Izuku estaba aturdido cuando se despertó y le tomó un minuto darse cuenta de que se había quedado dormido en los brazos de Uraraka. Instantáneamente, su rostro se puso rojo y se levantó lo más rápido que pudo, lo que aparentemente fue demasiado rápido, considerando que su cabeza golpeó su barbilla en el camino y la despertó de una de las maneras más dolorosas posibles.

"¡Yo... lo siento mucho!" Izuku se disculpó frenéticamente.

"Está bien..." Uraraka hizo una mueca mientras se frotaba la barbilla. "Um, ¿ya nos detenemos?"

Izuku miró por la ventana cuando el autobús se detuvo al costado de la carretera, "Supongo que sí. La desaceleración del autobús debe haber sido lo que me despertó".

Había asumido que llevarían a cabo el campo de entrenamiento en algún lugar más lejos, pero era solo media mañana, así que esto debía ser solo una parada técnica. El único problema con esa suposición era que no podía ver un solo baño o gasolinera a la vista. Eraser se puso de pie en la parte delantera del autobús y se aclaró la garganta, "Está bien, todos fuera".

Los estudiantes se miraron entre sí con sospecha, pero obedientemente salieron del autobús y se quedaron de pie torpemente en un grupo afuera mientras esperaban que Aizawa les diera las siguientes instrucciones. Izuku sabía que no era el único que comenzaba a preguntarse si esta era una de las artimañas lógicas de Eraser. ¿Por qué se detuvieron en medio de la nada?

Sus preocupaciones se confirmaron cuando Eraser habló, ocultando una sonrisa detrás de su arma de captura, "No pensaste que esta era una parada de descanso normal, ¿verdad?"

Los estudiantes observaron con curiosidad cómo se detenía un automóvil y salían dos mujeres, seguidas de un niño pequeño que parecía que realmente hubiera preferido quedarse en el automóvil "¡Perfectamente lindo y felino! ¡Puedes llamarnos The Wild Wild Pussycats!"

"Estudiantes, aquí Mandalay y Pixiebob". Aizawa sonaba casi aburrido. "Son algunos de los profesionales a los que hemos pedido que ayuden en este campo de entrenamiento".

"Ok..." Shinso dijo arrastrando las palabras. "Y, eh, ¿quiénes son?"

"¡Son las Pussycats!" Izuku dijo emocionado. "Nunca había trabajado tanto con ellos, pero se enfocan en el rescate y ¡son algunos de los más experimentados en la industria! Han sido un equipo de héroes durante más de doce..."

Izuku se congeló cuando una mano le tapó la boca y casi entró en pánico. Apenas se contuvo de torcer el brazo de Pixiebob al recordarse a sí mismo que no era Shigaraki quien lo estaba agarrando. No estaba en peligro y Aizawa estaba aquí para ayudarlo si alguna vez lo estaba. Estaba a salvo.

"Ahora bien, gatito, todavía somos jóvenes". Pixiebob advirtió. "¡Seguimos siendo modelos de la juventud felina!"

"De todos modos..." Aizawa puso los ojos en blanco. "Les ayudarán a llevar sus peculiaridades y habilidades al límite durante la próxima semana, así que prepárense para sufrir. También son dueños de toda esta propiedad".

"Eso es muy bonito." Kaminari dijo. "Pero, eh, parece un montón de nada".

Mandalay se rió "Bueno, es principalmente bosque, ¡pero nuestra base está allí, en la base de esas montañas!"

La clase intercambió miradas nerviosas ya que todos pensaban lo mismo. Si la base estaba allí, ¿por qué estaban ellos aquí?

"Uh... tal vez deberíamos volver al autobús..." Kirishima comenzó a retroceder poco a poco.

"Sí, suena como una buena idea". Ojiro estuvo de acuerdo, siguiéndolo con nerviosismo.

"¡El almuerzo es al mediodía!" PixieBob dijo. "¡Los gatitos traviesos que llegan tarde no pueden comer!"

"¡Pixiebob tiene una peculiaridad para manipular la suciedad!" Izuku gritó. "¡Aléjense del borde del acantilado!"

Todos se dieron la vuelta y comenzaron a correr, pero la advertencia de Izuku no sirvió de mucho cuando la tierra literalmente los recogió y los arrastró hacia el bosque de abajo. Los estudiantes se frotaron los diversos moretones e Izuku pensó en las posibilidades. Existía la posibilidad de que esto fuera solo una caminata normal, mucho más larga de lo habitual, pero con Eraser a cargo, Izuku lo dudaba, lo que lo dejó con un problema: todos los otros niños habían traído sus peculiaridades en el autobús, pero él no había traído sus armas.

Escuchó el sonido de la tierra moviéndose y miró hacia la cima del acantilado, que ya estaba comenzando a reformarse después de colapsar debajo de ellos. Aizawa los estaba mirando, con una ceja levantada mientras arrojaba algo por el acantilado, "Adelante, niños, no tienen todo el día".

Todos los estudiantes saltaron hacia atrás cuando una pequeña bolsa de lona golpeó el suelo, levantando una columna de polvo al aterrizar. Jiro lo miró con recelo, "¿Quién quiere apostar a que es una bomba?"

"Sin apuestas." Sero dijo rápidamente. "Eso parece algo que Aizawa haría".

"¡Oigan, dejen de ser un montón de cobardes!" Katsuki buscó a tientas y caminó hacia él. "Tengo resistencia a explosiones, revisaré la maldita cosa".

La clase contuvo la respiración cuando Bakugo pateó la bolsa suavemente, luego se inclinó y abrió la cremallera. Cuando vio lo que había dentro, resopló y se puso de pie, señalando con el pulgar hacia Izuku, "¿Estás bromeando? Es para el nerd".

Izuku entrecerró los ojos confundido, pero corrió hacia la bolsa y la abrió para encontrar sus armas. Miró hacia arriba para ver a Eraser sonriendo con suficiencia en la cima del acantilado, y se volteó antes de desaparecer. Izuku suspiró, "Katsuki tiene razón. Estas son mis armas, lo que significa que lo más probable es que entremos en una pelea".

"Umm, ¿señores?" Aoyama dijo vacilante, señalando hacia el bosque. "Creo que esa lucha ha llegado a nosotros".

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Había más monstruos de tierra de los que Izuku realmente pensó que eran necesarios, pero supuso que su clase ya había peleado la liga dos veces, si estaban contando esa cosa en el centro comercial, por lo que Eraser quería subir la apuesta. Aún así, estos monstruos de tierra eran como los robots en el examen de ingreso. Eran grandes, estúpidos y favorecían las peculiaridades físicamente destructivas.

Katsuki y Kirishima lideraban la manada, obviamente, trabajando codo con codo para despejar el camino para el resto de la clase eliminando tantos monstruos como pudieran. Trabajaron muy bien juntos, y el resto de sus amigos formaron una especie de equipo de apoyo a su alrededor para cuidar sus espaldas y manejar cualquier monstruo que intentara atacar mientras estaban rodeados. Izuku no pudo evitar pensar que probablemente tendrían bastante éxito como héroes de la luz del día si todos comenzaran su propia agencia después de la escuela secundaria.

Sin embargo, incluso con el bakusquad liderando la manada, había muchos monstruos de tierra para el resto de ellos. Shouto estaba congelando a cualquier monstruo que se les acercara por la derecha, lo que permitió a Ojiro, Sato y los otros luchadores físicos acabar con ellos rápidamente. Después de unos minutos de esto, Izuku sonrió cuando notó una pequeña llama en su mano izquierda. Con la cantidad de vegetación inflamable que había aquí, no era realmente seguro usar ataques de fuego, pero Shouto aún estaba haciendo un esfuerzo por usar su lado izquierdo para regular su temperatura. Había llegado tan lejos desde el festival deportivo.

Con lo sesgados que estaban estos monstruos hacia los rápidos que literalmente los destrozarían, Izuku y Shinso estaban teniendo más dificultades que la mayoría de la clase. Afortunadamente, el arma de captura de Shinso se había metido debajo del armamento de Izuku, por lo que pudo engancharla alrededor de las ramas y balancearse hacia abajo desde los árboles para patear a los monstruos con un impulso devastador. Izuku se había dado cuenta bastante rápido de que sus armas no eran de mucha utilidad contra los monstruos más grandes. Simplemente absorbieron las balas como si no fueran nada y dejaron a Izuku gruñendo de frustración hasta que uno de sus compañeros de clase pudo sacarlo.

Los monstruos más pequeños, sin embargo, podrían prescindirse de uno o dos disparos en la cabeza bien colocados. No era mucho, al menos en comparación con algunos de los esfuerzos hercúleos de sus compañeros de clase, pero al menos si eliminaba todos los pequeños, sus compañeros de clase podrían concentrarse en las amenazas más grandes sin distraerse. Era difícil conseguir una buena toma con todo el caos. Si tan solo tuviera una vista de pájaro...

"¡Uraraka!" Izuku gritó y se dirigió hacia ella justo cuando estaba dejando caer a otro de los monstruos del cielo. "¿Puedes quitarme la gravedad, por favor?"

Uraraka asintió y distraídamente agarró su mano, haciendo que Izuku se sonrojara cuando comenzó a flotar. Cuando se dio cuenta, se sonrojó y su agarre se aflojó por una fracción de segundo antes de darse cuenta de que Izuku probablemente simplemente se iría flotando si no lo estuviera agarrando, "Oh, um, ¿Qué tienes en mente?"

Izuku sonrió, "¡Si estando en los árboles, puedo ver todo el campo de batalla y tener un tiro claro para todos los monstruos! Tu peculiaridad es simplemente la forma más rápida de subir".

Uraraka le devolvió la sonrisa y lo soltó, "¡Solo dime cuándo quieres que libere mi peculiaridad!"

Izuku esperó hasta que estuvo bastante alto para agarrarse a uno de los árboles más grandes con su gancho de agarre, "¡Está bien, estoy listo!"

Sintió que su gravedad regresaba y aterrizó pesadamente en la rama mientras Uraraka salía corriendo detrás de otro monstruo. Sonrió por lo bien que todos estaban luchando antes de sacudir la cabeza y apuntar. Todavía tenían un largo camino por recorrer.

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Cuando llegaron a la base de los Pussycats, la boca de Ochako estaba agria y todo su cuerpo se sentía húmedo y sonrojado. Había perdido la cuenta de la cantidad de veces que había vomitado, pero después de al menos tres, probablemente eso fue lo mejor. Sus compañeros de clase estaban en un estado similar. Yaomomo parecía estar a punto de desmayarse de hambre, Bakugo estaba masajeando sus muñecas y la lengua de Tsu colgaba sin fuerzas fuera de su boca, demasiado exhausta para retraerse por completo. Incluso Izuku estaba exhausto, con los brazos temblando por el esfuerzo de arrastrarse de un árbol a otro y se tambaleó cuando finalmente caminó sobre tierra firme por primera vez en varias horas. Se había quedado sin balas cerca del final y Ochako le había quitado su gravedad mientras se balanceaba de los árboles como lo habían estado haciendo Sero y Shinso, devolviendo su gravedad en el momento justo para que hiciera el mayor daño.

Él había sido tan dulce y preocupado por su exceso de trabajo en su peculiaridad y solo había cedido cuando ella señaló que él no pesaba prácticamente nada, al menos en comparación con los monstruos que estaba levantando. Aún así, incluso con lo poco que pesaba, el esfuerzo de usar tanto su peculiaridad era agotador y Ochako no quería nada más que ducharse y meterse en la cama. Ojalá Aizawa fuera fácil con ellos solo por esta vez, pero sabía que no debía hacerse ilusiones.

"¡Excelente tiempo, gatitos!" Pixiebob sonrió mientras salían de los árboles. "Supongo que basamos el almuerzo en cuánto tiempo nos llevaría, ¡lo siento!"

"¿En serio se está jactando de humildad en este momento?" Sero murmuró. "Como si supiéramos que somos débiles, pero ¡hey!"

"¡Sin embargo, algunos de ustedes lo hicieron incluso mejor!" Los ojos de Pixiebob brillaron con un entusiasmo que hizo que Ochako se retorciera. "¡Voy a tener un interés especial en esos gatitos!"

Su corazón cayó. Pixiebob iba a destacar a Deku, ¿no? Ochako sintió una oleada de celos surgir sin su permiso. Obviamente, Deku había eliminado más monstruos que el resto de ellos, eliminando a casi todos los monstruos que eran lo suficientemente pequeños como para que sus balas hicieran daño y ni siquiera había dejado que quedarse sin balas lo detuviera. Obviamente, era uno de los héroes más dedicados de su clase.

Para su sorpresa y, por extraño que parezca, indignación, Pixiebob pasó corriendo junto a Izuku sin siquiera mirarlo dos veces. En lugar de eso, agarró a Bakugo, Kirishima y Todoroki, abrazándolos cerca de ella con fuertes brazos que estaban demasiado exhaustos para hacer otra cosa que no fuera mirarlos. ¿Cómo se atreve? ¿Fue porque Deku no tenía peculiaridades? ¿Era por eso que él no era lo suficientemente bueno para ella? ¿Quién se creía que era para ignorar todo su arduo trabajo solo porque los demás eran más llamativos?

Los pensamientos que giraban rápidamente en espiral de Ochako se detuvieron de repente, deteniéndose mientras los examinaba con incredulidad. Había estado celosa solo por la idea de que Pixie-bob eligiera a Deku, pero luego, cuando no lo había hecho, ¿había estado enojada por eso? ¿Cómo tenía eso algún sentido?

"Deja a mis estudiantes en paz". Aizawa dijo arrastrando las palabras. "Son menores de edad".

"Puedo ser paciente". Pixiebob hizo un puchero, pero soltó a los chicos, quienes retrocedieron hacia el resto de los estudiantes en silencioso agotamiento. (Pinche pedofila)

"Lo siento por ella". Mandalay dijo amablemente. "Está en la edad de tomar pareja".

"Lo que sea..." Bakugo chasqueó la lengua y agarró la mano de Kirishima mientras la miraba, "Algunos de nosotros ya estamos tomados".

Eso obtuvo una buena cantidad de risitas de la clase cuando Pixiebob se puso roja. Incluso Aizawa estaba escondiendo una sonrisa mientras les daba la bienvenida. "Buen trabajo, mocosos, lo hicieron bastante bien, pero eso no significa que puedan relajarse. Les daremos un descanso esta noche, pero de aquí en adelante solo empeorará".

Ochako se unió cuando la clase se quejó colectivamente. Miró a Deku, cuyo rostro estaba contraído de la manera que normalmente significaba que estaba tratando de resolver un misterio. Siguió sus ojos y se dio cuenta de que el niño pequeño que habían visto antes con los mininos también estaba aquí.

"Um, hablando de edades..." Izuku habló rápidamente antes de que Pixiebob pudiera tener la oportunidad de amenazarlo nuevamente. "¿Quién es él? Parece un poco joven para estar aquí..."

"Oh, ese es mi sobrino, Kota". explicó Mandalay. "¡Él vive aquí con nosotros! Kota, ¿por qué no saludas?"

Ochako sonrió cuando Deku se acercó al niño y le tendió la mano "¡Oye, Kota! Es bueno..."

El niño era rápido y la única razón por la que vio venir el golpe fue su entrenamiento con Gunhead. Afortunadamente, Izuku había entrenado mucho con Aizawa, o tal vez porque tenía que reaccionar rápidamente para sobrevivir cuando luchaba contra personas con fuertes peculiaridades, pero antes de que la mayoría de sus compañeros de clase se dieran cuenta de lo que estaba sucediendo, Deku había rodado detrás de Kota y el puñetazo del niño lo hizo perder el equilibrio cuando su puño golpeó el aire.

Izuku frunció el ceño y agarró al niño por el cuello para que no se cayera, "No es bueno tratar de golpear a las personas cuando intentan presentarse, Kota".

"Héroes estúpidos". Murmuró Kota, alejándose con fuerza de Izuku y ajustando su camisa. "Presumiendo con tus estúpidas peculiaridades. ¡Odio todo de ti!"

"Hah, tienes agallas, chico, te lo concedo". Bakugo resopló. "Pero el nerd ni siquiera necesitaba una peculiaridad para dejarte en ridículo".

Kirishima lo golpeó en la cabeza, "Amigo, es solo un niño, sé amable".

"¡Oye, fui amable!" Bakugo gritó. "Le di un cumplido, ¿no?"

Mandalay suspiró, "Lo siento por él. No le gustan mucho los héroes".

"Eso debe ser incómodo..." Aizawa suspiró. "Todos saquen sus cosas del autobús. No pueden comer hasta que sus maletas estén en sus habitaciones, así que váyanse".

Ochako se arrastró de vuelta al autobús, con la esperanza de que no hubiera más artimañas lógicas esta noche. No podía imaginar cómo sería que simplemente no le gustaran los héroes, especialmente si estaba siendo criada por un grupo de ellos. Sin embargo, todavía no excusaba al niño que intentó golpear a Deku.

Se tragó un medicamento contra las náuseas que había guardado en su bolso y lo sacó del autobús, demasiado cansada para usar su peculiaridad para hacerlo más ligero. Estaba emocionada de volverse más fuerte, pero si el día de hoy era una indicación, no creía que en realidad estuviera deseando que llegara el resto del campamento.

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