Para cualquier sería un panorama aterrador, incluso para Draken que mas que miedo, sentia incertidumbre, inquietud.

El pequeño rubio estaba tumbado con los ojos cerrados, aparentemente K.O (ya que por mucho que intentara despertarlo, no reaccionaba) sobre la cama de Draken. Su pecho subía y bajaba de manera lenta y constante, confirmando que estaba profundamente dormido.

Su blanca chaqueta de Kanto Manji se hayaba colgada en una silla. Se veía sucia, por el suelo en el que el rubio estaba tumbado antes de que Draken decidiera llevárselo a su habitación.

¿Por qué hizo eso? Ni él mismo lo sabía, lo único a lo que podría llegar a atinar es que se dejó llevar por el impulso.

Draken, sentado en una silla cercana al parqueño, se dedicó a mirarlo dormir sin decir nada, divagando en sus pensamientos.

Incluso a esas alturas, sentía que seguía con el Mikey caprichoso del que se hizo amigo. No se dió cuenta de lo mucho que lo echaba de menos hasta que lo vio y lo cargó en su espalda como cuando tenían 15 años.

¿Qué le debería decir cuando despertara?

¿Exigirle explicaciones?

¿Suplicar que volviera y dejara las pandillas?

Agarró su teléfono y le escribió a los únicos que sabrían como se sentía.

Trabajo de inglés

Tengo a Mikey durmiendo
en mi cama.

Mitsuya
Que-

[Enviaste una foto]

Smiley
JESUCRISTO EN MOTO

Pah
¿Que pasó?

Me lo encontré tirado en un barrio
donde peleó su pandilla

Pah
¿Alguien logró tumbar a Mikey?

#miedo #terror

Chifuyu
¿Y qué vas a hacer?

Esperar a que despierte

Chifuyu
Y después?

No lo sé

Mitsuya
Llevamos sin ver a Mikey dos años desde que pasó "eso"

Cuánto crees que habrá cambiado?

Pah
Mikey siempre será Mikey, no va a cambiar.

Aunque soy muy tonto para entender de lo que estáis hablando

Smiley
🤦

Mitsuya
Quieres que vayamos para haya?

Pah
No íbamos a ir?

Hasta me e puesto los zapatos

No

Bueno

No lo sé

Mitsuya
Yo iría pero tengo que cuidar a mis hermanas

Chifuyu
Mi madre no me dejará salir porque está lloviendo.

Pah
Pues yo voy

Smiley
Tampoco te dejarán salir a tí, tonto

Pah
A qn llamas tonto, imbécil?

Smiley
A tí

Yo sí voy ¿Donde vives? @Draken

En el centro de Shibuya

Smiley
Que lejos está

Joder

Manda la dirección

[Mandaste la ubicación del GPS]

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Un gimoteo se escuchó desde la cama donde estaba Mikey, pero al ver, vio el rubio seguía tumbado en la cama, como hace unos segundos, con la diferencia de que ahora estaba tumbado de lado

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Cuanto tardarás más o menos?

Smiley
Es que quién te manda vivir tan lejos

Mitsuya
Haber, esto haréis

Hablaréis con Mikey y lo convencéis de que deje las pandillas.

Chifuyu
Lo dices cómo si fuera fácil

Pah
No puede ser tan difícil hablar con Mikey

Te equivocas

Mikey lleva siendo un cabezota desde que lo conocí

Smiley
Y si ha cambiado?

Todos hemos cambiado a mejor durante estos dos años.

Pah
Tú no

Tú sigues siendo tonto

Smiley
-exclamó el tonto

Mitsuya
Los dos sois tontos

Chifuyu
@Smiley sigues en tu casa?

Smiley
Ahora mismo salgo

Chifuyu
Cuidado con la moto que está lloviendo

Smiley
Estas hablando con profesionales 💪

Pah
Como te caigas estaré en el suelo llorando de la risa mientras te llevan al hospital

Smiley
No te hagas

Tú serías el primero en llorar

Pah
De la risa

Chifuyu
SAL YA DE TU CASA

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-Par de tontos -murmuró Draken dejando que la pantalla de su teléfono se apagara esta vez con la mirada al suelo. Por ahora, lo único que le quedaba era esperar a que Smiley llegara o que el rubio en su cama despertara. Lo que llegara antes. Sinceramente no sabía que decirle a Mikey, hacia tanto tiempo que no lo veía. Pasaron casi dos años, diablos, el tiempo pasaba tan lento.

Al verlo tirado en el suelo, lo pudo reconocer rápidamente. No había cambiado en lo absoluto, bueno, al parecer ahora sí se sabía peinar ¿O alguien en la Kanto Manji lo peinaba? Le costaba creerlo, las pocas veces que vio esa pandilla, desprendía un aura muy diferente a la que hacía Touman cuando aún estaba vigente.

Como si lo que predominara ahí no fuera el compañerismo, sino el poder, el miedo. Se sentía algo nervioso.

Y casi se le paró el corazón cuando dirigió la mirada en dirección al rubio viéndo que ya se había despertado.

Se hallaba sentado sobre la cama dandole el perfil con la mirada fija en la pared del frente en la cual se hayan unas fotos pegadas.

En una de las fotos estaba con Touman, otra donde estaba Mikey en su moto con una expresión molesta, otra foto salía el con Emma...

Mikey estaba quieto, como una estatua, tal vez aturdido, tal vez paralizado.

-Mikey -aunque su voz salió casi en susurro, el nombrado pudo escuchar el llamado. Draken pudo ver cómo se estremecía en su lugar, después de unos segundos se giró viendo el rostro de Draken con sorpresa.

-Ken... -rápidamente se corrigió. No podía llamarlo por ese apodo, se suponía que todo eso lo había dejado atrás -Draken... -fue lo que contestó en su lugar cambiando su expresión de sorpresa por una apacible.

Fueron otros segundos de tortuoso silencio, que para el de tatuaje era más que incómodo.

-¿Por qué estoy aquí? -fue lo que preguntó Mikey.

Draken por unos segundos quedó en blanco hasta que contestó.

-Estabas desmayado en medio de la calle ¿Alguien logró tumbarte? Pensaba que eras invencible -ese último comentario fue meramente para molestarlo y ver su reacción.

-No, me dormí -contestó sin vergüenza alguna, cambiando la dirección de su cuerpo apuntandoba Draken, o más bien la puerta de salida.

-¿Te dormiste en medio de una pelea? ¿Es una broma? -preguntó incrédulo -pero si lo que más haces es dormir -entonces se dió cuenta de las ojeras que tenía bajo los párpados. Incluso viendo cómo se movía, podía notar cansancio en él -Mikey... ¿Estás durmiendo bien?

El nombrado lo miró sin decir nada. "No debí abrir la boca" porque ahora empezaba a sentir la necesidad de quedarse con él, seguir hablando como hacían en el pasado.

Pero si hiciera eso ¿De qué habrían servido todos sus esfuerzos por alejarlos? Desde que Takemichi le contó lo que pasó cuando se encontró con su versión Manila, lo único que pudo pensar que todos eran infelices por su culpa.

Le prometió a Takemichi que los protegería a todos, y esa era la única razón por la que se seguía levantando, pero no podría seguir con lo planeado si salían a flote los sentimientos que trató de silenciar por casi dos años.

Por esa misma razón se levantó sin decir nada, sin mirar a Draken, solo se dirigió hasta su sucia chaqueta blanca que colgaba de una silla, y con toda la atención de irse lejos de ese lugar y de todos los recuerdos que lo golpeaban ferozmente se dirigió hasta la puerta, pero el pecho de Draken se cruzó en su campo de visión, tapando la única salida.

-Fuera de mi camino, tótem -habló con toda la frialdad posible, teniendo que alejaste un poco para mirarlo bien a la cara.

-¿¡Por qué estás huyendo!? -la expresión de sorpresa del más bajo fue tan efímera que apenas Draken la pudo notar.

-No estoy huyendo -elevó a voz con molestia para que Draken oyera bien su mentira.

-¿¡Que no estás huyendo!? ¡Después de casi dos años, casi sales por esa puerta sin siquiera mirarme a la cara!

-¿¡Y por qué tendría que hacerlo!? ¡No me interesan las personas como tú!

-¿¡Como yo!? ¡No sabes ni lo que dices! -empujó al rubio sin mucha fuerza haciéndolo retroceder. Mikey se sentía algo mareado, después de todo era normal, llevaba días sin comer ni dormir bien.

-¡Quítate de mi maldito camino! -reaccionó también empujándolo pero no lo hizo retroceder ni un poco.

-¡Antes no eras así! ¿¡Qué mierda te pasó, Mikey!? -lo agarró por los hombros, apretándolos, hacercándolo y encarándole.

Mikey frunció el ceño.

-¿¡Qué te importa?! ¡No eres NADA para mí! Si sigo en las pandillas fue porque elegí yo ¿¡De qué me servirían un montón de sentimentales! ¡Ya no me importáis ni ahora, ni mañana, ni nunca, así que hazte un favor y quítate de la puta puerta! Porque a la próxima no lo repetiré ¡TE NOQUEARÉ!

-Solo dices mentiras... -mustilló Draken, aún sabiendo que eran mentiras, esas palabras le seguían doliendo como dagas.

-¿Y por qué mentiría? ¿Eh? -preguntó con una voz altanera encarando una ceja y cortando distancia-Hace dos años lo demostré, alomejor otra paliza te hace entender.

Draken se sentía desesperado, años de amistad para acabar siendo reducido a mentiras. Draken lo conocía desde hace años, sabía más de Mikey de lo que él creía.

-Si no es mentira... -susurró con rabia contenida -¿¡ENTONCES POR QUÉ ESTAS TEMBLANDO!? -con ira le dió un fuerte empujón al bajito. Desde luego no se lo esperaba por lo que por el empujón se acabó tropezando con la silla en la que Draken estaba sentado y cayó contra la cama golpeándose la espalda con uno de los bordes. -¡No entiendo nada de lo que heces! Un día estábamos bien y al siguiente empezaste a soltar toda esta mierda. Nos conocemos desde hace años ¿¡Por qué no me quieres decir nada!?

Mikey lo miró desde bajo, perplejo abriendo un poco la boca. Sentimientos encontrados salieron a flote ante la mirada de Draken, que no la apartaba por ningún segundo. Mirándolo directo a los ojos.

Mikey se sintió terriblemente expuesto, como si esos ojos llenos de impotencia lo estuvieran analizando con una sola mirada, y no le gustó nada.

Lo único que atinó a hacer fue desviar la mirada. Draken era como su corazón, puso todo de sí para golpear a sus ex-amigos para que así lo odiarán, no lo quería volver a hacer-No lo entenderías... -habló en voz baja apretando el puño de una de sus manos, sabiendo que Draken no la podría ver ya que la tenía escondida en su espalda.

Llevaba años preguntándose qué eran esos impulsos oscuros, jamás encontró una respuesta, lo único que sabía es que era como si fuera otra persona, no era consciente de lo que hacía hasta que el desastre ocurría, y perdió toda esperanza de alguna vez curarse cuando Takemichi le dijo que los mató a todos.

Si no podía controlarse lo mejor era alejarse ¿No? Sería la única forma, es la única forma.

Y las divagaciones de Mikey fueron interrumpidas por un toque suave en su mejilla que lo hizo mirar al dueño de ese toque. Por sobre-pensar ni siquiera se dió de en qué momento Draken se había hacercado tanto.

¿Espacio personal? Eso había desaparecido por completo, lo único que podía ver Mikey eran los ojos negros de Draken.

-No creo entenderlo menos que ahora, que no me dices nada -desde que hace casi dos años se alejó de sus amigos, no dejó que nadie le tocará, ni siquiera unas palmaditas en el hombro, su primer reflejo fue retroceder porque, joder, de verdad no quería golpearlo, pero un total fracaso cuando notó que chocó con algo, recordando que estaba sentado en el suelo, delante de la cama -Deja de huir y dime qué es lo que te pasa.

-Pesadilla -trató de ofenderlo -, no me pasa nada, de verdad que no eres nada para mí -con una mano lo alejó un poco desviando la mirada una vez más ¿Por qué se sentía tan mal? Antes podía ocultar sus sentimientos con extrema facilidad ¿Alomejor la falta de sueño efectaba demasiado? Diablos, se desmayó del cansancio en medio de una pelea, claro que le afectaba.

Draken con su mano derecha agarró la muñeca de la mano que el rubio usó para alejarlo, poniéndola contra su pecho, para ser más exactos, donde su corazón, mientras que con la izquierda lo agarraba del mentón para que lo mirará a los ojos.

-Dime Mikey... ¿Por qué mientes tanto? -Mikey lo miró a los ojos, se estás poniendo nervioso. Las barreras que había mantenido por casi dos años eran derrumbadas por Draken. No soportaba ese interrogatorio.

Se lo prometió a Takemichi, no lo quería arruinar todo otra vez, se sentía tan mal, acorralado, incómodo.

Sin duda era por culpa de la falta de sueño.

Trató de regular su respiración para bajar su nerviosismo. De alguna manera Draken sabía cuando estaba mintiendo. Todo el tiempo que llevaban de conversión, la única verdad que dijo fue que se durmió.

Si las mentiras no funcionaban, rrecuriria a amenazas.

-Si no me sueltas t-te voy a matar. -¿Acaso acababa de tartamudear? Definitivamente la falta de sueño. Al diablo las pesadillas, le pediría unas pastillas a Sanzu.

-Pero dime ¿Qué es lo que no entendería?

-¡QUE ME DEJES! -usó su pierna izquierda para empujarlo y alejarlo, y antes de que nadie dijera nada, la puerta de la habitación fue abierta, revelando a una de las mujeres del burdel.

-Kenny ¿Que te pasa? No paro de escuchar gritos -entonces su mirada se dirigió a Mikey, que estás algo alterado -Oh, Mikey, cuanto tiempo -le sonrió -hace mucho que no vienes de visita.

-Ahora me iba -y dejando atrás su chaqueta de Kanto, salió corriendo de la habitación, siendo seguido por Draken

-¡Espera, no huyas!

Mikey con rapidez, logró colarse en un ascensor que iba hacia abajo, para cuando Draken llegó, el ascensor ya había cerrado por o que no le quedó de otra que ir por las escaleras. Apenas llegó al bajo, vió a Mikey correr en dirección a la salida, Draken salió disprado, olvidó que estaba lloviendo.

Pero al salir, no pudó ver al rubio por ningún lado, había desaparecido.

Con rabia, le dió una patada a una lata que tenía al lado. Estuvo tan cerca de que Mikey le contara algo. Se apoyó en la pared observando el nublado cielo.

El sonido de una moto aproximarse captó su atención.

Al mirar en esa dirección, vió a un sonriente Smiley llegando.

-A buenas horas llegas -se quejó dejando a Smiley pasar.

-Si, sí, como sea ¿Donde está Mikey?

-Se fue.

-¿Y te dijo algo?

-Que no lo entendería... -suspiró. Ambos entraron al ascensor

[...]

Mitsuya
¿Pero por qué nos miente?

Salió con tanta prisa que se dejó su chaqueta.

[Mandaste una foto]

Chifuyu
¿Y si es verdad lo que dijo de que es su decisión?

No creo que sea feliz ahí

Me da igual lo que pase, salvaré a Mikey.

Una promesa fruto de una fuerte determinación fue cerrada.

Una promesa que jamás iba a cumplir.

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Por fin me volvió la inspiración después de faltar dos días al instituto porque no quería ir 💪

Se que esto no lo van a leer porque estuve desaparecida y sin actualizar durante meses pero meh

Se vienen cositas jsjs