- ¿Tienes planes para hoy? – Dazai se paralizo por completo antes las palabras de amor, llevaba meses conviviendo con él y sabia cuando amor iba a atacarlo, ya era suficientemente malo que no comenzara con insultos, no, estaba empezando con sarcasmo

- ¿Solo estar contigo? – contesto tratando de averiguar las intenciones de esa tranquila sonrisa que le estaba regalando Chuuya desde el sillón de la sala

- No, quiero decir, planes de evitarme – ah, ahí estaba, lo directo que era siempre

Dazai parpadeo rápidamente

- Yo no te estoy evitando ¿Por qué haría eso, chibi? – señalo mirando como un puchero aparecía en el rostro de su ahora novio, esposo, alma gemela, como que sea que se le llame a la persona que perteneces por la eternidad – Eres tú el que empezó esto – Si iban a hacer berrinche, Dazai iba a ganar

- ¿Ah? ¡Yo no te estoy ignorado, bastardo! – oh, pero si estaba enojado - ¡Maldición, debí haber salido hoy! ¡Y debiste haber venido conmigo como un buen novio!

Dazai se rio divertido ante eso

- No, Chuuya, yo dije que haría lo que sea que tu quisieras hoy, y tu claramente dijiste que querías quedarte en casa y yo te dije "¿Seguro, Chuuya? Después no digas que soy el único que holgazanea, maldito enano malcriado y berrinchudo y tú me dijiste...

- Que si querías un puñetazo en tu jodida boca – murmuro amor acordándose

- Y llegamos al acuerdo de que no me golpearías en el rostro, porque te gusta

- Lo amo – ahora parecía más enojado

El castaño sonrió con suavidad ante eso

- Es bueno que tu alma gemela tenga tan buena memoria, especialmente cuando el amor no recuerda cuando no le conviene – se burlo

- Ah, cállate Dazai, no creas que olvide porque comenzamos a discutir – se defendió

- ¿Por qué?

Chuuya abrió la boca, pero la cerro rápidamente

- No, no voy a caer en tu juego – se quejó

- ... Enserio Chuuya... ¿Por qué estamos discutiendo? – aunque Dazai no estaba enojado, en realidad estaba sonriendo al ver que Chuuya si lo había olvidado

Amor hizo una mueca de molestia, antes de rendirse... por ahora

- Bien, me equivoque, no me estas evitando como tú crees, pero estas enojado conmigo – el ceño fruncido se mantuvo en su rostro, cosa que hizo reír a Dazai, ahora comprendía, ayer luego de visitar a vida, quizás había hecho un pequeño... pequeño berrinche, pequeñito con Chuuya

- Besos... - fue todo lo que dijo

Los ojos de amor se agrandaron comprendiendo al segundo

- ¡Eres un idiota! ¡Solo lo bese como agradecimiento! – espeto Chuuya, cuando se encontró con Atsushi, de la felicidad, le lleno el rostro de besos, estaba tan feliz de que poder tener a Dazai a su lado que no lo pensó demasiado, aunque fue detenido cuando trató de besar a Ranpo, primero por su Alma gemela y segundo por destino, que amenazo con que conocía a alguien que podía encerrarlo en sus libros - ¡Ni siquiera fue un beso en los labios!

- Bien, esta perdonado entonces, no toquemos más el tema – comento muerte, no estaba enojado... y si seguían por este camino iba a perder definitivamente la discusión no discusión que tenían, pero fue demasiado tarde, Chuuya lo había notado y estaba regresando con el sarcasmo

- De todos modos, no te debería importar – Si, Dazai, estaba jodido, debió dejar ir el tema antes - ¿No me preguntaras por qué?

- Me rindo, Chuuya – el castaño hizo una mueca de molestia, pero amor no dejaba de sonreír

- Ven – comento haciendo un gesto para que acercara cosa que muerte hizo sin pensarlo mucho, dejando que Chuuya encerrara su rostro entre sus manos, simplemente manteniéndole la mirada – No debería molestarte porque a ti...

- Chuuya...- el pelirrojo no se detuvo, ya habían llegado al tema y ahora no le iba a dejar ir

- Porque a ti... no te importan los besos, cariño, como no me has besado en los labios desde que empezamos a salir, ni siquiera un toque más íntimo me he ganado – amor tan directo como siempre

- Yo... no...- Chuuya se rio divertido al ver su expresión choqueada

- ¿No te atraigo lo suficiente, cariño? – se burló cerrándole un ojo, dejando ir su rostro, pero con una triste expresión

Dazai negó rápidamente con la cabeza, sentándose en el suelo, para mirar desde abajo al pelirrojo, no le gustaba ver esa expresión en el rostro de la persona que amaba

- Joder, claro que me atraes, Chuuya, eso no lo dudes – sus ojos eran feroces mientras lo decía - ¿Cómo no podría atraerme alguien tan perfecto como tú? Incluso con tu personalidad del demonio

- Pero... aun así, tiemblas con solo un toque de mi mano – Chuuya para probar esto agarro la mano del castaño entrelazándola con firmeza, observando como poco a poco su mano comenzaba a temblar

Eso fue todo, Dazai dejo caer su cabeza en el regazo de amor como si se hubiera rendido por completo

– Supongo que te diste cuenta... esperaba que pasara un poco más de tiempo antes de que preguntaras – señalo con una suave sonrisa pero que no indicaba alegría

Amor beso su mano con cariño

- Me di cuenta desde hace un tiempo – señalo apoyando su rostro en sus manos entrelazadas - ... No me dejas besarte... no me dejas tocarte por mucho tiempo y tú tampoco me tocas...solo leves toques... solo acariciar mi cabello... besos en mas mejillas, y maldición, soy egoísta, tan egoísta que ya no puedo conformarme solo con eso... así que, al menos espero una explicación

Dazai levanto la mirada para sostener la hermosa mirada azulada de Chuuya

- Quizás no me creas, pero no lo hago a propósito – pensó en como decirlo, pero primero se levantó del suelo y se dejó caer al lado de amor en el sillón - Hago daño a todo lo que tiene vida, a todo lo que es hermoso... no puedes culparme por temer destruir mi última esperanza de tener un corazón ¿Comprendes? La muerte destruye todo lo que vale la pena y el amor... el amor lo es todo...tú lo eres todo...

- Dazai...- Chuuya trago con fuerza ante la mirada tan anhelante y llena de honestidad que estaba recibiendo – Estoy bien, no desapareceré solo porque me beses, solo porque quieras tocarme...

El castaño parpadeo antes de mirar aterrado sus manos entrelazadas

- Yo creo que dolerá... un beso mío – comento dándose el valor de devolver el apretón en sus manos

Chuuya se rio ante eso

- ¿Qué? ¿Es cierto que tocas almas? ¿Un beso al alma, Dazai? – estaba bromeando, pero muerte asintió con seriedad

- Y duele como el demonio – afirmo

Amor pareció pensar en ello, ahora tenia mas curiosidad por besarlo...

- Un poco de dolor no está mal – señalo amor sonriendo lentamente – Es más, haz que duela, te juro que lo disfrutare

Muerte lo miro fijamente antes de reírse divertido

- Te quiero – contesto con suavidad, pero pareció dudar sobre lo siguiente que iba a decir – Pero...hay algo más - Chuuya lo miro con curiosidad

- ¿Qué? – Amor se dejó caer en el suelo para estar más cerca de él terminando por sentarse en su regazo sin pudor, sin importarle el ligero temblor de temor de parte de muerte, simplemente sonriéndole sin rencor por nada

- Te vas a decepcionar – espeto este con sinceridad

- Nop, no lo creo, solo dilo – como si algo que dijera lo fuera a decepcionar

- Chuuya, yo...- suspiro agotado - ¿Comprendes que eres la primera persona a la que puedo tocar sin matar o causar daño? Ni siquiera tenía interés en esas cosas

Inmediatamente el pelirrojo capto la idea, sonrojándose levemente

- Espera... tu nunca...- su rostro se sonrojo aún más – Oh

- Si, oh, no es que no sepa del tema, maldición, tuve tiempo de sobra para investigar, hay mucho que ver y leer, pero nunca le vi el interés ¿Comprendes? Creo que, si no fuera por ti, me consideraría algo parecido a una piedra...- señalo el castaño atrayendo sus manos entrelazadas para posar un leve beso – pero ¿Cómo podría no sentir que te voy a decepcionar, amor? Seguro has tenido mejores parejas que yo

- Oye, primero, yo no soy un libertino – se defendió este, si había salido con gente, maldición, era una entidad con millones de años, así que si era una sorpresa lo que Dazai le estaba diciendo – Y segundo, tú eres la persona que amo, la única que voy amar tanto como lo hago, y la única que nació solo para mí, nadie en toda la eternidad será mejor que tú, idiota, y tercero... yo tampoco he estado con una persona que amo

Dazai le sonrió con suavidad

- ¿Serás paciente conmigo? - le comento sin perder su sonrisa

- Si es tu modo de decirme que necesitas más tiempo, entonces lo tienes – comento risueño Chuuya – Pero si quieres intentarlo, estoy dispuesto a ser tu sujeto de práctica, te guiare lo mejor que pueda

Dazai se rio divertido ante eso

- Puedes entenderlo así, por otro lado, soy yo quien te tendrá piedad por ser la primera persona a la que puedo tocar, estoy desesperado, aunque no lo parezca - comento frotando su nariz con la de Chuuya – Realmente realmente realmente quiero besarte

Amor observo la determinación en sus ojos, perdiéndose en ellos por lo que pareció una eternidad, envolviendo con suavidad sus brazos alrededor de Dazai

- Entonces, esta vez no me esquives – susurro acercándose poco a poco a sus labios, hasta que solo un suspiro los separo – Si... así está bien - señalo antes de cerrar sus ojos juntar sus labios, fue extraño, incluso si fue un toque inocente sin profundizar, dolió un poco, cosa que hizo a amor quejarse por el cosquilleo de electricidad en sus labios

- Chuuya – Dazai se separo asustado ante ese leve quejido, pero los ojos de Chuuya estabas resplandecientes no dejando que muerte se separara demasiado

- Si dolió – exclamo tocando sus labios con la punta de sus dedos, no diría que es un dolor desagradable

- Te lo dije, no deberíamos...

- Joder...eso fue genial – Amor se aferró con más fuerza a un muy sorprendido Dazai - Supongo... que así se siente besar a tu alma gemela – una bonita sonrisa se apodero de sus facciones - ¿Crees que se sentirá mejor si lamo tus labios?

El castaño lo miro por un largo segundo ante de romper en risas

- Tu... eres perfecto, Chuuya – exclamo muerte repartiendo besos por su rostro con mas confianza

- Lo sé, pero tú no te quedas atrás – Amor cerro sus ojos recibiendo feliz los mimos de su pareja. Quizás Dazai no lo comprendiera, pero los toques que le regalaba era su todo... esperar por él lo había hecho un egoísta

Poco a poco los besos en su rostro se detuvieron cuando por un segundo uno de ellos cayo en la comisura de sus labios, Chuuya no abrió sus ojos ante eso, dejando que Dazai tomara la iniciativa, que tomara su tiempo para besarlo como quisiera, cosa que hizo luego de un pequeño segundo de duda. El pelirrojo debía admitir que nunca lo habían besado así, como si fuera un tesoro, con una dulzura que lo hacía estremecerse, con una lentitud que lo dejaba anhelado más, cosa que solo empeoro cuando Dazai tomo valor de profundizar sus toques.

Chuuya estaba dispuesto, no importaba que su respiración estuviera fallando, solo quería saborear mas la boca de la persona que amaba, de sentir esa electricidad que, aunque en un principio dolió, ahora no hacia mas que aferrarse con desesperación a Dazai.

- Me gustan tus besos – susurro contra sus labios cuando le dieron un minuto para respirar

- ¿Ya no duele? – Muerte acaricio los labios del pelirrojo con dulzura, estos estaban temblorosos luego de la sesión de besos, pero no parecía tener dolor

- No, pero... incluso si fuera así... me gusta que el dolor lo causes tu – le sonrió seductor antes lamer los labios de Dazai con lentitud logrando que este se estremeciera – Entonces ¿Puedes continuar, Dazai?

Eso fue lo ultimo que necesito para romper ese control al que el castaño se había estado aferrando con tanta fuerza. No importo que estuvieran en medio de la sala, bueno, a Chuuya no le importo, la alfombra cumplía su función y Dazai no parecía están en sus cinco sentidos, pero aun así su cuerpo estaba temblando mientras quitaba hasta la ultima prenda del cuerpo de amor

- Esta bien... sigo aquí... puedes tocarme, no me voy a marchitar – Chuuya atrapo una de sus manos besándola con dulzura, tratando de calmar ese temor que se aferraba a Dazai y lo hacía dudar – También esta bien si quieres detenerte, no sabes lo feliz que estoy con tus besos

El castaño negó con la cabeza entre temblores, si se detenía ahora nunca tendría el valor de tocarlo de nuevo

- Yo... Chuuya...- sus manos no dejaban de temblar, su alma gemela era hermosa, no quería nunca dejarlo de mirar, no quería perder a este hermoso ser

- No me voy a marchitar – el pelirrojo le sonrió con confianza - ¿No lo recuerdas?

Dazai le regreso la sonrisa, apoyando su frente a la de él

- ¿Qué tienes mala memoria y yo no? – se burlo

- Eso no, idiota – se quejó amor – Además, eres tú el que tiene mala memoria

- ¿Por qué?

- "Esta bien si es conmigo" – susurro contra sus labios al mismo tiempo que sus ojos destellaban con ese brillo rojo que iluminaba a Dazai, repitiendo de ese modo lo que le dijo la primera vez que lo abrazo, cosa que muerte inmediatamente recordó, el primer abrazo que recibió en su vida de una persona que le importaba, un abrazo de la persona que sufrió por tener solo un toque de su parte...

- Esta bien... si es contigo – repitió, tanto para si mismo como para Chuuya

- Confía en mi – contesto este cerrándole un ojo

Dazai asintió, confiaría en él incluso si supiera que solo un terrible final le esperaría, todo sea por Chuuya. Así que, incluso con su cuerpo temblando, comenzó a repartir besos por todo el cuerpo de la persona que amaba, siempre atento a cualquier gesto de Chuuya. Cuando detenerse, cuando seguir, cuando ir mas rápido, todo fue quedando poco a poco en su memoria, aprendiendo de la práctica que amor le había permitido tener en su cuerpo y de los consejos que este le daba con paciencia, aunque, aun con toda la preparación que le dio, se detuvo ante el leve dolor que se demostró en el rostro de Chuuya cuando sus cuerpos se unieron

- No duele, así que no te detengas – exclamo Amor, aunque sus manos se aferraban a su espalda, rasguñando un camino en ella – Bueno, un poco, han pasado siglos para mi – admitió luego de un rato – pero esta bien, no te detengas ahora, te diré si es demasiado

Solo con esas palabras Dazai se permitió dar rienda suelta a una necesidad que no sabía que existía en él, demasiado perdido en cada expresión que Chuuya le estaba entregando como para concentrarse en cualquier otra cosa, quería ver más... quería hacerlo sentir más... quería amarlo más...quería seguir viendo esa mirada llena de amor y nublada por el placer que lo estremecía, así que, no dejo de estar atento a él, incluso cuando ambos se rindieron ante el placer del acto que, aunque quisieron que fuera eterno, tuvo que acabar

- Esa mirada...- jadeo el pelirrojo levantando una de sus manos para acariciar la mejilla de Dazai tembloroso por el placer que aún lo estaba recorriendo - ... Es la mirada de alguien que me ama...

El castaño beso la mano del pelirrojo, antes de entrelazar sus manos

- Tus ojos se ven igual...- exclamo Dazai con una suave sonrisa, besando levemente sus labios, casi como el aleteo de una mariposa pero que causo estragos en su sistema

- Me alegro...- en su rostro se formo una hermosa sonrisa llena de alegría –...Gracias, Dazai, por aceptarme en tu corazón...

El castaño se sorprendió por las palabras que le estaban regalando

- No, Chuuya, gracias a ti por quedarte en mi corazón – exclamo llevando sus manos entrelazadas a su pecho para que sintiera los latidos desesperados que tenía – Gracias por amarme... gracias por permitirme amarte... solo, gracias...

Ambos se sonrieron con cariño, esto estaba bien... ambos se perdieron en aquel infinito que ambos creaban, aquel que les decía que ninguno de los dos volvería a sentirse solo nunca mas 

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xtra 1, gracias por leer ♥️♥️♥️
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