Capítulo 39
Desperté en mi casa, no escuchaba a Megan por ninguna parte, era de noche en el exterior, lentamente pestañeé intentando recordar en qué momento llegamos aquí ¿Cuándo...?
Entonces lo recordé.
Rápidamente me incorporé viendo en todas direcciones, buscando mi móvil, necesitaba saber qué pasó con mi papá, necesitaba saber que estaba bien para poder faltarle el respeto por primera vez en la vida y golpearlo directo en el rostro por ser un idiota.
Me dice a mí que no salte hacia el peligro, que debo vivir, y él es el primero que salta directo a la muerte.
Cuando logré enfocar mi vista, vi a Travis inclinado en el mueble bajo la televisión, dos líneas perfectas de polvo blanco que formaba con una tarjeta, enrolló un billete e inhaló.
— ¿Qué crees que estás haciendo?
Dije.
Mirándolo mal.
Saltó de la impresión, soltando la tarjeta en el proceso, limpiándose la nariz torpe y rápidamente.
— L-lucia, creí que dormirías un poco más, y-yo...
— No me importan tus explicaciones ahora — sujetándome la cabeza, incorporándome con lentitud, estaba algo mareada aún— ¿Qué pasó con mi papá? ¿Han llamado?
Estrujó sus dedos con nerviosismo, caminando hacia mí.
— Habla, joder — Lo apresuré— ¿Qué pasó con él?
Cortando la distancia entre ambos, Travis estaba caminando muy lento.
— Tu madre dijo que me llamaría cuando saliera de la operación, pero aún no lo ha hecho.
Igual de nervioso que antes.
— Vamos al hospital.
Dije, tomando mis zapatillas, colocándomelas con rapidez.
— Me encantaría llevarte, pero y-yo... prefiero no conducir cuando me meto algo al cuerpo.
— Entonces yo manejo.
Dije, buscando las llaves de mi jeep azul.
— ¿Estás loca? ¿Cómo vas a conducir así? Ni siquiera puedes caminar derecha, tendrás un accidente.
— ¡Y qué! Si lo tuviera llegaré más rápido al hospital y podré saber que mierda está pasando con mi papá ¡¿Por qué tenías que consumir mierda justo ahora?! ¿Por qué?
Exaltándome.
— Lo siento Lucia... lo siento... — sonaba apenado— es que yo... —las manos le temblaban— yo tenía que hacerlo, yo.... Lo necesitaba... yo...
— Pediré un taxi ¿Dónde está mi móvil?
Cortándolo.
Realmente no me interesaban sus explicaciones en estos momentos.
— Yo lo tengo. Toma.
Sacándolo de su bolsillo, entregándomelo.
Prácticamente se lo quité de las manos, buscando el número del taxi rápidamente entre mis contactos, marqué y le pedí que viniera lo más rápido posible, mientras tanto, me quité la ropa con la sangre de esa hija de puta y me vestí otra vez.
— Vino la policía antes... para tomar declaraciones, les conté lo sucedido, les dije que Isi fue quien atacó a tu papá y tú actuaste en defensa de él. Les entregamos el video de la cámara de seguridad, Isi rondaba la casa seguido, dudo mucho que salga pronto de la cárcel, ya no hay que preocuparse por ella.
Miré el móvil, recibí un mensaje.
— Llegó mi taxi.
Le dije.
Tomé mi bolso, mi móvil y salí rápidamente de casa con Travis pisándome los talones, podía escuchar sus pisadas hundir el pasto.
Ambos nos deslizamos por el asiento trasero, di la dirección y nos pusimos rápidamente en marcha.
— Lucia ¿Puedes decirme específicamente por qué estás enojada conmigo? Sé que la cagué con tu padre, sigo... significando problemas para ti, o quizá fue por lo que viste antes, de verdad no era mi intención que vieras eso.
— Travis — lo miré— No fue tu culpa lo de papá, no eres el centro del universo, y espero que ya tengas hora para internarte, porque no quiero que vuelvas a hacer eso frente a mí nunca más en la vida — señalandolo— Ahora lo que me importa es la salud de papá, nada más me importa ¿Entendido? No me interesan tus explicaciones ni tus conversaciones sin sentido, sólo quiero saber que él esta bien, él... es... mi papá ¿Lo entiendes? Es la persona que me vio crecer, es quien más me quiere en el mundo, quien más me protege, él... él lo es todo... si lo pierdo yo... yo no podré seguir adelante ¿Lo entiendes? Es por esto que no me puedo concentrar en nada más — sujetando mis manos, estas temblaban— Bueno, una cosa más... no, dos ¿Dónde está Megan y Jack?
— Ambos se quedaron con Nick en la casa hermana, hablé con él hace un momento — enseñándome la foto— Ambos están dormidos, están bien con él.
Asentí.
Entonces desvié el rostro hacia la ventana, observando el exterior, haciendo un mapa mental en mi cabeza del camino que quedaba hacia el hospital, sólo quería llegar.
Ninguno de los dos habló en el resto del camino.
Travis pagó el taxi en cuanto llegamos, nos bajamos rápidamente y prácticamente corrí al interior del hospital, pregunté por papá en el mesón de informaciones y fui directo a la sala de espera fuera de quirófanos, dónde mamá no dejaba de pasearse, los tíos estaban con ella, Connor, Marcus y Oren, tan nerviosos como ella.
— ¿Aun no han tenido noticias?
Acercándome.
— Lucia, que bueno que llegaste.
Mamá caminó hacia mí, abrazándome con fuerza.
— ¿Qué te han dicho? ¿Qué pasa con papá?
Ambas estábamos temblando.
— Han estado horas y horas ahí dentro, Luca está... en riesgo vital — su voz se quebró— Vinieron hace poco, aún está en pabellón, perdió mucha sangre, las personas no donan tanto como antes, se les están acabando las reservas, hay otras personas que necesitan AB-, es un tipo de sangre rara y tu papá...
— Mamá, ese es mi tipo de sangre — alejándome un poco, observándola— Yo donaré todo lo que tenga que donar, soy compatible con papá, inclusive tomamos los mismos medicamentos, que tomen toda la sangre que quieran.
— Luca jamás me perdonaría que te pusiera en riesgo por salvarlo a él.
La desesperación en su voz era palpable.
— Yo jamás me lo perdonaría si no hiciera hasta lo imposible por él. Mamá, él es mi super héroe, necesito hacer todo por él, todo lo que esté en mis manos, es mi papito, adoro a papá, yo... no puedo vivir sin él.
Lo pensó por varios minutos sin apartar su mirada de la mía.
— ¡Mamá! Estamos perdiendo minutos valiosos, no seguiré esperando tu autorización, si algo ocurre, cuida de Megan por mí.
Besé su frente y toqué las puertas dobles con insistencia.
— Señorita, no puede hacer esto aquí — me regañó la enfermera que salió— intentamos salvar vidas aquí dentro.
— Soy AB-, escuché que mi papá necesita donador de sangre con urgencia, por favor tomen todo lo que necesiten, firmaré un consentimiento informado.
— ¿Está segura?
— Sí.
Dije sin pensarlo.
— Venga conmigo.
Crucé las puertas dobles con la mujer, siendo llevada a una sala aparte dónde tuve que desnudarme de pies a cabeza, me coloqué una de esas batas que usan cuando te hospitalizan, una cofia para el cabello y mascarilla. Firmé el consentimiento informado sin leer los riesgos, no me interesaba, sólo quería salvar a papá, nada más.
En una camilla, fui llevada al quirófano dónde tenían a papá abierto sobre la mesa, eso fue... realmente chocante, todos los aparatos pitaban, el cirujano se movía rápido, todo era un caos, eso me puso horriblemente ansiosa, comencé a hiperventilar.
— Tranquila, haremos todo lo posible por él —Me tranquilizó la enfermera— Cómo te quedarás aquí, y es tu padre en quien trabajamos, te sedaré para que estés más tranquila ¿De acuerdo? Y le colocaremos suero por la pérdida de líquido, también se le harán unos exámenes de sangre rápidos.
Explicando mientras me recostaban en la camilla, comenzando a trabajar en las vías.
— Haga lo que tenga que hacer — dije— estoy dispuesta a todo.
Una especia de mascarilla conectada a un tubo fue puesta en mi rostro, cubriendo boca y nariz, me pidieron contar de uno en uno desde el diez hacia atrás, ni siquiera llegué a ocho cuando perdí el conocimiento.
Por favor papá... por favor no te rindas.
***
Para cuando desperté, en un cuarto de hospital, sintiendo el cuerpo pesado y la boca horriblemente seca, desvié la vista hacia la izquierda, viendo lo iluminado que estaba todo tras las cortinas, era de día otra vez, miré mi brazo izquierdo aun conectado a una vía, una bolsita transparente colgaba del porta suero, y del brazo derecho, varios moretones y parches, supongo que de ese brazo se me extrajo sangre, tenía los pies en alto, estaba un poco aturdida aún, mantenían una naricera para el oxígeno, facilitándome la tarea.
A mi lado, estaba papá, en su camilla, podía ver su pecho subir y bajar con lentitud, estaba pálido, las maquinas pitaban con normalidad, él estaba vivo.
Él... estaba vivo.
Lloré de la alegría, sintiéndome horriblemente aliviada al ver que seguiría jodiéndome por más tiempo, lamentablemente, mis llantos alteraron las maquinas que comenzaron a pitar con fuerza, no sé de dónde salió mamá, Travis y mis tíos, rodeando mi camilla.
— ¡Llama a la enfermera! ¡Llama a la enfermera!
Dijo mamá, tirando de la camiseta de tío Marcus.
— Estoy... bien...
Dije en un volumen poco audible.
¿Cómo es que hablar se me hace tan difícil?
Dos palabras y ya estaba agotada.
— Cielo... me hiciste pasar un susto de muerte, casi te pierdo a ti también — mamá acarició mi cabello— donaste demasiado, al borde de producir problemas para tu salud, afortunadamente tu padre logró componerse y se detuvieron ¿Cómo eres tan tonta como para firmar algo que acabaría con tu vida de ser necesario?
— Porque... p...porque... yo... a-amo... a... p-papá...
Viendo su perfil otra vez, sintiéndome tan contenta de haber hecho algo por él por una vez en la vida.
— No vuelvas a hacer algo así, por favor — Travis tomó mi mano con delicadeza— Te perdí por unos minutos, Lucia, no quiero volver a sentir ese terror, no puedo perderte, no quiero...
Observándome con ojos brillantes.
La enfermera llegó justo después de eso, me revisó, me preguntó ciertas cosas que podía responder con Si o No, también me notificó que debía quedarme unos días en el hospital para observación, pero que era una heroína, salvé a papá. Si yo no le hubiese donado esa sangre, mi papito estaría muerto ahora.
Jamás me arrepentiría de esta decisión.
Los Landon no nos arrepentimos de las decisiones que tomamos.
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
BUENAS BUENAS MIS AMOREEEES
¿CÓMO SE LES PUDO LLEGAR A OCURRIR QUE IBA A MATAR A MI VIEJO SABROSO?
NO PODRÍA VIVIR SABIENDO QUE MATÉ A LA MAYOR (Y MÁS SEXY) CREACIÓN DE MI VIDA, O SEA... JAMAAAAAAAS
SOY MALA, PERO NO A ESE NIVEL, NO PODRÍA MATAR A UN PERSONAJE TAN QUERIDO, NO PODRÍA VIVIR CON ELLO
LUCIA ARRIESGANDO TODO PARA SALVAR A SU PAPÁ?
SE ME PUSIERON LOS PELOS DE PUNTA, LITERAL ESTABA DISPUESTA A MORIR POR ÉL
ESPERO QUE EL VIEJO SABROSO ABRA ESOS OJAZOS PRONTO PARA QUE PUEDA REUNIRSE CON SU FAMILIA
TRAVIS SIGUE CONSUMIENDO JODER:C NECESITA SALIR DE AHÍ
LUCIA ESTÁ BIEN CANSADA:c CASI SE NOS FUE PARA EL OTRO LADO TAMBIÉN, ESTUVO UNOS MINUTOS MUERTA
AMBOS, PADRE E HIJA, LES ESPERA UNA BUENA RECUPERACIÓN, PERO ESTA VEZ, SIN PROBLEMAS POR DELANTE
AHORA SÍ QUE SÍ
NOS LEEMOS PRONTO MIS AMORES BELLOS
SUEÑEN CON EL DIABLO VIVO
BESITOS EN LA COLAA
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top