Debajo de la capucha
Mi primera historia Stenny, espero que les guste ❤️
AU, los personajes son mayores de edad.
Contiene escenas +18
(...)
Stan Marsh siempre había sido alguien calmado, alguien que puede vivir su día a día sin la necesidad de causar problemas; pero cuando todo el jodido mundo se pone en tu puta contra creo que es el mejor momento para cagarte en todo.
Porque el mundo siempre se encarga de patearte dónde más te duele, ya sea en las bolas o en el corazón.
—Creo que es mejor que nos demos un tiempo, es lo mejor para ambos—Expresó la pelinegra.
¿Lo mejor para ambos? ¿Distanciarse? Él y Wendy ya habían terminado infinidad de veces pero esta parecía la "definitiva".
—Siempre he sido tu punto de apoyo, pero tú nunca has expresado la misma preocupación igual a como yo lo hago—Dijo el pelirrojo.
Kyle siendo su mejor amigo lo había abandonado cuando más lo necesitaba, solo así Stan se dió cuenta de lo egoísta que había sido como amigo, pero ya era tarde. Su estupidez fue tal que terminaron alejándose.
Y como si eso no fuera suficiente, sus padres se estaban divorciando.
—¡¿Porqué siempre me culpas de todo?!—Reclama Randy—No soy el único perdedor aquí.
—¡Eres tú quien siempre decide todo!—Exclama Sharon—¿Desde cuándo no somos un equipo?
—¡Desde que me haces sentir culpable de todo lo malo que pasa entre nosotros!
Ya llevaban así un tiempo, a Shelly no parecía afectarle mucho pero a Stan todo esto lo estaba enloqueciendo.
Así son las cosas, alejado de la chica de sus sueños, de su mejor amigo, de su familia, de todo.
Y un día, como siempre, Stan se levanta, se alista para la escuela, y camina hasta la parada de autobús, dónde sus amigos (y Kyle) lo esperaban.
—¿Todavía no han arreglado sus problemas matrimoniales?—Pregunta Cartman, viendo que Stan y Kyle siguen si hablarse.
—Cállate, culo gordo—Responde Kyle, poniéndose a la defensiva.
—Te enojas porque es cierto.
—«Se enoja porque estamos peleados»—Piensa Stan.
Kenny por su parte ignora toda la discusión. Nunca ha sido una persona que busca resolver el problema de los demás.
El autobús llega y los chicos se suben para ir a la escuela. Cartman durante todo el camino siguió con sus comentarios de insinuaciones homosexuales.
Stan trataba de ignorarlos, al igual que Kenny, mientras que Kyle discutía.
Llegaron a la escuela para después llegar a sus casilleros.
—¿Desde cuándo tú y Kyle dejaron de ser amigos?—Pregunta Kenny, por suerte ni Kyle ni Eric están para oír esta conversación.
—Solo discutimos, no quiero hablar de eso—Responde Stan mientras busca unos libros en su casillero.
—¿Y porqué no hablas con él?
—No estoy de humor, además, Kyle tiene razón, siempre se ha preocupado por mí y yo casi nunca muestro interés en su vida, quizás por eso mismo Wendy terminó conmigo...soy un egoísta.
—Parece que te han jodido estos meses.
—Si, además mis padres siguen discutiendo, incluso ya firmaron los papeles del divorcio.
—Mucho dolor en las bolas, ¿no?
—Si, exactamente—Stan cierra su casillero.
—Es genial tener a alguien con una vida más jodida que la mía.
—No sé si comer pan frío una vez al día sea menos jodido que tu novia te mandé al carajo.
—Todo es temporal, el dolor de pelotas siempre es temporal.
—Ya...si tú lo dices...
—Quizás yo te pueda ayudar.
—¿Cómo?
—Acompáñame.
—¿De acuerdo?
Kenny toma la muñeca de Stan y lo arrastra hasta la habitación del conserje dónde cierra con pestillo.
—¿Qué mierda Kenny, qué hacemos aquí?
—Creo que sé cómo ayudarte, al menos podré quitarte algo de tensión.
—No entiendo.
—¿En serio no tienes una idea?
—No, nunca sé que se esconde bajo esa capucha.
Stan toma la capucha de Kenny y lo baja, revelando su cabello revuelto rubio.
—¿Quieres que te enseñe que es lo que estoy pensando?—Pregunta Kenny con una sonrisa burlona.
—Adelante—Stan le devuelve el gesto—Quiero saber qué loca idea tienes en tu cabeza.
Claro que Stan sabe a qué se refiere, Kenny Mccormick es conocido por eso, por ser un pervertido de alto cuidado, todas sus ex parejas son la prueba viviente de ello. Pero todos dicen lo mismo: sabe cómo complacer, sea quién sea.
Según el rumor, acostarse con Kenny Mccormick es una experiencia única que todos deberían probar.
Además, Stan se encuentra en un lago de estrés, tristeza y tensión. Necesita distraer su mente y Kenny está más que dispuesto a llevarlo a cabo.
—Solo será esta vez...—Dice Stan—No creas que me acostumbraré a esto.
—Eso dicen todos—Responde el rubio con una sonrisa seductora.
Kenny comienza a desabrocharse el suéter naranja, tirandolo a su suerte, hace lo mismo con el resto de su ropa. Stan queda embobado, sabía que Kenny era atractivo pero nunca creyó que tanto.
—¿Quieres que te desvista?—Pregunta el rubio.
—¿Qué? N-No, yo...«Parezco pendejo tartamudeando de esta forma»—Piensa Stan sintiendo el calor cubrir su rostro.
Kenny comprende los nervios de Stan, así que decide desabrochar su suéter y a quitarle la camiseta, como diciendo "tranquilo, yo me encargo de todo".
—Lindo cuerpo Stanley—Dice Kenny mientras su mano recorre el pecho y el abdomen del pelinegro—Se nota que eres el capitán del equipo de fútbol.
—Kenny...—Stan iba a decir algo más pero la mano de Mccormick llega a su entrepierna—Aah...
—Eres bastante delicado, ¿qué acaso tú y Wendy no llegaron a esa fase?
—N-No...—La mano de Kenny se desliza por debajo de la ropa interior de Stan, tocando su miembro—Kenny...
—Noto esa tensión acumulada, no te preocupes, me aseguraré de que lo disfrutes.
—¿Le dices eso...a t-todos tus afortunados?
Y sorprendemente, Kenny acaricia con su otra mano una de las mejillas sonrojadas de Marsh. Es tacto cálido y cariñoso.
—No, solo a tí.
Stan no sabe cómo responder a eso, ¿porqué Kenny se muestra tan romántico si solo se están acostando por mera calentura?
Kenny baja los pantalones y la ropa interior a Stan, este no puede ni abrir los ojos.
—Interesante, Wendy se perdió un manjar—Comenta el rubio.
—Solo cállate por favor...
Kenny se arrodilla, toma el miembro de Stan y lo comienza a masturbar con delicadeza. Una lentitud tortuosa.
—K-Kenny...¡Aah!
—Si no guardas silencio nos pillaran.
—Debiste p-pensarlo antes de encerrarme aquí...
—Siendo sincero, no creí que aceptarías a esto, pero me alegro que sea así.
Kenny mete el miembro entero en su boca, lamiendo gustosamente.
Stan no podía controlarse ante tanto, en ese momento todo desapareció; Wendy, Kyle, sus padres, su vida, el mundo...no existe nada más allá de esas cuatro paredes.
Kenny es un experto en los orales, recorre cada centímetro, cubriendo todo, aumentando la velocidad progresivamente. Stan logra abrir sus ojos para encontrarse con el panorama más erótico de toda su vida.
—Kenny, joder...
Entonces el rubio comienza a meter y a sacar, la pequeña habitación es dominada por los sonidos del oral y los suspiros de Stan, quién trata de no lastimar a Kenny.
Siguen así por un rato más, hasta el punto en que Kenny decide no sacar más, lamiendo todo, succionando, causando cadenas de placer en todo el cuerpo de Marsh, y al final no resistió más.
Stan cierra con fuerza sus ojos y entierra sus dedos en los cabellos de Kenny, sus piernas tiemblan, corriendose en la boca del Mccormick. Este traga sin ningún problema.
—Me alegro que lo hayas disfrutado porque sigue la mejor parte—Comenta Kenny con una sonrisa.
—¿Habrá más?—Pregunta Stan mientras trata de recuperar el aliento.
—¿De verdad crees que esto es lo mejor que puedo ofrecer?—Kenny le retira el gorro azul a Stan y le acaricia otra vez la mejilla—Claro que habrá más.
Kenny besa con pasión a Stan, quién esté corresponde al cerrar sus ojos y tratando de seguir el ritmo del contacto. Esto no es lujuria, este cariño no es normal en Kenny Mccormick. Tanta dedicación, tanta calidez...
Tras terminar de desnudarse, Kenny se toma su tiempo para preparar a Stan, usando sus dedos y saliva. Esta sensación es nueva para Stan, nunca creyó que algo entraría ahí, pero confía en Kenny. Tras un buen rato, ambos saben que el momento ha llegado.
Stan no se había percatado de lo atrapado que está entre Kenny y la pared hasta que el rubio lo apresa, toma una de sus piernas para separarlas. Kenny entra poco a poco, causando en Stan un dolor nuevo.
—¡Joder!—Exclama antes de cubrir su boca con una mano. Mal sitio para tu primera vez.
Kenny retira la mano de Stan para besarlo con fuerza, su lengua recorre aquella cavidad.
Entonces las embestidas dieron inicio, al principio suaves pero después con uno poco más de fuerza. Stan se mantenía callado ya sea por los besos de Kenny o por su mano.
Pero todo eso fue imposible cuando Kenny logra entrar por completo, dándole a Stan una oleada de un placer nunca antes experimentado.
—¡Kenny!—Enloquecido de tanto, Stan abraza al rubio—Si...joder si...
Disfrutan del momento con besos, caricias, mordidas, embestidas llenas de fiereza, arañazos en la espalda. Todo eso en la oscuridad de una pequeña habitación.
Durante un buen rato quedan así, salvajes entre el placer y el afecto. Perdidos en un mar de emociones que los arrastra lejos y los lleva a dónde ningún problema externo pueda alcanzarles.
Cuando saben que no falta mucho para el orgasmo se abrazan fuertemente, anhelando el climax. Se besan, Stan se corre primero en el abdomen de Kenny, y este se corre tras un par de embestidas más.
Cansados, sucios y complacidos, ambos se sientan en el suelo tratando de calmar sus respiraciones.
—Espero que te sientas mejor—Dice Kenny mientras toma su ropa para vestirse, por fortuna hay un paquete de papel de baño cerca para limpiar el desastre.
Stan también se viste mientras piensa en todo lo sucedido. Sigue creyendo que es sólo "un afortunado más" y otro nombre en la lista de Kenny Mccormick. Pero hay algo más, un sentimiento un tanto más complicado que el placer.
—Kenny, he estado pensando y quiero saber algo.
—¿El qué?
—¿Querías que hiciéramos esto porque me querías en tu colección o...?
Kenny vuelve a acariciar la mejilla de Stan.
—Mi fama de puta es natural, me gusta lo que hago, pienso que ambas partes salen beneficiadas pero contigo...
—¿Conmigo...?
—Te aprecio de una manera distinta al resto, y si me dieras una oportunidad te demostraría que quizás pueda hacerte feliz.
Stan sonríe cariñosamente. Justo ahora que su vida no está teniendo fortuna, que Kenny Mccormick le diga esto es el paraíso.
—Supongo que mereces una oportunidad ahora que me has hecho gemir cómo una gata en celo.
Se besaron, sellando un nuevo comienzo, uno en donde dentro del caos y descontrol, hay una pizca de amor.
Una en donde la pasión prevalece.
Fin.
La verdad estoy orgullosa del resultado, espero seguir así.
Gracias por leer! Vota y comenta si quieres más historias así <3
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top