Cuidando a Pan 11: Sumergido

Veguita se volteo con un tinte rojo en las mejillas.

- yo no canto - dijo bajando la mirada

- ¿y entonces que fue eso? - pregunto mientras se sentaba junto a ella.

- Pensé que la mejor manera de dormir la era arrullando la.

- ¿también eres buena con los niños? - pregunto con algo de risa

- no, sólo soy amable... como tú - respondió mientras miraba a piccolo

-¿como yo? - pregunto confundido

- si, o ¿me dirás qué juegas con la comida con todos? - pregunto juguetonamente

Las mejillas de piccolo se mancharon y se enojó un poco por recordarle que lo atrapó mientras jugaba con Pan.

-hm... - fue lo único que dijo piccolo, después tocó su espalda y se quejó.

- ¿estas bien? - pregunto veguita mientras miraba la mano de piccolo en su espalda.

- si, es sólo que...- piccolo se interrumpió, iba a decir que después de caer de espalda esta le dolía - me duele la espalda es todo - dijo cortante

Veguita acercó su mano en donde tenía piccolo la de el y empezó a dar ligeros vaivenes - ¿aquí? -pregunto veguita

-si, justo ahí - piccolo empezó a relajarse y retiro su mano - más abajo - dijo con un notorio sonrojo.

-se podría sentir mejor si te acostarás -dijo con un poco de rubor en las mejillas - sólo es un comentario

- hay una mesa de masajes en la otra habitación - la cara de piccolo expresaba placer, Veguita por fortuna no miraba nada.

Veguita se sorprendió un poco por el comentario pero accedió; Pan no despertaría en toda la noche.

Al entrar en la otra habitación veguita prendió unas velas de relajación. No era mucha luz la que proporcionaba pero era suficiente como para ver los objetos en la habitación.

Piccolo se quitó su capa y turbante y se recostó en la mesa.

Veguita busco en un pequeño mueble de madera y encontró una botella de aceite.

-encontré una botella de aceite, ¿quieres que la utilice? - pregunto mientras miraba a piccolo

- como sea- dijo sin mucha importancia

Veguita pensó en utilizar la botella pero aún no.

Veguita se hacerco a piccolo y continuó dando vaivenes en la espalda de piccolo.

- más abajo - decía piccolo mientras se sumergía en el placer.

Veguita obedeció a piccolo hasta llegar en el límite de su espalda baja, un poco más y veguita daría masajes en una parte más íntima.

- más abajo - pronunció piccolo muy relajado

- pero piccolo esa parte ya no es espalda, esa parte... - veguita se interrumpió...

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top