9° Comienza la primera batalla
El canto de los gallos junto con los primeros rayos de sol se hicieron presentes anunciando la llegada del nuevo dia, ese tan esperado dia, el viernes 25 de agosto de 2023, el dia en el que la guerra santa comenzaria para determinar si la tierra seguiria con la vida tal y como hasta hoy dia es conocida o en su defecto habria un nuevo orden.
Mas de uno tenia los nervios a flor de piel y los pelos de punta, al saberse seleccionados para ir en primera fila y, posiblemente, como carne de cañon, a la tan afamada y dichosa guerra entre dioses.
Eran las seis y media de la mañana en Grecia cuando el patriarca y la joven deidad convocaron a los caballeros a una breve reunión en el coliseo, previo a la partida, pues ya debían salir.
La joven como de costumbre se despertó desde las cinco de la mañana para asearse y arreglarse, pues quería lucir bien en su muy probable último día de vida.
Como ella tenia la idea de que muy probablemente moriría siendo virgen, días antes se había comprado un lindo vestido blanco que le llegaba dos dedos debajo de la rodilla.
Se colocó el vestido y sus zapatos de entrenamiento, unos huaraches griegos con tiras de cuero que se ajustaban a las pantorrillas, cepillo su cabello y lo dejo suelto, posteriormente en su cintura y espalda ato un lazo de cuero con dos fundas porta-machetes del mismo material.
Empuño sus dos armas y las guardo en sus respectivas cubiertas, posteriormente se colocó su armadura y para finalizar, su máscara, oculto entre su cabello había un pequeño listón rojo con una rama de pirul, mientras que en su ombligo había una pastilla de alcanfor envuelta en un poquito de algodón y pegada con cinta adhesiva para evitar que se le cayera.
Salió cubriéndose con una capa con capucha, esto por lo fresco de la mañana, llevaba una pequeña mochila con algo de cosas posiblemente necesarias para el campo de batalla.
Al bajar se encontró con sus amigos y tras un abrazo grupal, los que irían a la guerra fueron con el grupo de los veinte seleccionados.
Una pequeña niña se hizo presente entre la multitud, buscando desesperadamente a alguien, al ver a la castaña corrió hacia ella.
-Mami!-
La chica volteó y vio a la pequeña niña de cabellos albinos, se acuclillo y le extendió los brazos, en señal de que fuera a estos, la pequeña de a penas cinco años corrió a los brazos de la amazona, quien cariñosamente la abrazó y levantó.
-Tsuki! Como estas mi niña?- Pregunto la chica cariñosamente.
-Bien! Mami, iras a la guerra?-
-Si, me seleccionaron, pero no te preocupes, tu mami es muy fuerte y va a regresar.- Habló enternecida en un intento por confortar a su pequeña
-Si! Mi mami es muy fuerte!-
La castaña asintió
-Te quedarás con Shaka y con el abuelo Shion de acuerdo?-
-Si!-
-Por cierto, donde estuviste? No te he visto últimamente.-
-El abuelo Dohko me llevó a su Dohkolandia.- Contesto inocentemente a lo que la mayor río ante esa ocurrencia.
-Dohkolandia jaja, oh,ya hay que guardar silencio, la señorita Athena va a hablar.- Dijo y la pequeña asintió, la deidad se hizo presente.
-Caballeros míos.- Comenzó Athena. -Los he reunido hoy aquí, pues es el día en el que finalmente iremos a la guerra. Siendo sincera no me complace el arriesgar sus vidas, sin embargo, puede ser algo necesario para que la humanidad siga existiendo tal y como la conocemos hoy día. Sólo quiero decirles que me alegro mucho de haberlos conocido, de que hayamos nacido todos en esta época, pues son personas maravillosas y estoy agradecida de haberlos conocido. Quiero que sepan que aun si no ganamos la guerra, siempre estaré agradecida con ustedes por apoyarme en cada idea loca y descabellada que tengo. El tiempo que he pasado con ustedes se han vuelto personas muy valiosas para mi, y yo confío en ustedes, en su fuerza, y en que lograremos ganar esta guerra, así que no se rindan, mis nobles caballeros! Eso es todo, muchas gracias.- Finalizó la deidad a lo que todos comenzaron a vitorearla gritando consignas en su honor.
Los veinte seleccionados se despidieron de algunos amigos y compañeros, rezando por el buen resultado y que todos, o al menos la mayoría saliera vivo de la carnicería a la que iban.
La chica caminó hasta donde se encontraban Athena y Shion hablando, aunque en el camino casi choca con el guardián de la sexta casa.
-Cuidado.- Habló mientras tomaba a la joven por los hombros
-Eh, si, lo siento.- Habló apenada
-Buenos días Tsuki.- Dijo el rubio esta vez dirigiéndose a la pequeña mientras acariciaba su cabeza
-Buenos días señor Shaka.- Habló alegremente la pequeña
-Ya te vas?- Pregunto el virginiano a la amazona mientras abría sus ojos
-Si... sigo sin querer ir...-
-No te preocupes, estoy seguro de que todo saldrá bien.- Habló acariciando los cabellos de la muchacha
-Gracias...- Habló sonriendo levemente
-No me agradezcas, sabes que cuentas con mi apoyo.- Dijo observando con cariño a la chica
-Mami, por fin voy a tener un papá?- Pregunto inocentemente la albina haciendo que los dos mayores reaccionarán
-Ejem, eh, no, es- este... ay, que cosas dices Tsuki.- Habló más que apenada la chica, el rubio cerró sus ojos y volteo la cabeza avergonzado, la amazona aprovechó para ver hacia donde estaba Shion quien había terminado de hablar con Saori y ahora estaba al lado de Dohko -Eh, yo, ya debo irme.-
-Oh, si, ten... ten cuidado, buena suerte.-
-Si, gracias... nos vemos.-
Dijo la chica mientras se dirigía hacia Shion, esto para despedirse de él y de Dohko, y claro, encargarles el cuidado de su pequeña lunita como ella le apodaba a su hijita.
Llego con ellos y hablo un poco, bajo a Tsuki y tras unos instantes Shion la abrazó con un cariño fraternal genuino, ella correspondió el abrazo y Shion musito un apenas audible
-Cuídate mucho mi niña.-
La amazona asintió y rompieron el abrazo para posteriormente abrazar a Dohko de la misma forma. Al terminar, la chica levantó nuevamente a Tuski a quien abrazo y beso en la frente, para después encomendarle su cuidado a sus padres adoptivos. Posteriormente a esto, la chica corrió hacia el grupo de caballeros que irían a pelear.
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En alguna otra parte del mundo, una joven cubierta con una piel de jaguar meditaba de frente a una fogata y un recipiente con copal, el lugar se hallaba en oscuridad total, la única luz era la del fuego.
Aquella muchacha tenía la mitad del rostro cubierto, y lo que se alcanzaba a ver, eran marcas negras, de sus orejas colgaban plumas de aves y detalles de oro, plata, jade y obsidiana.
Estaba sumida en su trance cuando de pronto entró un hombre a la habitación, alto y fornido, de piel morena, y que también estaba cubierto por un manto de piel de animal.
-Señorita, están a punto de partir, ya va a comenzar la primera batalla.-
-Oh, así que ya empieza? Llama a los demás, debemos estar al pendiente de cualquier cambio o anomalía.- Habló la misteriosa joven
-Si señorita.-
-Ah y por cierto.-
-Dígame.-
-Muchas gracias por avisarme Juan.- Dijo la joven sonriendo tranquilamente.
El hombre salió de la habitación e instantes más tarde regreso acompañado de otros cinco hombres de diferentes edades, al igual que un anciano, todos se sentaron al rededor de la fogata en aquella especie de cueva, y la única mujer presente empezó a hablar.
-Puede que este sea el momento que tanto queríamos evitar que llegara, y si no, entonces estará pronto, debemos entrar en contacto con ella antes de que sea demasiado tarde.-
-Pero, por que?- Preguntó un joven de escasos catorce años
-Es muy peligrosa, Alexis, no debemos permitir que la bruja despierte, si lo hace, este mundo estará condenado a la ruina.-
-Y quien es la bruja?-
-Según la profecía, es aquella que impedirá el regreso de Quetzalcoatl y propiciará la llegada de las Tzitzimime a estas tierras, trayendo consigo la destrucción del quinto sol... No podemos permitir que eso pase, habrá que sellarla, o en el peor de los casos, darle la muerte.-
-Habrá que esperar a ver su jugada, la guerra está por iniciar.-
-Créeme que lo más seguro es que ya se empezó a mover y esta pronta a despertar por completo, lo se, lo he escuchado en el viento...-
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Unos minutos después salió el grupo de caballeros y Saga hizo uso de su habilidad, la otra dimensión para transportar a los caballeros más rápido, claro, con el cosmos de Athena cuidadolos para que no se perdieran entre dimensiones.
Llegaron al pueblo donde se había acordado que sería la primera batalla, ahí ya comenzaba a atardecer, pues entre Grecia y ese país habían por lo menos diez u once horas de diferencia.
Comenzaron a caminar topandose con un pueblo que a simple vista parecía deshabitado, sin embargo, Saori dijo que había mandado a evacuar a la población de ese lugar.
Avanzaron un poco más, acercándose a la montaña cuando de repente se toparon con otra pequeña aldea aledaña a la de Navala, solo que la diferencia era que esta estaba totalmente destrozada, gruesas manchas de sangre pintaban el suelo, y pronto empezaron a ser visibles los cadáveres de los habitantes del lugar, niños, mujeres, hombres, adultos y ancianos, era lo que se podía ver en aquel lugar, definitivamente había sido una masacre.
-Quien pudo ser tan cruel como para hacer esto?!- Pregunto aterrada Xiaoling
-Los espectros de hades... Son los únicos tan desalmados que podrían haber hecho esto.- Respondió Geki mientras posaba su mano sobre el hombro de Xiao a modo de apoyo y consuelo.
Siguieron avanzando solo que ahora con pesar en sus corazones, puesto que no habían podido salvar a esa gente inocente. De pronto, un ataque les llegó por un costado, se trataba de una emboscada por parte de los espectros quienes ya estaban esperándolos, de inmediato todos se pusieron en guardia, listos para pelear.
De inmediato los espectros realizaron algunas maniobras para tener tiempo y separar y acorralar a los caballeros, cosa que les sirvió pues la geminiana de inmediato saltó a la cacería de por lo menos cinco espectros, con la agilidad de un gato y la velocidad de estos mismos corrió tras los espectros mientras arrojaba su capa y su mochila con el improvisado botiquin en su interior, logrando así separarse del grupo y no escuchar los gritos de sus compañeros, pues a medida que subía por la cuesta de aquel cerro, más difícil le era escuchar lo que abajo pasaba.
Seiya y Shiryu se pusieron espalda con espalda, cubriéndose de los ataques mutuamente al par que comenzaron a defender y atacar, Nachi y Shinato también se cubrieron las espaldas, aunque en un descuido Shinato cayó al suelo, y a punto de ser atacada por el espectro contra es que se estaba enfrentando, Nachi saltó a su rescate mientras que Saga y Marin le daban muerte al enemigo
-Se encuentran bien?- Preguntó Saga con su característica voz aguardientosa pero con algo de preocupación
- Eh si, muchas gracias.- Respondió Shinato.
Por su parte Moses, Asterion, Dante y Aracne habían sido acorralados con Athena por un grupo de espectros, Saori quien en sus manos portaba la pequeña estatua de Athena estaba intentando activar la armadura sin éxito alguno, hasta que alguien apareció frente a ellos.
-Vaya vaya, miren nada más a quien tenemos aquí- Habló aquella voz femenina al tiempo que Saori levantaba la mirada. -Nada más y nada menos que a Athena y sus perros falderos.- Se burlo. -Que pasa? Ya van a empezar a ladrar? Jajajaja-
-Así que tu debes ser Pandora, o me equivoco?- Habló con firmeza la deidad
-De hecho no, te creí más ignorante pero veo que no lo eres tanto, aunque si para usar tu armadura- Dijo continuando con las burlas.
-Te tolero que te burles de mi, pero no lo harás de mis santos, Asterion!-
-Si mi señora?-
-Toma, cuida mi armadura, me encargare de cerrarle la boca a esta mujer.-
-Que? Te ofendí?-
-No podría ofenderme alguien totalmente inferior a mi.-
Ante esto, Pandora crispo los puños y su seño se frunció, corrió hacia la pelilila intentando atacarla, al ver esto, Saori también tomó impulso para correr hacia Pandora.
-Que puede hacer una diosa inútil que necesita que la cuiden un montón de hombres?!- Grito Pandora enfurecida
Saori al estar cerca de ella bloqueó el golpe que Pandora le iba a propinar, y en su lugar, arrojó una fuerte patada hacia el costado de la comandante de los espectros, haciéndola trastabilar y casi caer.
-Eso es lo puedo hacer y más, haré que te tragues tus palabras.-
-Estoy deseando verlo... Minos acabará con ustedes, no serán rivales para el.-
-Eso ya lo veremos.-
Y con esto dicho siguieron repartiéndose una serie de golpes y patadas que cubrían o esquivaban, los santos de plata estaban anonadados viendo a su diosa pelear.
-De cuando acá la señorita Athena sabe pelear?- Pregunto Asterion
-Ni idea, pero no lo hace nada mal.- Respondió Aracne
-Que se supone que están haciendo ustedes?!- Replicó June llegando al lugar
-Pues...- Intento excusarse Dante
-Nada de pues! Somos los que protegen a Athena! No somos espectadores! Trae acá la armadura!-
-Pero, la señorita Athena se la dio a Asterion-
-Eso ya lo sé Moses, pero no están haciendo nada, así que damela!-
Justo en ese momento, Athena iba a recibir una patada que no lograría bloquear por lo que June rápidamente saltó hacia el frente recibiendo ella el impacto de lleno en su espalda.
-June!- Exclamó la deidad
-Me alegro que este bien Athena, tome.- Dijo la rubia dándole la armadura mientras se incorporaba con dificultad a lo que Saori sin dudarlo la ayudó.
-Recibiste el golpe por mi, me protegiste, ahora yo te protegeré- Habló decidida mientras hacía arder su cosmos, esto hizo que la armadura brillara y tomara su forma, comenzando a cubrir el cuerpo de Saori, haciéndola lucir como toda una guerrera. -Caballeros! Yo me haré cargo de Pandora, ustedes váyanse!- Habló imponente
-Si señora!- Respondieron los presentes mientras se amedrentaban con un grupo de espectros que venía llegando.
Daichi y Erda estaban peleando junto a Aldebaran, intentando encontrar alguna brecha en la defensa de los espectros.
-No entiendo que pasa con estos tipos! Los espectros siempre han tenido fama de ser débiles!- Habló molesta Erda
-Es extraño! Son muy fuertes!- Respondió Daichi
-No se distraigan! No podemos perder ante estos seres tan inferiores!- Habló Aldebaran
Seiya que recién había sido acorralado cerca de ellos preguntó
-Oigan! Alguien ha visto a Alejandra?!-
-Ni idea de donde está! La perdimos de vista hace rato!- Respondió Daichi
-Ha de estar con Saga! Ya sabes como es! No se le despega! Agh! Ni al rubiecito ese! Maldición!- Gritaba Erda molesta pues estaba teniendo más dificultades de lo esperado.
Mientras tanto en la montaña, la chica de cabellos cafés seguía persiguiendo a los espectros, quienes eran inusualmente fuertes.
La chica peleaba a punta de golpes y patadas, intentando reservar su cosmos y también, no usar armas más que sus puños y piernas, se había hecho algunos raspones, producto de las caídas, mismos de los cuales en otro momento se habría quejado, pero ahora no eran de gran importancia.
-Que hace una niñita en la guerra?! Que no deberías estar en la cocina?!- Se burlo uno de los espectros haciendo que los otros lo secundaran con carcajadas
La sangre de la joven hirvio de coraje, pero logró pensar a tiempo
-De hecho, vine aquí a conseguir la carne que será mi cena, sin embargo dudo mucho poder llevarlos, ya que yo no como porquerías! Ey! Por cierto! Que ustedes no deberían estar trabajando? Son hombres, es SU obligación el llevar dinero y comida a las casas, de esa forma nosotras nos podríamos mantener en ellas, oh claro, siempre y cuando no sea una miseria como la que se cargan entre las piernas o realmente nos veremos obligadas a salir!- Gritó furica levantándose y dando una patada en el aire, misma que dio de lleno en la cabeza del espectro.
Fue tanta la fuerza imprimida en ese golpe, que aquel tipo quedó con el cráneo medio roto y el cuello torcido, fue a dar contra unas piedras, lo que hizo que su cabeza se terminara de romper y la sangre saliera a chorros, los demás espectros solo vieron atemorizados a la joven quien estaba como si nada.
-Quien sigue? O es que ya se les hicieron los huevos chiquitos del susto?! Eh!-
-Sigo yo.- Habló una voz detrás de la muchacha
-Quien- Sus palabras fueron cortadas al ver a un espectro con un aura tan imponente, al instante, recordó aquel sueño que meses antes había tenido
-Señor Minos!- Exclamaron los espectros aliviados
-No entiendo por qué una simple chiquilla les ha causado tantas molestias.- Los espectros bajaron la cabeza. -Amazona!- Exclamó Minos haciéndose con la atención de la joven. -Quien eres?...-...
Boom! Inicio la primera parte de la guerra. Vamos a ver quien muere y quien no.
Alguno de ustedes sabe en que país están? Si es así déjenlo en los comentarios, yo si se. Pero no les voy a decir aún jajaja, hasta dentro de dos capítulos.
Publicado por primera vez: Miércoles 17 de abril de 2024
Editado: Miércoles 30 de mayo de 2024
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