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(Amenización de esta parte †, hasta ††)

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Plank...

Una lata de refresco impacta en la frente de la peliverde, causándole una herida, la cual sangra bastante; aunque le duele, ella no se detiene, solo sigue avanzando, hasta el otro lado de la calle, mientras llora en silencio.

???: Eso es... Sigue caminando Natsumi, eres solo una indeseable bastarda, jajajajaja -dijo, sin dejar de reírse de forma maniática.

Natsumi: Ellos tienen razón, mi padre jamás me reconoció, solo sana su conciencia dando un poco de su dinero a mi madre... -susurró, mientras sale corriendo del lugar.

Cerca de una heladería, Kurumi, Sawa y una furiosa Hibiki, miran la escena; la última, ve con un odio asesino, al grupo de chicos.

Hibiki: Como se atreven... -expresó, mirando a la pequeña con tristeza.

(Imagen simbólica).

Sawa: Tranquila... Pronto cambiaremos todo ese dolor de esa pequeña, por alegría... -dijo, sonriendo cálidamente.

(Imagen simbólica).

Kurumi: Vaya... No sé por qué esperamos, ya vayamos por la pequeña -intervino, con una mirada sería, pero llena de afecto.

(Imagen simbólica).

Hibiki: Tranquila amiga... Esperamos 8 años, para salvar a esa pequeña, Álex me dijo que debemos intervenir en el momento justo; de hacerlo ahora ella no confiara en nosotras y está espera no valdrá la pena... -argumentó, con la voz más relajada.

Sawa: Ese Álex es muy dulce, mira que darle parte de su poder a ambas; ahora Kurumi ya puede controlar a voluntad su ángel, se le ve mejor su rostro, sin ese fleco -añadió, viendo con cariño a su amiga.

Kurumi: Es cierto, Zafkiel no solo ha dejado de comerse mi tiempo de vida, sino que por fin, puedo invocarlo a voluntad; no traer ese ojo de reloj, es un sueño... -respondió feliz.

Llegando en un auto negro muy elegante, la peliceniza aparece justo al lado de las chicas espíritu; sin decirse nada, las 3 camina hacia el para subirse, y posteriormente empezar a moverse, en dirección opuesta de la niña.

(Imagen simbólica).

Nia: Perdón por la demora, no encontraba la tienda de ropa que me dijo Hibiki, al fin está todo listo, para cuándo traigan a la pequeña, será mañana... ¿Verdad? -preguntó, con gran ánimo en su voz, mientras conduce.

Las 3 espíritus: Sí -respondieron alegres.

Hibiki: Mañana, debe ser perfecto... -expresó sería, pero feliz.

Nia: Relájate Hibi-chan... Raziel nos dio toda la información:

*Fecha
*Hora
*Lugar
*Momento exacto de intervención

Pero, debemos ser muy precisas, ya que solo tendremos una oportunidad, para que todas nos ganemos su confianza -explicó, mirando de reojo a las chicas.

Ya sin más que decir, solo disfrutan del viaje de regreso a casa; con una misma idea en su mente, las 4 se sonríen simultáneamente.

Al día siguiente, dentro de una casa bastante desarreglada, puede verse a Natsumi, la cual acaba de despertar; su habitación, pese a las carencias de muebles o utensilios, tiene muy buen aspecto y aseo en esta.

Apenas sale al pasillo, avanza hasta el baño, el cual se encuentra sucio y lleno de algunas manchas de vómito y sangre; en el piso, está una botella de vino rota, algunas jeringas ya usada, además del basurero tirado y regado.

Como si fuera habitual para la niña, toma lo que obstruye su camino al inodoro, para así depositarlo en el bote y utilizarlo; pasados 5 minutos, se mueve hasta la cocina, en donde una mujer demacrada la espera.

???: Natsumi, no se te olvide que hoy manda tu padre lo de la pensión... Te quiero aquí, al dar exactamente las 4 de la tarde; espero, no llegues tarde como la última vez... O si no, te golpearé con el cable -dijo, arrojándole unos trozos de pan duro y un vaso de agua.

Natsumi: Claro que no... Estaré aquí, apenas acaben mis clases... -respondió con miedo en sus ojos, mientras coloca instintivamente las manos en su trasero.

???: Por dios, arréglate un poco al menos, sé que eres fea, pero has el intento de verte un poco bien -expresó, viéndola con odio.

Natsumi: Si mamá, intentaré -respondió, con algo de timidez.

???: No sé, como fui a embarazarme de ti, mi cuerpo se deformó por tu culpa; además, tu idiota padre no se hizo responsable, pues ya tenía a su familia... De no ser, por ese dinero que me da cada mes... ¡¡¡Ya te habría echado a la calle!!! -reclamó, viéndola con odio.

Natsumi: Lo siento... -susurró, triste.

???: ¡¡¡ODIO QUE SEAS TAN SUMISA, SI POR LO MENOS FUERAS COMO YO!!! -gritó, llena de rabia, para después aventarle una taza de café al rostro.

Apenas esquivándola, Natsumi se para de su silla, para ir por el recogedor y la escoba; sin importarle su hija, está solo se va.

???: Cuando termines, te largas al colegio, te espero puntual y ni se te ocurra tomar nada de la despensa... ¡O ya verás! -exclamó, muy enojada, mientras se va a su habitación.

Un gruñido, proveniente del estómago de la chica, deja ver el hambre que tiene, tentada a tomar algo retrocede; pues al recordar las amenazas de su madre, opta por alejarse de esta y terminar de limpiar.

★Escuela primaria de Natsumi...

Un edificio viejo es como, puede definirse el lugar, en uno de los salones del primer piso, Natsumi toma su clase de literatura; aunque lo que menos le interesa es eso, pues para la pequeña, el único motivo de asistir sin falta al colegio, es la hora del almuerzo.

Natsumi: Que hambre tengo -sé dijo, con voz triste y casi imperceptible.

En eso, la profesora sale del salón a causa de un llamado, lo cual es aprovechado por cada alumno, para ir con sus amigos; entre risas y pláticas amistosas, la única que solo observa desde su asiento, es Natsumi.

Natsumi: Como siempre excluida... Al menos no van a molestarme -susurró, algo feliz.

Ya en el almuerzo, todo el alumnado come la merienda que les brinda el colegio, el mismo que consta, de una pieza de pan, 2 galletas y una pieza de pan; algunos juegan con este, a modo de pasar el rato, pero para la pequeña es lo más valioso del mundo, pues esta sería su única fuente de alimento.

Comiendo con desesperación, Natsumi toma un sorbo de leche entre bocados, para poder comer sin ahogarse; la mayoría alrededor de ella, la miran con asco, otros con repulsión y un par más, solo ríen de sus modales:

???: Esa niña es desagradable...

???: Es verdad, no sé cómo la dejan entrar...

???: No le hagan caso, solo es una bastarda...

De la nada, un par de piezas de pan, vuela al encuentro de Natsumi, impactando tanto en su cartón de leche, como en su pan; incapaz de procesarlo, está mira hacia los agresores, que se ríen a carcajadas de lo que hicieron:

???: Si quieres comer, lame la leche del piso infeliz... Jajajaj...

Importándole poco su dignidad, Natsumi se lanza al piso para rescatar la poca leche del recipiente y el trozo de pan; lo cual, provoca unas carcajadas colectivas, a diferencia de la niña, que llora en silencio.

Risas, burlas, odio sin fundamento, eso es la vida de una niña inocente, que no hizo nada más que nacer; sin un solo amigo en la vida, Natsumi solo hace lo único que puede hacer, tratar de sobrevivir, al mundo que le tocó...

Ya rumbo a su casa, Natsumi se detiene casi al instante, pues contempla, algo que jamás había visto; es una pareja, abrazando a una chica de la misma edad de Natsumi, tal acto le arrebata unas pequeñas lágrimas:

???: ¡Mamá, todos nos están viendo...!

???: No tiene nada de malo, eres nuestra hija y te amamos...

???: Tu madre, tiene razón...

???: Bueno...

Dejando de forcejear, la chica se deja querer por sus padres, quienes no dejan de abrazar a su hija; desde la distancia, Natsumi solo ve la escena, mientras más lágrimas se deslizan por sus mejillas, hasta tocar el suelo.

Natsumi: Ella jamás me ha abrazado -sé dijo, con voz entrecortada.

Natsumi: Mi padre, nunca me ha visitado, es como si no existiera... -añadió, apretando los puños debido a la frustración.

Incapaz de seguir viendo, sale corriendo a la dirección contraria, pensando en como sería de haber tenido una madre que la amara; en la entrada de su casa, escucha unos gritos de lo más demenciales, que recitan su nombre.

Natsumi: No puede ser posible, está furiosa conmigo; pero eso no puede ser, yo llegué a la hora que me dijo... Incluso más temprano, no quiero entrar; pero si no lo hago, será un poco más agresiva con el castigo -sé dijo, con miedo en la mirada.

Apenas entra, detrás de ella, parece un auto negro con 4 chicas a bordo, no son otras que Nia, Kurumi, Sawa e Hibiki; preparándose a entrar en la casa, la peliceniza las detiene en seco, mientras invoca su ángel.

(Imagen simbólica).

Nia: ¿A dónde y sin permiso? -preguntó, con voz burlona.

Kurumi: Nia-san, la niña está en peligro... No podemos esperar -respondió, con voz triste.

Nia: Tenemos una oportunidad... Esperamos 8 años, yo creo que podemos esperar, unos 8 minutos más... -expresó seria.

Sawa: Apenas me digas, yo derribo la puerta amiga... No va a lastimar a esa pequeña, voy a acabar con esa basura -intervino, con gran ánimo en su voz.

En uno de los techos adyacente, una peliazul con un CR-Unit/Wizard, observa al grupo de espíritus; incapaz de disimular, sonríe dado la suerte que tuvo de encontrarse con todos sus objetivos a exterminar

(Imagen simbólica).

Mana: Excelente, ahora solo me resta matar a cada una de esas cosas, y habré terminado con mi misión... Nii-sama, con esto Ellen me dirá tu paradero; no me importa, que tenga que hacer -sé dijo, preparando su espada.

CRASH...

BLAMP...

Mana: ¿Qué es eso? -sé preguntó, viendo en dirección de la casa.

Apenas se asoma por la ventana, mira como una mujer de edad madura ahorca con gran odio, a una niña; este acto, la hace olvidarse de su directiva y opta por apuntar sus dedos láser, directamente hacia la cruel fémina.

Mana: No la matarás... -dijo, preparándose a disparar.

¡¡¡AHORA!!!

CROASH...

¡¡¡ALÉJATE DE LA NIÑA, MALNACIDA!!!

Mana: ¿Qué...? Por esto están aquí, vinieron a salvarla; se suponía, que los espíritus eran seres sin sentimientos... Mejor observaré un poco más -expresó, bajando sus dedos.

★Momentos atrás, dentro de la casa...

???: Lo siento, pero el señor ha muerto y por consiguiente, la pensión queda anulada... Es el deseo de su esposa legítima -dijo una voz, por medio de la bocina de un teléfono.

???: ¡¡¡NO PUEDEN HACERME ESTO, AHORA QUÉ HARÉ PARA MANTENER A NATSUMI, Y ENCIMA QUIEREN QUITARME LA CASA, ESO NO ES JUSTO!!! -reclamó, furiosa.

???: ¡ESO DEBIÓ PENSAR, AL METERSE CON UN HOMBRE CASADO! -exclamó irritada, la otra voz, antes de colgar.

¡¡¡MALDITO SEAS!!!

SACRIFIQUE MI CUERPO, MIS SUEÑOS, POR UN IDIOTA QUE ME ENGAÑÓ...

AHORA QUE HARÉ, NO PIENSO CONTINUAR CUIDANDO A ESA BASTARDA...

Natsumi: ¿Eso piensas de mí? -preguntó, con lágrimas en los ojos, mientras se sostiene del marco de la puerta.

???: Tú fuiste un error... Ya no tiene caso que te lo oculte; iba a deshacerme de ti, pero por alguna razón, el imbécil de tu padre, se hizo cargo de ti... Al menos en los gastos, pero me acaba de avisar su asistente que murió y ya no hay pensión -respondió, viéndola con un resentimiento absoluto.

Cerrando la puerta, Natsumi se acerca hasta la cocina, para seguir a su madre a la sala, la atmósfera era dada vez más tensa, pues ella agitaba una copa de vino barato; pese a todo el miedo que le tiene, se arma de valor para colocarse enfrente de la mujer, que todavía se lamenta, por lo que ha pedido.

???: Ni pienses que estarás aquí de gratis, yo no pienso mantenerte... Así que desde ahora traeré unos amigos, para... -dijo, antes de ser interrumpida por la niña...

¡¿PARA QUÉ?!

¡¿PARA PROSTITUIRME?!

COMO TE ATREVES... TÚ, QUE SIEMPRE ME LLAMASTE FEA Y AHORA QUIERES DARME A ESOS CERDOS, PARA QUE ABUSEN DE MÍ.

ESTOY HARTA DE TI, SIEMPRE BUSQUÉ QUE ME DIERAS UN POCO DE AMOR...

PERO TU JAMÁS ME DISTE NADA, SOLO ME GOLPEABAS SIN RAZÓN, ME MANDABAS A LA CALLE A CONSEGUIR DINERO...

CUANDO MI "PADRE" TE DIO UNA PENSIÓN PARA MÍ... LA CUAL NUNCA RECIBÍ, JAMÁS ME DISTE DE COMER, NUNCA ME CUIDASTE Y POR ENCIMA DE TODO...

¡¡¡ACABASTE CON MI AUTOESTIMA!!!

SI TANTAS GANAS TIENES... ¡PROSTITÚYETE TÚ!

Ante las palabras de la niña, la mujer agarra la copa de vino y se la avienta, pegándole en su cabeza; cayendo abruptamente al piso, se trata de levantar, pero en eso, la mujer salta sobre ella, para comenzar a ahorcarla...

???: Debí hacer esto, cuando naciste -dijo, de forma sádica.

Natsumi: Suéltame -balbuceó, mientras que trata de respirar.

???: Muerte de una vez... Déjame en paz, tu miserable bastarda; arruinaste mi vida, soy tu dueña y hago lo que quiera contigo, eres lo peor que me pudo pasar -respondió, con odio, para luego aumentar la presión en su agarre.

Cada vez más sofocada, Natsumi empieza a dejar de luchar, con lágrimas en los ojos, se lamenta por todo lo que no tuvo; amor por parte de sus padres, ni un amigo, nadie que se preocupara por ella...

Por favor... Alguien que me ayude, no quiero morir...

Quien sea... Se los suplico...

A quien engaño, a nadie le importa un pedazo de basura sin valor, como yo...

Voy a morir, lo único que quise de ti, era algo de tu amor... Pero una Infeliz como yo, nunca mereció ser feliz, ni ser amada...

Nadie vendrá...

Cerrando los ojos, Natsumi espera su final a manos de su madre; sin esperanzas, ánimos o deseos de vivir, lanza su último suspiro...

¡¡¡AHORA!!!

CROASH...

¡¡¡ALÉJATE DE LA NIÑA, MALNACIDA!!!

Sin darle oportunidad a reaccionar, Kurumi se abalanza sobre la mujer, pateándola en el pecho; mientras Sawa e Hibiki, se deslizan a un lado de la niña, para revisarla, apenas la toma entre sus brazos, está despierta.

COF, COF...

Natsumi: Estoy viva -balbuceó, abriendo los ojos al máximo, mientras frota su cuello.

(Imagen simbólica).

Kurumi: Ara, Ara... ¿Qué pasó...? No es igual cuando la presa se defiende... -preguntó, de forma sádica.

???: ¿Quién eres...? -preguntó de vuelta, con una línea de sangre en los labios.

††

Kurumi: Soy, tu peor pesadilla... -respondió, con una mirada que irradia locura.

(Imagen simbólica).

Continuará...

Mamá... ¿Dónde está papá?

Ara, Ara, tu papi está por llegar Alexa-san.

Mamá... ¿Por qué, elegiste este nombre para mí?

Sencillo, le pertenece a un ser que me dio una segunda oportunidad para ser feliz.

Ya veo, es lo que me dice Shido-san...

Fufufu, yo lo llamo así amor, pero tú le debes decir... Papá 🐑❤️