Las rosas crujían con cada paso en el que Camus más lento iba,la nostalgia y el paisaje teñido de viejos y muertos colores aumentaban esa sensación de vacío inminente dentro suyo,recordando como partió el alma de su estimado camarada Afrodita provocaba la culpabilidad en él,sabía que no deseaba lastimarlo ni a él ni a nadie,no encontraba razones para su comportamiento mucho menos excusas más allá de decir que todo lo había hecho por Milo,y sólo por él,la única razón para encontrarse entre los jardines sin vida del templo de Piscis,tumba de su difunto propietario.

El viento de la noche azotó el jardín,llevándose en espiral las hojas negras y las rosas cafés muy lejos de las raíces secas y espinas,el suelo estaba cubierto de tierra oscura y húmeda,el toque de sus píes retumbaba por todos lados,entre el silencio de la noche buscó la manera de irse de allí,tal vez ver su templo,tal vez intentar verlo antes de irse con Hades y restaurar el infierno,su templo era el siguiente después de todo,valía un poco llegar a él.

Merodeando los alrededores,sus ojos notaron un punto ciego dentro de algunas ramas terriblemente largas repletas de espinas grandes,curioso por ello se acercó sin apuros,forzando sus pupilas pudo notar a la sobreviviente del abandono,dentro de la maleza,justo en frente de sus ojos,yacía una muy pequeña rosa de color blanco luchando por salir y crecer para adornar la lúgubre penumbra encima de ella,algunos de sus pétalos estaban al punto de marchitarse,pero ella,se aferraba a crecer.

Camus pensó.

──"La última rosa en pie en el jardín de Piscis."

Para muchos,una flor era insignificante,pero aquello era lenguaje de los ignorantes que no ven más allá del rocío y aroma del alma encerrada en ella.

Para Camus,simbolizaba esa minúscula parte dentro de su mente la cuál no ha sido víctima de la corrupción en su pensar,y además de ello,era la única rosa que estaba esperando por su guardián.

Esperando y muriendo lentamente.

Camus nunca logró entender porqué Afrodita,en vida,solía pasar horas en su templo admirando el inmenso mar de rosas a su alrededor,hasta ese momento aún no captaba el mensaje que su compañero trataba de explicarle el por qué ese amor por las rosas del templo. Habiendo tantas en distintas partes del mundo.

── "Tal vez para ti,mi estimado Camus. Te parezca que son simples hierbas coquetas que todo el mundo da un ser querido,pero para alguien como yo que literalmente nació rodeado de ellas,siento cada uno de sus sentimientos como si fuesen mías,al ser seres vivos pero inanimados las personas no saben lo que son realmente hasta indicar un valor,en cambio yo puedo verlas de una manera distinta sin necesidad de ponerles un precio,supongo que es por eso que las amo tanto."

──"No logro comprenderte,¿de que otra manera podrias observarlas?." -Dijo Camus en aquel entonces.

──"No me sorprende,lograrás entender lo que digo cuando suceda un acontecimiento que sobrepase tu forma de mirar y sentir,sólo entonces lo sabrás."

──"¿Qué estás insinuando con eso?,Afrodita."

Su compañero cerró los ojos,tomó una rosa de entre todas ellas y se la dio

──"Eres como esta rosa blanca,Camus. Puro y reflejas cierta inocencia cuando se trata de abrirte con otros,por no decir,alguien de sentimientos honestos y sensibles."

──"Afrodita,eso no va conmigo. No soy un sujeto que se 'abre' con los demás y tú lo sabes mejor que nadie. Incluso contigo soy reservado."

──"He aquí lo más cómico de esto. -Afrodita acomodó su cabello,mirando a Camus con ojos gatunos.- "Tal vez no lo notes aún,y tal vez tardes en analizarlo,pero tú ya estás abriendo tu corazón a otro."

───"¡Pero que dices!,¿que calumnia es esa?; Yo no podría caer en aquel vil juego como el amor. Es una perdida de tiempo. -Fingió estar ofendido,pero estaba lejos de estarlo."

──"Eres adorable Camus,no trates de engañarme a mi,quién soy el más cercano a ti y él que más conoce de como te comportas. Si dices no estar enamorado,¿por qué eres tan cercano a Milo?."

Camus abrió los ojos en sorpresa mientras sus sentidos hacían un esfuerzo por esconder su sonrojo,una vez más, se hacia el del rogar.

──"No digas cosas como esas tan alto,alguien podría oírte y eso me metería a problemas con Él."

──"¿Y que te hace pensar eso."

──"No se lo tomara para nada bien,seria...Raro."

──"¿Raro para Milo,o para ti?. Engañarme con esa expresión falsa de neutralidad es casi un insulto. Casi. Entiendo que no puedas aceptarlo ahora amigo mio,lo se;aunque no se por cuanto tiempo puedas cegarlo y seguir actuando."

──"No estoy actuando nada,mi relación con Milo no va mas allá que el compañerismo,eso no tiene nada de malo. Evita hablar de temas que no conoces por favor." -Le dolió decir esa palabra,compañerismo sin nada de por medio.

──"¿Realmente lo vez así?. ¿Solo amigos?." -Camus no volteo a verlo menos responderlo,Piscis dedujo que reflejaba una dudosa respuesta de su parte.

    Algo muy común,callar cuando no estaba seguro de lo que hacía o decía.

Y realmente,no encontraba la manera de defender su 'firme' testimonio,al contrario le hizo profundizar más sus palabras.

Afrodita puso su mano en su hombro,regalándole una mirada que le tranquilizaba.

—– "Tranquilo,tu secreto está a salvo conmigo."

—–"Gracias,Afrodita".

Sin duda alguna,tenía un buen amigo.

A Piscis no le pudo ocultar por mucho tiempo ese 'terrible' secreto y terminó en aceptarlo ante él mucho antes de la pelea en contra de los santos menores,un secreto que permaneció en los restos del jardín.

Estaba infinitamente agradecido con Afrodita por escucharlo sin ser totalmente juzgado,por supuesto el caballero de la última casa trataba de alentarlo a confesarse y era bastante persistente pese a recibir respuestas negativas todo el tiempo,estuvo ahí escuchando sin quejarse.

Lo menos que podía hacer en una muestra de agradecimiento era cuidar de aquella flor tan pequeñita que le esperaba a duras penas.

El significado de las rosas era variado.

Las blancas como ella las usaban las novias al momento de casarse pues simbolizaban la pureza de ellas,las rojas llenaban de pasión el corazón y estimulaban las nariz con su fragancia tan erótica,las rosas expresan el cariño,protección y positivo dad,las amarillas y las naranjas la juventud,la alegría de vivir,y lo exótico,las violentas la lealtad,eran relacionadas con la magia y la espiritualidad,las azules confianza,afectó y armonía.

Las rosas negras,a diferencia de las anteriores atraían la pasión fatal y el amor trágico,normalmente simbolismo de la muerte y el odio.

Si bien,cada una tenía su significado especial,esta rosa en espera de su amo tendría uno propio por ser especial.

La única en pie,refleja el coraje y tenacidad a cumplir su propósito, el de ella era crecer y traer a sus hermanas devuelta para convertir el jardín en lo que solía ser,una peligrosa pero hermosa trampa.

Con cuidado de no pincharse fue cortando las ramas que no la dejaban salir,hincándose más de una vez pues era un duro trabajo quitarlas sin dañar ni un pétalo y con las manos manchas de lodo y unos cuantos rasguño en la yema y palmas de sus manos.

Le noto algo decaída,pero sin perder su color.

Busco dentro del templo un recipiente con agua,lo lleno y lo roció en la flor esperando que eso le ayudara a sobrevivir una noche mas en la soledad.

La noche pronto se apodero del santuario y toda Grecia,los faros y candelas en las casas vecinas y el pueblo eran la única luz presente,ahora puede moverse libremente sin preocuparse por ser notado,las guardias del turno nocturno no eran muchos,de hecho era un numero casi invisible,se pregunto si esas bajas eran consecuencias de la guerra santa.

Dejó el templo de Piscis para encaminar a su antiguo recinto, contempló el silencio.

La soledad gobernaba el templo de Acuario con una brisa fría que recorrió el rostro de Camus,la verdad agradable estar ahí después de tanto tiempo viviendo en el templo y marcharse así por así para luego volver,era como regresar a tu casa luego de un largo día laborando.

Sin embargo,no se sentía del todo bienvenido.

Era inexplicable,no fuese como que las paredes tuvieran vida propia y le juzgarán,o los pilares cobraran vida para sacarlo de ahí.

No sabría decir si eran juegos de su cabeza o si realmente había algo extraño.

──¿En que estoy pensando?,me he vuelto un completo lunático. -Admitió con pesimismo.- ── Debo dejar las paranoias un instante,siento como devoran mi cabeza.

── Por favor,estabas empezando apenas con la diversión.

Camus levanto la vista,era la voz de Hades pero no lo miraba en ninguna parte,ni en las esquinas oscuras cuál vil acosador,sus afirmaciones eran ciertas,Hades lo estaba vigilando.

── No es por ser descortés. ("En realidad...no es como si me importara"). -Pensó para luego dirigir la palabras una vez más.- ── Pero seria satisfactorio que usted dejara mi cabeza en paz. -Trató no sonar molesto,eso no engaño al rey de el inframundo.

── Cuida tu tono conmigo,¿qué pensabas?¿que te dejaría sin supervisión alguna después de lo ocurrido con Athena?. Aún no confió en ti,Camus. Y ciertamente he de admitir lo divertido que ha sido todo esto. -Hades liberó una risa profunda cubierta por la burla,Camus cerró los ojos meditando y recuperar su paciencia.- ── He visto fracasados en el amor,pero no alguien como tú que sigue fielmente a su incompatible.

Si el propósito de Hades era hacerle enojar y sentirse peor con su persona,lo lograba bastante bien con el primer comentario,era irritante tenerlo en su nuca casi todo el tiempo.

Igual que un parásito.

── Muy propio de usted,¿verdad?. Le gusta mucho ver sufrir a otros.

── De hecho si. ¡Y mucho mas cuando se trata de gente como tú!.

──¿Que insinúa?. -Interroga con voz molesta,Hades era despreciable.

── Sabes a lo que me refiero,gente igual a ti. Quieren ser inmunes de corazón rechazando la propia naturaleza humana todo por no salir perjudicados con sus actos,queriendo mantener la cabeza y corazón frío,y cuando su teatro va desmoronándose caen en tu situación,Camus.

──¡Salga de mi cabeza inmediatamente!. -Gritó a la nada,el eco rebotó en el templo y quedando atrapado entre las paredes,miró su puño estampado contra un muro.- ── He tenido suficiente hace unas horas,¿por qué no se detiene?¿tanto me destesta o cuál es el propósito de hacerme sentir peor conmigo mismo?. -Camus no lloraría con su presencia,no lo hizo,pero estaba mentalmente agotado y no le faltaba mucho para colapsar. Creía que Hades no le diría nada más luego de esa arrebatante exclamación.

La risa de Hades sonó por los rincones y alrededores,pasó de ser una risilla con disimulo a ser una sonora carcajada.

El pelirrojo no hizo gesto alguno de molestia,mantenía su rostro serio ante esa risa tan estrepitosa.

Un pensamiento cruzó la mente de Camus,uno completamente inapropiado para esa situación.

──"Su manera de reír,me provoca escalofríos."

Quizás era por la posición del Dios,o tal vez era la oscuridad creciente del templo que lo hizo tener ese pensar,no debía dejarse ver intimidado por algo así.

── No tienes por qué saber mis motivos para atormentarte,me deleita tu voz sufriente. Ah y tus expresiones son una maravilla, tienes un rostro bastante atractivo.

Camus parpadeoe incrédulo,nunca antes le habían dicho esa clase de comentarios,y siendo sinceros viniendo de Hades lo hacia el doble de extraño.

Notó algo más,el cosmos de Hades era distintos a cuando hablaron hace apenas dos días.

──¿Lo notaste ya?.

──¿Cuándo usted...?

── Podemos decir que tuve 'visitas' de algunos conocidos míos, ya hace un buen rato se han marchado y lo mismo debes hacer tú. Te doy hasta el amanecer para venir cuánto antes.

── Es una petición bastante inesperada,¿no lo cree?. Además se supone que mi trabajo aquí no ha concluido,hay muchas almas que están llegando a el territorio santo de Atenas,puede ser una buena oportunidad. -Comentó sin mucho ánimo. Volver allá lo haría verse derrotado.

── No recuerdo a verte pedido que hablarás. -La voz de Hades sonó molesta.- ── Acabo de darte una orden,no una sugerencia. Es importante que vengas de inmediato,tengo otros encargos para ti.

──¿Aun más?, no es por ser quejumbroso pero no se si pueda volver de manera instantánea al castillo,me tomo una noche y casi mediodía llegar hasta aquí.

Eso era una buena a excusa,pero Camus olvidaba que le hablaba a Hades.

Él no iba a permitir tantas insolencias de parte de un simple mortal haciéndose el listo,aunque Camus se ha convertido en su nuevo interés no significaría que estaría a salvo de su castigo por haberle cuestionado sus órdenes.

No dio una advertencia.

Cuando el cuerpo de Acuario quedó inmóvil un segundo,el aire comenzó a faltarle y las paredes del templo parecían caerse,una sensación de pánico y terror le invadió,trato de moverse desesperadamente pero el forcejeo hacía que el aire se le escapara mas rápido poniendo su rostro colorado y sus ojos que casi salen de su órbita. Sus pies dejaron de tocar el suelo,podía sentir su piel hirviendo como si estuviera en aceite,estaba al punto del desmayo.

Todo se detuvo.

Su cabeza se estampó violentamente en el suelo provocando unas lineas de sangre confundirse con el rojo de su cabello,llevó su mano a su herida manchándose la palma,emitió un quejido de dolor,el golpe fue suficiente para aturdirlo unos momentos,pues se sentía mareado y sus ojos no formaban una imagen concreta.

Pero la voz de Hades,podía oírla claramente.

── La próxima vez que me muestrea desobediencia ante mi,te enviaré al mayor dolor que tu frágil cuerpo pueda sufrir. Guarda mis palabras,no me costaría nada romperte.

Tras oír la amenaza,se levantó mirando a la nada absoluta nada.

── Maldito seas,Hades. -Murmuró a si mismo mientras sentía la energía u del Dios desaparecer.

Cuando las mujeres salieron del castillo,Athena se encontraba muy débil.

Horas atrás.
Al terminar la sesión Perséfone se separó de su esposo,se miraba cansada pero ella decía que era normal,transmitir el cosmos dejaba débil a cualquiera.

Sin embargo,Athena no corrió la misma suerte.

Saori aún sostenía la mano de Hades con la suya,acto que incomodaba de sobre manera al Dios del inframundo,su mano fue deslizándose poco a poco y fue en ese instante en que Athena dejó caer su cuerpo.

──¡Kido!.

Alpha Librae la tomó en brazos antes de que ella tocara el suelo,Perséfone estaba impactada,y entonces miró a su marido con clara acusación.

──¿Que fue lo que le hiciste a esta pobre niña?.

── Depende,¿a quién de ésas do te refieres?. -El rostro de Hades mostraba poca importancia al asunto.

── No lo tomes como si fuese una broma!,y responde mi pregunta. - Perséfone le lanzó miradas llenas de molestia,pero eso a Hades no le importó.

── No tengo nada que ver en eso,Athena debe estar exhausta por nuestra guerra pasada,era de esperarse siendo ella una humana.

La castaña no le creyó por completo,si bien lo conocía él podía ser muy mañoso,por esta vez lo dejaría pasar.

── Kido,responde,Kido. -Decía la mujer de melena dorada a la mujer en sus brazos,ella la miro con una sonrisa a medias.

── Que lindo de tu parte. Te preocupas por mi.

──¿C-cómo no hacerlo...?. -La cercanía con ella ponía sus sentidos alterados.- ── Si algo te pasara, la tierra estaría a merced de estos desgraciados.

── De cualquier forma,es agradable ver que no me odias como yo pensé.

El rostro de Odeth se lleno de rojo, cuidadosamente puso los brazos de la Diosa alrededor de su cuello y tomando sus piernas firmemente se aseguró que Saori estuviese cómoda.

Era la primera vez en 244 años que tenía una cercanía tan grande con una reencarnación,o recipiente como ella decía,de Athena.

── Señorita Perséfone,ya nos vamos. Yo personalmente la llevaré de vuelta sus aposentos. -Habló firme,y más que una petición fue una orden.

En vez de protestar Perséfone negó la invitación con amabilidad,Athena debía volver a su santuario y tomar descanso,además si su madre estaba allí,no quería que Athena y Odeth se enfrentaran a la ira de su sobre protectora madre.

── No te preocupes por mí,conozco un camino que me llevará devuelta a mis aposentos. Es mejor que te apresures y la entregues en las manos de sus caballeros,tallos siempre cuidarán de ella,Odeth.

Sin más,el caballero se despidió cortésmente de Perséfone y lanzó una mirada de amenaza a Hades,entre la oscuridad ambas de perdieron de la vista de ambos Dioses,Perséfone y Hades quedaron completamente sólos.

Y el ambiente era tenso.

── Ha crecido mucho,esa mocosa.

── Los años pasan y parece que ha perdonado a Athena por lo ocurrido en el pasado.

── Yo no lo diría de ese modo. -La diosa de la primavera se fijo en él.- ── No le ha perdonado el crimen encontrade su 'madre',al menos no desde lo más profundo del corazón.

── Pero,parece que la quiere mucho...

── No te confundas mujer,no quiere a Athena,a la que quiere es a su recipiente. Kido Saori.