- ¿Por qué lo leíste? - Le reprocho un Alec completamente enojado.

- Creo que lo que tenemos que hablar no es eso.

- ¿Cómo que no? Es mi celular. - El modelo se acerco y le quito el celular de las manos.

- Si no lo leía nunca me ibas a decir.. ¿No?

- Por supuesto que no. Es privado...

- No es privado cuando incluye a otros, mes espía a mi también.

- NO QUIERO HABLAR DE ESTO!

Magnus se quedo callado, sorprendido con la actitud de Alec. Pero entendió todo, cerro sus ojos e intento calmarse. Tenia que abarcar la situación de otra manera...

- Perdóname Alexander. - Se levanto de la cama y llevo sus manos a tomarle el rostro.- Me equivoque tenes razón... Me asuste...

- No quise gritarte. - Le contesto mas calmado.

- No, esta bien mi amor. - Le dejo un beso en la mejilla y le abrazo, rodeándolo con sus brazos.- No estemos mal...

- No, no quiero estar mal. - Alec también le abrazo.

- Vayamos a desayunar algo y después vemos que hacemos.

- Gracias... - Le susurro.

Pero Magnus ya estaba pensando mil maneras distintas de abordar la situación. Con quien tenia que hablar, que iba a pasar y una película en su mente que hizo que apretara el cuerpo de ese joven que era tan hermoso y perfecto que no tenia planeado soltar.

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