-No entiendo porque le das tantas vuelta a esto.

Plagg se encontraba sobre una charola comiendo queso, observando como Adrien caminaba de un lado a otro pensativo.

-es normal que no te conteste el teléfono, y más si llevas tantos días sin hablarle.

-Solo fue una semana! -decida desesperado

-En una semana pueden pasar mil cosas Adrien.

El rubio rodo sus ojos algo molesto, para después suspirar. -No entiendo porque Mama esta tan desesperada por hablarle, porque no lo hace ella misma?

-Adrien! -Grito una voz desde afuera

La puerta se abrió de golpe, dejando ver a una rubia agitada, la cual obviamente había corrido, tanto su ropa como su cabello estaban algo desarreglados.

Plagg inmediatamente se escondió, mientras que Adrien se acercaba a su madre

-Mama?, que ocurre?

-Es Marinette!

Adrien Loraine y Gabriel se encontraban fuera de casa de Marinette, la chica no respondía haciendo que Adrien desesperado rompiera la puerta para entrar

-Marinette! -grito el rubio para después correr hacia su habitación seguida de su madre

-Policía?, habla Gabriel Agreste. Necesito que vengan a donde solía ser la panadería Dupain Cheng, una chica está desaparecida.

Adrien entro a la habitación, seguida de la señora Agreste.

La mujer volteo de reojo, tomando una nota que se encontraba ahí.

Después de leerla la arrugo metiéndola en su bolsillo.

-al parecer salido en la noche a comprar unas cosas, pero no regreso, -dijo la mayor.

-Noche?, te refieres a que no a regresado desde entontes! -la voz de Adrien iba cada vez más alta, sud manos comenzaron a moverse de forma nerviosa, mientras que su mirada se llenaba de temor.

La mujer bajo la mirada algo preocupada, observando con tristeza a su hijo.

-mama? -dijo nervioso

-Al parecer lleva tres días desaparecida.

Adrien abrió los ojos como plato, al escuchar las palabras de su madre

"La maldad no siempre proviene de un miraculous"

Marinette comenzó a abrir los ojos poco a poco, todo se encontraba completamente obscuro.

-Tikki?-dijo apenas en un tono audible.

Su garganta estaba seca, su cabeza dolía horriblemente, sin contar que algunas partes de su cuerpo como sus brazos y espalda dolían fuertemente.

Intento levantarse pero fue inútil, se encontraba amarrada y sin fuerzas como para intentarlo.

No recordaba cuanto llevaba ahí.

En un momento de razón, la chica logro ver una silueta frente a ella. La silueta siempre le decía algo, sin embargo su cansancio era tal que no podía siquiera sentir temor.

-maldita seas! -grito un chico alarmando a la Peliazul.

Acto seguido, la chica sintió un golpe hacia su estómago, haciéndola soltar todo el aire.

Marinette lloraba mientras intentaba respirar dificultosamente.

Sintió una mano acariciando su cabello, y al fin pudo distinguir la voz de aquella sombra.

Fue temor?, no lo sabía, pero después de escucharlo callo nuevamente inconsciente.

"Nunca dañaría tu hermoso rostro, mi querida modelo fantasma."

Muchos ruidos siempre inundaban el lugar, pero Marinette jamás se tomó la molestia de ver que o quien era, no sabía cuándo llevaba sin comer o siquiera sin tomar agua, no tenía energía para nada.

Sabía que de alguno de los golpes había salido sangre, lo cual no ayudaba en nada a su condición, toda esperanza desaparecía, miles de recuerdos aparecían en su mente, sus aventuras como Ladybug, a sus padres, sus amigos, sus logros como diseñadora y al final, a Adrien.

"No volveré a dejarte sola"

Al escuchar esto Marinette abrió los ojos de golpe.

Frente a ella, Adrien se encontraba con los ojos llorosos.

El chico le observo con rareza para después sonreirá

-señor Agreste, -decía una enfermera jalándolo hacia afuera, mientras que el doctor y otros especialistas comienzan a acercarse a La cama donde Marinette estaba.

-Estaré aquí afuera! -Dijo Adrien para después des expulsado del cuarto.

-es una suerte que Chat Noir la encontrara no? -decía Loraine

Adrien soltó una risa nerviosa, mientras pasaba su mano sobre su nuca para rascarla.

- Si que suerte, -susurro el chico soltando un suspiro de alivio.

Adrien después de enterarse de lo sucedido, salido a buscar a Marinette como Chat Noir.

Curiosamente el chico tuvo un poco de suerte, encontrando un rastro de Marinette y siguiéndolo hasta su origen.

Si estaba seguro de algo, es que alguien pagaría por hacer sufrir a su princesa.

Llego a un cuarto obscuro, comenzó a caminar confiado gracias a su visión nocturna.

Después unos pasos, pudo sentir como una consistencia parecida al agua estaba esparcida por el suelo.

Bajo su mirada encontrándose con un pequeño charco de lo que parecía sangre.

Comenzó a meditar, pidiendo que el dueño de esa sangre no fuera quien creía que era.

Subió su mirada hacia el origen, encontrándose con lo que más tenia.

El angelical rostro de Marinette se encontraba como siempre, algunas ojeras arruinaban su rostro, pero no era nada que no tuviera una joven de su edad.

Sin embargo, el resto de su cuerpo era un desastre, moretones y raspones por todos lados.

"Prometí no dañar su hermoso rostro"

Chat apretó los puños furioso, al notar que el culpable estaba tras de el, de un rápido moviente le dio un puñetazo en la cara haciéndolo caer inconsciente.

Tomo su teléfono llamando a la policía y después de eso tomo a Marinette en brazos, llevándola había el hospital.

Adrien caminaba de un lado a otro. Esperando noticias de Marinette, alado de el sus padres le acompañaban un poco más tranquilos.

El doctor les había avisado que la chica estaba bien, solo tenía algunas heridas externas, pero No era suficiente para Adrien, tenía que verla bien.

Pasaron unas horas, cuando Marinette al fin fue transferida a un cuarto.

Las radiografías, pruebas de sangre las curaciones y demás la cansaron haciéndola caer dormida.

Adrien entro en la habitación un poco más tranquilo al poder verla.

Marinette abrió los ojos, regalándole una sonrisa.

-no quise despertarte, lo siento, -dijo nervioso.

-Está bien, quería verte.

Adrien desde la puerta, y Marinette desde la cama.

Ni uno separaba su vista uno del otro. La sonrisa de ambos comenzó a desaparecer poco a poco, Adrien camino hacia Marinette algo serio, mientras que la chica comenzaba a sollozar en voz baja.

Finalmente se encontraban uno frente al otro.

Adrien dejó escapar un pequeño suspiro, y abrazo a Marinette la cual comenzó a llorar cual niña.

-Tenia tanto miedo, -decía con voz entre cortada

Los sollozos se volvieron gritos, lloraba con las fuerzas que tenía, mientras que Adrien la abrazaba de la misma manera.

La puerta se abrió, ambos miraron hacia ella.

Marinette con sus ojos y su rostro lleno de lágrimas y Adrien serio.

-Lamento interrumpir, -dijo tímidamente la señora Agreste.

-No pasa nada, -Decía Marinette amablemente

-Mari, se que no es el momento pero-

-Marinette, déjame estar a tu lado a partir de ahora, no dejare que nadie más te haga daño! -dijo Adrien interrumpiendo a su madre.

Loraine sonrió al ver el rostro de Marinette, el cual mostraba sorpresa.

-Si Adrien. -dijo Marinette mientras se recargaba en su pecho.

La mujer salió de la habitación, dejando al par de chicos solos.

-Gracias Loraine, no sabía a quién recurrir -Dijo una voz proveniente de su bolso.

-No tienes nada que agradecer, Anda vuelve con ella, -Dijo la mujer amablemente.

Una pequeña creatura roja salió de su bolso, para después abrazarle el cachete y salir volando hacia su portadora.

-Oh Tikki, jamás cambiaras, -Dijo la mujer sonriendo dulcemente.

Bien!, espero que les gustara jijiji, Les repito, este será un Fic corto, y muy diferente a mis otros fics c:!

Y recuerden, para los que son de Monterrey, el día 10 de septiembre estaré en colegio civil en el evento de "Festival del lector joven" estoy como escritora invitada, espero ver algunos por ahí y que me saluden!

Les deseo una hermosa noche <3