"Nunca podrás cambiar la forma en la que se sienten.
Mejor déjalos hacer lo que quieran."
— Kissing a Fool

A partir de ese día en el restaurante Sehun comenzó a ser más protector con Junmyeon. Siempre que tenía oportunidad esperaba afuera de sus salones para recogerlo y poder acompañarlo a su siguiente clase, pues quería asegurarse de que nadie podría gritar algo insultante o agredirlo en los pasillos. También los días en los que salía temprano decidía esperar algunas horas en la biblioteca para poder ir por él a su última clase y llevarlo a la salida con sus amigos sin problemas.

En un inicio Sehun creyó que no sería de mucha ayuda para Junmyeon, pues él era alguien tímido y reservado, pero tras recordar su última experiencia algo despertó en él y surgió una necesidad abrumadora de proteger al mayor.

Fue así que mientras caminaban juntos por la escuela o almorzaban en la cafetería, intentaba mantenerse alerta para poder reaccionar a tiempo a todas esas miradas despectivas que algunas personas les lanzaban. Al principio sus ojos juzgadores lograban intimidarlo un poco, pero sentir el agarre de la mano de Junmyeon en la suya le recordaba lo mucho que deseaba alejarlo de esa energía tan negativa, dándole la fuerza que necesitaba para enfrentarlos y lograr que desviaran la mirada.

A pesar de su protección seguía muy latente, no pudo evitar que los pensamientos y preguntas se juntaran en su mente. Se sentía confundido en cada ocasión que descubría los ojos de Jongin sobre Junmyeon cuando el moreno llegaba a la cafetería, podía ver en sus ojos que deseaba acercarse, sin embargo la negativa de Junmyeon de tener a su exnovio frente a él era muy fuerte.

El mayor por su parte había notado la atención que estaba recibiendo por parte de Sehun, creyó saber porqué se trataba, pero no quiso enfrentarlo y desencadenar una serie de preguntas que realmente no quería responder, por lo que decidió aceptar cada gesto con una sonrisa, tomó su mano cuando lo notaba demasiado tenso frente a él y le agradecía cada que tenía oportunidad.

— ¿Qué harán este fin de semana? —preguntó genuinamente curioso Jongdae mientras veía a sus amigos en la mesa.

—Tengo toneladas de tarea que terminar—contestó Jaehyun con un suspiro pesado.

—Kyung y yo iremos al cine—respondió después Chanyeol con la emoción escapando de sus ojos, todos lo voltearon a ver con una sonrisa—. Hace mucho que no tenemos una cita.

Kyungsoo asintió de acuerdo, recargando su cabeza sobre el brazo de Chanyeol y sonriendo en el proceso.

— ¿Ustedes también saldrán? —preguntó Kyungsoo a Sehun y Junmyeon.

Ambos chicos se miraron un segundo antes de negar de inmediato. En realidad Sehun no tenía planes para ese fin de semana, estaba pensando en terminar su tarea y tal vez ver algunas películas en la comodidad de su habitación si llegaba a tener tiempo disponible. Junmyeon, por otro lado, solo tenía en mente terminar sus proyectos y estudiar para los exámenes que tendría en unas semanas.

— ¿Por qué no tienen una cita como Chanyeol y Kyungsoo? —les cuestionó Jaehyun. Sehun miró a Junmyeon sin saber cómo responder a ello.

—No me digan que nunca han tenido una...—dijo un poco escandalizado Jongdae, y a juzgar por las expresiones en blanco de ambos chicos pudo saber que su comentario era cierto—. ¡No puede ser!, pero si han salido por semanas.

—C-creo que nunca lo habíamos pensado—habló inseguro Junmyeon.

— ¡Vengan con nosotros al cine! —sugirió Chanyeol emocionado—. ¡Tengamos una cita doble, será divertido!

Junmyeon miró a Sehun para intentar saber su opinión al respecto, observó inseguridad en sus ojos y supo que no era una idea que le emocionaba del todo. A él, por otra parte, no le molestaba, le gustaba un poco pensar en salir con sus amigos y pasar tiempo con Sehun; sin embargo no quería forzar las cosas, así que decidió que debía negarse al ofrecimiento.

—No estoy seguro...

Fue lo único que pudo murmurar, causando que Chanyeol borrara su sonrisa y Sehun volteara a verlo al percibir un poco de decepción en su voz. Sehun había escuchado la propuesta y le agradó la idea de poder salir con ellos, incluso se permitió emocionarse, pero solo bastaron unos instantes para comenzara a pensar que salir en una cita doble sería rebasar la línea que habían tratado de dibujar. Aunque al ver su expresión supo que el mayor deseaba ir tanto como él.

No le haría daño a nadie si iban.

—Claro, ¿por qué no? —comentó Sehun sin despegar su mirada de Junmyeon, el mayor volteó para encontrarse con sus ojos y observarlo un poco dudoso—. Podemos ir si quieres...

— ¿En serio?

Sehun asintió un poco nervioso, pero la sonrisa que surcó el rostro de Junmyeon lo hizo sentir mejor. Tal vez esa salida podría hacerles bien, quizá de esa manera Sehun podría deshacerse de la amargura que su última salida había causado.

Al ver a la pareja asentir al ofrecimiento, Chanyeol volvió a emocionarse causando que Kyungsoo lo viera con adoración. Siguieron hablando del tema unos cuantos minutos, entre pequeños planes de cosas que deberían hacer en su primera cita y comentarios en donde Jongdae se burlaba de ellos. Seguía sin poder creer que durante todo ese tiempo nunca hubieran salido solos.

Ese mismo día Junmyeon salió primero de sus clases y caminó fuera de su salón mientras pensaba en dirigirse directo a casa, sin embargo en ese preciso momento recordó a Sehun y que el menor saldría en media hora. Dudó un poco, pero al final decidió esperarlo y recogerlo fuera de su salón tal como su novio lo hacía a diario por él.

Salió del edificio hacia el lugar en donde sabía se encontraba Sehun, subió las escaleras hasta el segundo piso y se paró delante de la puerta correspondiente. Podría haber ido a la biblioteca durante esos minutos que tenía libres, pero quería recibir un poco de aire fresco en ese edificio que no lo hacía sentir sofocado.

Recargó su espalda en el barandal y sacó su celular para matar el tiempo. Fue por esa misma distracción que no pudo notar las dos siluetas que se acercaban a paso lento mientras conversaban entre sí. Luhan y Baekhyun, quienes se dirigían a la cafetería para poder comprar algo que matara el hambre hasta que terminaran su proyecto, notaron la silueta de Junmyeon cuando se encontraban a unos cuantos metros de distancia. Luhan lo observó durante todo el tiempo que pudo, intentando encontrar cualquier señal que le dijera qué tipo de persona era Kim Junmyeon.

Baekhyun le había comentado que el chico no lucía tan malo como los rumores apuntaban. Al parecer su amigo había intercambiado algunas palabras con él unos días atrás y su amabilidad lo había sorprendido por completo.

Luhan dedujo que Junmyeon se encontraba ahí para recoger a Sehun de su última clase, él mismo sabía bien todo el horario del menor y no podía pensar en otra razón que atrajera a Kim Junmyeon a ese edificio en particular. Debía admitir que le molestaba un poco su presencia, pero no podía hacer nada al respecto cuando él había sido el causante de toda esa situación. Tal vez, muy en el fondo, comenzaba a arrepentirse de su decisión.

Algunos minutos después la puerta se abrió sin previo aviso, Junmyeon miró el reloj notando que aun faltaban diez minutos, por lo que supuso que el profesor había dejado ir a su clase temprano. Después de todo era un viernes en la tarde.

Miró cada rostro que cruzaba por la puerta esperando encontrar a Sehun entre ellos. Algunas personas lo miraron con curiosidad y otras con un aire de reconocimiento que a Junmyeon le eran tan familiar desde hace algunos meses. Suspiró al saber que no sería libre de los rumores en ninguna esquina de esa universidad.

De pronto reconoció el cuerpo alto del menor y no pudo evitar sonreír al instante. Sehun por su parte se despedía de manera breve y nerviosa de un par de compañeros con los que a veces conversaba en clase. Los chicos lo despidieron y fue entonces que desvió la mirada y encontró a Junmyeon esperarlo a unos cuantos pasos de distancia.

Se acercó a él por completo confundido y con un sentimiento que no supo nombrar creciendo en su interior. Sonrió brillantemente al notar la expresión contenta de Junmyeon.

—Jun... ¿viniste por mí? —preguntó incrédulo—. Creí que habías terminado hace un rato.

—Recordé que salías un poco más tarde y pensé que podríamos irnos juntos—contestó entusiasmado tomándolo de la mano y jalándolo hacia la dirección de las escaleras, Sehun no puso resistencia y se dejó llevar con gusto—. ¿Eran amigos tuyos?

Por alguna razón se sentía feliz de saber que el menor tenía otras personas a su alrededor que compartían clase con él y lo hacían sentir incluido. Sehun por otra parte, supo a quién se refería de inmediato y no pudo contestar, esos chicos lo saludaban con amabilidad pero no sabía si era apropiado nombrarlos sus amigos.

—Algo así... hablamos de vez en cuando.

—Me alegro—al escucharlo miró su rostro y encontró en ella una sonrisa y ojos brillantes dedicados solo para él, haciendo que volviera a sentir aquello innombrable—. ¿Quieres que te acompañe a casa?

—N-no quiero ser una moles...

— ¡Vamos! —lo interrumpió de inmediato mientras lo volvía a jalar—. Cerca de tu casa hay una tienda de conveniencia, ¿no?, podemos pasar por un helado.

Sehun asintió, a unas cuantas cuadras de su edificio había una pequeña tienda de veinticuatro horas. Sin mas que agregar ambos chicos salieron de la universidad tomados de la mano, incluso cuando ya habían caminado varias calles y no había algún estudiante cerca ambos mantuvieron el agarre mientras hablaban y reían.

Llegaron a la pequeña tienda y compraron algunos dulces, helados y bebidas; al salir decidieron tomar asiento en una de las mesas que se encontraban afuera del establecimiento y permanecieron ahí por un par de horas. Hablaron con la misma comodidad de siempre, rieron por sus chistes sin sentido pero que de alguna manera tenían significado entre ellos y lograba arrancar una carcajada de sus gargantas; compartieron los dulces con naturalidad e incluso Junmyeon recargó su cabeza sobre su hombro, lo cual no causo problema en el menor.

Fue inevitable para Sehun no pensar en aquella noche en la que se conocieron, tan desastrosa y que lucían tan alejada. Nunca pensó que esa persona que se había lanzado a su cuerpo sin previo aviso sería ahora quien lo hacía sentir tan cómodo y lograba sacar su lado más valiente.

Para el final de la tarde Junmyeon lo llevó hasta la puerta de su edificio, tal como le había prometido cuando salieron de la escuela. Se despidieron con un ademán de manos y sonrisas enormes que no habían abandonado sus rostros en las últimas horas. El mayor le prometió que le mandaría un mensaje con los detalles sobre la cita doble que tendría al día siguiente y Sehun asintió un poco emocionado.

A la tarde siguiente Sehun se miró en el espejo de su habitación mientras se probaba varias playeras y camisas. No sabía qué tipo de atuendo debía usar para la ocasión y además de sentirse emocionado, también estaba nervioso. No sabía qué deberían hacer Junmyeon y él frente a sus amigos, no sabía si ellos descubrirían su relación falsa cuando notaran la falta interacciones íntimas entre los dos.

Revolviendo su cabello un última vez, para desordenarlo y darle un aire casual, salió de su habitación y se encaminó a la puerta de su casa. Se acercó a su madre que estaba sentada en el sillón de la sala viendo alguna película y se despidió de ella con un beso en la mejilla, gritó una última vez para hacerle saber a su padre que saldría y se acercó al recibidor para colocarse sus tenis.

Justo cuando estaba por irse la puerta de la cocina se abrió revelando a su padre con un plato de algo que había encontrado en el refrigerador. El señor se acercó a él y le revolvió el cabello.

—Dijo tu madre que saldrías con tu novio y unos amigos—comentó con una sonrisa, Sehun no supo responder por lo que miró a su madre que escondía una sonrisa burlona detrás de su mano.

Sehun se preguntó si debería decirles a sus padres la mentira que todos en la escuela conocían. Ellos sabían que Luhan y él habían terminado hace un par de meses y aunque mencionó a sus nuevos amigos, nunca habló de Junmyeon de una manera especial que les hiciera pensar que estaban saliendo.

—Te vi llegar con él ayer—le explicó su madre sonriente e intentando molestarlo.

Sehun estuvo a punto de replicar cuando vio la mano de su padre extendida hacía él, tomó lo que le ofrecía y miró sorprendido el dinero que le había entregado. Levantó la mirada y fue en ese momento que el señor decidió guiñar con un aire cómplice.

—Diviértete, no llegues tarde.

No lo dejó hablar, solo palmeó su espalda y se dirigió al lugar en donde se encontraba su esposa. Sehun pensó que era una perdida de tiempo intentar negar en ese momento que Junmyeon y él eran algo, después se encargaría de hacerles saber que el mayor solo era un amigo.

Salió de su casa hacía la parada de autobuses que lo llevaría a la plaza en la que había acordado de verse con los demás. Afortunadamente él era alguien bastante puntual, por lo que logró llegar al lugar quince minutos antes. Tomó asiento en una de las bancas y miró alrededor atento a cualquier rostro que pudiera reconocer.

Al pasar casi los quince minutos miró su celular un poco preocupado. Checaba el chat de Junmyeon en busca de cualquier señal que le dijera que el mayor estaba en camino. Después pensó que tal vez había entendido mal en dónde debían verse, por lo que volvió a leer el mensaje varias veces solo para estar seguro. Unos cuantos minutos después comenzó a sentirse ansioso, tal vez no llegarían, quizá habían decidido ir a otro lugar sin avisarle.

Sus pensamientos no pudieron llegar más lejos pues sintió una mano tomarlo del hombro para llamar su atención. Subió la mirada de su celular hasta encontrarse con la sonrisa, acompañada de un hoyuelo, de Chanyeol.

— ¡Llegaste temprano! —lo saludó emocionado—. Lamento la tardanza, cuando venía vi una tienda de música, entré y cuando volví a mirar el reloj ya era tarde.

Sehun sonrió aliviado de que sus últimos pensamientos no fueran realidad. Miró alrededor en busca de las otras dos personas, sin embargo notó que el alto venía solo por completo.

—Se les hizo un poco tarde a Junmyeon y Kyung, pero no tardarán en llegar—comentó como si pudiera leer sus pensamientos.

Sehun asintió y se levantó de su asiento para estar a la misma altura de Chanyeol. Permanecieron en ese lugar unos cuantos minutos con el alto hablando sobre cualquier cosa y Sehun intentando seguir la conversación lo mejor posible. Tal como dijo el chico, los otros dos no tardaron en llegar corriendo.

—Lamento la tardanza—se disculpó Junmyeon con la respiración un poco entrecortada—. Pero alguien tardó en salir de su habitación.

—Tenía un trabajo que terminar, no puedes culparme—se defendió el bajo mientras se acercaba para abrazar a su novio, Junmyeon rodó los ojos al escucharlo.

—No sabía que vivían juntos—comentó Sehun mirando a Junmyeon mientras lo tomaba de la mano.

—Me mudé con él hace unos siete meses—respondió con casualidad.

— ¿Por qué? —le preguntó curioso, sin embargo fue Kyungsoo quien respondió con un encogimiento de hombro.

—Por seguridad—el menor esperó a que explicara un poco mejor, pero parecía que nadie tenía la intensión de hacerlo—. ¡Vamos a comer, me muero de hambre!

Sin mas que agregar los cuatro chicos se dirigieron a un restaurante famoso que se encontraba en la misma plaza. El plan era comer ahí y después dirigirse al cine para ver la película que Kyungsoo escogió por ellos, al parecer el chico había estado esperando el estreno desde hace unos meses.

Llegaron al lugar y tras pedir una mesa para cuatro, todos se dirigieron al lugar que les indicaron. Tomaron asiento acomodados por parejas y todos comenzaron a leer el menú en silencio. Unos cuantos minutos después llegó un mesero que se presento con amabilidad y les pidió sus órdenes.

Kyungsoo, Chanyeol y Junmyeon hablaron con claridad, pero cuando llegó el turno de Sehun el menor se sintió un poco nervioso. Miró el menú fingiendo decidirse por lo que ordenaría cuando en realidad intentaba buscar fuerza en su voz para que esta saliera lo más segura y clara posible. Por alguna razón siempre había sido complicado para él poder hablar cuando se encontraba frente al empleado de un establecimiento, pensaba de manera irracional que lo juzgarían cuando escucharan lo que tenía por decir, y aunque intentaba trabajar en ello, estar frente a sus amigos y aquel extraño lo regresó a los días en los que no podía siquiera articular palabra.

De pronto sintió una mano colocarse sobre su pierna, descolocado miró a Junmyeon quien le sonrió y logró tranquilizarlo un poco. Dejó salir un pequeño suspiro y finalmente vocalizó lo que había decidido ordenar. No pudo mirar los ojos del mesero, pero por lo menos su voz fue lo suficientemente alta para que le entendiera.

Nadie en la mesa comentó lo que acababa de suceder, lo cual hizo que Sehun se sintiera demasiado agradecido con su comprensión. Continuaron con su plática durante toda su estadía en el establecimiento sin mayores percances, Junmyeon acarició su pierda durante todo el tiempo intentando transmitirle comodidad, hasta que sus ordenes llegaron a la mesa y tuvo que retirar la mano para poder sostener sus palillos.

A pesar de ello, ambos chicos no tardaron en buscar el tacto de sus manos en cuanto terminaron de comer y seguían con su conversación con la pareja frente a ellos, Sehun acarició sus dedos con lentitud sobre la mesa sin prestar verdadera atención a sus acciones y lo que podrían causar. Veinte minutos después todos se levantaron de sus asientos hacia la caja registradora, Sehun comenzó a sacar su cartera cuando Junmyeon lo detuvo.

—Yo pago la comida—le aseguró y al ver que Sehun estaba a punto de negarse decidió agregar algo más—. ¿Qué tal si tú invitas el cine?

Sehun asintió convencido, le gustaba la idea.

—Ustedes son la única pareja que conozco y discute por pagar—comentó Kyungsoo sacando su cartera y ganando un sonoro beso en su mejilla por parte de Chanyeol que quería evitar que se molestara por algo como ello.

—Los esperaremos afuera—anunció el alto arrastrando a Sehun con él hacia la salida del restaurante.

Una vez fuera ambos se sumieron en un silencio inusual, el menor pensó en cómo iniciar conversación, aunque no fue necesario pues Chanyeol fue el primero en hablar.

—Sehun, he querido hablar contigo—le comentó con seriedad—. Sé que Junmyeon no te dirá ahora, pero siento que debes saberlo.

— ¿Sucede algo? —preguntó un poco preocupado por la atmósfera que los rodeaba. Chanyeol pensó en sus palabras antes de continuar.

—Sé que has notado que la gente habla sobre Junmyeon—el menor no pudo negarse y solo lo observó con mucha más atención, tal vez sabría lo que necesitaba—. Quizá está de mas decirlo, pero todo es mentira.

— ¿Qué sucedió en realidad?

—Me parecía un poco raro que no preguntaras antes—murmuró bajando la mirada—. No puedo decírtelo, no me corresponde... aunque ni siquiera yo conozco toda la historia.

— ¿Pero cómo...?

—Todo inició cuando Junmyeon terminó con Jongin—contestó—. Jongin es algo popular en la escuela y todos comenzaron a inventar rumores de lo que había sucedido... supongo que habrás escuchado algunos y sabrás que no son muy agradables.

Sehun asintió sintiendo un poco de molestia al recordar aquel comentario.

—A Junmyeon ya no le importan—lo intentó tranquilizar—. Sé que sientes curiosidad por lo que sucedió e impotencia por no poder callar a todos, nosotros nos sentimos igual, pero sé que Junmyeon te contará la historia cuando esté listo.

Sehun soltó un suspiro. Chanyeol tenía razón, sentía impotencia por no poder hacer demasiado para ayudar a Junmyeon. No podía callar a todos y eliminar los malos comentarios, lo único que había hecho era mirar a aquellos que se atrevían a observarlos e intimidarlos tanto como fuera posible con ello. Era inútil.

—Sehun—llamó su atención el alto de nuevo y levantó la mirada en el momento que sintió la mano del chico sobre su hombro. En su rostro tenia una sonrisa ladeada—. Solo quiero pedirte que cuides de mi amigo, por favor.

Asintió de inmediato, era lo que más quería. Cuidar y proteger a Junmyeon.

A unos cuantos metros Luhan, quien venía junto a Minseok, reconoció de inmediato la silueta de Sehun a la distancia cuando pasaron cerca de él, notando que se encontraba junto a un chico que era parte del grupo de Kim Junmyeon. Detuvo su paso para observarlo mientras decidía en su interior si acercarse o no.

— ¿Sucede algo, Han? —preguntó el otro chico por completo ajeno a lo que ocurría. Al no recibir respuesta siguió la dirección de su mirada y encontró al mismo chico que le había causado tantos dolores de cabeza—. Vámonos.

—Espera—lo detuvo Luhan dando unos pasos al frente—. Quiero saludarlo.

Antes de que pudiera ir más lejos observó el rostro de Sehun iluminarse cuando Junmyeon y otro de sus amigos salieron de un restaurante. Luhan miró cómo el chico se acercaba a su exnovio y lo envolvía en un abrazo que era correspondido fuertemente de inmediato. Algo dolió en su interior.

—Min, creo que me arrepiento—murmuró sin apartar la mirada del chico que caminaba de la mano de alguien más. Eso no debía suceder, eso no es lo que había pensado.

—Vámonos.

Minseok tomó de la muñeca a Luhan en un intento de alejarlo de Sehun. De alejar su mente de él, pero una mirada al chico le dijo que estaba muy lejos de lograrlo.

Tras media hora de caminar por la plaza observando algunas tiendas, los cuatro chicos se dirigieron al cine. De inmediato ambas parejas se colocaron en la fila mientras Kyungsoo les explicaba para cuál función debían comprar. Los primeros en pasar a la taquilla fueron ellos, dejando a Sehun y Junmyeon esperando.

El menor sostenía la mano de Junmyeon fuertemente. Se arrepentía un poco de haber dudado de él, de haber pensado por un segundo que tal vez esos rumores eran verdaderos; y tras escuchar a Chanyeol, aquella necesidad de ser el escudo de Junmyeon solo había incrementado.

— ¿Estás bien? —le preguntó el mayor al notarlo callado y un poco tenso.

—Sí—murmuró como respuesta al mismo tiempo que sacudía la cabeza y le sonreía un poco.

—Bien, porque serás tú quien pedirá los boletos—le anunció contento el mayor.

— ¿Qué?, p-pero...

—Nos toca—Junmyeon lo jaló hacia la taquilla que recién se había desocupado y le pidió que le dijera la función a la chica mientras él le preguntaba a Kyungsoo qué asientos seleccionar.

Un poco nervioso Sehun pudo hablar y hacerse entender, cuando le enseñaron la pantalla con los lugares disponibles entró en pánico al no saber qué decir, pero de inmediato Junmyeon regresó a su lado para susurrarle cuáles debían escoger mientras entrelazaba sus dedos una vez más.

Sehun volvió a hablar un poco más seguro y pagó de igual manera. Salieron del área de taquillas y se dirigieron a la dulcería en donde Chanyeol ya se encontraba comprando. Junmyeon le comentó que quería palomitas antes de dirigirse junto a Kyungsoo quien también esperaba por su novio.

Sehun volvió a entrar en pánico, tal parecía que debía volver a vencer su pequeña ansiedad para poder comprar lo que Junmyeon quería. Tras algunos titubeos y manos temblorosas que entregaban el dinero, logró salir de la dulcería sin mayor problema para ir con las tres personas que lo esperaban.

—Lo hiciste muy bien—lo felicitó Junmyeon con un beso en la mejilla en cuanto llegó, Sehun se sonrojó ante ello y el hecho de que el mayor había intentado hacer que enfrentara sus miedos e inseguridades tres veces ese mismo día.

Los cuatro chicos entraron a la sala y se dirigieron a sus asientos. Chanyeol y Kyungsoo se envolvieron en su pequeña burbuja de inmediato, comenzando a susurrar y riendo ante cosas que solo ellos dos podían entender. Junmyeon suspiró al verlos, le alegraba demasiado ver a sus dos amigos tan enamorados.

Sin previo aviso sintió el cuerpo de Sehun acercarse al suyo con su brazo rodeando sus hombros. Lo observó con sorpresa e intentando comprender lo que sucedía, desde que habían salido del restaurante el menor había estado demasiado pegajoso con él.

— ¿Te molesta? —preguntó Sehun unos segundos después—. Pensé que sería normal que hiciéramos esto...

Junmyeon asintió de acuerdo y se acercó aun más a él, buscando su mano libre para poder tomarla entre las suyas. Inició la función con ellos acurrucándose aun mas conforme pasaban los minutos, terminando con la cabeza de Junmyeon recargada en el pecho de Sehun, y la mejilla del menor sobre el cabello de su novio falso.

No les importó tomar la mano del otro durante todo ese tiempo, no importo que se encontraran en una posición tan íntima, no importó que no hubiera nadie a quien deberían convencer sobre su relación, no importó que el ritmo de sus corazones se acelerara por la cercanía.

En esa sala oscura sin testigos de lo que realmente sucedía entre ellos, Sehun intentó ignorar lo mejor posible aquello que crecía en él con cada día que pasaban juntos; mientras que Junmyeon comenzaba a ser consiente de que quizás sus sentimientos por el menor eran más fuertes de lo que deberían.

Y eso no era parte del plan.

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¡Sorpresa!
Regresé MUCHO antes de lo planeado.
Por alguna razón me sentí muy inspirada para hacer este capítulo y PUM, AMONOS... ya quedó 😂

Date Me lleva en primer lugar en #SEHO desde hace tres días y yo estoy así 🤯
Quiero agradecerles a todos una vez más por leer, votar y comentar... en serio que verlos a todos significa una gran motivación para seguir escribiendo. 💕

Ayer leí un tweet que decía que los escritores de fics empiezan una historia porque tienen una escena de su ship en la cabeza y para poder escribirla deciden trabajar en todo un contexto, personajes y situaciones solo para llegar a aquello JAJAJA
Me sentí muy identificada.
Con Date Me no fue una escena en específico, pero si toooooodo lo que se viene.
Y creo que por eso estoy tan emocionada e inspirada, ya estamos llegando a la parte chida de la historia 😈

Díganme, ¿les gustó el capítulo?
¿Sienten que van rápido Jun y Hun? ¿Van lento?
¿Alguna idea de lo que pasará?
Creo que ya hay suficientes pistas para darse una idea de qué pasó con Jongin... desde el prólogo hay pistas JAJAJAJA
¿Alguna teoría al respecto?
¡Me encantan sus comentarios, los leo todos! 💕

Espero regresar en un par de semanas uwu
¡Nos leemos pronto! 👋