Dios...
- Se... Siente muy bien... Aaa... ¡Au! Duele, ¡duele!
Fin de la narración.
Piccolo abrió los ojos y al mirar que estaba sobre veguita se levanto en un solo movimiento.
Miró su hombro derecho y miró las marcas de los dientes de veguita.
- ¡¿me mordiste!? - miró a veguita - ¡me mordiste!
- estabas sobre mi - se sentó en el suelo
- ¡me mordiste!, ¡ tengo la marca de tus dientes en mi hombro! - dijo mientras tocaba al rededor
- relaja te, se quitara con tiempo
- ¡¿por que me mordiste!? - piccolo no podía creer que lo mordió
- estaba ensima de mi, tu pecho aplasto todo mi cuerpo. Es incómodo tener el aliento de alguien en tu nuca-
Las mejillas de piccolo se cubrieron de un tinte morado.
- ah... No se como termine así - dijo avergonzado y tapando las marcas en su hombro
- tomaste una posición muy mala de meditación y caíste sobre mi... Ah, y termine de curarte - se tallo un poco las piernas
-¿estas bien? - preguntó mientras la miraba
- si, se me durmieron las piernas
- ¿necesitas ayuda? - pregunto mientras quitaba la mano de su hombro
- quisiera decir que no pero si, necesito ayuda- veguita estiro su mano al igual que piccolo.
Ella era más fuerte que piccolo y al tratar de levantarse jalo a piccolo tirándolo encima de ella.
Las manos de piccolo estaban a los lados de la cabeza de veguita.
-ah - veguita tapo su boca con su mano hecha puño. Esto puso nervioso a piccolo.
- se ve tan... Tan... Dios... Que... - pensó embobado
Los ojos de veguita se humedecieron.
- no... No... Puedo resistirlo... Se ve tan... Lin - piccolo se interrumpió; al ver que por las mejillas de veguita corrían lágrimas.
- ¿que... Te sucede? - dijo preocupado
- me... Aplasta mi... Cola - dijo con la voz entre cortada
Piccolo miró su rodilla y aplastaba la cola marrón de veguita. Levanto su rodilla, agarró su cola y la llevo hasta sus labios.
La cola peluda de veguita era agradable al tacto y tenía un olor dulce.
Veguita se tapó la cara de vergüenza. Nadie antes avía tocado su cola y para ella era una sensación muy rara.
- deseo que esto nunca termine - pensó piccolo mientras jugaba con la cola. Miró a veguita y se paro sus manos revelando un tímido rostro.
Cerro sus ojos al igual que veguita y acerco sus labios a los de veguita pudo sentir el cálido aliento escapando de la boca de veguita... Solo unos milímetros más y...
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