Truco de magia
En una de las casas de Metrópolis, una joven maga hacía aparecer unos conejos desde su sombrero, sorprendiendo y haciendo reír a los niños. Peter miraba todo eso con una sonrisa, viendo como Zatanna hacia reír y sorprender a los pequeños. "¡Y ahora para mí siguiente truco, aré que estos globos se conviertan en confeti!" Dijo animadamente, obteniendo el entusiasmo de los pequeños. "Si mi querido ayudante es tan amable de traerme los globos"
Dijo mientras Peter subía al escenario con cinco globos en cada mano. Cuando Zatanna se acercó a Peter, empezó a mover sus manos sobre los globos, para luego hacerlos explotar y convertirlos en confeti, haciendo reír a los niños. "¡Gracias mi querido público!" Exclamó alegremente saludándoles muy felizmente junto a Peter. Al ver la sonrisa de los niños, una felicidad inmensa llenó a Zatanna, y Peter pudo verlo en su rostro.
"¡Niños, el pastel!" Dijo la madre de uno de los niños, haciendo que corriesen hacia la mesa donde estaba el pastel. "Lo has hecho muy bien Zee" le felicito Peter guardando algunos accesorios en la caja. "Gracias mi querido Peter, aunque esto no se acerca ni a la mitad de lo que puedo hacer" le dijo empezando a guardar cosas en su sombrero. "Si alguna vez actuó en un gran escenario, espero que tengas la oportunidad de verme en el" dijo sonriendo amablemente.
"Lo espero con ansias" le dijo amablemente guardando los últimos accesorios de magia. "Gracias cielo" le dijo dulcemente. Al instante fueron rodeados por los niños, queriendo que se les uniesen a ellos en las mesas. "Gracias cielos, pero ahora mismo necesitamos guardar todo" dijo dulcemente a los pequeños. "Por favor señorita, queremos que tu y tú novio nos acompañen" dijeron los pequeños felizmente.
Esa palabra pillaron a ambos desprevenidos sonrojándoles en el acto, que no pudieron hacerles saber que no eran novios, porque fueron arrastrados por los pequeños hacia la mesa, mientras los adultos veían todo eso con unas sonrisas. Ya sentados junto a los niños, Zatanna no pudo evitar observar cómo Peter era muy atento con los pequeños haciéndoles sonreír, y como les limpiaba el rostro con las servilletas. Esas imágenes la hicieron sonreír dulcemente, pensando en que sería un buen padre.
Cuando Zatanna se dio cuenta de lo que pensó, se puso roja al instante. Intentaba dejar de lado esas ideas, pero luego se fijó como las niñas se arrimaban a Peter algo sonrojadas. Esa imagen la dejaron confusa. Por un lado estaba feliz de lo amable y atento que era con las pequeñas, pero, por otro se sentía celosa de que unas niñas pequeñas tuviesen la atención de su hombre. Al darse cuenta de lo que pensó, se puso roja de verdad. '¡¿Porque me importa que las niñas estén tan cerca de Peter?!, ¡¿De verdad pensé que sería un buen padre?! ¡¿Y, porque pensé en el como mi hombre?!' Pensó Zatanna muerta de vergüenza.
Los niños continuaron jugando, y esta vez con Peter y Zatanna uniéndose a ellos. Cuando acabó la fiesta, Peter y Zatanna fueron pagados por los padres. "Muchas gracias por venir, y hacer felices a los pequeños" dijo la madre de la cumpleañera, mientras los veía jugar en el jardín. "No hay problema. Ver a los pequeños sonreír es más que suficiente" dijo Peter sinceramente. "Siempre que necesite un poco de asombro, no dude en llamar a la Fabulosa Zatanna" interpretó haciendo una última pose.
Cuando ambos recogieron sus accesorios de magia, se despidieron de los padres y los niños amablemente. En las calles de Metrópolis, Peter y Zatanna caminaban tranquilamente. "Esa fue una fiesta muy divertida, ¿no lo crees Zee?" Le preguntó amablemente. "Si, fue bastante divertida" dijo algo nerviosa. Por el camino, Zatanna no podía dejar de pensar en Peter, debido a su aura que la relajaba en todo momento, pero también se sentía nerviosa debido a lo que pasó hace poco.
"Pero, lo que realmente quiero es hacer un gran show, donde toda la gente pueda ver y reír todos juntos" dijo esperanzada de poder actuar en algún lugar así. "Se que lo lograras Zee, eres realmente fabulosa" le sonrió con sinceridad. Esas palabras la pillaron por sorpresa sonrojándola de golpe. Sabía que Peter era tierno y atento con todo el mundo. Pero oír esas palabras dirigidas a ella la hicieron sentir bien. "Por cierto, ¿como es Kamar-Taj?" Preguntó de repente, queriendo cambiar de tema.
"Bueno, por donde empiezo..." se dijo a sí mismo pensando por donde comenzar. "Hace 1.000.000 de años, un hechicero muy poderoso llamado Agamotto, junto con otras personas libraron a la Tierra de un mal tan antiguo como poderoso" dijo Peter empezando a recordar a los primeros Avengers.
"¡1.000.000 años!" Exclamó Zatanna sorprendida. "Si. Hace 1.000.000 años existió el primer grupo de superhéroes de la Tierra, que batalló sus primeras batallas contra los villanos. Pero esa es una historia para otro momento" dijo sonriendo amablemente. Zatanna estaba sorprendida por saber que había existido un equipo tan antiguo, y que entre ellos se encontrase un hechicero.
"Hace mucho tiempo, Agamotto y sus aliados se enfrentaron a todo tipo de males, entre ellos seres con poder cósmico, y seres con magia tan asombrosa como peligrosa" dijo tranquilamente. "De todos aquellos seres se encontraba Dormammu, el conquistador de mundos" dijo seriamente recordando a uno de los villanos más poderosos que haya conocido.
"¿Quien es Dormammu?" Preguntó interesada. "Dormammu, es un ser de entidad mágica, que conquistó un montón de reinos y dimensiones, y ansia la Tierra por más que cualquier otra" dijo seriamente teniendo su atención. "Mucho tiempo atrás, Agamotto y Dormammu tuvieron una batalla épica, que terminó ganando el primer Hechicero Supremo de la Tierra. Pero sabiendo que volvería, decidió prepararse" dijo seriamente.
En el antiguo Nepal, creó Kamar-Taj donde entrenaría a la siguiente generación de hechiceros que protegerían la Tierra de Dormammu y otros seres mágicos" dijo seriamente. "Aunque creo Kamar-Taj como un lugar de recuperación, también supo que Dormammu volvería en cualquier momento, así que creó tres templos donde servirían como escudos mágicos donde evitaría que Dormammu y sus fuerzas viniesen a la Tierra" dijo seriamente.
"¿Y donde se encuentran esos templos?" Preguntó interesada. "Los templos se encuentran en tres ciudades clave, que son reconocidas por todo el mundo. Hong Kong, Londres y Nueva York. Y es en el de Nueva York donde conocí a Stephen Strange, mejor conocido como Doctor Strange el Hechicero Supremo de nuestra era" dijo sonriendo nostálgicamente recordando a su viejo amigo.
"Vaya. Debo decir que ese nombre es muy bueno" dijo Zatanna amablemente. "No lo niego" dijo sonriendo nostálgicamente. Al instante ambos oyeron una explosión que les hizo voltear, para ver a unos cuatro coches huir de la policía. Ambos se miraron entre ellos sabiendo lo que debían hacer. "Dejaremos la historia para otro momento" dijo Peter seriamente, yéndose junto a Zatanna a un callejón. En el callejón, Zatanna se vio envuelta por un destello de luz que hizo que vistiera su traje de heroina, mientras que Peter se saco su ropa dejando ver su traje.
Zatanna se sonrojó pensando en que se iba a desnudar delante de ella, y ella misma se palmeó las mejillas poniéndose seria. Ambos empezaron a seguir los coches que perseguían la policía, mientras veían sorprendidos como lanzaban granadas al azar queriendo dañar a gente inocente. "¡Zee, debemos encargarnos de las bombas y los civiles primero!" Dijo Spider-Man seriamente ganando su asentimiento. Zatanna protegió a las personas con escudos mágicos, mientras que Spider-Man lanzaba al aire las bombas mientras las envolvía con sus telarañas evitando una onda expansiva mayor.
Mientras seguían evitando que los integrantes de los coches dañasen a personas inocentes, en el coche patrulla que los seguía de cerca consiguió parar a dos de ellos estrellándolos contra el muelle. Spider-Man se fijó que los dos últimos iban a escapar, así que creó una red gigante delante de ellos atrapándolos al instante. Zatanna después hizo que los integrantes apareciesen fuera de los coches sin sus armas. "¡Manos arriba!" Dijeron dos oficiales de policía.
"Son vuestros oficiales" les dijo amablemente. "Gracias a ambos, hemos estado intentando capturar a estos miembros de Intergang durante mucho tiempo" les dijo Dan Turpin seriamente empezando a esposarles. "Muchas gracias a ambos" les dijo Maggie amablemente. "Tranquilos oficiales, nosotros solo hicimos lo correcto" dijo Zatanna amablemente. Sin que se diesen cuenta, desde el muelle, uno de los miembros de Intergang sacó un cuchillo, y lo lanzó hacia Zatanna con intenciones asesinas.
Spider-Man se dio cuenta y actuó de inmediato. "¡Zatanna cuidado!" Dijo apartándola del camino, pero el cuchillo logró penetrar el brazo de Spider-Man hiriéndole en el acto. Todo eso asustó de golpe a Zatanna, para después mirar con furia al asaltante. El miembro de Intergang se asustó al sentir la mirada de Zatanna, que intentó lanzarle otro cuchillo, pero Zatanna fue más rápida. "¡Sadreuc satleuvne rodederrla ed le!" Exclamó haciendo que las cuerdas del muelle le retuviesen sin posibilidad alguna de moverse.
Zatanna miró a Spider-Man preocupada. "¡Estás bien!" Le preguntó muy preocupada. "Tranquila, no es la primera vez que me hieren" le dijo intentando ignorar el dolor que sentía. Zatanna se sintió culpable, su amigo recibió una herida terrible destinada a ella, y el la protegió de recibirla. "¡Euq al adireh y le rolod naczerapased!" Exclamó curándole la herida al instante sorprendiéndole. "Te hirieron por mi culpa, no quiero que eso recalque en mi conciencia sin haber hecho nada" dijo algo triste.
Spider-Man la abrazó repentinamente sorprendiéndola. "Tranquila Zee, estoy agradecido de que me curases. Y no te eches la culpa de todo, eso no pega con tu cariñosa actitud" le dijo amablemente tranquilizándola. Zatanna no pudo evitar sonreír y sonrojarse. Después de ayudar a los agentes a capturar a los que quedaban, Peter y Zatanna se encontraban delante del edificio donde se aloja Zatanna.
"Gracias por todo lo que has hecho hoy por mi Peter, has sido muy caballeroso" le dijo dulcemente. "No hay de que Zee, estoy contento por haberte ayudado" le dijo sonriendo amablemente. Zatanna al ver su rostro sincero y dulce, no pudo evitar besarle en la mejilla sorprendiéndole. "¡Nos vemos mañana cielo!" Se despidió alegremente entrando en el edificio.
Zatanna al llegar a su piso, y entrar en su cuarto, se sonrojó al instante al saber lo que hizo. "¡Por toda la magia! ¿Porque le besé?" Se preguntó muy nerviosa tirándose a la cama. Al instante recordó lo que le dijeron los niños, lo dulce que era con ellos y lo valiente que fue protegiéndola. Esas imágenes hicieron que su corazón palpitase aceleradamente.
CONTINUARÁ
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top