El chico iba de vuelta a su casa por la noche cuando algo se paró en medio de la carretera. Cuando las luces alumbraron al desconocido se quedó de piedra.

- ¿Hablamos? - le dijo Hawke.

Tragó saliva. Si salía no acabaría bien, pero tampoco podía huir, porque entonces acabaría peor.

Al abrirse la puerta del coche, Hawke no tardó ni dos segundos en sacar al chico por la fuerza y estamparlo contra el capó.

- No me hagas daño por favor.

- Qué gracia que digas eso cuando sé cuánto te gusta ir haciendo daño a mujeres.

La cara se le puso pálida.

- No sé quién te ha dicho eso, pero es completamente mentira.

En ese segundo a Hank se le pasaron por la cabeza los moratones que había visto en el cuerpo de ____________ hacía semanas. Había pasado mucho tiempo pero era incapaz de olvidarlos.

No respondió ni le dio tiempo a decir nada más, ya que estampó su puño contra su cara. Cuando vio la sangre brotar de su nariz le dio otro y otro. No paró hasta escuchar un crujido.

- Esto ha sido una advertencia. La próxima vez me aseguraré de que no vuelvas a andar en tu vida.

Soltó al chico, el cual cayó al suelo al lado del coche, y se fue a casa.

Entró en silencio en el piso. Se quitó el traje y se lavó sin hacer ni un ruido. Cuando hubo terminado fue a la habitación. Se metió en la cama y abrazó a ____________ por la espalda. Enterró la nariz en su pelo e inspiró, no había nada que lo relajara más que tenerla cerca.

- ¿Dónde has estado? - preguntó la chica en voz baja.

- He salido a dar un paseo.

Ella le cogió la mano y pasó los dedos por sus nudillos ásperos.

- Estoy bien, no te preocupes.

- Me da a mí que no es por tí por quien debería estar preocupada.

- He solucionado un problema.

_________ se giró para mirarlo a los ojos.

- No voy a preguntar, pero quiero que me prometas que no vas a salir más de casa así por la noche. Es peligroso. ¿Y si te encuentras con alguno de esos justicieros?

- Lo tengo todo bajo control.

Le dio un cálido beso en la frente.

- Descansa.

____________ se acurrucó contra su pecho.

- Yo siempre me preocupo por tí.