ッ 03
«No sé cocinar, pero sé hacer canciones.»
Chris entró al departamento que compartía con su prometido; "prometido" ya solo pensar que eran prometidos sentía una hermosa calidez, no podía imaginar cómo sería cuando lo llamara "esposo".
Cerró la puerta con llave al ya estar dentro del departamento. Solo se escuchaba la lluvia, más nada.
Frunció el ceño confundido, si no se equivocaba su prometido debería ya estar fuera del trabajo. Dejó las llaves en su colgador correspondiente, caminó por el pasillo hasta llegar al salón, donde encontró a Jeongin sentado en el suelo escribiendo en un cuaderno junto con una taza de café a su lado.
—¿Estás componiendo? —Jeongin se sobresaltó en su lugar. Levantó la mirada, haciendo contacto visual con Chris.
—Joder, me asustaste —suspiró, pasando sus manos por su pelo cansado.
Chris sonrió apenado.
—Lo siento.
Se agachó un poco dándole un beso en los labios a su pareja en forma de saludo. Cuando se separaron, Chris se sacó su chaqueta y la dejó colgada en la primera silla que vio.
—¿Estás escribiendo una nueva canción?
Jeongin asintió volviendo a poner su atención en sus escritos.
—Sí, es una de las nuevas canciones para el álbum de Seungmin, la debo entregar el jueves —lo volvió a mirar, ocultando su cara con sus manos—. Ay no, hoy me tocaba a mi cocinar... lo siento, me olvidé. Hay ramen en la cocina, si quieres puedo hacer eso, porque otra cosa no se me ocurre —dijo apenado haciendo un leve mohín. Chris sonrió enternecido.
—Tranquilo, podemos pedir comida —sacó su celular, empezando a buscar una página de comida rápida para pedir—. ¿Qué prefieres, nuggets o brochetas de cordero?
—Llevamos cuatro años siendo pareja, creí que a estas alturas ya sabrías mis preferencias, amor —bromeó. La respuesta era obvia.
—Brochetas de cordero será —se sentó al lado de Jeongin mientras seguía ordenando.
El mayor tomó la canción que escribió y empezó a revisarla, preocupado por si le faltaba algo a la letra. Chris se dio cuenta de lo que hacía su pareja, terminó de pedir y anotar la dirección para poner total atención a Jeongin.
Jeongin soltó un bufido y le pasó el cuaderno a Chris.
—¿Puedes decirme tu opinión? —el mayor asintió tomando el cuaderno.
Empezó a leer la letra, amándola de inmediato. Jeongin estaba pendiente de cada reacción de Chris, el cual solo sonreía al leer cada párrafo. Levantó la mirada cuando terminó de leer toda la canción, encontrándose con la mirada expectante del pelinegro.
—Sigo preguntándome cómo puedes crear canciones tan hermosas —Jeongin soltó un suspiro aliviado, soltando todo el aire que retuvo.
—Vamos a ver si la empresa junto con Seungmin piensa lo mismo que tú —Chris dejó el cuaderno en la mesa del comedor. Pasó una de sus manos por la cadera de Jeongin, atrayéndolo más a él, mientras que con la otra acariciaba la mejilla del contrario. El pelinegro acomodó su cabeza en el hombro de su pareja, cerrando los ojos cansado y cómodo, disfrutando de las delicadas caricias que le daba el castaño.
—¿Sabes? Félix se ofreció para ayudar en la boda, aunque él organizaría todo —dijo Chris en tono suave y tranquilo.
—Uhm... ¿y si dejamos que organice todo? —levantó su cabeza y miró a Chris, quien lo miró expectante—. A ninguno de los dos nos gusta organizar fiestas, ¿por qué no lo dejamos elegir el sitio y todo eso? Ya sabes que le gusta decorar y esas cosas.
—Cierto, no es mala idea. Le avisaré luego a Félix, creo que él está más emocionado que nosotros mismos con la boda —bromeó. Jeongin negó con una sonrisa.
El timbre sonó, anunciando que alguien estaba llamando. Chris se levantó y miró por la mirilla, viendo a un chico con una caja de comida. Abrió la puerta, el chico lo miró y le saludó cordialmente.
—Buenas noches, le traigo su pedido —le ofreció la caja. Chris sonrió, salía un rico aroma de la comida que estaba dentro.
—Muchas gracias —agradeció haciendo una rápida reverencia, siendo correspondido por el repartidor. Cuando ya tenía la comida en manos, y el repartidor ya se había ido, cerró la puerta para empezar a sacar la comida.
Jeongin sacó algunos platos, donde dejaron las brochetas de cordero y en otro las papas fritas. Dejó los platos con comida en la mesa del salón, acomodó unos cojines en el suelo frente a la televisión y la prendió, empezando a buscar alguna película en Netflix.
Chris había ido al refrigerador para sacar dos cervezas frías. Volvió al salón y las dejó en la mesa, sentándose al lado de Jeongin.
El pelinegro seleccionó la película "Estación zombie: Tren a Busan". Se acomodaron en los cojines juntándose, listos para pasar una noche de pareja, ¿y qué mejor que con una maratón de películas y una rica comida?
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