Cuando las cosas se calmaron y Travis comenzó a respirar con normalidad otra vez, subí a su moto y le pedí que por favor no me soltara hasta llegar a su casa, asintió sin decir nada y subió tras de mí, afirmándose con fuerza de mi cintura.

Podía sentir cómo sus lagrimas mojaban mi hombro y se perdían en el top deportivo, claramente no dije nada. Lo conozco hace poco tiempo, pero si algo he aprendido sobre él es que es una persona muy cerrada, si quiero ayudarlo, no debo espantarlo, debo estar para él hasta dónde Travis delimite la línea.

Estacioné fuera de su casa, le pedí las llaves y abrí la reja principal, entrando la moto mientras él me seguía a pocos pasos de distancia, mirando el piso y secándose el rostro cada tanto, ignorando mi mirada, luego fui hacia la puerta principal, la abrí y dejé pasar primero, cerrando tras nosotros.

— ¿Quieres que te prepare algo de comer antes de que me vaya?

— Yo... yo...

— Ve a descansar ¿Sí? Prepararé algo bueno.

— Es que... es que...

Apretó sus manos formando puños.

— ¿Qué pasa?

— Es que... no hay... nada...

Compré todo ayer ¿Cómo no va a haber nada?

— ¿Pasó algo? ¿Te hicieron algo?

— Los ángeles te... vieron aquí, vinieron poco después que te marcharas y se... llevaron todo. Por eso jamás mantengo comida aquí, siempre se lo llevan todo.

Eso me hacía entender muchas cosas.

— Pediré comida ¿Qué quieres comer?

— Deberías marcharte, si te vieron aquí ayer, pueden venir antes hoy, este es territorio de los ángeles, no transites por aquí, menos sola.

Tenía razón en eso, es peligroso para mí estar aquí.

— Al menos pídete algo de comer ¿De acuerdo? Y recuéstate, descansa, duerme, cierra con llave la puerta principal.

Suspiró.

— Es mejor que te vayas, pero... gracias por estar ahí para mí cuando yo fui tan... patético, mi padre es un hijo de puta, no me llamaría la atención que alguien viniera justo ahora sólo para molestarme... o para dañarte, por eso Lucía — caminó hasta mí, tomando mi mano— Por favor... por favor vete, sólo ve a casa ¿De acuerdo?

Asentí.

Él estaba preocupado, y la verdad es que yo también.

— Está bien, me iré — tomando el móvil— pediré un taxi — enviando el mensaje— De todas maneras, come algo — tomando dinero de mi billetera— estás pálido.

— Tengo dinero, puedo...

— Sólo tómalo ¿De acuerdo? — poniéndolo en su mano— y llámame si algo ocurre, vendré de inmediato.

Maldije por lo bajo, viendo el mensaje del taxista.

— ¿Qué ocurre?

Preocupado.

— Nada, no te preocupes, ya me voy.

Sonriente, acomodé mis cosas, cargando el bolso en mi hombro.

— ¿Y el taxi? ¿Llegó afuera tan rápido?

Intentando observar por la ventana cerrada.

Idiota.

— Algo así — mentí— nos vemos mañana en el campamento, no faltes, el abuelo es capaz de sacarte de casa a patadas.

— Lo veo muy capaz, no pienso faltar.

Nos despedimos y di media vuelta, crucé la puerta y cerré tras de mí, apretando el bolso a mi costado, armándome de valor para caminar por mi cuenta hasta tener la suerte de encontrar un taxi que me lleve a casa, envié un texto antes y sólo respondieron "No llegamos a esa área de la ciudad" como si las personas de este barrio no necesitaran transportarse.

— Qué bonito tatuaje niña — Dijo el tipo que me cortó el paso, señalando la calavera con cuernos— ¿No te dijeron lo que le hacemos a los Diablos por aquí?

Mierda.

Mierda.

Mierda.

— ¿No te dijeron quien soy yo? — sonriendo de lado— Puedo enviarte al hospital si me pones una sola mano encima.

Metió la mano a su bolsillo, sacó una navaja, presionó el botón liberando el filo y me señaló con ella.

— Demuéstralo, niñita. Los ángeles caídos no mostramos piedad. Hombre o mujer, niño o adulto, da igual.

Dando un paso hacia mí.

Él no estaba jugando.

Empuñó su navaja con profesionalismo, como si esto lo hubiese hecho cientos de veces, me puse en posición, atenta al movimiento del filo, no podía lastimarme o mis padres harían preguntas, no quiero preocuparlos.

Antes de que su navaja pudiera cortar el aire a mi alrededor, el motor de una motocicleta paró justo a nuestro lado.

— Creí haber escuchado que tu taxi estaba fuera de la casa.

Travis.

— Lo siento. Mentí.

No podía seguir mintiendo en este punto.

— Súbete.

Ni siquiera debatí la opción de seguir por mi camino, apreté mi bolso y subí tras él, sujetándolo de la cintura.

— Oto — mirando mal al idiota que jugaba con la navaja ahora— La próxima vez que le pongas una mano encima, te las cortaré y se las daré a los perros, no les hará mal comer un poco de carne de vez en cuando.

Haciendo rugir el motor, sin dejar esa mirada amenazante, de un león acechando a su presa.

— ¿Olvidas cuál es tu misión angelito? Si tú no te haces cargo, otro lo hará.

Lo observé con confusión.

— ¿De qué está hablando?

Pregunté.

— Está drogado y es un hijo de puta, no lo escuches, mejor salgamos de aquí, no debí haber permitido que vinieras de nuevo.

Sin escuchar una sola palabra más por parte del sujeto, giró su mano derecha hacia atrás, abrió gas y aceleró la moto, sacándonos rápidamente de ahí.

— ¿Qué fue eso? ¿Por qué todos los ángeles hablan en códigos extraños?

— Porque son extraños, son una mierda ¿Entendido? Los Diablos hicieron bien en enviar a la mayoría a prisión todos son unos hijos de puta.

— ¿A prisión? ¿Los Diablos? ¿Por eso me odian? ¿Por ser un diablo?

— Así es, así que te ruego que por favor no vuelvas a venir por aquí, tengo miedo de que algo te suceda Lucía, no tientes a la suerte.

— Está bien... te lo prometo.

Asintió y se concentró en el camino, hablando conmigo únicamente para pedir la dirección de mi casa, luego de eso, no me habló hasta dejarme directamente frente al grueso portón de casa.

— ¿Quieres pasar? Podemos comer algo, debe dolerte la cabeza, tenemos medicinas también.

— Vives prácticamente en una mansión, es... un gran terreno.

Maravillado.

— Fue el regalo de papá cuando le pidió matrimonio a mi madre, tenemos hasta un huerto, a mi madre le gusta cultivar sus propios vegetales, entonces ¿Qué dices? ¿Pasamos?

— ¿Olvidas que tu padre me prohibió acercarme a ti?

Observándome como si yo estuviese loca.

— ¿Olvidas que soy mayor de edad y puedo verme con quien se me cante el culo?

Suspiró.

— Está bien, pero si tu padre me asesina, vendré como fantasma y te tiraré los pies todas las noches.

— Trato — buscando el control en mi cangurera, presionando el botón que abre el portón— Listo, adelante.

Hizo rugir el motor otra vez, entrando un par de metros, esperó a que cerrara el portón y siguió su camino directo a la casa, comentando en ocasiones lo grande que era, lo bien distribuidos que estaban los árboles, o lo verde que era el pasto, cosas por ese estilo.

— Bien, adelante — dije entrando por la puerta principal— ¿Qué quieres comer? Sé preparar de todo.

— Unos fideos instantáneos estarán bien.

Dijo mientras sus orejas se teñían ligeramente de rojo.

— ¿Fideos instantáneos? ¿Qué mierda es esa? No hijo, no — Dijo el tío Oren, abrazando a Travis por los hombros con familiaridad— comí por años esa porquería, comeremos bien, muy bien ¡Mi amor! Descongela la carne, haremos una parrillada.

Travis me miró con pánico.

— Tío Oren, primero hay que saludar — reí— él es mi amigo Travis, Travis, él es mi tío Oren, vive con nosotros, él y su esposo Marcus.

— ¿Esposo...?

— Sí, esposo — dijo Oren, analizándolo— Vaya... chiquilla, tú sacas los genes de tu mamá, te gusta el mismo tipo de chico — riendo— Travis, eres muy guapo, literalmente, si yo fuera mujer, tú podrías ser mi hijo, tienes mis ojos y mi cabello, lastima que no pueda parir bebés por el trasero, el universo le tuvo miedo al éxito — suspiró— ¡Mi amor! — caminando hacia la cocina— Nuestra bebé trajo un chico a casa.

Desapareciendo tras la puerta, dejándonos solos en medio de la sala.

— Mis tíos son un poco extraños — reí al ver la expresión perpleja de Travis— lamento eso, él... mi tío Oren suele decir lo primero que se le viene a la cabeza.

— Me agrada tu tío, es... divertido, creí que iba a arrancarme la cabeza.

— Oh no, no te preocupes, ellos no van a matarte.

— ¡Hola! Oren me dijo que Lucía trajo visita, ella suele dormir con muchas personas, pero no trae a nadie nunca, siéntete especial, chico — poniendo una cerveza heladita en la mano de cada uno— por cierto, yo soy Marcus, tío de esta princesita aquí.

Acariciando mi cabello.

Reí.

— Tío Marcus, él no es mi novio, somos amigos.

— Amigos dices — bebiendo de su cerveza— Oren y yo también éramos amigos.

— Luego nos emborrachamos — comenzó a narrar tío Oren— él estaba demasiado ebrio para ir a casa, así que lo subí a mi cuarto, y bueno, somos hombres, se nos paró el pene, me dio hambre porque joder... ese paquete era lo que yo necesitaba en ese momento — abanicándose— Así que le hice la mejor mamada de su vida, y para recompensarme, me dio como cajón que no cierra durante toda la noche. Fue el mejor sexo de mi vida, fue un amarre, un amarre, no tengo dudas de ello — suspiró— me llenó como pavo en navidad, ese fue el amarre y después de todos esos años, sigo tan enamorado como el primer día.

Besando los labios de mi tío, observándolo con adoración.

Aah...

Amo el amor.

— Detallada su historia de amor — Travis intentó sonreír, el temblor de su ceja lo delató— muy... romántica.

— No hijo, eso fue sexo puro y duro — aclaró el tío Oren— Lo nuestro fue corporal por meses, mucho sexo y del bueno, mi esposo es el mejor, incluso terminamos por varios meses, años creo, los peores años de mi vida, y cuando me di cuenta de que estaba cometiendo el peor error de mi vida, fui por él, no desperdiciaría mi vida ni me arrepentiría el resto de ella por no dejar el orgullo de lado y seguir a mi hombre, lo seguiría hasta el fin del mundo si fuese necesario.

— Bueno, eso sí fue romántico — dijo Travis— no todo el mundo está dispuesto a sacrificarlo todo o a perder el orgullo por amor, muchos sufren el resto de su vida, viviendo de arrepentimientos por no seguir lo que dicta el corazón.

— Tú me agradas muchacho, me agradas — le dijo el tío oren— Te protegeré de Luca, el bastardo babea por sus hijos, pero es duro cuando alguien intenta cosas con ellos.

— Lucía ¿Ya llegaste?

Jack irrumpió en la estancia, viniendo hacia mí, abrazándome con fuerza.

— Ya casi no te veo — protestó— te extraño.

Acaricié su cabello, besando su coronilla.

— Lo siento Jack, con el cambio de especialidad, he tenido que ponerme en forma, salgo a correr y entrenar por las noches por mi cuenta, y al gimnasio del abuelo por las mañanas.

— Yo también iré a entrenar con el abuelo cuando sea mayor.

— Serás el mejor, enano — reí— tengo a alguien que presentarte, un amigo — moviéndome hacia el lado, sin lograr que mi hermano me soltara— él es Travis Grey, mi amigo, Travis, él es mi hermanito Jack Landon.

Travis extendió la mano hacia mi hermanito para salúdalo, este hizo lo mismo, extendió su mano y estrechó la de Travis de forma segura.

— Mucho gusto, Travis, espero que cuides de mi hermana o te las verás conmigo.

El pelinegro a mi lado sonrió, asintiendo.

— La cuidaré muy bien Jack, te juro que siempre tendré un ojo puesto en ella.

Soltándose.

— ¿Te gusta? Lucía tuvo novia hace poco, bueno, ella nunca tiene novios o novias, ella sólo ve lo que sucede — con rostro confundido— no sé lo que eso significa.

— Lucía es una chica muy guapa, es cierto, supongo que veremos lo que sucede también.

Le respondió Travis al niño, sonriendo ampliamente.

Es la primera vez que me percato de las margaritas en sus mejillas ¡Diablos! ¿Cómo demonios no vi eso antes? Es... es...

¡Aah...!

Podría tener un orgasmo ahora mismo.

— Mi niña es la chica más guapa de todas ¿A quién debo felicitar por la buena vista que tiene?

Mamá irrumpió en la escena, caminando hacia nosotros, fue a por Travis, palmeando su espalda a modo de saludo.

— ¿Cómo te llamas, chico?

Papá cargaba las bolsas de las compras, parando frente a nosotros.

— Él es Travis, está en nuestro gimnasio, y creí haber sido claro cuando le pedí que no se acercara a mi princesita o yo...

— ¡Aah Luca! — lo regañó mamá— ¿Cómo quieres que nuestra hija traiga chicas o chicos a casa si amenazas a todo el mundo? — mirándolo mal— Travis, eres bienvenido en esta casa cuando quieras, es más, Luca me dijo que irán de campamento mañana con mi suegro ¿Compartirás tienda con Lucía? Tenemos de todo para acampar, así que sólo has tu bolso ¿Por qué no te quedas a dormir? Los llevaremos mañana temprano para que se suban al mini bus del gimnasio, sí, te quedarás a dormir, Oren ¿Qué cenamos?

— Haremos una parrillada, cielo mío — besándola en los labios— mi esposo está preparando la carne.

— ¡Perfecto! Luca, tú lleva al niño a su casa para que recoja sus cosas mientras nosotros preparamos todo.

Papá y Travis nos miraron como si estuviésemos locas.

— Nada de chistar, al auto y por la mochila.

— Sí amor...

Respondió papá.

— Está bien... señora Landon.

Respondió el pelinegro de lindas margaritas.

Reí por lo bajo, cubriendo mi boca, acercándome a Travis.

— Háblale de boxeo, es un tema que ambos manejan y les apasiona, y si te pregunta por qué vives en ese sector, no menciones a los ángeles, estarás bien.

Besé su mejilla antes de darme cuenta.

Para cuando me alejé, sorprendida de mi propio actuar, ambos estábamos rojos y sorprendidos, y todos en la sala estaban observándonos.

— Sí, creo que tú y yo tendremos una gran plática de cómo serán las cosas si estarás cerca de mi princesa — papá lo rodeó por los hombros, arrastrándolo hacia la puerta principal— numero uno, si llora por tu culpa, estás muerto. Número dos, si se pone triste por tu culpa, estás muer...

Fue lo ultimo que pude escuchar de él.

Pobre Travis, le espera un largo camino.

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BUENAS BUENAS CRIATURAS MÍAS ¿CÓMO ESTUVO SU DÍA? 

VIERON MIS HISTORIAS DE INSTAGRAM? HOY TUVE UN DÍA MUY RELAJADO JAJAJAJA HACE MUCHO TIEMPO QUE NO TENÍA TIEMPO LIBRE, SE SINTIÓ BIEN

¿CÓMO VAN SUS CLASES? SIENTO QUE EL SEGUNDO SEMESTRE ESTÁ MUY AGOTADOR, NO SÉ CÓMO O POR QUÉ

VOLVIENDO AL CAPITULOOOO

WEEEEEEI

LUCÍA CASI ESTUVO EN PELIGRO, ME GUSTA QUE TRAVIS SIEMPRE ESTÉ CERCA PARA PODER CUIDARLA, ESTOY INCLINANDOME SINCERAMENTE POR LA OPCIÓN EN LA BALANZA EN LA QUE ÉL ES BUENO Y QUIENES LO RODEAN SON MALOS, TRAVIS ES UN ANGELITO LITERAL

SIEMPRE ESTA CERCA CUANDO LO NECESITAS

AMO

OREN SIEMPRE CON SUS INDISCRECIONES JAJAJAJAJAJA ES QUE LO AMO, ME ENCANTAN SUS LOCAS HISTORIAS SIN FILTRO, PARA ÉL SON GRANDES HISTORIAS DE AMOR

MARCUS ES SU PERSONA IDEAL, ME ENCANTA COMO SE HABLAN CON TANTO AMOR

JESS SIEMPRE UN AMOR DE MUJER! LA AMO, ME ENCANTA

JACK, BEBÉ PRECIOSO QUE EXTRAÑA A SU HERMANA, ME ENCANTA ¿CÓMO SE LLEVAN CON SUS HERMANOS? YO SOY LA MAYOR Y LITERAL SOY COMO SU MAMÁ, DESDE ORDENAR SU PIEZA, COCINARLES HASTA AYUDARLOS CON SUS CLASES JAJAJAJA

LUCA CELOSO ME DA MIL AÑOS DE VIDA JAJAJAJAJA QUE DIVERTIDO

EL VIAJE A CASA DE TRAVIS SERÁ LARGO

NOS LEEMOS PRONTO MIS AMOREEEES

TENGO DÍAS LIBRES, ASÍ QUE QUIZÁ NOS LEAMOS MAÑANA!!!

BESOS PEGAJOSOS PARA TODAS, TODOS Y TODEEES

AMOR PARA TODO EL MUNDOOO