3 Años antes...

Shidou se abría paso por los escombros. El desastre que había dejado la batalla fue total, pero eso tenía arreglo. Milagrosamente, la gente se había salvado gracias a que las espíritus supieron trabajar juntas para salvar a cada unos de sus amigos y conocidos en la ciudad.

Fue un golpe bajo que se los fuera a atacar con todo. Y sólo por sus cristales Sephira que le daban los poderes a las chicas.

Pero ya todo acabó.

El podía estar seguro de ello. Las dificultades y el sufrimiento que tuvieron que pasar por DEM ya habían pasado.

No había nada que les podían decir lo contrario.

Todo había salido a la perfección.

Tras neutralizar a DEM, sellar a Kurumi y hacerle frente a la mismísima espíritu de Origen Mio Takamiya, lograron asegurarse de la victoria.

Se podía decir que estás "citas", las que Shidou empezó con Tohka, Yoshino, Kotori, Kaguya, Yuzuru, Miku, Natsumi, Origami, Nia, Mukuro y Kurumi, habrían acabado.

El logro salvar y proteger a cada una de ellas.

Luego de perderlo todo y fracasar en una línea alterna, gracias a <Vav> la "sexta bala" de <Zafkiel>, logró enviar su conciencia al pasado y repetir todo de nuevo.

Pero hubo un costo...

Shidou no pudo lograr uno de sus objetivos.

Debido a que...

El detuvo sus pasos.

Dentro de una edificación en ruinas, estaba sentado contra la pared y respirando dificultosamente y con una apariencia totalmente maltratada y arruinada por el poder espiritual el hombre responsable de todo el tormento que vivió Shidou junto con las espíritus.

Isaac Westcott.

Le faltaba parte de su cabello rubio color ceniza que parecía que se lo habían arrancado, su ropa negra estaba rasgada y hecha girones, la mayor parte de su piel estaba chamuscada... como si las llamas lo hubiesen consumido. Sus ojos estaban perdidos en el vacío, mirando al aire. De su boca, podía verse brotar un líquido negro espeso. Era su sangre... una sangre que fue contaminada al tal punto de no ser para nada biológicamente humana.

Shidou avanzó lentamente hacia él. Portando una espada en su mano.

<Sandalphon>

El ángel de Tohka.

Shidou simplemente se detuvo a dos pasos de distancia de Westcott. Estaba lejos pero con <Sandalphon> podía llegar fácilmente a hacerle más que daño a Westcott. Quien se hallaba muy débil. Al parecer, estaba en sus últimos momentos con vida.

Los ojos de ese agonizante Westcott lo miraron fijamente.

- Ah... niño...- dijo muy tranquilo- ya te habías tardado...

- Se acabó Westcott...- dijo tajante Shidou- no harás mas daño a nadie.

Westcott simplemente soltó una leve risa acompañado de una tos.

- No hace falta que me lo dígas Itsuka Shidou. O debería decir...

Takamiya Shinji...

Shidou tragó saliva. El hecho de que le mencionara ese nombre, hizo que volviera a recordar muchos momentos... de su vida anterior. Otra familia, otros pasatiempos... otro amor...

Hace nada, Mio Takamiya, la primer espíritu de Origen, había muerto. Había contrarrestado una gran cantidad de poder que equivalía a la de ella. De hecho, fue por ese mismo motivo, por el que Westcott estaba en esta situación inevitablemente con un fin fatal.

- Shinji Takamiya ya no existe... tu lo mataste.

- Hum... no lo comprendes eh? dí lo que quieras Itsuka, esta es tu historia... es imposible negarla...

- No. Tu eres el que no comprende.

- ¿Oh?, ¿Y en que estoy equivocado?

- En casi todo...

Westcott sonrió mucho a pesar de sentir mucho dolor en su cuerpo consumido.

- Sabes que esa criatura yo la traje a este mundo... la criatura que se enamoró de un niño de preparatoria común. La que aproveché su dulce inocencia... mientras descubría el amor con él. Oh...- Westcott fingió un tono sarcasticamente triste para burlarse de Shidou- que tristeza ver como acabé con la simple vida de su amado... para luego, ver como ella arruinada poco a poco a este mundo con tal de rescatarlo... ja ja ja ja.. ¿no se te hace eso... "romántico"? JAJAJAJA....

"COFF", "COFF", "COFF"

El mandamás de DEM toció mucha sangre...

Mientras que miraba a Shidou quien no dejaba de clavarle su mirada y empuñaba a <Sandalphon>, aún así... el decidió...

- Ja... jajaja...

Reírse junto con él.

- ¿Ahora le ves la gracia Itsuka?...

- Nop. Es simplemente que me decepcionas...

- Jaja ¿Y por qué?

Shidou clavó a <Sandalphon> en el suelo a un lado de él y se inclinó hasta estar frente a frente de Westcott.

- ¿En serio piensas que recordarme todas las estupideces que nos hiciste me van a hacer enojar?, ¿piensas que por ser... "un niño" no puedo controlar mi mente?, me decepcionas... Wizard patético...

Westcott sólo río patéticamente.

- Sí... parece que te subestimé... demasiado...

Justo apenas terminó de decir esa palabra, Shidou escuchó como alguien se acercaba velozmente detrás de él.

- ¡Muere!...

Dijo la voz de una mujer mientras le atravesaba su espada por el pecho...

Era Ellen.

No obstante, Shidou no sintió nada, más bien, su cuerpo no mostró ni el más mínimo dolor. Su cuerpo no perdió sangre.

Westcott sólo observaba. Mientras que Ellen puso una expresión de sorpresa en su rostro.

Shidou en ese instante... se desvaneció en una luz verde.

Había utilizado a <Haniel> para crear a un falso de él.

Ellen se desesperó ante tal movimiento.

- Ellen...- dijo Westcott difícilmente.

- ¡Tranquilo Ike!- dijo desesperada- ¡Necesitas un Realizer médico y estarás bien...!

Ellen quiso darse la vuelta pero no pudo... algo le impedía salir, una barrera invisible se interfería entre ella y el exterior de esa  habitación en ruinas. Golpeó, disparó, hizo de todo para intentar romperla, pero no podía.

- ¿Nunca te cansas de luchar eh Ellen?

Ella volteó a verlo.

- Sí es por nosotros, por tí. Nunca dejaría de matar aquellos que interfieran.

- Hum...

- Vaya, vaya...

Ellen se dio la vuelta y pudo divisar de nuevo al chico peliazul que hace nada se había desvanecido. Se acercó hasta <Sandalphon> que aún estaba clavado en el suelo y lo volvió a empuñar en su mano izquierda.

- ¡Tú maldito...

- Ya basta Ellen...

Ellen se detuvo sólo por recibir esa orden de Westcott. Y bajó sus armas sólo para ver a Shidou quien tenía una expresión neutra.

- Así que... ¿tenías planeado que ella me atacara por la espalda mientras charlabamos? Muy cobarde de tu parte.

- No sabía que iba a estar aquí Itsuka, me tomó por sorpresa que viniera aún con ganas de matarte.

Shidou se rascó la mejilla mientras miraba el suelo.

- Sí por eso mismo... tenía un plan sorpresa para ambos.

- Encerrarnos en un cubículo inpenetrable a cualquier arma para torturarnos...

Shidou soltó una leve risa.

- Puff... esta mujer necesita marido...

- ¿Qué dijiste? No te oí- dijo Ellen con dudas de lo que balbuceó Shidou en voz baja.

- No nada, que tienes mucha imaginación... para lo único que los encerré a tí y a esa basura ahí, es para demostrar lo muy animales que son.

- ¿Cómo te atreves?, juro que voy a matarte...

Shidou ni se inmutó sólo miró a Westcott.

- Dile a tu mascota que se calme, o ¿acaso ella habla por tí?

Westcott puso una expresión forzosamente graciosa por los dichos de Shidou.

- Tienes razón... debo de hablar por mí mismo Itsuka...

- Ike...- dijo Ellen dolorosamente algo sorprendida.

- Tienes tu oportunidad ahora Itsuka... ¿por qué no me matas ahora y así vengas la muerte de tu amada novia muerta?

- Jejeje- rio Shidou.

Lo que causó el enojo de Ellen.

- ¿De que te ríes?, si piensas hacerle algo voy a...

- Tranquila sanguijuela rubia, no pienso hacerle nada al que le chupas la sangre.

Shidou se puso la espada sobre su hombro mientras caminaba de un lado a otro en la habitación en ruinas.

- <Raziel> me lo mostro. Lo ví todo... ví como quemaron su aldea, ví como sobrevivieron y quisieron cambiar el mundo a su antojo... razón por la cual trajiste al primer espíritu. Cuando ella dividió y dio sus poderes a diferentes chicas... tú no sólo te empeñaste en buscarla si no en hacerlas sufrir más de lo que lo han hecho. Y tú... - Shidou se dio la vuelta mientras lo apuntaba con <Sandalphon>- ¿en serio piensas que te mataré así de fácil sólo para ahorrarte el sufrimiento que tanto te mereces?

- Ah vaya... de modo que el niño romántico se volvió sanguinario. Sólo por perder a su amada...

Shidou simplemente sonrió.

- ¿Sabes que nos diferencia a Shinji y a mí de tí Westcott?

Westcott no dijo nada simplemente se quedó callado.

- Shinji murió es cierto... pero murió dando la vida por lo que más amaba. Yo estoy vivo y logré salvar a las espíritus... salvo a Mio, pero era inevitable. En resumen... cumplimos nuestro propósito. Y tú... ja. Tú sólo te quedarás con la imagen de tu aldea en  llamas mientras estuviste a un pelo de cambiar el mundo, pero... algo, más bien alguien... que tu invitaste a este mundo, no pudiste controlarlo. Eso fue lo que te detuvo.

Westcott empezó a querer levantarse. Algo de lo que Shidou le dijo, más bien todo lo que le dijo, le afectó.

- Tú... tú... eres sólo un... humano...

- Tal vez, pero este humano vivira un día más... tú sólo vivirás el poco tiempo que te queda con una punzada en el pecho, la falta ser aire en ahorcandote y la simple impotencia pisandote la cabeza.

- Itsuka Shidou...- Ellen que hasta el momento estuvo callada, rompió el silencio- juro que cuando salga de aquí... te mataré a tí y a esas espíritus.

- Claro...- Shidou simplemente empezó a salirse del lugar dónde estaban- si es que te acuerdas para hacerlo...

- Escucha Itsuka...

Ante las palabras de Westcott... Shidou se detuvo sin voltearlo a verlo. Sólo quería escucharlo.

- Tal vez... me hayas vencido hoy. Tal vez hayas salvado a tu familia. Tal vez hoy hayas salvado el mundo... pero en un futuro... vendrá algo que será peor de lo que hayas vivido... algo más poderoso de lo que puedas ser... Y verás como te quitará todo lo que amas frente a tí... y ahí... desearás no haber nacido.

Shidou no dijo nada. Simplemente suspiró.

- Sea lo que sea... tú ya no estarás aquí para verlo. Adiós... Isaac Westcott.

Shidou salió de allí, mientras que en un lugar, se encontró con un hombre en silla de ruedas y una mujer detrás de él, eran el fundador de Ratatoskr y su secretaria.

Elliot Woodman y Karen Mathers, hermana menor de Ellen...

Elliot extendió su mano hacia la de Shidou.

- Gracias muchacho...

Shidou se la estrechó.

- No es nada señor. Si me disculpa, iré con las espíritus.

- Adelante... yo debo de ir a despedirme... de un viejo amigo.

Sin decirse más, cada uno tomó su camino, Elliot y Karen hacia donde estaban Westcott y Ellen... y Shidou en la playa donde estaba las espíritus.

_________________________________
_________________________________

- ¡Shidou!

Las chicas vieron venir a Shidou caminando lentamente  en dirección en donde estaban ellas en frente del calmo mar, luego de una dura batalla.  Se acercaron a él.

- Hola chicas...

- ¿Estás bien Shidou-san?- preguntó Yoshino.

- Oh sí estoy bien. Estuvieron geniales todas.

- Ha ha, gracias pariente mío- intervino Kaguya- estarás seguro con nosotras.

- Todas hicimos un esfuerzo para proteger a Darling ¿verdad chicas?

- Afirmar. Nos alegra haber ayudado a protegerte.

- Muku está feliz por Nushi-sama. Aunque Muku tiene hambre ahora.

- No te preocupes ya iremos a cenar...

El sol estaba a nada de desaparecer. Mientras que Shidou miraba junto a ellas.

- Entonces... ¿se acabó?- preguntó Natsumi.

- Ah... yo diría que sí Natsun- Nia dijo mientras le daba una chupeteada a su botella de cerveza- ahhh que rika está...

- ¿Y ahora que sigue Shidou-san?- intervino Kurumi- se supone que no hay nada más por hacer.

- Hay mucho por hacer...

- ¿Como qué?

- Ah pues.... ¿Quien tendría que cocinar, lavar la ropa o ir a citas con las chicas?

- ¿Piensan que era sólo por sellar poderes?, ¿por qué más creen que quería salir con ustedes?

- 'Tal vez verlas desnudas?... Shidou-kun'.

- Síp... dígo... ¡No!.  Yoshinon no des malas ideas.

Pero las chicas en vez de molestarse sólo sonrieron sonrojandose.

- Ahhh- suspiró Shidou- ¿Para qué me molesto?

- Bueno ya Shidou- Kaguya intervino- ¿Qué ibas a decir?

- Duda. ¿queremos saber?

- Es simple. Diversión chicas. Todas ustedes tienen distintos pasatiempos y gustos y creanme, disfruto de todo eso con ustedes.

- Ósea qué... ¿te disfrazarías de Shiori-san otra vez para mí Darling?

Miku con unos corazones en sus ojos preguntó eso mientra tomaba de las manos a Shidou.

- Wow, wow... yo nunca dije...

Pero al ver que Miku ponía los ojos vidriosos pues...

- Ahhh... supongo que puede ser...
Posible...

- ¡Yeiii!

- Jeje. Este Onii-chan...

- Y tu que... ¿quieres una paleta?

- Sí es de nuevo sabor... sí la quiero.

- Niña golosa.

- Jeje soy así Shidou.

- Ara~Ara... - Kurumi lo tomó del brazo- ahora que lo pienso, necesito a alguien que me de consejos para probarme lencería nueva...

- ¿Cómo dices?- preguntaron todas.

- Hey Shidou... - intervino Origami que estaba prestando atención.

- Dime Origami.

- Al volver a casa me dejaras lavarte la espalda mientras nos bañamos.

- Sería lindo... pero no gracias.

- De acuerdo, la entrepierna será entonces...

- Ya se- dijo Miku- ¿Qué tal si todas nos damos un baño con Darling al llegar a casa?

- ¡Siiii!- gritaron todas emocionadas.

- Bueno...- dijo Origami- supongo que toca compartir...

En eso, las chicas empezaron a hablar una sobre la otra mientras que Shidou sólo reía incomodamente mientras se rascaba la nuca. Pero... mientras las veía a cada una de ellas, sintió que faltaba la presencia de una.

- Tohka...- dijo en voz baja.

Miro a los alrededores y no estaba.

Natsumi se percató de lo que buscaba Shidou.

- ¿Shidou a quien buscas?

- A Tohka. ¿no la han visto?

- Pero... Tohka-san estaba aquí cuando  te vimos llegar- dijo Kurumi- ¿no la viste?

- No la llegue a ver.

- Vamos Shidou, no debe de estar lejos.

- Okay vamos a buscarla y luego...

De la nada, una luz brillante llamó su atención. Las chicas también la vieron así que fueron hasta allí... a ver que pasaba.

Al llegar, vieron dos personas ahí. Una chica de cabello morado oscuro y un vestido astral oscuro y un revelador y portaba una enorme espada con la misma aurea era el Rey demonio  <Nahemah>. Tohka estaba en su forma inversa... no obstante, en vez de darle importancia a su presencia... Tohka inversa estaba fijando su atención en algo que brillaba en el cielo.

Era un cristal sephira.

Y no cualquier cristal Sephira. Era el Cristal Sephira de Mio Takamiya.

Y la persona que lo portaba, era una chica irreconocible ya que tenía su cabeza cubierta. Vestía un vestido negro y grisaceo en algunas partes. Y tanto él, como las chicas, podían percibir un poder viniendo de esa chica que tenía el Cristal de Mio en sus manos.

¿Era... un espíritu?

Shidou sin importarle mucho la presencia de esa chica misteriosa.

- ¡Tohka!- gritó su nombre alto.

Tohka... la Tohka inversa, volteó a verlo y se fijó en ese chico peliazul acompañado de todas las espíritus.

- Humano... - dijo ella moviendo apena los labios.

Shidou estaba a punto de ir con ella, pero algo lo detuvo.

Vieron a la chica introducirse el Cristal de Mio en el pecho... y con una voz distorsionada dijo.

- Este es mi mundo ahora....

Y una luz encegueció el mundo entero.