Por @Aladeriva-

Como ya se dijo, y se va a decir varias veces más, nosotros somos hijos de inmigrantes. La Argentina se forjó sobre la espalda de cientos de refugiados, exiliados, ladrones y gente bien, sí, además de colonizadores e invasores, como si alguien pudiera olvidarlo. El punto es que de ahí nace la tremenda mezcla de culturas e idiomas que tanto nos caracteriza. Siendo un país joven, imprudente y mal hablado, puedo decir que nuestra identidad está en permanente cambio. Las fronteras están abiertas en el sentido más literal de la palabra y no me entra en la cabeza que alguien reniegue de esta diversidad y riqueza, porque para mí es lo mejor que tenemos.

Pero el tema acá es la música y el rock que me educó y me abrió los ojos, no sólo a mí sino a generaciones enteras, también vino de afuera. Nosotros lo adoptamos y transformamos. Por eso es reflejo de nuestra historia, pero vamos por pasos.

Mientras buscaba información, avanzaba y retrocedía todo el tiempo. En mi cabeza tiene sentido, pero no es un ritmo conveniente al momento de explicar algo. Así que voy a empezar dando una definición general. Luego voy a seguir una línea de tiempo, pero no me va a salir, así que voy a retroceder un par de años más. Van a pensar que cierta información no tienen nada que ver con el rock, pero sí, prometo que sí. Quien esté familiarizado con el género y lo haya vivido, supongo que se dará cuenta antes.

Lo primero que hay que decir es que el rock es un género musical estadounidense que se caracteriza por ser libre, contestatario y primitivo. Proviene del término «rock and roll», cuya traducción del inglés al español, es «mover y rodar».

¿Alguna vez fuiste a un recital?

Porque esto es lo que hacemos, aunque de una manera mucho más violenta. Al menos, acá, donde la música es vida. Por esta razón la frase se asocia al movimiento de cabezas que se veía en los recitales en pleno siglo XX.

El rock es mestizo y ansía ser libre. Es un género que resultó de la combinación de música afro americana y blanca. Hablo, por un lado, de la música gospel, el jazz y el blues, y por el otro, la música country, folklórica irlandesa y el boogie woogie. Aunque este último deriva del blues, así que.

Ahora quiero que pienses en la denuncia. A mi parecer, una de sus principales características.

En tiempos de la esclavitud en los Estados Unidos, las comunidades negras desarrollaron un potencial musical en el que predominaban los cánticos religiosos y ritmos propios que marcaban los días de trabajo en las diversas plantaciones que habitaban en aquel entonces. En esto hay que detenerse a pensar dos minutos, porque es increíble. Los tipos cantaban encadenados y golpeados. Laburando todo el día de sol a sol. Cantaban sobre su dolor, queda claro, no porque estuvieran felices.

A nivel musical la influencia de los ritmos y sonidos africanos se hacían presentes generando un estilo propio y diverso que luego se materializó en el blues. Por otro lado, la influencia de los músicos blancos a través del country y la aparición de la guitarra eléctrica, daría nacimiento a lo que se llamó «rhythm and blues».

¿Qué fue primero entonces?

El rhythm and blues (R&B).

El tema es que en poco tiempo el término rock and roll empezó a utilizarse para aminorar musicalmente al R&B. Porque era todo demasiado obvio. Se notaba mucho la lucha racial de la época. Y aunque en esencia los dos géneros musicales representaban lo mismo, se quiso diferenciar uno del otro para dar paso a los cantantes blancos y a una música que no mencione este conflicto. Ahora, no te preocupes, porque esto es temporal. El rock va a seguir hablando de lucha y revolución a través de distintos instrumentos. En la mayoría de los casos, usando la batería, el bajo, la guitarra y en algunas ocasiones, los teclados o pianos. De hecho, el rock se fue modificando con el paso del tiempo y se combinó con varios otros géneros además de los mencionados.

Se dice que en 1949, el músico de blues Muddy Waters, uno de los precursores del R&B, pavimentó el camino hacia el rock and roll. Además sus giras por Inglaterra a principios de la década de 1960 marcaron, posiblemente, el primer antecedente de una banda amplificada haciendo algo cercano al hard rock. Uno de los críticos presentes señaló que se retiró al baño a escribir su reseña, porque la música estaba muy alta. Un blando.

Sin embargo, hay quienes datan el origen del rock en 1954 con el trabajo discográfico de Bill Haley y su grupo Bill Haley and the Haley's Comets. Sobre todo con «Crazy man crazy» (1954) y su gran éxito de rock «Around the Clock» (1955) que tanta influencia tendría en John Lennon. Otros consideran como creador a Little Richard o a Elvis Presley. Todos coinciden con el año: 1954. Año en el que Presley editó su primer disco.

Volvé a pensar en la lucha racial.

Ahora, ¿quién quedó como el Rey del rock and roll?

Y sí, Elvis. No lo menciono por casualidad, sino porque tuvo una clara influencia acá. Sandro, considerado uno de los primeros rockeros del país, sí, aunque usted no lo crea, tomó mucho de la estética de Elvis.

Pero me estoy adelantando demasiado. Volvamos para atrás.

¿Qué sería del rock and roll sin la difusión? ¿Sin un vocero?

En 1951, vivió un disc jockey estadounidense, llamado Alan Freed, que comenzó a transmitir por radio rhythm & blues (R&B) y música country. Se dice que Freed fue el primero en utilizar la expresión «rock and roll» para describir la música que difundía. Aunque Leo Mintz, su patrocinante, se lo discutió bastante y se atribuyó el término.

Pero pará, ¿vos no me dijiste que el término vino del R&B en la década del cuarenta?

Sí, así es. La expresión fue tomada por Freed de la propia música negra. Es decir, el término rock and roll ya existía en las letras de las canciones. Como el tema «Rock and Rolling» (1939) de Bob Robinson, «Rock and Rolling Mamma» (1939) de Buddy Jones y «Cherry Red» (1939) de Joe Turner. Freed sólo se encargó de difundir la expresión un poco más.

¿Pero de dónde viene el «mover y rodar»?

Lo usaban los marineros para describir el movimiento de los barcos. O sea, es una analogía.

¿Y el año de la esclavitud en Estados Unidos?

No fue un año, fueron décadas. Fueron siglos. Ni da extenderse tanto.

Por eso dije que iba a avanzar y retroceder mucho en el artículo. Espero que se entienda la idea general. El rock se sitúa a mediados del siglo XX, entre el cuarenta y el sesenta.

La popularidad de este género, lo volvió conocido en todo el mundo. Varios países adecuaron este estilo a su región y nosotros no podíamos quedar afuera. Acá fue uno de los estilos predominantes, casi al mismo nivel que el tango. Aunque hoy el tema es distinto. Para mí ya no hay rock. Hay otra cosa. Las nuevas bandas han desarrollado un estilo propio. Lo cual era de esperarse.

Existió también un estereotipo de roquero. Algo obvio porque el rock también es una cuestión de actitud. Hablo de una actitud agresiva, o como mínimo conflictiva, y el cuestionar, incluso odiar, el sistema establecido. Hay que entender que el rock, como muchos otros estilos musicales, es una expresión de arte y lo que se busca es retratar los sentimientos y la historia, lo interno y lo externo. Por eso no voy a entender nunca a los que buscan «escaparse de la realidad». Esta música no es para vos entonces. Porque el rock te va a llevar a tocar fondo. Esa es la única forma de salir después de todo.

En los períodos oscuros que vivió nuestro país, el rock jugó un rol importante, al llevar en el hombro la resistencia y la esperanza. Aun siendo lo peor que uno puede tener, también es necesario.

Siempre, siempre siempre siempre SIEMPRE, hay que tener en cuenta el contexto. De más está decir que hace cincuenta años no había la tecnología de hoy y no era tan común la profesión, por ponerle un nombre. Antes si le decías a tu vieja que ibas a ser músico, probablemente se hacía a la idea de que te iba a mantener hasta los cuarenta. Carreras eran Derecho y Medicina y pará de contar. Hoy hasta podés estudiar para ser «DJ» en la facultad (conseguite un empleo honesto, diría Pappo) y hay una gran cantidad de bandas. Muchísimas. Ni hablar del rechazo a lo diferente, la hipocresía y lo políticamente correcto, junto a la censura. No cualquiera hacía/vivía rock. Hoy ni siquiera necesitás una discográfica. Es más, ya casi no se venden discos, el negocio pasa por otro lado.

Acá abro un paréntesis y aclaro que yo hablo en nombre de la música y me chupa un huevo la prensa y los fanáticos. Y lo que hagan con su vida privada los artistas, es asunto de ellos. A mí no me importa si son adictos, golpeadores, machistas o cayeron presos. A mí me importa la música. Así que no me vengan con conventillos, ni dramas baratos. Tampoco con la boludez de «los artistas sufridos» porque esa es la excusa de los mediocres. Si te gusta algo, te esforzás, persistís y ponés huevos.

En resumen, el rock nacional, es un movimiento artístico cultural influenciado por el rock and roll norteamericano, dentro de un territorio con serios tabúes. Por eso hay que resaltar el valor de esos artistas. Tanto en la creación de su música, como en su lucha. El rock fue un género influyente en los jóvenes y no tan jóvenes, de gran reconocimiento internacional.

¿Habla sólo de revolución y política?

No. Es mucho más amplio. Habla del amor, el miedo, la soledad, la muerte, las drogas y el sexo. El rock nacional habla de la vida. Si hay al algo que valoro del género es que no hay lugar para medias tintas. Hoy parece que la gente tiene miedo de decir «me gusta esto» o «estoy en contra de lo otro». Y si no lo hacen por no tener una discusión o por quedar bien, imaginate si tuvieran que sacar un CD puteando al gobierno y cuestionando el sistema. Imaginate hacerlo en plena dictadura.

El rock es realista, mundano y crudo. Pero también esperanzador y tierno. Es, por excelencia, y en mi caso, la principal influencia. Y merece no sólo un artículo, sino veinte. O más, quién sabe. Merece todo. Y si hay algo que envidio de la música es que no viene ningún boludo a decir ay, canten en español neutral porque no se entiende. Porque la música te entra por otro lado. Te atraviesa la piel y te toca el alma. No es la letra, es la melodía. No sabe de idiomas, ni fronteras.

Es tiempo de aclarar que esto es sólo una introducción. El rock nacional cumplió en el 2017 cincuenta años y mi idea es repasar cada una de esas décadas y hacer artículos especiales para nuestros próceres. Hablo de gigantes como Charly García y Luis Alberto Spinetta.

También señores como Gustavo Cerati y el Indio Solari, dos íntimos amigos.

No, mentira, esto nunca pasó. Alto photoshop.

En la próxima entrada, ya me meto de lleno con la primera década del rock nacional.