Capitulo 15: Cada día mas cerca II

Antes de empezar el capitulo quería desearles feliz primavera n.n y como esta es mi época favorita del año les dejó de regalo :3 un capitulo extenso y con lemon así que ADVERTENCIA!
Yyy aparte les dejó un one shot ;) busquenlo en mis obras! Los invito a :D
Muchas gracias a todos los que comentan y votan a diario, no tienen la menor idea de lo feliz que me hacen :')
Sin dar mas vueltas les dejo el capitulo de hoy 💕

Abrió la puerta del dormitorio y se adentró en el a paso lento, sentía que algo le pesaba y lo forzaba a caminar apagado, como si no tuviese absolutamente ninguna gana de andar, cerró la puerta, dejó su mochila y se aproximó a la cama, entonces se dejó caer en esta viendo hacia arriba, un flash back lleno de emociones encontradas se paseaban por su cabeza.

~~~~~~~~FlashBack~~~~~~~

"- Creo que me enamoré de un chico.

- ¿Y cómo se llama? -investigó curiosa, al bicolor se le abrieron los ojos sorprendido - ¿Es lindo? -preguntó su madre algo risueña.

- Se llama Katsuki... Bakugou Katsuki, y es hermoso -dijo Shouto con una sonrisa, viéndola con unos ojos soñadores."

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

"- ...Solo te uso porque quiero tener sexo y descargarme -terminó de decir Bakugou de modo arrogante y serio."

~~~~~FindeFlashBack~~~~~

Enserio no podía soportarlo, apretó fuerte sus ojos pero aquello que sentía lo consumía por dentro, el rechazo, la desmerecida amargura de las palabras que el rubio le regaló, como un puñal, esa sensación de parecer tener el corazón roto y de creer que incluso pudo escuchar cuando se rompió, rememorar los pocos pero encantadores momentos que tuvieron juntos, pensar en todas esas experiencias mágicas que sintió, las mariposas en el estomago, las sonrisas desmedidas, soportar todas las ilusiones que se había hecho de que quizás, podría ser,  Bakugou sintiera lo mismo pero... No.
No quería llorar, y era muy fuerte como para no aguantarse aquello, si algún día llorara por aquel rubio explosivo tendría que valer la pena, tendría que ser por una muy buena razón y esa no era la situación, en estas circunstancias, en las que solía pensar que él se había equivocado con Bakugou, no debía llorar, así que solo se fue hundiendo en un sueño del que despertaría gracias a las miles de voces y carcajadas provenientes de sus compañeros. Se refregó los ojos y alcanzó su celular para ver la hora, se puso de pie y se estiró, seguramente los chicos estarían cenando, iban a dar las 21:30 y él había pasado todo el día durmiendo, exactamente casi todo el día, entre lo que estuvo pensando y repensando, tratando de comprender mejor la situación en la que se encontraba. Fue hasta la puerta y trató de simular su mal estar, no se sentía muy a gusto con ir a cruzarse a todos en la sala, sobre todo a él, pero no podía permanecer todo el día en su cuarto.

- ¡Todoroki-kun! -un grito alegre lo contagió, una pequeña y débil sonrisa se asomó a sus labios, pero no pudo mantenerla, Midoriya se acercó a él en cuanto lo vio llegar a la sala común.

- Hola Midoriya, ¿Ya están cenando? -preguntó calmado, veía como todos se movían rápido en el ambiente.

- Ya terminamos Todoroki -Kaminari pasó frente a ellos.

- ¿Estuviste durmiendo? -preguntó el de cabello verde intrigado.

- Sí, sí, solo que...

- ¿Qué sucedió hoy? -interrogó Uraraka acercándose a él, acto seguido Kirishima se acercó.

- Todoroki -dijo su nombre y entonces hizo silencio, el bicolor lo vio agachar la mirada, rápidamente los demás se acercaron y continuaron haciéndole preguntas, pero la mirada del pelirrojo hacia él seguía extrañándolo, algo en su forma de llamarlo, pudo notar que su semblante alegre que siempre traía consigo se apagó de repente, y entonces, como si de un interruptor se tratara, sonrió - ¿Puedes decirme que pasó con Bakugou? -los ojos de Todoroki lo vieron con recelo, el Kirishima de siempre volvió a aparecer, volvió a hablar -Él... No me ha dicho una sola palabra de lo ocurrido, creí que podría preguntarle después pero no lo he visto.

- Es verdad, los dos anduvieron muy extraños hoy -Yaoyorozu se acercó a ellos muy tranquila.

- Entonces... ¿Bakugou no ha regresado? -el rostro del bicolor se veía confuso.

- Nadie ha visto a Kacchan desde que se fueron hoy -Midoriya se veía algo apenado, el bicolor se sorprendió y dejó escapar un suspiro, era típico del rubio, sabía que lo molestarían con todo aquello y siquiera se digno a aparecerse.

- Peleamos en la actividad, seguro ya todos lo saben -todos lo veían -No reprobamos, pero somos el peor puntaje.

- Todoroki... ¿El peor puntaje? ¿Ustedes? -dijo Momo algo preocupada, Mineta se acercó.

- Bakugou siempre tiene que sobresalir en todo, aunque sea metiéndose en problemas -se sonrió, entonces comenzó a exaltarse -Tal parece que los reyes del curso van cayendo -Iida se interpuso.

- Mineta, no es momento para eso.

- ¿Por qué pelearon Todoroki-kun? -Uraraka volvió a preguntar.

- Nosotros nos llevamos mal, ya lo saben, intentamos hacer lo posible y dar lo mejor en una mala situación pero no funcionó -el bicolor agachó la mirada -Solo eso, ahora discutimos por haber sacado la calificación mas baja y por el castigo, Bakugou se enojó y se fue, no sé donde está.

- Sí... Aizawa nos habló de eso -habló Kirishima cabizbajo, luego volvió a ese estado en el que se había quedado anteriormente -No entiendo por qué Bakugou no me contó nada en absoluto.

- Prometimos no decir nada para no meternos en problemas pero... No solucionó nada. -contestó el bicolor, una mirada furtiva de parte del pelirrojo lo hizo confundir un poco.

- Entiendo -fue todo lo que dijo, dio media vuelta y volvió a su lugar junto a mina. Al parecer nadie había notado aquel pequeño pero repentino cambio en el chico, decidió ignorarlo y pensar que solo eran celos, el bicolor suspiró.

- En fin, no tengo hambre, voy a mi cuarto a ver que puedo adelantar -dijo para dar media vuelta y regresar por donde había llegado, Deku notó aquella mirada, ¿Las calificaciones? ¿El castigo? Eso no era todo lo que le agobiaba al bicolor, corrió hacia él y lo detuvo en el pasillo.

- Espera Todoroki-kun -el recién nombrado lo vio con su semblante tranquilo de siempre- ¿Sucede algo?

- ¿Por qué preguntas eso?

- Lo noto en tu rostro, ¿Estás bien?

- Sacar la nota mas baja del salón no es muy bueno ¿Sabes?

- No hablo de eso... Pregunto si sucedió algo más, es decir... -la mirada de Shouto volvió a ser intimidante como la primera vez que se habían enfrentado, a tal punto que hasta le recordó al rubio.

- Se directo ¿Quieres? -esa personalidad un tanto distante y fría que siempre había tenido salió a relucir.

- Tú y Kacchan... ¿En verdad pelearon por las notas?

- Sí -contestó de forma cortante, el otro bajo la mirada y volvió a intentarlo.

- ¿Seguro? -se acercó a él unos pasos -Tú... Tú sabes que...

- Sí, seguro. Discutimos por las notas y por estar castigados 3 días, él... -volvió a contestar el bicolor de la misma manera, el otro iba a darse por vencido, pero la forma en la Todoroki había balbuceado en esa última palabra lo hizo desistir.

- Todoroki... Enserio... Puedo escucharte, ¿No quieres...?

- ¡Midoriya, no peleamos por lo que tú crees! -los ojos del otro se abrieron, esta vez el bicolor parecía molesto -Bakugou y yo no tenemos nada que ver.

- Pero creí que ustedes...

- No tenemos nada que ver.

Siguió su camino y dejó al chico verde desorientado, pero realmente con esa forma de enfrentarlo lo había dicho todo, algo más había pasado entre esos dos, y nadie podía notarlo porque era ridículamente imposible a los ojos de todos, ¿Todoroki y Bakugou? ¿Juntos? Nadie podría jamás imaginárselo, ni él lo hubiera pensado, incluso lo dudó cuando ya los había descubierto con las manos en la masa, solo había una persona que podía ayudar a Todoroki en ese momento, y ese era el mismísimo Bakugou, únicamente Kacchan podía arreglar todo ahora.

Aquella noche no hizo más que dar vueltas en la cama, claro, durmió toda la tarde, ¿Por qué estaría cansado? Igualmente necesitaba cerrar los ojos y dormir, no quería que aquellos sentimientos, esas imágenes, las emociones del momento, lo consumieran nuevamente, sus libros habían quedado abiertos sobre su pequeña mesa, no tenía ánimos para nada, lo único que su cabeza podía pensar era en Bakugou, el rubio explosivo, su rostro, sus palabras, esos días en los que había podido ver esa faceta nueva de él, su sonrisa, incluso su cuerpo desnudo, sus ataques de ira, sus gritos, su cabello despeinado, no podía pensar en nada que no fuera él, su olor, su sabor, sus ojos, su boca, su... ¡Basta! Se dijo para sí mismo, creía que estaba enloqueciendo, estuvo a punto de golpearse la cabeza con fuerza para ver si así lograba olvidarlo, en realidad solo se le cruzó la idea de salir a entrenar, quizás aquello lo alejaba de su recuerdo, pero en cuanto se decidió a levantarse de la cama su puerta sonó, se calzó y fue hasta la misma para abrirla y entonces encontrarse con todos sus pensamientos unificándose, materializándose en ese amor que no le correspondía, había quedado estupefacto, como si lo hubiera llamado con el pensamiento.

- Hola Todoroki -lo saludó Bakugou Katsuki, con la mirada perdida y un tanto decaído. El otro se incorporó tratando de no verlo a los ojos.

- ¿Que quieres ahora?

- Me... -El bicolor lo vio directo, el rubio alzó su mirada a los ojos del otro- ¿Me dejas pasar?

Trató con todas sus fuerzas de decirle que no, trató con todas sus fuerza el ponerse firme y echarlo de su habitación, trató con todas sus fuerzas de evitar sonreírse antes de tiempo pero... Si todas las fuerzas suman cero...

- Sí -sus ojos se nublaron un poco, odiaba esa fuerza que tenía el rubio para hacerlo cambiar de odio a amor tan rápidamente -Pasa.

El rubio irrumpió en la habitación, Todoroki cerró la puerta y lo vio sentarse en la cama sin pedir permiso, Bakugou se veía tan perdido, reojeó todos los recovecos de la habitación antes agachar la cabeza y tomársela con ambas manos, el bicolor se acercó a él.

- Bakugou...

- Perdóname -dijo en un tono forzado, como si se hubiera obligado a hacerlo, los ojos del bicolor se abrieron repentinamente ¿Enserio estaba pidiéndole perdón? Esto era demasiado irreal -No lo diré de nuevo, así que acéptalo.

- ¿Perdonarte por qué? -el rubio se levantó de repente para ponerse a su altura.

- ¡Por todo lo que dije! -gritó molesto y un poco exaltado -No era verdad, solo quería ser duro contigo, quería que te alejaras, todo esto me está destruyendo Todoroki -la forma de sus palabras, la energía con la que las decía, realmente estaba aterrado con todo esto, el bicolor se acercó a él haciendo mas intimo el espacio entre ellos, esperando que el rubio no rechazara su acercamiento, y entonces lo abrazó -No soy una prostituta -siguió hablando este totalmente abatido entre los brazos del mitad y mitad -No lo soy. No hubiese sido lo mismo con otro que contigo, no solo te busco por sexo, no estoy contento con estar mal contigo, ya no me da lo mismo, yo...

- Bakugou, todo está bien -este lo vio, realmente parecía estar sufriendo por todo lo que estaba pasando, era obvio que sentía igual a él al principio, pero ahora que había sido sincero consigo mismo todo era mas fácil, para Bakugou era diferente, él no quería admitir nada. Permaneció en silencio contemplando sus ojos carmesí y luego lo besó, el rubio respondió al beso y subió sus manos para abrazarse a su cuello, era como si este hubiera sido el primer beso, fue tan dulce al paladar que no pudieron despegarse, el encierro de sus brazos era como una prisión en la que las sensaciones que los estaban golpeando a ambos se sentían explícitamente, luego de un rato se separaron, el rubio agachó la cabeza y la apoyo en el pecho del otro.

- No quiero sentir esto.

- No sé lo que sientes.

- Me siento extraño -Bakugou se desenlazó de los brazos de Todoroki y se sentó en la cama, bajo los ojos heterocromáticos se recostó en la misma -No sé que es... Estar a tú lado me cambia bastante, y no me gusta -el otro continuó viéndolo desde la misma posición.

- ¿Por qué no te gusta?

- Siento...

- ¿Miedo quizás? -Bakugou levantó su torso de la cama, realmente molesto.

- ¡No tengo miedo idiota! No camines por ahí, solo estoy confundido -Todoroki se sentó a su lado.

- Yo lo estaba, pero fui mas sincero conmigo de lo que he sido contigo -el bicolor volteó para ver sus ojos y tomó sus manos.

- No... Todoroki...

- Bakugou, yo...

- ¡No! -se soltó rápido de su agarre y se levantó caminando nervioso - No me mal interpretes pero... No me siento listo para escuchar eso.

- ¿Y que piensas hacer? -Shouto se puso de pie y fue hacia él -Dímelo, me tienes aquí esperándote, solo quiero saber si esto sigue o si debo renunciar a ti.

- Yo... -Bakugou fue hasta él y le robó un beso -Me encanta esto, pero... No puedo aceptarlo.

- ¿Lo harás? -Todoroki lo tomó de la cintura acercándolo a él, el otro tomó sus manos retirándolas de su cuerpo.

- No lo sé, y no te pido que me esperes, en verdad me gusta esto, estar contigo, besarte, que hagamos cosas... que en la vida hubiera imaginado que haría contigo pero... Aceptarlo me tomara tiempo.

- No voy a obligarte, mientras podamos estar juntos no voy a obligarte, quizás así logres aceptarlo -Bakugou se sonrió, se sentó en la cama y lo vio, el bicolor se acercó a él - Y bien... ¿Qué hacemos?

- Seguir, hasta que... Cambie de opinión, o lo acepte ¿Te parece?

- Sí, eso es lo que yo quiero -una vez más Todoroki se aproximó al rubio hasta quedar de pie entre sus piernas, el otro se abrazó a la cintura del bicolor -Voy a hacer que lo aceptes.

- Inténtalo -los ojos carmesí encontraron los de Shouto, este se sonrió - Por ahora... Sí podemos ser amigos.

- Me conformo con eso, amo estar cerca tuyo -el rubio alzó sus manos para tomarlo del rostro y lo acercó a sus labios.

Arrastrando su cuerpo hacia atrás el rubio fue subiendo del todo a la cama, mientras el bicolor lo seguía de cerca posicionándose mas entre sus piernas, las que el rubio abría sin dudarlo, esas sesiones de besos calientes hacían que Bakugou se confundiera mas, quería sentir aquello todo el tiempo que le fuera posible, la manera en que Todoroki lo besaba le encantaba, como sus manos lo hacían sentir, como manejaba su cuerpo, sobre todo como sus sentidos se activaban cada vez que el quirk de Todoroki se dispersaba en su piel, de un lado su tacto frío lo estremecía, del otro su calor lo envolvía, las sensaciones con Shouto lo eran todo, pero su orgullo no le permitía admitir lo que en verdad le andaba pasando. Cuando por fin dejaron de besarse Todoroki se quedó recostado sobre este, sobre su pecho, entrelazó sus dedos con los del otro y lo vio fijo con su sonrisa clavada en el rostro, verlo nuevamente a su lado lo alegraba de sobremanera, lo hacía feliz, incluso más aún después de pensar que jamás volverían a estar de ese modo.

- Sabes... Me siento tan bien estando contigo -susurró el explosivo dejando que sus labios dibujaran una leve sonrisa, colocó su mano en la cabeza del otro y comenzó a jugar con su cabello rojo, como lo hacía en esas semanas.

- Igual yo -el bicolor levantó su torso y lo besó en la frente -te extrañaba.

- ¿Sabes que podemos hacer ahora? -sonrió el otro un poco pícaro.

- Mmm... ¿Dormir juntos?

- Podemos... -mencionó Bakugou mientras tiraba de espaldas a la cama a Todoroki y se subía sobre él, sentándose en su pelvis -Tener sexo -su sonrisa lujuriosa invadió su rostro mientras movía sus caderas.

- Aaah mira la señorita prostituta -se sonrió Shouto, sabía que el rubio tenía mucho apetito sexual- ¿Ya lo aceptaste?

- Corrección, idiota, señorito prostituto -lo corrigió el rubio de forma molesta, el otro solo se rió - Y sí, puedo ser tu mujerzuela -Bakugou tomó los pliegues de su remera de modo sensual y se la quitó -Solo tuyo.

- Esa es la mejor parte -sonrió Todoroki antes de tomarlo de la cintura para que el rubio cayera inmediatamente sobre sus labios.

Aquellos besos subían la temperatura en cuestión de segundos, sobre todo a Shoto, quien no podía mantenerse tranquilo con semejante mercancía sobre él, el rubio era una exquisitez para el bicolor, sus piernas a un lado de su cuerpo, su cintura arqueada, su olor y su sabor, de a poco lo fue subiendo hasta que su boca recorrió su cuello para quedarse atrapado en su pecho, no sabía por qué pero succionar los pezones del rubio lo excitaban demasiado, las manos del bicolor se habían colado por debajo de los pantalones del otro, se posicionaban bien abiertas sobre los glúteos del rubio, apretaba su trasero hundiendo sus dedos en su piel, con todo aquello la erección que crecía debajo de los jeans de Todoroki comenzaba a doler, en un dos por tres tomó el control de la situación y dejó al otro con la espalda en la cama, como si Katsuki fuera un juguete este se dejaba manipular, a tal grado que no le importaba en absoluto lo que el mitad y mitad le hiciera, los chupetones en su cuello, en su pecho, en ese mismo instante eran manchas rojizas pero que al día siguiente se verían como marcas moradas, las pequeñas mordidas que el bicolor le propinaba eran deliciosas y solo por eso se estaba dejando besar de esa forma, poco a poco sus pantalones desaparecieron y una mano ágil irrumpía entre sus piernas, fue entonces que se le ocurrió la idea, se levantó un poco suprimiendo todo contacto con el otro, el bicolor lo miró un poco descolocado, el rubio se hizo en el piso y lo vio con una cara algo ruborizada.

- Enséñame-pidió, mientras continuaba viéndolo desde el suelo, Todoroki se sonrió y se sentó en el borde de la cama, había captado la idea de solo verlo de rodillas pero quería jugar un poco con él.

- ¿Que te enseñe qué? -interrogó el otro, el rubio mufó y se quejó en voz alta.

- ¡Vamos bastardo mitad y mitad! ¡No me hagas decirlo...! -recordó entonces que no estaba en su habitación y se calló de repente, el otro se rió -Serás cabrón, lo hiciste a propósito.

- No, enserio, ¿Qué quieres? -volvió a preguntar Todoroki, esta vez se puso en la posición justa para que la boca del otro alcanzara su pelvis, Bakugou corrió la mirada.

- Quiero... Chupártela -dijo, para que un sonrojo se pegara fuerte a sus mejillas, el bicolor se sonrió malicioso.

- Y hazlo.

- Pero... no sé hacerlo -continuó apartando su mirada, si había algo que le costaba más que decir esa clase de cosas era admitir que había algo que no podía hacer -Jamás había hecho esto, enséñame -volvió a pedirle avergonzado.

- De acuerdo -Shouto se mordió el labio inferior, verlo allí en el suelo, arrodillado y pidiéndole aquello le hacía agua la boca, Katsuki estaba casi desnudo, únicamente traía puestos sus boxers, la idea comenzaba a gustarle -Sácalo -le ordenó.

El rubio no tardó en posicionar sus manos en el pantalón del bicolor y bajarlos considerablemente hasta poder sacar de allí su miembro, al principio su rostro denotaba una increíble incredulidad, lo tomó en sus manos como si de un juguete se tratase y lo vio asombrado, el pene de Todoroki era realmente ancho, y largo, y ahora que estaba duro... Rápidamente se dio cuenta que en su boca jamás podría caber entero.

- Maldición... -susurró Bakugou, el otro que estaba espiando sus expresiones desde arriba se rió un poco, todo aquello le causaba una risa interna que no podía mantener oculta.

- ¿Qué sucede? No vayas a decirme que es grande, porque ya la tuviste dentro muchas veces -el rostro del rubio se tornó rojo.

- No vuelvas a decir eso imbécil, me da más impresión -dijo en un tono molesto.

- ¿Qué impresión?

- No me va a entrar, ¿Cómo haces para tragártela entera?

- Solo chúpala -terminó de decir con la tranquilidad del mundo, la boca del rubio se acercó al glande y solo lo lamió, al sentir la lengua de Bakugou sobre él un escalofrío recorrió su cuerpo y soltó un leve suspiro -Ahora... métela en tu boca, hasta donde llegue, trata de mantener el menor contacto con tus dientes -explicó el bicolor para que el rubio abriera la boca y devorara su miembro de forma perfecta, la cavidad bucal de Bakugou era casi tan cálido como su interior, el explosivo tenía esa cosa de querer ser el mejor en todo, y cuando decía en todo era en todo, asi que lo intentó y tragó aquella inmensa erección hasta donde pudo, lo que lo llevó a atragantarse y quitarla rápidamente de su boca, tosió.

- Maldita sea... Creo que lo hice mal.

- ...no.... - respondió el bicolor algo agitado - estuvo bien, practica respirar por la nariz lentamente cuando la tengas en la garganta, y sácala lento, respira de intervalos y luego reten la respiración - el rubio respiró y acto seguido volvió a llevarse el pene de Todoroki a la boca hasta el fondo - aahhh-un gemido hizo que el rubio levantara la vista cuando aún tenía su erección en la boca -lo haces bien,... Ahhh.... Sigue así -comenzó a gemir cada vez más, el rubio intentaba respirar en aquellos intervalos en los que la sacaba y la volvía a introducir en su boca pero cada una de ellas le costaba más, lo único que lo hacía resistir era el placer que le daba escuchar gemir a Todoroki -Sigue... Ahh... Un poco más... -dijo entre suspiros para tomar la cabellera rubia y acelerar el ritmo, el placer se intensificaba, sentir la húmeda lengua del rubio y su boca presionando fuerte su erección lo llevaba a gemir de manera desaforada, Bakugou se sentía un poco incómodo, sus lágrimas comenzaron a resbalar por sus mejillas, la saliva salía  a borbotones de entre sus labios que aprisionaban el miembro de Shouto, ya no podía aguantarlo cuando al otro se le ocurrió soltarlo, Todoroki dejó escapar un último suspiro y comenzó a quitarse la camiseta, el rubio tosía mientras contemplaba su cuerpo envuelto en saliva.

- Eres idiota, casi me matas -continuó tosiendo.

- No he acabado todavía -dijo para tomar a Bakugou de la mano y llevarlo a la cama de un tirón. El rubio cayó boca abajo entre las sabanas, bastante sorprendido, la fuerza del bicolor se incrementaba cuando se trataba de sexo desesperado. Escuchar los gemidos del bicolor mientras estaba chupándosela hizo que se diera cuenta que sus compañeros podrían oírlos si no se cuidaban, algo iba a salir mal si seguían sus impulsos esta vez.

- Todoroki creo que... Aaah -un suspiró se escapó de su boca, la lengua del bicolor había irrumpido en su entrada y parecía no querer parar - Aahh Todoroki...

Primero un dedo, luego otro, la entrada del rubio parecía haberse acostumbrado a su toque, a esta altura siquiera se tensaba, volteó para verlo a los ojos y lo abrazó, Shouto hizo exactamente lo mismo, ver su expresión gustosa con su sonrojo y su boca abierta pidiendo más le dejaron en claro que ya no podía aguantar, beso sus labios, sus ojos se cruzaron un instante antes de que el bicolor introdujera su erección dentro del otro.

- ¡Aaahh! -un gritó grave se escapó de la boca de Bakugou, Todoroki levantó su espalda de la cama quedando los dos sentados, esta posición hacía que el bicolor tuviera mayor control con el rubio sentado sobre él, pero así también era tan fuerte que implicaba que los gemidos de Bakugou se convirtieran en gritos lujuriosos -Ahhhh... Ahhh.....ahhhhh -cada vez mas fuerte.

-Bakugou, Bakugou no grites -dijo Todoroki con su respiración agitada y colocó una mano sobre la boca de este, la forma en la que el interior del rubio apretaba su miembro era tan excitante - Ahhh... Ahh... -sus gemidos fueron mas intensos y mas altos, la mano de Bakugou alcanzó su boca para que este también fundiera aquellos ricos gemidos en su palma.

Ambos continuaron cada vez mas rápido. Cada vez que el rubio se sentaba con fuerza sobre él lo desorientaba. Cada vez que el bicolor salía y entraba de su cuerpo lo volvía loco. Esa fricción, llegar al fondo de su interior, hacía que se aferrara a su agarre y buscara que fuera mas salvaje, el placer era tal que cuando llegaron al clímax el pene de Bakugou los empapó a ambos, al terminar el rubio largó un suspiro y cayó rendido en la cama, de su interior se podía ver que no solo él había logrado descargarse bastante, Todoroki juntó un poco de fuerzas para tomar un par de pañuelos de su mesa de luz y dárselos al rubio.

- Ten... Límpiate -podía notar que había dejado salir demasiado - Lo lamento -le dijo antes de acostarse a su lado.

- Creo... Creo que... Fue mucho... ¿No? -habló el rubio realmente agitado mientras se limpiaba los restos de Todoroki sobre él, luego abrió los brazos invitando al bicolor a recostarse en su pecho, este lo hizo.

Estaban cubiertos de sudor, con sus respiraciones agitadas, pero con la sonrisa a flor de piel. Todoroki no podía creer todo lo que había pasado, sentir el corazón del rubio y su palpitar acelerado era como un sueño, amaba cada detalle de esas noches con él, Bakugou lo acariciaba con enfasis, adoraba ese cabello rojo y blanco, incluso se le hacía sexy, pero el bicolor no tenía por qué saberlo, se rió, Shouto alzó la mirada a él.

- ¿Qué sucede? -se sonrió.

- Nada -respondió el chico explosivo -Me resulta gracioso que después de las cosas que hicimos ahora estemos aquí como dos niños buenos acostados -volvió a reír Bakugou, el otro volvió a acomodarse en el pecho del rubio con una sonrisa satisfactoria -Eres un pequeño demonio Todoroki -dijo, y lo tironeó suavemente del pelo -Y yo nunca me había dado cuenta.

- Yo siempre supe que eras un demonio, lo que no sabía era que sexualmente eras tan... tan hambriento y exigente -Bakugou lo tomó del rostro y lo acercó hacia él -Aay Bakugou no soy elástico -el rubio le dio un beso en los labios.

- Perdón si soy bruto, pero te... -y entonces se calló de repente, el bicolor se sonrió.

- ¿Me...?

- Te... Te extrañaba -Todoroki renegó con su cabeza aún con su sonrisa grabada, nunca lo admitiría -Yo también te extrañaba -el rubio se acomodó más en las sábanas -Creo que voy a dormir, son más de las tres.

- ¿Cómo vamos hacer mañana? Recuerda que estás en mi habitación, aparte... Le dije a todos que nos peleamos ayer.

- Te preocupas demasiado Todoroki -Bakugou continuó con sus ojos cerrados -Todo está bien, mañana vamos a pasar todo el día juntos, nadie nos dijo a que hora debemos empezar, a la mañana cuando todos se vayan nos levantamos -bostezó y se colocó de lado, Shouto se acomodó mas arriba para poder abrazarlo, todas aquellas semanas habían dormido de la misma forma, al parecer el rubio buscaba su calor y se acurrucaba a entre sus brazos, entonces siguió hablando algo somnoliento -Y después de este día empezamos a andar juntos, nos tratamos mejor y a nadie le parecerá extraño.

- De acuerdo... Sí tú lo dices -Todoroki lo vio casi dormido entre sus brazos y se sonrió -duerme bien Bakugou.

- Sí, sí -terminó de hablar este y cayó rendido al sueño, el bicolor besó su frente.

- Voy a esperarte -susurró para finalmente quedarse dormido.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top