. Pero les voy a pedir, sobre todo a las chicas -recalcó- que se comporten, ya que él es una figura pública y sólo viene a ejercer su trabajo. Bueno aquí tienen a su nuevo maestro, compórtense por favor, pasa Drake.

¡¿Qué?! ¿Drake? ¿¡Dijo Drake!? ¡Hay no! -Él entró-.

Drake: Gracias Sr. Director -sonrió, algunas chicas se emocionaron Mandy y Anna no fueron la excepción-.

Director: De nada muchacho, bueno me voy chicos. Con permiso.

Drake: Propio -salió el director-. Buenos días muchachos, no sé si todos me conozcan. Bueno soy su nuevo maestro de Música y mi nombre es Jared Drake Bell -se presento-.

Nosotros: Buenos días -saludamos-.

Drake; Me pueden decir Jared o Drake, aunque me gusta más Drake. Bueno me gustaría que cada uno se presentará, ¿les parece? -propuso-.

Todos aceptamos.

Drake: De acuerdo, van a decir su nombre, edad, si le gusta mi materia o sólo están aquí porque la deben cursar, que quieren aprender y que instrumento saben tocar. Empezaremos contigo -señalo a un compañero-.

Todos empezaban a decir todo lo que les preguntó Bell, me vale yo le diré Bell. Mientras Richard sólo se burlaba de mí.

Richard: ¡Uy! Tú pesadilla al parecer aún continua Kat.

Kat: ¡Ya sé! ¡No me lo recuerdes! No sé cómo le haré -dije confundida-.

Richard: Pues tu sólo actúa normal, como siempre.

Kat: Tienes razón -sonreí-.

Richard: ¡Claro! Trátalo como un profesor más, porque lo es.

Kat: Gracias.

Seguían todos pasando, hasta que llego el turno de Anna, por cierto Bell ya me había visto y se emocionó.

Anna: -se levantó- Me llamo Anna, tengo 18, me encanta está materia, quiero aprender a tocar la guitarra.

Drake: Gracias Anna, puedes sentarte -se sentó- él que sigue.

Richard: -se levantó también- Mi nombre es Richard, tengo 18 años, me gusta la materia, quiero aprender a tocar mejor la batería y pues obviamente sé tocar la batería

Drake: Muy bien Rich, siéntate -se sentó- ¿Quién sigue? -pregunto-.

Kat: Yo -alze mi mano y él me miro, me levante- Soy Katherine, tengo 18, esta materia es mi favorita espero que NO cambie -recalqué-, quiero aprender a cantar y tocó un poco el piano.

Drake: Excelente Kat, toma asiento -me senté-.

Y así pasaron todos, bueno no éramos muchos sólo como 20. Terminamos y él comenzó a dar su clase, eran dos horas, nos dejo un trabajo que yo resolví rápido pero no quería ir a entregarlo, hasta que Richard me obligo y termine llevándolo.

Continuará...