LOS CINCO DE LA COMISION.
INTRODUCIR: LONDON BRIDGE - JRs Ost
Su piel debajo de su ropa estaba como la de una gallina enfriada hasta el hueso, no podía dejar de temblar, no era normal. Tenía tanto frio que sus dientes estaban rechinando.
Sintiendo un escalofrió que no vino del frio sino de miedo, Izuku nerviosamente puso sus manos en su estómago.
Pero el temblor ya extendido por todo su cuerpo, sus brazos no podían soportarlo. Cuando levanto la mirada, sus rodillas se sentían como si se fueran a romper, izuku estaba aterrado por lo que estaba viendo.
―A-Alguien...
El ritmo cardiaco de Izuku, tan fuerte hace un rato, se ha estado fortaleciendo, y su respiración era tan difícil en el momento en que la sangre broto de una parte del cráneo de Kamui. Él quería pedir ayuda, pero su voz no salía de su garganta. Sus piernas estaban como si sus extremidades no estuvieran aceptando el oxígeno del alrededor.
[¿Nagant fallo?]
Las voces en eco atravesaban las calles.
[Nagant no falla, Nagant es superior... el esquivo.]
Esto era malo, era el pensamiento que estaba dominado la mente de Izuku. Él no tenía ningún entendimiento de lo que estaba pasando a su cuerpo. Lo único que sabia es que su vida estaba en peligro.
Izuku siguió mirando el charco de sangre que alcanzaba sus pies. Esto provocaba que sintiera como si su interior estuviera derritiéndose; el sentía como si todo se estuviera convirtiendo en alguna especie de sopa.
Quería vomitar.
Su rostro estaba llenándose de lágrimas.
Su mente estaba nublada.
Todo su cuerpo era lento. Su respiración era dura y sus oídos no dejaban de escuchar ruidos a alta frecuencia.
Fue pura casualidad, o podría decirse como maldita suerte, que Izuku se dio cuenta de un sonido extraño.
El sonido era como el de cuando arrastran algunas cadenas.
Tenía un mal sentimiento, el que un no se movía en lo absoluto, sus hombros cayeron hacia delante; presiono su cabeza contra su palma derecha.
―¿U-Uh...?
En el siguiente instante, un golpe voló sobre el aire goleando la espalda de Izuku.
El cuerpo del chico salio volando. El reboto varias veces, su cara literalmente iba limpiando el piso, al momento que izuku se dio cuenta de que algo increíblemente duro lo había golpeado fue en el momento que estaba quieto al otro lado de la calle.
[Hemos llegado...]
Las luces de los faroles parecían parpadear.
[Llegamos juntos, nos vamos juntos.]
Predicando su voz atravesaba el denso mar de soledad de aquella calle abandonada.
No había dolor.
Sin embargo, sentía un malestar de como si desde las uñas de sus pies hasta su pecho hubiera pasado por una licuadora.
―¿Qué pas...?
Que paso, el empezó a decir mientras ponía una mano en el piso para intentar levantarse.
Su bolso había quedado tirado a su costado unos 4 metros a su derecha encima de un coche.
Parte de su saco estaba desgarrado revelando algo más debajo de las ropas.
Aun a pesar de que ya estaba por ponerse de pie, su temblorosa mano no tenía fuerza para ello. Eso era extraño, él no tenía ningún balance. Su brazo derecho estaba trabajando tan duro; ¿Qué carajos le estaba pasando?
*FUM*
Todas las luces de los faroles finalmente se habían apagado en un estruendo sin igual. Tan solo la luz que provenia de la tienda de convivencia era la única que yacia impoluta a esto.
Los ojos de Izuku fijaron su atención en el cuerpo de Kamui el cual estaba en el suelo en un charco de sangre.
[Tu hora te llego... el juicio ha de ser.]
[Tu hora te llego... paga como debe ser.]
[Tu hora llego... da tu vida de una vez.]
[Tu hora llego... cobremos lo que debes.]
Cuatro voces distintas en cuatro direcciones diferentes.
Los sentidos de Izuku estaban reaccionando.
Una figura en la sombra de la noche mientras el cielo se nublaba.
Era una sombra enorme.
―Tengo que llevar a kamui a un hospital... ―dijo entre susurros Izuku―. Tengo que...
Casi al momento de dar un paso el farol encima suyo se ilumino y la constante luz blanca comenzo a titilar.
*¡ZONK!*
El sensor de peligro se había activado.
Izuku salto hacia atrás y del farol una gran lanza lumínica descendió.
*¡KRAHSSS!*
En el suelo se incrusto he izuku topo con el muro del edificio detrás de él.
―Tengo que llamar a Miruko ―Izuku llego su mano hacia su bolsillo tomo el teléfono con su mano y lo saco―. Miruko...
[Good Night~]
Sin apartar su mirada del frente miro a través del rabillo de su ojo el teléfono celular que a la hora de presionar el botón de encendido yu la pantalla se iluminara se encontró con algo sumamente siniestro.
Era una gran sonrisa de una mujer que parecía relucir entre titileos.
―¿¡―?!
*¡CLACK!*
Se corto cartucho, la mirilla tuvo en su blanco de nueva cuenta a Izuku.
*¡ZONK! ¡ZONK! ¡ZONK! ¡ZONK!*
Una tormenta de relámpagos.
En un momento izuku recordó ese sentimiento de peligro total que tuvo en Osaka ya hace cinco meses.
De repente Izuku tuvo otra sensación extraña la cual rodeaba la mano que sostenía el teléfono. Algo estaba tocando las puertas de su interior pues pequeñas grietas blancas comenzaban a avanzar por su brazo derecho.
Sin que Izuku se diera cuenta, la luz que producía el teléfono celular se reflejaba en el muro detrás de él por el cual poco a poco una figura comenzo a emerger.
Portaba un gran casco con la parte frontal de cristal mientras que todo su cuerpo portaba un traje de fibra de carbono luminiscente.
Y no deteniéndonos ahí, al final de la calle poco a poco una niebla oscura comenzo a reunirse de cada extremo de las ceras comenzando a unirse en el medio de la calle formando una figura que portaba detrás de el dos vainas pequeñas a su cintura mientras que en su espalda había una gran arma.
En su caso portaba una capucha que cubría su cabeza y al levantar su mirada una gran mascara blanca con dos fisuras rojas lo miraban.
Este aún no se había formado por completo y de su cintura hacia abajo la niebla estaba expandiéndose.
*¡JAJAJA!*
Una siniestra sonrisa.
Y sin esto ser el final, al otro lado de la calle un par de pasos hicieron eco.
Había un hombre saliendo de la oscuridad. Portaba un vestido hanfu oscuro con terminados purpuras. Su cabello era oscuro y su rostro casi blanco como el de un muerto.
Era un japones, la más clara representación de un japones de la edad Edo. Tenia ambos brazos ocultos dentro de sus ropajes y miraba con desdén al chico.
*Clap*
Un aplauso.
*Clap, Clap, Clap*
Tres aplausos.
*Tap, Tap, Tap*
Tres pasos.
Izuku levanto su mirada y de la misma calle por la que él había venido un hombre emergió dando una fuerte pisada sobre el charco de sangre del cuerpo de Kamui Woods.
El temblor se hizo evidente.
Instantáneamente, la mente de Izuku fue llenada completamente con un ruido blanco.
El desesperadamente quería denegar la señal frente a sus ojos, pero él no podía pensar en nada que la dejara.
Los pensamientos de Izuku estaban en blanco, blanco puro, sin nada en estos.
Su respiración se detuvo, su corazón parecía quieto, como si hubiera olvidado como mantenerse latiendo.
Lo que libero a Izuku de ese estado fue la fría sensación de la gota de sudor que bajo por la piel de su frente.
El hombre delante de él miro hacia el suelo, justo al charco de sangre, el vio su reflejo.
[Que curiosa apariencia me diste...]
»Esto esta mal... ¡MAL, MAL, MAL, MAL, MAL, MAL!
Sus pensamientos vacíos comenzaron a llenar una y otra vez con una inquietud violenta y pánico. Pensamientos no racionales vinieron.
―¿C-Co-Como... t-tu...?
No era posible.
―¡¡―!!
La persona realmente frente a él era...
―¿S-Six...?
¿Era realmente Six el que estaba frente a sus ojos?
¿Era realmente ese six que Izuku conocía y que el mismo acabo?
Sus palabras formales deslizándose como una daga, puntual hasta el punto de obsesión, adorando a su imprudente contrincante, albergando un serio complejo de superioridad.
Con Izuku habiendo perdido su anterior voluntad de lucha, aquel hombre denominado Six lo miro mientras manejaba su mano por delante de su rostro.
―Si no te resistes, puede que te demos un final rápido y propicio.
Izuku sabia que ese no podía ser Six, no podía serlo. El mismo lo vio deshacerse al final de su batalla. No había forma de que el fuera. Quizas... si, quizás esto era una ilusión he Izuku estaba cayendo de lleno.
Poco a poco, izuku trituro la realidad entre sus dientes, su boca formo palabras que estaba alcanzando.
―¿Q-Quienes son...?
―No es nada complicado. Tu eres un problema, así que voy a darle a la comisión tu cabeza para de una vez terminar con todo esto ―respondió Six.
―Tenemos la intensión de terminar esto antes de que el día termine ―dijo la voz femenina detrás de Izuku provocando que este se sobresaltara pero no pudo moverse.
Su cuerpo estaba inmóvil.
―¡¡¿―?!!
Cuando menos se lo espero, el teléfono que estaba encendido aun estaba extendiendo las grietas de luz a través de su cuerpo. Fue entonces que sintió el toque de la mujer que aun estaba con la mitad del cuerpo enterrado en el muro detrás de él.
―Eliminaremos a todos los que se opongan a la comisión. Tu eres meramente uno ―dijo Six.
El toque seco hizo que su visión oscilara; un dolor agudo salía de los dedos que tocaban la piel de su cachete izquierdo.
Todo su cuerpo estaba encendido ahora.
Toda su existencia le estaba gritando que huyera...
Esta sensación no la había olvidado, no podía hacerlo. Desde Osaka todas sus pesadillas solo lo hacían recordar el mismo sentimiento de miedo.
Un miedo por estar rodeado ante el inminente peligro de muerte.
Musutafu, Japón. 1 de julio.
―Siento que ha pasado un tiempo desde la ultima vez que vine a Japón.
―¿Cómo se ha sentido el extranjero?
―La verada es que no se siente nada en particular. Estar ocupado todo el día en el trabajo y aun así sentir que los días duran años. Pero al fin y al cabo es parte de nuestro trabajo el soportar esto. ¿Paciencia la madre de todas las ciencias? Director.
―Debió de haber sido una experiencia horrible, Fobos.
Ryuji Kinoshita, actual director de la comisión de seguridad publica en todo Japón ubicado en el centro de Tokio se encuentra entablando una platica con un miembro de la comisión. A través de los largos pasillos del ultimo piso de un gran edificio ubicado en la zona central de Tokio.
―Últimamente me estado preguntando muchas cosas director, algunas de ellas sin interés y otras mas sencillas como el por qué el café granulado sabe mejor. Una de estas tantas preguntas es el por que el director de la comisión publica le interesa tanto mi presencia aquí. Supongo que le habrá costado mucho hacer que el gobierno lo mire.
Dicho hombre era alto, casi 1:90 y era bastante fornido. Portaba un traje oscuro con el saco abierto permitiendo ver su corbata oscilar de un lado al otro.
Podría ser considerado alguien común y corriente pero tenia una característica en especial...
El no portaba rostro.
―Parece que somos unos extraños hablando de esta forma. ¿Qué no nos conocemos desde hace años ya, Fobos? ―pregunto con sorna.
―¿Entonces debería referirme a ti como Ryuji? Si es así entonces le pediría que me llamase por mi nombre también.
―Si lo hiciera, ¿No te molestaría acaso?
El hombre sin rostro sonrió.
Ambos continuaron su ruta a través de los largos pasillos. El sol se adentraba por los grandes ventanales a su costados.
―Volviendo un poco al tema. Ciertamente tienes razón. De verdad fue un asunto tener al gobierno de mi lado esta vez, aun siendo yo el director de la comisión esos tipos parecen tener otros asuntos mas importantes. Pero por una vez en la vida parece que las lunas se alinean para resolver un problema más importante.
―¿Mas importante? Sacarme de operación en conjunto no fue buena idea. Estábamos a punto de malograr los vestigios de un hombre perfectamente alejado de la ley. Y sobre todo esto pensar que incluso ha traído a más. ¿Es acaso que yo no soy suficiente para esto?
―No se trata de eso. En nuestro caso por muy cercano sabes que tenemos nuestros propios métodos de resolver problemas. Personas como ustedes pero lamentablemente dudo que estén al nivel.
Fobos parecía ahora un poco más interesado deteniéndose en el proceso.
―¿Lady Nagant y Hawks no son suficiente para esto? Director.
―Oh, oh, ¿Los conoces?
―¿Por qué no lo haría? La pequeña niña que manipularon justo unas semanas antes de que me fuera y el tipo que esta en el top de japón. Es como si me pidieras que no subiera de que color son las hojas de los árboles.
―Entonces si conocen a la tabla, supongo que has de conocer a la numero 6 dentro de esta tabla, ¿Me equivoco?
―Permítame pensar... ¿Es acaso, esa mujer de la aldea de animales? ¿Cuál era su nombre...?
―Rumi Usagiyama.
―Miruko.
Aquel trozo de carne en forma de cabeza con tan solo la piel desnuda sin ninguna fisura como oído y poros nasales, tan si quiera ojos... nada, más que su boca.
Aun así se podía sentir un poco sobre su inquietud.
―¿Ella es el objetivo?
Ambos se habían detenido en medio del pasillo justo a la puesta del sol.
―Por tu actitud eh de creer que conoces algo sobre su pueblo, ¿Cierto?
―Así es.
―Entonces entiendes que el pueblo de donde viene esa mujer no es muy bien conocido además de que parece tener algo en contra de todas las personas que intentan ir a ese lugar. ¿Sabes por qué, no?
Fobos, el hombre sin rostro escudriño cada milímetro de su limpio rostro y despues tentando su mentón excomulgo una idea.
―El secreto de su mutación, ¿Sera?
―Mas que eso, lo que viene con ello. Honestamente no tenemos todos los detalles por que como antes mencione, hay cierto misticismo con todo esto y al alrededor de todas estas cosa. Lo único que sabemos es que esa mujer, lo que el pueblo tiene que ofrecer lo porta la heroína Miruko. Y con toda la información que hemos recolectado me atrevería a decir que ella tiene una fuerza oculta una que si ella quisiera podría estar en un rango casi yendo adentro del top 3.
―¿Así de fuerte es?
―Incluso diría más... ―Ryuji negó con la cabeza. Acero su mano para apoyarse en uno de los pilares del pasillo―. Hace unos meses en Osaka sucedió un ataque donde ella se vio involucrada. No hubo muchas fotografías y videos acerca del enfrentamiento debido a que la comisión se encargo de casi toda la evidencia debido a que si esto salía a la luz podría funcionar como un apoyo para alguien a quien no queremos que este en las calles. El tema aquí es que a través de estas grabaciones pudimos notar una fuerza más allá de lo que uno pensaría que su quirk tiene. El peligro que enfrento esa ciudad aquel día lo calificaríamos para All Might y aun así ella tuvo la fuerza de sobresalir.
―Entonces, si lo puedo entender... ¿Ella no es el problema?
―No.
―No veo la razón por la cual me este contando todo esto. No creo que me haya sacado de mi operación para venir a contarme historias de una mujer cualquiera.
―Es ese el problema, Fobos. Al no ser una mujer ordinaria es por eso que te llamamos a ti y a los demás exmiembros de la comisión de seguridad pública. Esa mujer tomo bajo tutela a quien ustedes tienen que cazar...
―¿Ella es un obstáculo? ―interrumpió Fobos.
―Mas que un obstáculo, la veo un origen de problema. No solo su protección si no que los conocimientos de esa fuerza oculta han sido traspasados.
―A ver, permítame intentar entenderlo. A quien nosotros bajos a cazar es a alguien a quien Miruko le brindo su protección y sus conocimientos. ¿Es eso acaso?
―Si.
Fobos sonrió nuevamente.
[¿Y entonces cual es el maldito problema anciano?]
El ambiente se palmo rápidamente de tensión. Fobos estaba irritado y Ryuji estaba con una mirada directa hacia donde deberían estar los ojos de ese hombre.
Fobos se acercó, tanto que pudo sentir la estática de su piel. Poco a poco la figura de Fobos parecía estar gorgoteando pero no avanzaba de simples burbujas alrededor de su cuerpo.
―Usted mas que nadie sabe de lo que somos capaces. Que no lo haga olvidar el hecho de tener inservibles miembros ahora, con el hecho de que en el pasado tenia a personas capaces de todo en donde sea y cuando sea.
El rostro de Fobos se había deformado y poco a poco un ojo estaba apareciendo, un ojo de pupila roja.
El rostro de ese hombre estaba siendo dibujado en el de Fobos y el director no pudo evitar dejar escapar una gota de sudor al costado de su rostro.
―Entiendo tu molestia y te pido una disculpa si te cause un mal rato, pero aun no he terminado. Y así como te pedí perdón y entiendo tu enojo, quiero que tu recuerdes mi lugar y tu lugar mocoso.
―¿Sigue teniendo esa boca suelta como siempre director? Eso le puede causar problemas a la larga.
―No lo hizo hace treinta años, no lo hará ahora. Así que procura cerrar la boca de aquí en adelante *****...
El nombre se había dicho y Fobos se había detenido.
Su quirk había sido apagado.
Ambos rostros separados solamente por una pequeña apertura por la cual el viento traspasaba.
[La comisión de seguridad puede pecar de arrogante pero nunca de tonta. Es lo que aprendí durante todo el tiempo que estuve en este lugar. Incluso con los años y la muerte tocando su puerta, ese hombre sigue siendo quien controla los hilos. Ryuji Kinoshita sigue siento un arrogante hombre.]
Mas tarde ese día, todos habían sido reunidos.
Un total de cinco individuos, entre ellos, Fobos.
[Palabra tras palabra nos explicó la situación y a varios de nosotros que no conocíamos la historia se nos hizo presente una cosa. La persona a quien seguramente mataríamos aquel día, era una persona peligrosa.]
Los días pasaron, las horas transcurrieron y la noche finalmente había llegado.
[Se nos informo el nombre, la imagen y sus capacidades. Ninguno de nosotros lo subestimo completamente. A nadie le pareció una broma por que si es justo la persona como la describe el director, entonces es una persona peligrosa.]
Cinco sobre la calle, una sobre el techo. La luna al pleno y un cuerpo cayendo.
________________________________________________
[Midoriya Izuku es una persona testaruda.]
________________________________________________
Esto era una cosa que aquellos dentro de aquella sala no podían ignorar.
...
La sangre corría a través de la cera hacia el bordillo de la calle. El cuerpo de Kamui se encontraba tirado sobre el suelo boca arriba con una parte de su mascara hecha trizas y unas bolsas con ingredientes desparramadas sobre el suelo.
Justo a unos centímetros de donde estaba el cuerpo de Kamui se encontraba Fobos, aquel hombre sin rostro quien para Izuku ahora si tenia rostro y era el de Six.
La explicación mas razonable para esto es sencilla, su quirk.
Antiguo miembro de la comisión de seguridad pública, ahora representante de los equipos de operaciones en conjunto fuera de Japón; nombre, clasificado.
Nombre de héroe:
[Fobos.]
¿Y por qué Fobos?
En la mitología griega, Fobos era la personificación del temor y horror. Hijo de ares, dios d ela guerra y el amor.
En otras palabras, el quirk que posee este hombre se le conoce como: Fear Shifter.
Posee la capacidad de adoptar las formas de aquello que aterra a su objetivo. Toma la misma imagen del terror mas presente que tenga la persona y la usa en su contra.
Esta es la principal causa del primer impacto que tuvo en Izuku, confusión y terror. Despues, vino una sensación completamente diferente y eso era referente al cuerpo de aquel héroe, Kamui.
Poco a poco Izuku comenzo a perder los estribos. Parecía haberse olvidado o más bien, comenzo a ignorar los gritos en su interior que le decían una y otra vez que huyera de ahí. Todo esto fue remplazado por una enorme necesidad de actuar.
Dejo de pensar en cosas innecesarias, comenzo a pensar solamente en Kamui.
Y esto se vio reflejado en él.
―¿Huh? ―la mujer de casco noto algo extraño.
El cuerpo de Izuku comenzo a temblar de manera extraña y un crujido se hizo presente. Al mirar hacia el lugar de donde provenia el sonido encontró que se trataba del teléfono celular que Izuku sostenía en sus manos.
Estaba ejerciendo una fuerza enorme sobre el celular causando que este crepitara.
»¿Se habrá dando cuenta?
Pensó la mujer cuando noto un extra. Las grietas de luz estaban desapareciendo. Las que se extendían por su brazo y desde su mejilla, todas ellas estaban desvaneciéndose.
En un momento lanzo su mirada hacia el rostro del chico.
El estaba mirando hacia el frente, ¿No? Fue lo que pensó esa mujer. ¿Entonces por qué parecía que estuviera devorándola con la mirada? Desde el rabillo del ojo, la pupila de Izuku se había colocado ojo a ojo con la mujer.
―Ey Fobos... ―llamo hacia el hombre.
Pero antes de que si quiera este respondiera un sonido atronador resonó a través de la calle.
*¡KRASH!*
El teléfono se rompió en decenas de pedazos al momento de que Izuku cerrar la mano.
―¡¿―?!
―...
―¿―?
―¿Oh...?
Un segundo despues...
*¡KA-POW!*
Izuku salio disparado hacia delante mientras que decenas de partículas eléctricas estallaron alrededor suyo. En un segundo había acelerado tanto que ya estaba en medio de la calle en dirección hacia Kamui ignorando todo lo demás.
»Tengo que llevarlo a un hospital.
Pensó Izuku extendiendo su mano hacia el cuerpo ya cercano de Kamui.
―¿Piensas ignorarnos? ―pregunto la voz espectral al final de la calle.
Aquella estela de humo negro que formaba la mitad de un cuerpo había encendido su mirada hacia Izuku a lo cual este cometido un terrible error; el miro aunque sea un segundo hacia aquella dirección.
*¡ZONK!*
El sensor de peligro se activó.
[Izquierda...]
Apenas Izuku envió su mirada hacia el contrario de la calle se encontró a lo lejos con aquel hombre de aspecto sencillo al final de la calle mirándolo con una sonrisa en su rostro.
[No hay nada...]
Cuando izuku había llegado a la cera de la otra calle escucho de nuevo una voz, era la de Fobos.
―No te distraigas chico estrella ―la voz era exactamente a la de Six―. Nos hablaron muy bien de ti.
Apenas su mirada había llegado a Kamui cuando desde el punto ciego debajo del mentón de Izuku comenzo a nacer una bruma oscura la cual rápidamente formo un brazo entero y siguiendo este una mano que sostenía una pequeña espada japonesa; una Wakizashi.
―Estilo de sombra... ―el rostro pegado al suelo emergió y el filo de la pequeña katana lanzo su corte―. ¡Territorio cercenado!
*¡¡ZAAAAW!!*
El tajo de la katana había cortado el aire delante del rostro de Izuku quien en seco había logrado detenerse clavando su talón en el suelo.
―Eso estuvo cerca, que buenos reflejos tienes Midoriya Izuku ―dijo Fabos con una osada sonrisa―. Veamos si puedes esquivar tanto la sombra como la luz.
―¿―?
La luz del farol encima suya se encendió.
*¡ZONK!*
El sensor de peligro se activó he izuku giro hacia atrás mientras su rostro se iluminaba.
No hubo a donde escapar, solo le quedaba cubrirse.
*¡KAPOOOOOW!*
Un marro enorme casi cómico como el de las animaciones graciosas estallo contra izuku directo en su pecho enviándolo hacia la tienda destruyendo en su paso las ventanas y varios estantes llenos de insumos hasta terminar en un par de refrigeradores causando un gran estruendo en la calle.
―Me hiciste pensar por un segundo que mi luz seria suficiente para intoxicarte pero me equivoque ―aquella mujer de casco cristalino y traje oscuro cayo por delante de donde estaba Izuku hace un momento mientras que el farol parpadeaba tragándose aquel marro de luz blanca―. Si no caíste con ese veneno entonces supongo que la fuerza era la única manera de hacerte caer.
―Bien hecho Eva, ese golpe fue contundente ―halago con una sonrisa Fabos.
―¡Ja!*
Con una sonrisa arrogante la mujer se dejo caer hacia un lado mientras un pilar de luz emergía del suelo para sostenerla.
Hikari Misayama, conocida por su nombre de heroína como: Eva.
Su quirk es simple pero poderoso.
«Llum»
Toda luz producida a su alrededor puede manipularla a placer y moverse a través de ella. Mientras mas luz se concentre, más fuerte es ella.
―A pesar de que nosotros somos los retadores no parecía muy interesado en pelear, jefe ―dijo la espectral voz que emergía detrás de Eva―. Es la primera vez que alguien esquiva uno de mis cortes sin recibir al menos un rasguño en mucho tiempo.
Aquel espectro de sombras finalmente se había formado siendo un hombre de casi dos metros de altura y un gran manto que cubría su rostro con una gran capucha. Portaba una máscara casi blanca con dos fisuras rojas en sus ojos.
Su nombre es Nacht Korsen, mejor conocido como su nombre de héroe; Schwarzer Tod.
Aunque su quirk puede ser algo parecido al de Eva, es completamente diferente, incluso se diría mas complicado. Aunque no se sabe a ciencia cierta el cómo, el poder de Schwarzer Tod provoca que sus células se descompongas y se vuelvan a regenerar simultáneamente a una velocidad impresionante aun despues de que su cuerpo sea destruido puede recuperar su forma física en un momento adecuado moviéndose en una especie de niebla negra.
De vuelta, en un instante la imagen de aquel hombre había vuelto a la normalidad. Era su cara sin rostro con tan solo una sonrisa hueca.
―Las cosas van según el plan ―dijo Fobos mirando el resto de la calle―. La comisión sigue siendo igual de efectiva al ocultar cosas a plena vista.
―Nos han quitado un peso de encima ―comento Nacht.
―¿Qué haremos con el cuerpo? ―pregunto Eva.
―Ya deberías de saberlo. Mientras más rápido acabemos aquí, los de limpieza podrán actuar. Por ahora centrémonos en lo que sigue ―lanzando una mirada hacia el final de la calle había observado como poco a poco se acercaba el ultimo hombre―. Ya puedes deshacer el muñeco, Kano.
A unos 2 metros el hombre se había detenido y levantando su mirada, un par de mechones de su larga cabellera oscura oscilaron frente a él.
Con una sonrisa en un segundo el hombre detrás del mostrador dentro de la tienda se convirtió en un líquido rojo deshaciéndose por completo.
La tienda había quedado sola mientras que las luces del techo parpadeaban constantemente.
―Tenemos máximo diez minutos hasta que el ruido comience a llamar la atención. A nadie le gustaría un enfrentamiento con el número uno, ¿Verdad? Entonces, Eva... ¿Por qué no te encargas?
―Sera un placer, jefe.
Eva desapareció en una unión de luces resplandecientes como si la misma luz que nacía del foco del faro estuviera absorbiéndola.
―Por lo mientras, esperemos.
Tanto Nacht como Fobos miraron hacia el interior de la tienda mientras que todas las luces del lugar comenzaron a alocarse.
Kano, el hombre de pocas palabras tomo asiento en una banca frente a la puerta de entrada del establecimiento mientras que el cuerpo de Kamui aún seguía en el suelo sangrando.
La última integrante, Lady Nagant se encontraba en el techo de aquel edificio en construcción con su vista sobre su mirilla... esperando.
...
El golpe le había causado un gran dolor de cabeza.
Estaba sobre el suelo del cuarto frio mientras que cientos de botellas de agua y diferentes líquidos se derramaban alrededor suyo.
Encima suya se encontraba una lampara casi hecha trizas que desprendía pequeñas partículas de electricidad que funcionaban como una lluvia de luz dentro de aquel cuarto oscuro.
De un momento a otro Izuku reacciono he irguió su espalda contrayendo su pierna contra su pecho y usándola de apoyo para su antebrazo. Parte del saco de su uniforme estaba hecho trizas y su cabello oscilaba frente a su rostro empapado.
[¿Cuál es el hospital mas cercano?]
Izuku casi enseguida se puso de pie.
[Quizas si corro lo suficientemente rápido puedo llegar a la avenida 112, no... sería más rápido que fuera al consultorio del sur, justo en la entrada de la zona obrera. Tal vez... si de alguna forma puedo atravesar la zona de construcción del este en el centro comercial podría llegar al hospital central.]
Izuku empujo el refrigerador hacia un lado terminando el trabajo que su choque no hizo.
El refrigerador cayo he izuku salio a la tienda en si mirando hacia el mostrador.
Enseguida busco con la mirada al chico que debería estar atendiendo.
[¿Habrá escapado ya? Espero que lo haya hecho.]
Camino encima de un cumulo de insumos y trozos de estante desechos bajando hasta el piso de azulejo y mirando hacia delante.
Toda la tienda estaba en un constante parpadeo simultaneo.
[Tengo que encontrar la mejor ruta para llevar a Kamui al hospital... Tengo que hacerlo rápido...]
Apenas dio un paso, todas las luces pasaron a apagarse... ¡Ocurrió un apagón!
Izuku se detuvo en seco.
El miro hacia delante y pudo ver tres figuras fuera de la tienda, expectantes. Su ceño se frunció y todo a su alrededor parecía carecer de sonido.
Tan solo escuchaba el chirrido eléctrico detrás suya iluminando por momentos la tienda.
Por unos cuantos segundos la postura de Izuku comenzo a caer hacia delante. Lanzo sus brazos a cada costado y formo una postura defensiva.
―¡Laughing Boy!
Los ojos de Izuku se abrieron en grande.
La voz femenina provenia de todos y de ningún lado.
―Todos hablan de ti, todos se encuentran mirándote desde cada extremo de su moral. ¿Por qué? Sencillo, por que tienes un quirk maldito.
Las luces de la tienda comenzaron a parpadear. Empezando desde los refrigeradores, luego continuando sobre las lámparas del techo, despues las pantallas del mostrador y finalmente las de los estantes.
*¡ZONK!*
La lampara encima de Izuku se encendió por lo que enseguida el miro hacia arriba y salto hacia un lado esperando que algo viniese del techo pero en realidad vino del suelo. Un cumulo de diez lanzas color blanco absoluto que brillaban tan intensamente.
[¿Del suelo?]
La lampara siguiente se enciendo atrapando a Izuku en su luz.
Sin si quiera tocar el azulejos con sus pies dos pares de cadenas se formaron tomando tobillos y muñecas de Izuku. Dichas cadenas estaban clavadas a la nada pero aun así estaban creando una fuerte tensión entre las extremidades de Izuku que no tardaron en ser tiradas por dichas cadenas.
[¿Me tiene...?]
*¡CLANCK!*
Tanto los brazos como sus piernas se hincharon unos milímetros al momento de forcejear con las cadenas.
―Es inútil, prácticamente son cadenas de alta resistencia. Necesitarías la fuerza de un mastodonte como para poder romperlas.
Delante de Izuku aquel cumulo de lanzas se deshizo comenzando a llover hacia arriba formando de las partículas lumínicas una figura femenina.
Delante de Izuku, flotando treinta centímetros encima del suelo, Eva reflejaba el rostro del chico en su casco.
―¿Hmm? No pareces alterado a pesar de que tu cabeza esta en nuestras manos. ¿Entiendes tu situación verdad?
Izuku miraba fijamente a la mujer hasta que ella dijo estas palabras. Desvió su atención de ella y comenzo a mirar a su alrededor observando como algunas lámparas del techo continuaban sin encender mientras que otras parpadeaban.
―¿Me estas ignorando?
Izuku dejo de mirar a su alrededor, ahora la miraba a ella.
Miraba sus pies, la punta de ellos que estaba por tocar el suelo.
[¿Electricidad? No. Pudo haberme dado cuando estaban las chispas eléctricas en el cuarto frio pero no lo hizo. ¿Estaba jugando conmigo? Puede ser una opción. ¿Eva es su nombre de héroe? Es parte de la comisión pero no había escuchado su nombre. Sin embargo había escuchado sobre alguien capaz de manipular la luz. Ella es esa persona.]
*¡CRKKK!*
―¿Eh?
Los brazos de Izuku se hincharon, sus músculos parecían hincharse hasta que dos segundos despues de contrajeron.
De su boca emergió vapor y poco a poco un baño de partículas eléctricas esmeraldas cayeron encima de él.
Sus ojos se iluminaron destellando de verde.
*¡CRACK!*
Las cadenas fueron rotas, enseguida un relámpago relució dentro de la tienda.
*¡¡ZOOOOM!!*
―¡GAHHHJG!
Dentro del cuarto frio había sido estampada Eva contra el muro al lado de la puerta donde ninguna luz entraba.
La velocidad de aceleración que Izuku alcanzo en ese momento seria algo imposible para él si no fuera el caso de que Miruko sea quien lo haya instruido. Pues solo le tomo un instante que hacer estallar su velocidad en un ataque frontal.
En otras palabras, velocidad explosiva.
Ahora él tenía su antebrazo contra el cuello de Eva.
―¡E-Eso fue... s-so-sorpresivo...! ―dijo Eva―. ¿P-Por qué... N-no te tranqu-quilizas...? ¡H-hablemos!
―No tengo tiempo para esto.
Izuku levanto el brazo izquierdo preparando un puñetazo que iba a ir directo hacia el estómago de la mujer.
―E-Er-Eres... bastante listo...
Cuando el puño de Izuku estaba listo, detrás de él un par de luces brillaron.
―¡¿―?!
―P-pe...p-pero la i-inteligencia no viene de la mano c-con... c-co-con la... ¡Experiencia! ¡¡¡JE!!!~
Detrás de Izuku un total de cinco esferas se habían iluminado hasta el punto quie tras un segundo estas estallaron produciendo una luz cegadora en todo el cuarto.
Fuera de aquella tienda, el hombre de ropas sencillas; Kano, se encontraba contando el tiempo.
Segundo a segundo.
...
[Tanto obstáculos como personas, todo aquello que este conectado a Midoriya Izuku en esa noche debe ser cortado. Pero mientras más fuertes sean estos lazos, quizás sea más duro cortarlos.]
Proximo capitulo: Experiencias heredadas, Luna llena.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top