INSUPERABLE IRA.
La sangre gotea al movimiento de la manecilla del reloj.
*Tic tac*
Fluye como el agua en un rio por sus pieles abdominales. Viaja a través de la piel de su espalda desgarrada, abierta en una fisura vertical llegando a mostrar la carne. Su traje se llena de oscura tierra, se vuelve lodo con su sangre.
Sus manos tiemblan sobre el pavimento donde él se sostiene con ambas palmas. Sus brazos se tambalean y con ello su cabeza se mueve oníricamente de arriba hacia abajo.
Él se encuentra aturdido. No es capaz de escuchar más allá de su propia persona. Tanto el sonido del ambiente, su vista y su sentido parecen atontados.
Llegados a este punto él es capaz de distinguir quejidos.
Parpadea un par de veces, lo hace para percatarse de que esta despierto, de que esto no es una pesadilla. Siente su costado caliente como su espalda por igual. La sangre cae una y otra vez mientras que el goteo se intensifica como los golpes de campanas.
Su cuello rechina al moverse. Su fijo cae sobre la persona debajo suya. Hay un hombre que parece estar jadeando, llorando y gritando de dolor pero izuku es incapaz de distinguir estos sonidos.
Su corazón palpita tan fuerte que puede escuchar como su propia sangre viaja por su cuerpo con la única intención de salir de este.
El mira hacia abajo y observa una extremidad faltante en el hombre. Era esta la razón de sus gritos ahogados en el aturdimiento.
Una pierna faltante. La sangre que sale del muñón se mezcla con la de izuku en un charco que refleja una mirada estupefacta.
Una mirada que poco a poco recupera su corazón.
Las emociones y sensaciones vuelven y poco a poco izuku comienza a escuchar gritos, lamentos, sollozos. La calle entera cubierta de este matiz de sufrimiento de personas que han resultada heridas. Es gracias a esto que el gana un poco de fuerza para levantar la mirada hacia el resto de la calle delante suya.
Vislumbrando más allá de la estela de humo que viaja como un cometa en el espacio, cuerpos de hombres y mujeres... incluso niños que yacen en el suelo cubiertos de sangre y con extremidades faltantes.
Esto era un caos.
Y en ese arremolinado caos, sus pupilas se contraen, su cuerpo se estremece y en su cabeza le comienza a retumbar los gritos de todos.
―¡Gyahhh...! ¡Nopo...! ―una joven mujer que sostiene el cuerpo de su esposo, hijo a mitad de la calle―. ¡P-por favor no...!
Las pupilas de izuku se mueven de lugar.
―Gagh... ¡Gahhh...! ¡A-ayuden...me...! ―un hombre a la lejanía apenas puede mantenerse consciente. Parte de su estómago ha sido abierto.
Mientras tanto en otra parte yace en un muro justo al lado de una puerta abierta un chico de casi la misma edad que izuku con la cara estampada en este muro, sangre cayendo de su espalda y aparentemente sin signos vitales.
El hombre debajo de izuku comienza a gemir de dolor. Era tanto que no podía contener su voz que pequeños gritos salían acompañados de lágrimas mientras este apretaba con fuerza su muslo pues debajo de este, despues de la rodilla no había nada más que un muñón sangrante.
―¡H-hijo...! ¡NOOOO...! ―la respiración de izuku se cortaba en momentos pero también se aceleraba por igual.
El peso sobre sus hombros se hacía cada vez más pesado y podía sentir como la sangre se hacía más espesa en sus heridas.
Nuevamente el mira ese reflejo carmesí en el charco de sangre.
Era su rostro.
Una gota más de sangre cae y su reflejo parece desaparecer con las ondas en el líquido.
*¡HA-HA-HA!*
Una estridente risa, no, era una burla.
―¡Es igual! ¡Jajaja! ¡Es justo tal para cual un escenario como este para alguien como tu jajaja! ―Six estaba regresando de su metamorfosis. Todo su cuerpo el cual se había deformado estaba tomado una forma humana nuevamente. Tanto la ropa que lo cubría en la parte superior había desaparecido y solo era su torso lo que desnudo estaba―. ¡Que excelente héroe eres Laughing Boy!
―¡Te veias tan confiado en pelear contra mí, en defender a esas personas antes de que las hiciera brochetas! ¡¿Dime, que ocurrió?! ―Six curveo su ceja, miro con petulancia y golpeo su pecho―. ¡¿Dónde quedo tu gran responsabilidad héroe?! ¡¿Tu eres uno no?! ¡Un héroe asesino!
Su risa no paraba.
Era tan fuerte, tan burlesca que resonaba incluso más allá de lo que los tímpanos de izuku le permitían procesar. Podía incluso escuchar esa risa golpear los tambores de su corazón. Su mente retumbaba y la planicie blanca sonora se hacía más fuerte.
Tambores de presentación, no, de aproximación.
*RAN RATAPLAN*
[Es tal como All Might lo dijo...]
Su corazón latía incontrolablemente y los tambores le seguían.
*¡RAN RATAPLAN!*
Su corazón estaba afligido.
[Él sabía que podría tomar malas decisiones. Él no puede ver el futuro me dijo. Sin importar cuando lo tratemos de negar, mi quirk está hecho para lastimar pero aun así... yo estoy hecho para ayudar. Tengo más opciones, ¿No, All Might?]
"No te voy a mentir, claramente habrá muchas más opciones. Pero ninguna se compara a ti. Por que como yo lo veo, las vidas de las personas... su avances. Todas esas cosas dependen de un poder mayor. Si alguien, incluso yo dejara de ser lo que es, he hiciera todo lo contrario podría llegar a destruir la sociedad. Pero sé que eso no sucederá porque las acciones dependen de la persona. Y es por eso que debes darte cuenta de que todo depende de ti."
Los dedos que estaban tocando el pavimento convirtiéndose en una roca en medio de un mar de sangre comenzaron a contraerse. La roca del pavimento parecía agrietarse y poco a poco a través del blanco mar antes de sus pupilas se llenaron de venas en forma de grietas. Desde su cabeza hasta su rostro sus venas se inyectaron en sangre y adrenalina, tanto que todo el dolor desapareció.
Sangre salio por su boca y nariz pero esto a él no le importo.
[No soy alguien bueno, no soy alguien que debe ser admirado, tan solo odiado. Pero, aun así, aunque no sea alguien bueno... yo tengo una responsabilidad. Un deber que sin importar que debo de cumplir.]
La sangre bajo desde sus ojos en lágrimas y las grietas, la grieta en su rostro se ilumino en una feroz llama verdosa.
"En esta palma... Todo dependerá de lo que hagas con esta palma. En algún momento..."
[En algún momento...]
"Encontraras algo que no podrás evitar destruir..."
[Encontrare algo que no podre evitar destruir...]
Al abrir su boca el vapor que salio subió al cielo y los relámpagos aparecieron en un fulgor de fuego verde.
[Porque hay personas en este mundo que irracionalmente toman vidas y causan dolor sin arrepentimiento... y ese tipo de violencia me enferma.]
Durante toda su vida él había tenido sus manos manchadas de sangre. Todos a su alrededor lo tachaban de asesino y sanguinario. Era un monstruo de tan solo 5 años de edad y aun así siguió avanzando con la esperanza de que algún día, en aquel oscuro bosque pudiera alcanzar la luz de una llanura verde.
El más que nadie comprendía lo que era la vida y muerte.
[Tanto que mi cabeza estalla...]
Su cuerpo entero se llenó de venas inyectadas en sangre mientras su ira se volvía una estala feroz que lo cubría.
Y en su mente tan solo una frase se formó.
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[Voy a destruirte.]
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Sus ojos se tornaron blanco y una insuperable ira había tomado el control de su corazón.
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CAPITULO 18.
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La ira desencadena el descontrol y el descontrol trae destrucción.
Lo que en su corazón alberga es una ira incontrolable la cual se forma a partir de las llamas de su corazón. Tomando la forma de relámpagos destellantes poco a poco comienza a ponerse de pie, tanto así que su espalda queda inclinada hacia delante. La sangre que aun cae de su rostro como de su costado, espalda y mano se mezcla en el rostro del hombre delante suya.
―¡G-gu-guh...!
El rostro cubierto de venas y sangre, sus ojos en blanco y con una expresión iracunda que desprende furia. Aprieta sus dientes tanto que estos rechinan. Sus manos se cierran formando puños y poco a poco toma una postura curveada.
El héroe debajo de izuku, con una pierna faltante le resta atención a su estado solamente para temer ante lo que tiene delante. Lo único que viene a su cabeza es el hecho de que esa no es la cara que debería tener un héroe ni mucho menos alguien que aspire a ello.
El viento soplo contra su rostro y su cabello se sacudió hacia atrás, tal como el de Six quien miraba la espalda del chico algo asombrado.
―Bastante resistencia para alguien que recibió un ataque directo. Digno del noveno sucesor, ¿No, señor de los demonios? ―dentro de su corazón, en la cúspide de la oscuridad se asoman dos manos las cuales aprietan con fuerza el pecho del chico, hacen sangrar su corazón y el aire comienza a faltarle―. S-sigues siendo demasiado arrogante...
Con una sonrisa arrogante Six cierra los ojos comenzando a respirar pesadamente.
―Solo un poco más, solo déjame destruir un poco más de mi nido y apartemos nuestras diferencias despues de eso. ¿No se supone que este era el trato? Permíteme deshacerme de mis errores ―como si estuviera hablando con algo dentro suya, esa sombra que se oculta en lo más profundo de su corazón contrae aquellas manos devuelta a la oscuridad.
Six comienza a respirar tranquilamente una vez que estas manos desparecieron. Y tal como estas desaparecieron, al momento de que el miro hacia la calle, había algo que también faltaba ahí, que desapareció.
―¿Eh? ―el charco de sangre yacía a los pies del hombre y la sombra que se supone que estaba ahí parada había desaparecido―. ¿Dónde...?
INTRODUCIR: SYMBOL OF FEAR
*FWOOOOSH*
El viento sopla de maneras misteriosas y tras estas brisas en recóndito viaja la pureza de las llamas eléctricas.
Su corazón se acelera, su sangre le sigue y su cerebro comienza a calentarse. El tiempo se ha detenido casi al completo, tanto que ni si quiera un aleteo de ave puede verse con claridad. Detrás de Six, al momento de darse la vuelta él puede captar como el muro del viento comienza a quebrarse, como si los nudillos de aquella persona rasgasen la superficie transparente.
Lentamente el da un paso hacia atrás, apartándose del puño que a contra toda marea comienza a incluso ir más rápido que el aleteo de un ave.
Puede llegar a percibir su entorno.
Six lo nota. Como en ese espacio en blanco donde su pupila debería estar, había algo, una especie de indicación que le decía que ahora mismo estaba siendo observado.
Cazado.
Su cuello se tuerce tanto que rechina. La sangre que sale de su cuerpo se mezcla con los llameantes relámpagos y las grietas de sangre en sus ojos parecen extenderse por fuera de estos, hasta sus corneas.
En un segundo, la cabeza de izuku ha girado conectando miradas con six.
Sonriendo confiadamente, Six comenzo una patada alta con su pierna izquierda.
El chico volteo su muñeca, dando la impresión como si fuerza a bloquear la patada.
―¿Cómo...? ―más allá del tiempo, más allá de la velocidad de procesamiento de sus células.
Overclock.
Este quirk le permitía acelerar su células a un punto en que era tan rápido que parecía que el tiempo se detenía. La única manera de ganarle era que alguien tuviera un nivel de percepción superior o simplemente fuera capaz de prever. También estaba la opción de que fuera igual que rápido. Pero eso era imposible, no había manera de que alguien que no fuera aquel hombre o All Might alcanzara tal velocidad.
Riéndose de este pequeño hecho, el observo al chico intentando romper aquel muro de tiempo que se formó entre ellos.
La pierna de izuku punzo con dolor otra vez pero a él no le importo.
La boca de izuku parecía haber llameado descubriendo sus dientes.
Y aunque estaba faroleando con su expresión, Six llego a sentir que sus respiraciones se habían vuelto más rápidas
Aullando como un lobo, el grito de Izuku hizo que sus extremidades desprendieran aún más poder, tanto que esa barrera entre ambos se acorto.
―¡Absurdo! ―exclamo Six.
Ese aullido se convirtió en un rugido.
*¡WROOOM!*
El pie de izuku alcanzo el suelo y grietas se formaron en un instante. Fragmentos del suelo del techo se desprendieron saliendo disparados hacia arriba. Izuku lo encaro, extendió su mano izquierda al frente.
Una especie de tensión en Six era tal que parecía volverse tan inmensa que se sentía como si ya estuviera contra la pared. Desde la cabeza hasta el estómago esa sensación de peligro le estaba avisando que estaba en un momento de vida o muerte.
Y aun así sonreía excitadamente.
»Este chico... despues de tanto tiempo es el primero. ¡Estoy tan vivo!
Ambos se movieron en el mismo preciso momento.
*LAP*
El aleto del ave parecía haber sonado.
*LAP*
Izuku enfilo su puo hacia delante al igual que six el cual se volvió una cometa blanca azulada.
*¡LAP!*
El tiempo volvió y los puños chocaron.
En el instante en el que colisionaron, poderosas choques de onda explotaron hacia adentro, agrietando el suelo en su camino. Las personas restantes que yacían en toda la calle sintieron la presión y algunos irresistiblemente fueron lanzados hacia atrás.
Ambos puños solo estaban encontrándose en el tamaño de sus nudillos, pero aun así estaban batallando intensamente . superando su límite, el poder comprimido se disparó en un rayo de luz, explotando en el cielo oscurecido por las nubes de humo.
Sorprendiéndolo levemente, la intensidad del noveno sucesor estaba a un nivel sorprendente. Pensaba que quizás esa expresión en su rostro estaba convirtiendo su ira en fuerza. Pero aun así no podía evitar estar algo confundido. Desde hace ya unos años que el volvió en sí, la sensación de estar en un sueño lo estaba consumiendo.
Siempre que el miraba hacia arriba y observaba el cielo azul sabía que el sueño había comenzado y que en algún momento este terminaría con su despertar. Pero incluso eso era demasiado para pensar. Ahora, en este momento, solo estaban él y el chico.
»Siento que me puedo desvanecer en cualquier momento...
Pensó.
»¿Estoy soñando o estoy despierto?
No había una manera exacta de describir la sensación que six tenía sobre sí mismo en ese momento. Era como si viajara en una nube, y poco a poco esa nube comenzara a descender al mundo terrenal. Todo el cielo azul que lo rodeaba como las aguas de un mar se convirtieron en tierras áridas donde él podía verse a sí mismo reflejado con otro rostro.
Un rostro que el realmente odiaba pero había olvidado.
»¿Koichi...?
«¿Por qué razón es que él quería destruir su pasado?» no lo sabía. Ni si quiera era capaz de recordar su pasado ahora que lo pensaba. Solamente tuvo la sensación de que lo que tenía delante suya era suficientemente odiosa para que lo dejara pasar.
Era como si hubiera nacido para destruir eso.
Entonces donde él se encontraba ahora mismo era el sitio donde debería estar.
Su sonrisa se desvaneció poco a poco más, no sin antes dejar escapar una risilla de alivio.
*Click*
Una pequeña vibración pudo sentirse desde dentro del puño. Cuando Six volvió en si lo que se encontró fue con una fuerte sombra de llameantes relámpagos la cual se desprendía del chico.
»No es bueno. Incluso esto no será suficiente para atravesarme pero porque... ¿Por qué siento peligro venir de...?
Six había visto el rostro del chico pero jamás el choque de sus puños. El observó con detenimiento como era que los nudillos de ambos se conectaban en un perfecto choque de ambos. Pero no solo eso. Las heridas, cicatrices que se abrían de los brazos de izuku se convertían en grietas las cuales parecían extenderse
»¿Qué...?
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[¿Qué gracia tiene para ti?]
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Six levanto su rostro.
Él estaba en shock.
―Las vidas de las personas, ¿Crees que puedes hacer lo que quieras con ellas?
La flameante energía que desprendían los ojos de izuku trajeron su pupila la cual parecía sacudirse como una llama dentro de una esfera.
»¿Es rápido no? es mucho más rápido que yo. Así que solo necesito sostenerlo, y esto acabara. Yo debo terminar con esto rápido he ir con esas personas.
El choque de puños ceso. Izuku se apartó y antes de que Six pasara por su lado lo tomo de la muñeca mientras este se estiro violentamente hacia el lado contrario de izuku.
―No puedo perdonar a gente como tu...
―No seas hipócrita chico ―Six volvió en si mientras sonreía―. ¡Tú eres un asesino que porta la máscara de la oveja!
El soltó una carcajada.
»Convierte la rabia... l-la rabia... en... ¡Poder!
*¡CRACK!*
No se sabía si fue por deterioro o por la fuerza que izuku puso en el apretón de la muñeca de six lo cual produjo aquel sonido de ruptura.
Six enfureció.
―¡NO JUEGUES CONMIGO! ―grito con tal fuerza que los tímpanos de izuku querían estallar. El suelo que se encontraba agrietado comenzo a desprenderse hacia abajo, justo hacia el piso final del edificio.
»¡¿Con el puño?! ¡ADELANTE, HAZLO!
Parte del rostro de Six se oscureció mientras parte de la piel se desprendieron acumulándose a un costado, capa tras capa. Eran escamas de metal reforzado.
―¡Hazlo!
Izuku soltó un rugido y tiro del brazo de Six hacia él.
Con la máxima determinación y furia.
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[¡¡¡¡¡¡SMAAAAAAAAASH!!!!!!!]
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*¡BWOOOOOOSH!*
El estruendo alcanzo tantas manzanas alejadas a ese edificio que cierta parte de Osaka sintió el cambio en la dirección del viento. Las personas que se encontraban en la cima de los edificios empresariales de Osaka pudieron ver muy a lo lejos como una extensa nube de humo se alzó a los cielos como si algo hubiera explotado.
Parte de aquel edificio se redujo a escombros mientras que en el cuarto del penúltimo piso se encontraba izuku recostado en un cumulo de escombros. Para su suerte ese edificio no estaba habitado pues era uno en venta. El golpe fue tan fuerte que despues de hacerlo la propia inercia hizo lo demás.
La presión del golpe y el viento lo arrojaron hacia atrás mientras que, al mismo tiempo parte del edificio se derrumbaba yéndose con él.
Y nuevamente para su propia suerte él fue lo último en caer pues sin contar los pequeños trozos de concreto que aun caen de los muros y el techo a los costados de izuku en forma de lluvia, nada lo lastimaría, claro, más de lo que estaba.
Pues, para su mala suerte él ya había cruzado su límite, ambos limites humanos. Ya que las personas que se acercan a su límite en resistencia les resultan doloroso moverse y si por alguna razón pudieran ignorar esto con pura fuerza de voluntad les llegarían a sangrar todos los orificios de su cuerpo en respuesta del sobre esfuerzo.
Despues viene el límite de la vida.
Si izuku hubiera movido su cuerpo un poco más, tan solo unos segundos quizás el no estaria ahí, tosiendo sangre a mares pero aun respirando.
La sangre que corría por sus ojos, nariz, oídos y boca junto a su costado y espalda habían vuelto a ser tan fluida que parecía que estaba desinflándose. Si izuku no hacía nada rápido se desangraría y moriría.
Ahora mismo, los escombros debajo de él estaban llenándose de ese líquido, el líquido de la vida que hacía funcionar a todo cuerpo.
Ya estaba a punto de cruzar el límite permitirle para la pérdida de sangre pero aun así no podía moverse. Ya no tenía la capacidad de superar el dolor y el miedo. Su cuerpo había perdido todas las fuerza que le quedaban y las fuerzas que tomo prestadas.
Estaba entumido, casi perdia la sensación de cada extremidad de su cuerpo a tal punto que pensaba que las había perdido. Y ni que decir sobre su brazo izquierdo. Este tenía una vez más, todas las cicatrices vueltas a abrir.
Uno de sus ojos se cerró como si estuviera quemado. Su poro izquierdo de la nariz estaba con una cortada, quizás producida por un escombro que habrá salido volando.
La cicatriz vertical en su rostro que cruzaba su ojo izquierdo estaba casi al filo de volverse a abrir. Esto y muchas cosas más deberían de ser primer preocupación de izuku pero ahora mismo, el solo tenia una cosa por al preocuparse y eso era la personas delante suya. Asomándose por el velo del humo y atravesando el mismo con pasos simples y ligeros.
Six se encontraba perfectamente.
»No puedo moverme... respirar, me duele respirar. Ya pasé el límite de mi resistencia. Mi vista se esta oscureciendo y no puedo escuchar nada mas que el latido de mi corazón...
―Eso fue un buen golpe chico. Juraría que si no fuera por los quirks de resistencia, mi vida había corrido peligro. Incluso si soy algo benevolente contigo, lograste romperlos. Esa fuerza es muy aterradora en manos... ―Six observo el brazo izquierdo de Izuku―. ¡¿Enserio?!
El comenzo a reir a carcajadas.
―¿Tu cuerpo no está perfectamente adaptado? No puedo creerlo... ―su risa no paraba―. Eso explicaría por que al momento de ver dentro tuyo sentí como si algo me alejara. Hmph, parece que ni tu cuerpo te soporta. Pero no importa ya, te liberaremos de ese dolor ahora mismo. Aunque debo de admitir que fue divertido. Me hiciste sentir que pisaba tierra una vez más.
Six comenzo a caminar hacia el chico.
Alrededor de las manzanas una sombras se acercaba a una velocidad impresionante.
―¿Sabes? Últimamente me he sentido adormilado, como si todo lo que estuviera delante mío fuera no más que un sueño lucido. Siento que nada de lo que hago tiene sentido pero aun así tu lograste hacerme sentir equivocado ―justo encima de Six estaba el hoyo del edificio el cual continuaba hacia delante en una cascada descubierta―. Aun cuando solamente mi misión era venir por tu poder, siento que aprendí algo nuevo. Así que cuando vuelva a entrar en la oscuridad procurare recordar tu rostro. Quizás de esta manera pueda...
*TAP.*
―Pueda... ―Six miro encima, justo donde una silueta se posó―. ¿eh?
Blanco y rojo, orejas largas y piernas morenas. Al filo del gran hoyo del techo la heroína numero Seis se encontraba de pie.
―M-mir-miru...ko-San... ―incapaz de hablar completamente, Izuku sintió un gran alivio.
El viento soplo y la cabellera blanca se movió hacia un lado. La brisa bajo y alcanzo el rostro de six sacudiendo su cabellera oscura.
Ambos encuentran la mirada del otro.
...
[La heroína número seis y el villano six. Polos opuestos de diferentes objetivos y un camino donde la fuerza de una profesional choca con el poder de un monstruo.]
Proximo Capitulo: Yin Yang.
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