En Japón

-Muy bien, esto es lo que tengo- dijo Nighteye frente a una mesa llena de papeleo. -Midoriya Izuku fue el sucesor de All Might durante un tiempo, hasta que lo inculparon y desapareció antes de entregarlo a la prisión de Tártaros.-

-Varias semanas después reapareció en un pequeño restaurante donde fueron algunos estudiantes del curso de heroes de la UA. Varios héroes acudieron pero de alguna manera fue capaz de teletransportarse junto a Endeavour a un bosque lejano, donde fue notificada la pelea por los civiles que estaban cerca.-

-Luego el incidente con esa niña y después.... nada. Hay algo que no estoy viendo.-

En eso, un poco de polvo se le metió en los ojos y tuvo que tallarse, pero como si de una mano se tratara, unos papeles junto al collar de Enji cayeron sobre la mesa.

Nighteye notó el espacio del collar y lo que le contó el héroe sobre este, además de notar en los papeles que según Mt. lady, su collar de la suerte terminó rompiendo se y perdió la hermosa joya que tenía en el.

Cuando escucho joya, empezó a unir cables. A pesar de no conocer al chico y de lo que sabían de él, no parecía interesarle el dinero. Perro esas gemas parecían ser lo que buscaba.

Investigando más a fondo descubrió que la UA tenia posesión de una, pero fue llevada a I-island. Más reportes de gemas con extrañas capacidades terminaban en sus manos, pero ninguna que no pudiera conseguirse por medios públicos.

Hasta que encontró en las redes sociales algo interesante. "El museo del cristal (Venecia, Italia) fue robado. Se asegura que se llevaron fósiles muy bien conservados y de dudoso origen, además de un extraño mineral conocido como la gema de la vida."

No había indicios de quién lo robo, pero Nighteye consideraba muy probable que ese era el siguiente objetivo.

Con los villanos

Toga y Dabi no parecían ser ellos para nada. Seguían cometiendo los mismos tipos de crímenes que solían hacer siempre, pero no parecían ser ellos mismos. Se veían deprimidos.

Entrenaban sus poderes mientras que la extraña marioneta los veía, como si los estuviera analizando.

En eso, Alpha salió y llamo su atención. -¡Oigan! Les tengo otra misión-

-¿De qué trata?- dijo Toga neutralmente.

-Irán a Venecia por algo en lo que estoy interesado.-

-¿Que hay en Venecia?-

-Passione me dijo que hace un tiempo, su ex-jefe los mando a robar el museo del cristal. Entre ellos había una gema que cumple con los requisitos de lo que busca Deku. Quiero que me lo traigan.-

-Bien. Pero necesitaremos que los de Passione nos digan donde está.-

-Algunos de sus hombres irán, al igual que miembros de Baroque Works y Akatsuki. Y también irán unos de mis hombres.- haciendo una señal de manos.

La marioneta bajo de un gran salto y aterrizó junto a Alpha. -Él es Hyakudollu, irá con ustedes.-

-No necesitamos una niñera, somos más que capaces de hacerlo.-

-No lo dudo, solo es un seguro extra. Y otro más para hacer esto más....... divertido.-

El dúo no entendió y escucharon que la puerta de metal que daba al almacén de Nomus empezaba a romperse.

La puerta salió volando y reveló a un extraño ser que no parecía para nada un Nomu.

-Lo llamo "Purple Haze" y si todo falla, el se hará cargo-

-Suena como si pensaras que vamos a fallar- dijo Dabi para alejarse del lugar junto a Toga.

-Se que lo harán- dijo Alpha en voz baja, luego empezó a decirle algo a Kyakudollu.

-Los boletos están en la mesa del mapa, reúnan a los hombres y partan de enseguida. Será un viaje de tres días. *Se la ubicación del chico, el llegar casi al mismo tiempo*-

En I-island

Una alarma empezaba a sonar hasta que fue callada por una mano con cicatrices.

Era Izuku quien se levantaba, ya habían dado las 9 de la mañana en sábado. Aún con sueño se metió a bañar y se puso ropa fresca mientras que se dirigía a la cocina y se secaba el pelo.

Pero notó que Melissa estaba en la mesa de la sala encima de varios planos. Izuku se acercó a ella y le empezó a agitar ligeramente.

-Oye, Melissa.- la chica se despertó con un unos pequeños pedazos de papel pegados en su rostro y los lentes en el cabello. -Buenos días-

-¿Acaso no dormiste?- pregunto Izuku

-Si dormí, pero a mitad de la noche empezaron a llevarme unos extraños pensamiento de unos inventos y no pude evitar el hacer planos.-

Izuku tomo los planos para verlos, se sorprendió por la calidad del dibujo pero se sorprendió aún más por el poder reconocer lo que eran. -Ehm.... Melissa, creo que alguien ya invento todo esto-

-¿Qué dices? Nunca he visto a nadie hacer algo así.-

-Yo si. En los mundos de los usuarios del LH-

Melissa se congelo un poco pero se derimio de golpe y estrelló su cabeza contra la mesa. -No puedo creer que iba a tomar el crédito de algo que ya había hecho alguien. soy una vergüenza-

-Bueno, como no existen en este mundo creo que puedes hacerlo.- dijo tratando de animar a su novia. Pero Izuku notó algo en Melissa que lo hizo ponerse rojo.

-Ehm..... Melissa. ¿Esa no es mi..... sudadera?

Era una sudadera anaranjada con detalles negros, que cubrían a Melissa pero era demasiado grande para ella.

-Oh, si. Lo siento pero no puse a lavar la mía y no traía más así que tome algo de la tuya.- dijo levantándose de la silla. -¿Te molesta?-

-No, para nada- decía tratando de evitar el verla indecentemente. -Por cierto, lo que ocurrió ayer. Lo siento mucho, no debi actuar de esa forma-

-No, yo también quería disculparme. No sé que me pasó.-

Pero fuero interrumpidos por el den den mushi. Izuku lo contesto y se lo puso en la oreja.

-¿Hola?-

-Hola Izuku. Soy Doppio.-

-¿Qué pasa Doppio? ¿Todo bien?-

-Aún no hemos encontrado nada de la gema si es lo que preguntas. Pero por eso mismo llamaba. Cómo ya ha pasado un tiempo y aún está desaparecida, pensé en llevarte con la que yo tengo-

-Claro, ¿cuando podrás traerla?-

-Bueno, no es seguro ahora que se mueva de lugar así que tendremos que ser nosotros quienes vayan a ella-

-Como si fuera seguro que un criminal se suba a un avión cuando lo están buscando-

-Pudo conseguir un barco, así no llamaremos la atención y no habrá registros de que hayas salido.-

-Ugh.... Esta bien. ¿Dónde está?-

-El barco en el muelle 17, no sabemos ahí mañana a las 11 de la noche. La gema está en Venecia, Italia. Nuestra distancia actual nos llevará ahí en dos días, lleva ropa suficiente.-

-Entendido- dijo para colgar y dejar al caracol en la mesa

-¿Quién era?- pregunto Melissa estirándose

-Era Doppio, quiere que vaya a Venecia para conseguir otro fragmento del LH.-

-Oh, cierto, me había olvidado por un segundo de tu deber- dijo algo malhumorada.

Izuku la abrazo por la espalda y recargo su cabeza en su hombro. -No te enojes, solo estaré fuera unos dias. Me daré la mayor prisa posible-

-Aun así no me gusta que vayas solo.- dijo haciendo un puchero -No puedo salir mucho de la isla por todo eso de revelar secretos, pero quiero ver el mundo.-

-Te lo compensaré de una forma-

-¿Me trajeras algo de Venecia?-

-Aún mejor. Cuando todo esto termine, te llevaré a ver el mundo entero.-

-¿Eri vendrá?-

-Claro-

-¿Lo prometes?-

-Lo prometo-

Ambos se miraban a los ojos par luego darse un corto beso. En eso una adormilada Eri entró.

-Buenos días- dijo bostezando Eri

-Buenos días princesa- dijo Izuku para luego cargarla. -Dime ¿Qué quieres desayunar?-

-Ahhh no. No vas a cocinar, sigues herido de ayer.-

-Pero yo ayude a papá con eso- dijo Eri más despierta. Izuku levanto su playera y mostró que no tenía heridas.

-Aún así no debería moverse- dijo Melissa para cocinar un desayuno.

El día pasaba muy tranquilo. Izuku le pidió a Melissa y a Katarina si podían cuidar de Eri mientras no estaban. Katarina dijo que solo la cuidaría cuando le tocará entrenarla.

Melissa mencionó que iba a estar trabajando en el taller por unos días, con lo cercano que estaba podría cuidar de ella.

El dio fue muy aburrido ya que no hubo llamadas de Doppio, ni señales de gemas, ni tampoco ataques de villano.

Izuku sentía que algo estaba muy mal, sobre todo sentía como si alguien lo vigilara.

Melissa se tuvo que ir a su taller para empezar a trabajar, así que Izuku decidió acostar a Eri ya que mañana tendría que dejarla con Melissa temprano para ir a Venecia.

-Papá, cantame algo.-

-¿Cantar? ¿Yo?- Eri asintió -Soy muy malo cantando, dudo que quieras oírme cantar. Y Melissa es mejor en eso.-

-No me importa, quiero oírte cantar.-

-Bueno veré qué sale- dijo para acostarse junto a ella.

Cuando dejo de cantar, Eri estaba dormida encima de su pecho y no podía levantarse, asia que decidió dormir ahí esa noche. -Buenos noches princesa- dijo para darle un beso en la frente y cerrar los ojos.

En la puerta entre cerrada, se podía ver a alguien viéndolos con una sonrisa. Era Melissa quien había ido para ver a ambos y los encontró cuando Eri se iba a dormir.

Melissa no pudo evitarlo y les tomo una foto de cuando se quedaron dormidos. También se quedó mucho tiempo en el taller y le hablo a su padre y amigos que se quedaría trabajando en su proyecto más tiempo.

Pero Melissa dijo eso para unirse a la cama y dormir junto al peliverde y la pequeña peliblanca.

Tal como en el parque de diversiones, energía salió de Izuku y cubrió a ambas, pero de Melissa empezó a salir de su cuerpo también un brillo.

El brillo de Izuku era rojo anaranjado y el de Melissa era amarillo, ambos brillaron empezaron a subir hasta cubrir a Eri y darle un brillo blanco a su cuerpo.

La noche pasó en un instante. Izuku fue el primero en despertar y notó que Melissa estaba junto a él.

Con mucho cuidado bajo a Eri de su pecho a la puso junto a Melissa, quien la puso más al centro de la cama. Instintivamente Melissa abrazo a Eri y ambas siguieron durmiendo.

Izuku salió del cuarto y cerró la puerta de forma silenciosa. Cuando la termino de cerrar se puso a cocinar.

Melissa y Eri salieron para desayunar y al terminar los tres salieron y rápidamente Izuku las llevo al muelle.

Doppio y Kaiba se encontraban en el lugar, simplemente esperando por el peliverde.

El pelirosado solamente movió la cabeza e Izuku se volteó para despedirse, mientras que tenía una especie de disco en su mano.

-Eri, cuídate mucho, has caso a lo que te digan. ¿Ok?-

-Sí- siendo cargada por Melissa

Izuku volteó a ver a Melissa y se veían fijamente mientras algo de su cabello quedaba entre sus dedos.

-Vendré lo más pronto posible. Y cumpliré esa promesa-

-Se que lo harás, pero vuelve a salvo.-

-Haré lo que pueda- dijo para darle un beso y luego dirigirse al barco.

El barco empezó a moverse mientras que a la lejanía, ambas chicas se despedían del peliverde.

Izuku también se despidió pero cambió su semblante a uno nervioso, había algo que no lo dejaba tranquilo.

Alpha

Alpha estaba en una silla con los ojos en blancos pero soltando un brillo rojizo.

Pero en su mente se podía ver una especie de niebla roja humanoide y estaba volando alrededor de..... ¡¿Izuku en el barco?!

Parecía que Alpha podía ver a Izuku desde muy lejos, y saber cosas que otros no. Pero parece guardarlas para si mismo.

-Espero que te gusten las sorpresas que te deje. Jejeje. Algún día me conocerás, Midoriya Izuku-

Alpha pudo escuchar unas ruedas fuera de su mente y su consciencia volvió al cuerpo del Nomu.

Frente a él había varias cajas de distintas formas y tamaños siendo llevadas por los criminales que estaban bajo su mando.

-Oye, pajarraco, buscamos las cosas que nos pediste. Justo en donde dijiste que estaban, nisiquiera se cómo sabías el lugar exacto de todo esto pero ya que. ¿Qué hacemos con esto?-

-Dejenlos aquí. Yo me encargaré del resto-