Capítulo Ocho
Domingo 20 de Noviembre de 2022.
Ciudad de México, México.
7:30 AM
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Estoy tomándome mi segunda taza de café de la mañana cuando Max cruza la línea de meta del Gran Premio de Abu Dabhi en nada más y nada menos que primer lugar.
Este fin de semana estaba siendo todo lo contrario a lo que había sido el pasado. Max había logrado la pole position y logró cuidar esa primera posición durante la carrera.
Estaba cerrando con broche de oro su mejor temporada en Fórmula 1. Y estaba muy feliz por él.
Aunque cualquiera que me esté viendo en estos momentos pensaría que estoy a punto de insultar al corredor portador del número 1.
Digamos que el levantarme antes de las 6 de la mañana en un domingo no es mi actividad favorita.
La que si que estaba rebosando de alegría era Jaqui, ya que Charles Leclerc, su piloto favorito, había terminado en segundo lugar y también había asegurado la segunda posición en el campeonato de pilotos contra Checo. Igual, antes de que Charles cruzara la meta había gritado “perdóname Checo, pero Charles es el amor de mi vida”, para posteriormente empezar a dar saltos de emoción.
Y luego estaba Daniela, quien no había salido de fiesta ayer porque “no quería perderse la carrera de hoy” —aunque bien sabíamos que no había salido porque eso implicaría que Raúl viniera y se quedara a dormir con ella, y no quería que volviéramos a pasar por lo mismo de la semana pasada—.
Tampoco puedo dejar pasar el hecho de que Daniela y Jaqui habían hecho una apuesta, y ahora mismo estaban esperando ansiosas quien la ganaría. El lunes les había contado a ambas una parte de la llamada telefónica, incluida la promesa de Max y la supuesta dedicatoria. Después de haberlas visto sacar sus propias conclusiones por una gran cantidad de tiempo, habían decidido apostar como iba a ser la dedicatoria.
Daniela había apostado que Max diría directamente mi nombre, en una entrevista o algo así. Jaqui apostó una dedicatoria más tranquila, y que solo haría un gesto o algo más secreto. Quien perdiera la apuesta tendría que hacer de comer todos los días hasta que el semestre terminara, en aproximadamente tres semanas.
Yo sinceramente estaba esperando que Max no lo hiciera, pero el estaba aferrado a esta idea de que lo mínimo que podía hacer es dedicarme una victoria. Así que solo me quedaba esperar el momento, y rezarle a todos los santos del cielo que lo hiciera de forma discreta.
Max y yo habíamos hablado casi todos los días desde hace una semana, si no era por llamada, era por mensajes, pero mínimo platicábamos cinco minutos al día. Decir que no estaba feliz con esto sería mentir.
Vemos los primeros tres lugares haciendo “donas” en la pista, para después ver a Sebastian Vettel –quien estaba corriendo su última carrera en F1– hacer lo mismo. Jaqui estaba llorando mientras repetía una y otra vez “no te vayas Seb”.
Después de unos minutos más llega el momento de las entrevistas. Primero entrevistan a Sebastian y luego a Max.
—Esto se va a poner interesante.– Dice Jaqui mientras se vuelve a acomodar a lado mío en el sillón.
Al otro lado de la pantalla, el entrevistador le pregunta al neerlandes sobre la carrera, y sobre como calificaría su temporada. Cuando al fin creo que terminarán la entrevista, le preguntan a Max si quería dar un mensaje especial.
No, no, no por favor no...
—¡Si, claro! Me gustaría darle las gracias a todas las personas que han estado apoyandome esta temporada, en especial a mi familia y a mi equipo, esperemos el siguiente año sea igual de increíble que este.
Bueno, eso no estuvo tan...
»También me gustaría dedicar esta victoria a alguien muy especial. Esta es para ti Mel. Muchas gracias a todos–. Y, sin decir nada más, sale del enfoque de la cámara para que el siguiente piloto sea entrevistado.
—No mames Jaqui, ¡te lo dije!– oigo que dice una Daniela muy emocionada. Siendo sincera, estoy feliz de que ella haya ganado la apuesta, digamos que su comida no es la mejor.
No sabía como estaba siendo la reacción de Jaqui, porque no había movido mi vista del televisor para nada. Lo que menos quería que sucediera, sucedió.
Digo, desde el día en que había aceptado ser parte de esta “relación” sabía que mi existencia iba a pasar de ser muy poco conocida a demasiado pública. El problema era que todo esto estaba avanzando demasiado rápido y yo aún necesitaba tiempo para asimilar todo.
Solo esperaba que los fanáticos no se pusieran a investigar como locos quien era «Mel» –aunque no dudaría que ahora mismo estén buscando entre las personas que sigue Max en Instagram–.
—¿Sigues ahí Melissa?– mis pensamientos son interrumpidos por Jaqui, quien me ve preocupada.
Regreso a la realidad, en donde Daniela está recogiendo las tazas vacías de la mesita de café en la sala, mientras que en la televisión solo veo a los pilotos celebrando con la champaña. A lado mío está Jaqui, con teléfono en mano, una pequeña mirada y ya sé que está revisando Twitter.
—¿No me digas que mi nombre ya está rondando por todo Twitter?
—Erm... Noo, nada de eso...– me responde mientras bloquea la pantalla de su celular.
Que mejor confirmación que esa.
Me llevo las manos a la cara y pienso en todas las cosas que puedo hacer ahora mismo, pero la realidad es que solo quiero hacer lo que últimamente mejor me sale: dormir para evadir mi realidad.
—Me voy a dormir. No me vayan a despertar.
—¿No quieres desayunar primero?– grita Daniela desde la cocina.
—Nope, dormiré hasta el medio día si es posible.
Y ni corta ni perezosa, salgo corriendo hacia mi cuarto con Darcy siguiéndome.
Una vez instalada en mi cama, pongo mi mente en blanco y me dedico únicamente a dormir. Y por unas horas soy feliz en el mundo de los dulces sueños, hasta que mi teléfono interrumpe mi bello momento de descanso.
—¿Bueno?– ni siquiera revisé el número de teléfono a la hora de aceptar la llamada, así que no sé que esperarme.
—No sé que significa eso, pero espero sea un ¡hola Max!– me responde la voz del neerlandes que de repente me sacaba unas cuantas canas verdes.
Eso significa ¡no me pudiste hablar en peor momento, hombre!
No me da tiempo de responder porque escucho como alguien más se une a la conversación.
—¡Hola Melissa, soy Brad! Espero que esté todo bien. Ahora, no sé si es a ti a quien le tengo que reclamar que Max ha estado escuchando las mismas cinco canciones de Taylor Swift todo el día durante los últimos días...
—Ok Brad, creo que llegó el momento de que te vayas...– Max vuelve a hablar, sonando un poco molesto.
—Además, ya hasta se sabe las letras de las canciones, de repente se pone a cantar...
—Creo que llegó el momento de que vayas y busques a Jo y hablen de lo que sea que los fisioterapeutas hablan... No me importa... Si, sirve que dejas de joder...– lo último intenta decirlo en un susurro, lastima para el que yo lo escuché. —Dice Brad que lamenta despedirse tan pronto, pero tiene algunas cosas que hacer y que disfrutó su corta plática.
Hazte tonto Gatito.
—¿Así que ya escuchas a Taylor Swift?– no voy a soltar la plática, ahora quiero mis detalles.
—Erm... puede que tal vez, solo tal vez...
Está nervioso, como puede ser posible que se siga poniendo nervioso al hablar de música.
»También puede que haya escuchado Speak Now completo...
Bueno, eso sí no lo veía venir, o al menos no ahora. No habíamos tocado el tema de los álbumes de Taylor desde hace ya un buen rato. Esto solo demuestra lo comprometido que está con la promesa, y me gusta eso.
—¿De verdad?– me responde con un ruido de aceptación. —¿Y qué te pareció?
—Me gustó, pero no al nivel de Fearless, siento que le faltó algo.
¿Cómo puede ser posible que le gustara más Fearless que Speak Now? No lo entiendo.
En mi opinión muy personal, Speak Now es mil veces mejor que Fearless, pero bueno.
—Ahora mismo respeto tu opinión, pero no estoy nada de acuerdo con ella, así que mejor preguntaré por las canciones. Aunque si dices algo malo sobre Enchanted te dejaré de hablar.
Al otro lado de la línea solo escucho su risa. Taylor Swift ayúdame porque no miento cuando digo que disfrutó mucho su risa.
—Creo que Enchanted es la mejor canción del álbum. Junto con Mean claro está.
Claro que le gustó Mean, lo supuse bien.
—Bueno, ahora me caes mejor. El mundo necesita más stans de Mean.
Más risas al otro lado de la línea. Por un momento olvidó porque estaba irritada al inicio de la llamada.
¿Debería preguntarle por Dear John? Qué tal que...
—Hice toda una lista de como las califiqué, te la mandaré después, ¿ok?
—Perfecto. Por cierto, ¡felicidades por el triunfo de hoy!
—¿O sea qué si viste la carrera? Vaya, gracias, yo... necesitaba esa victoria–. Por su voz sé que está sonriendo, y no está de más decir que yo también lo estoy.
—¡Claro que la ví! Te dije que todo iba a mejorar, y así fué. Ahora puedes darte el lujo de irte a disfrutar tus muy merecidas vacaciones.
—¡Ja! Ni tanto. Todavía tengo pendiente los test de llantas para la siguiente temporada, la gala de la FIA, un evento que organizará Honda en Japón y otro evento en la base de Red Bull, en Inglaterra. Mis vacaciones están un poco lejanas aún.
—Bueno, pero al menos vas a descansar un poco, ¿no?
—Un poquito. ¿Y tú? ¿Ya casi terminas las clases?
—No, hasta mediados de diciembre. A partir de mañana empiezo a tener algunas entregas finales.
El fin de semestre estaba siendo todo lo que esperaba, estresante.
—Vaya, creo que nunca había estado tan feliz de no haber ido a la universidad.
Me río por ese comentario. Era inevitable que no me arrepintiera haber entrado a la universidad, a veces sentía que me quitaba las ganas de vivir.
Max y yo seguimos platicando unos minutos más, hasta que ambos tenemos que colgar, y justo cuando estoy colgando es cuando recuerdo lo que había pasado hace unas horas.
No quiero pensar en eso, quiero hacer como si nada pudiera pasar. Porque se que si lo pienso demasiado voy a empezar a replantearme todo lo que ha sucedido, y no quiero ni puedo dar marcha atrás ahora mismo.
Así que lo siguiente que hago es apagar mi teléfono por un tiempo indefinido y esconderlo en uno de los cajones de mi escritorio. Lo que tenga que pasar, va a pasar.
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holi gente bellaaaa!
mucho relleno 🤪 pero sin relleno no hay sándwich dirían por ahí, así que aquí estamos.
lo subo hoy en honor a que al finnnnn empieza el summer break, honestamente estaba a una carrera de quedarme calva o de un infarto, pero feliz pq mis varones estuvieron en el podium hoy 😭
anyways, espero mis capitulos dejen de ser una mierda pronto, crucen los deditos.
gracias gracias por leer, gracias por sus votos y comentarios, lqm, nos leemos la siguiente semana si dios taylor lo permite ✨
besos, bai 🤍
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Twitter: itsferchabitch
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