7.¿Pero, que paso? (Actualidad)


Luna

Desde el comienzo ella fue maldita, a no poder ser aquella luz que gobernara sobre la oscuridad. Escrito estaba que el mal reinaría sobre la luz, desde que dio a luz a un ser que no pertenecía a este mundo.

Mentiría si le contara que el mundo estaba tal cual como lo deje antes que Rous despertara. Pero no. Ya habían pasado ya dos años desde que Lux mí no hermana gemela (Bruja), se relevara contra la humanidad solo con el deseo de quedarse con mis poderes celestiales.

El mundo se volvió un caos por completo, nadie podía salir a las calles porque si lo hacia los espías de Lux lo capturaba y se lo llevaba al bosques y no lo volvíamos ver. El mundo estaba ardiendo en llamas desde que otras brujas se revelaron al mandato de Lux, se escuchaba muy poca veces los gritos de niños o personas pidiendo ayuda. Iban entrando casa por casa buscándome como si yo fuera su trofeo.

Hace dos años antes que Rous despertara tuve que ocultar la casa con un conjuro que había aprendido gracias a la traición de Cristians, no se me hizo difícil en ese momento pero después tuve que incrementarla cuando comenzaron atacar con toda las fuerzas que hubo un momento que no pude seguir.

Se me hizo difícil abandonar a mi familia y borrarle la memoria a todos desde aquella noche, ya Rous, Star y yo ya no éramos como imanes. Ya tenía todos mis poderes y podía andar por donde quisiera. Las visiones me frecuentaban mucho y a veces brillaba mucho que llamaba la atención de los espías de Lux. Nathan quiso rastrearme una noche pero se lo impedí, y comencé a dejar de usar mis poderes y ser ahora más humana como era antes.

Ahora que estamos en esto me llamo Luna Rubí Hill una chica que creyó que era humana, pero al parecer soy un ángel que la bajaron del cielo con brujería muy poderosa cuando estaba en un deceso a una misión a la tierra. El ciclo se tenía que romper a costar lugar, porque yo tenía que volver a donde pertenecía pero ya eso no se podía, había nacido de carne y mi cuerpo angelical fue borrado desde que la bruja me eligió como su nueva presa para tener vida eterna.

Y ya que estoy huyendo en el pueblo de Treverlin para acabar con Lux y todo este cao que desencadeno solo por tenerme.

Mire el cielo oscuro de esta noche y sabia en lo más profundo de mi corazón que era hora de darle pelea y mostrarle la nueva Luna que tanto ella buscaba. La lluvia caía tan fuerte que a los lejos se veían los rayos que alumbraba el cielo en medio de esta noche. Corrí hasta quedar dentro un establo vacío, no había animales y mucho menos personas. No la sentía en mi cuerpo así que estaba sola otra vez.

—Otra noche a sola Luna.—murmure caminando.

Busque por los alrededor una manta que pudiera secarme y quitarme toda esta ropa que me pesaba por lo mojada que estaba.

No había dado cinco pasos cuando lo sentí, ahí. Mi cuerpo se encendió como hacia todas las noches con una máxima potencia de luz mandándome otra visión.

Estaba dentro de una casa, todo olía a madera remojada. Los truenos eran más fuertes que siempre y escuche un sollozo que me hizo retroceder cuando vi a la pequeña niña en el suelo con sus rodillas al pecho y se balanceaba de adelante hacia atrás y alguien se posaba frente de ella con un cuchillo en mano.

—Pertenece al ejército de la reina Lux o mueres en el intento.—repitió el hombre con el mismo discurso de siempre desde que llevo huyendo.

—No por favor.—rogo ella y vi por la ventana el granero donde estaba.

¡Miércoles!

<<¿Cómo rayos no pude detectarla? >>

Mi luz se apagó y corrí tan rápido que llegue antes de tres segundos alados del tipo. Tenía poderes angelicales que podía traspórtame en un abrir y cerrar de ojos. Apenas lo estaba perfeccionando pero lo iba a logra. Le di unos cuantos golpe al hombre forzudo que tenía el cuchillo que ni se dio cuenta que yo estaba ahí.

La pequeña asustada seguía meciéndose de adelante hacia atrás todavía más asustada, su vestido estaba rasgado y manchado de sangre. Me acerque con la intención de ayudarla pero podía sentir que no era humana. No me dio tiempo a responder cuando se me lanzo encima cambiando de cara y cuerpo.

¡Maldición!

—¡Hermanita, hermanita!—dijo con un tono de burla, luchando conmigo en el suelo.—Me fue difícil encontrarte pero aquí estamos otras vez.

Intente quitármela de encima pero mis reflejo se activaron cuando vi una sombra moverse tras de ella y lo pude reconocer cuando un relámpago ilumino el cielo y la luz entro por la casa.

<<Era Cristians.>>

—¡Loca desquiciada déjame en paz!—le di un cabezazo para quitármela de encima y funciono. Me coloque de pies y comencé a encender mi luz.

—Sabe que eso no nos hará daño ¿verdad?—Cristians todavía con su estúpida sonrisa me miraba con algo en manos que no sabía decir que era.

—Dígalo por ustedes, solo quiero distraerlo como lo hice hace años.—me le burlo saliendo corriendo tan rápido que por un momento me parecí a flash.

—¡No corras tan rápido que te puedes cansar!—me grito Lux con una sonrisita atrás.

Solo gire la cabeza y los vis, me estaban persiguiendo y corrían a la misma velocidad que yo. Tenía que huir antes que ellos me alcanzar o si no, iba a morir en sus manos. Vi mi oportunidad en el bosque sabiendo que estaba infectado de sus gentes y no me importo, corrí y atravesé con unos reflejos locos en medio de la oscuridad que ni siquiera me lleve una piedra o ningún rasguño cuando llegue a la piedra.

—¡Debe estar por aquí!—gritaron un grupo de la gente de Lux pasando por mi lado cuando me deje caer en la arena.

La piedra seguía intacta como la había dejado la última vez, Lux y Cristians no sabía de ella y si lo sabía no podía entrar, se mantenía oculta por si sola y solo yo sabía por las piedras que había colocado la última vez.

No sé qué paso pero la tierra comenzó a moverse como si fuera un terremoto, no me moví de mi sitio porque sabía que era esa cosa.

<<Su mascota. >>

Ese bendito animal no moría ni porque hiciera el intento de envenénalo o pelearla con él con el fin de quitarle ventajas, pero nada paso. Llevo dos años viviendo en las sombras como humana sin poder usar mis poderes y si lo hago es para defenderme o ayudar a otros, pero de igual forma esta gente cada día se está fortaleciendo más.

Intente pasarme por Lux ya que no somos muy idénticas pero use la misma magina que ella uso para robar mi imagen, pero no funciono. Su gente la reconoce a quilómetro aunque ella no se inmute a dar la cara a la humanidad. Las pocas personas que la han visto le tiene miedo y cuando me ven piensa que soy ella, por eso cuando ayudo a las personas tengo que esforzarme a ocultar mi rostro en todo momento.

***

La mañana me recibe con gritos y llantos de gente que están siendo arrastrados a una sola dirección.

<<La puerta al otro mundo. >>

Los gemelos o morochos son utilizado más al modo de reclutar presas para su beneficio o algo así, en realidad todavía no sé porque nunca he llegado tan lejos.

Me escabullo silenciosamente de mi escondite sin llamar la atención y me dirijo al pueblo, el estómago ya me está rugiendo y llevo más de tres días que no como nada y decir que duermo, tampoco.

<<Ya comienzo a creer que tengo un aspecto de caca si me veo en un espejo.>>

Me escabullo silenciosamente por las calles de la ciudad sin llamar la atención de nadie. Esto da mucho miedo, no hay gente o vehículo que transite en las calles o niños que jueguen a cualquier juego, todo está silencio y vacío. Ahí recorte de periódico en todos lados, papeles, fuego o maleza en algunos edificios. Esta es la parte que más miedo me da cuando vengo.

Detengo el paso escondiéndome tras unos botes de basuras cuando veo a dos chicos entra al centro comercial vacío. Su ropa es oscura y llevan morales negros como si fueran algún equipo de ladrones. Solo lo logro ver de espalda porque se mete tan rápido por la puerta grande para no llamar la atención. Salgo con cuidado y sigo con mi camino cuando sé que son humanos por la electricidad que emana de ellos.

¿Qué hacían entrando en ese lugar?

Aunque no sienta más personas.

Camino con cuidado entrando sin que nadie se dé cuenta.

—Debe haber comida por aquí.—murmura uno ansioso entrando a un mini marke de comida enlatada.

No puedo seguir escuchando bien o identificar las voces porque de un momento a otros las puertas del centro retumban tan fuertes que tengo que esconderme sin dejar un rastro de mi existencia en la primera tienda de mí.

—¡Esta aquí!—dice uno con voz gruesa y amenazadora, por el reflejo que vi son cuatros y son gemelos.

—Busque en todos lados.—ordena otro y comienza a esparcirse.

<<Ni siquiera me deja comer algo esa loca. >>

Cuando será el día que podre comer tranquila al fin, sin que me esté bombardeando el trasero para tenerme a su merced.

Se escucha como hacen escandalo ruidosamente entrando en tienda por tienda, tengo que escabullirme por algunos pasillos que están repleto de cajas de zapato y...

—¡Encontramos a dos individuos!—grita uno feliz.

Los otros tres se reúnen rodeando a los dos chicos mientras que patalean y hacen el esfuerzo de zafarse.

<<No voy a pelear, lo siento mucho por ellos. Pero si hago el poco esfuerzo de mi luz, ella me va a encontrar.>>

Como puedo salgo de la tienda y me encamino hasta la puerta cuando escucho su nombre que me deja paralizada en el momento.

—¡Hero huye!—esa voz, esa voz que desde que tengo uso de razón se preocupó por mi desde que estaba en el vientre de mi madre y estaba con el amor de mi vida.

Aunque pasaran los años yo los seguías teniendo presente.

—¡No John, no me voy a ir sin ti!—le respondió Hero asustado.

—Pertenece al ejército de la reina Lux o mueres en el intento.—le dijo uno y no pude más me di la vuelta mirando la escena con lágrimas en los ojos.

Pensé que nunca más volvería a verlo después de borrarle la memoria, creía que nunca más interactuaría con ellos. Y verlos ahí intentado defenderse y cambiado a más guapos que nunca, abrió aquella herida de mi corazón.

—¡Oye tú!—grite dando un paso al frente y todos me quedaron mirando sorprendido.—Me quieres a mí, no a ellos imbécil.

El más alto dio un paso al frente hipnotizado, sus ojos eran tan rojos como la sangre que sabía que el mal estaba en ellos. Me señalo cargándose de ira.

—¡Vienes con nosotros o la reina Lux te mata!—me ordeno y negué con lágrimas en los ojos.

—¿Reina?—me burle.—¡Esa bruja no es reina de nadie, debería estar en esto momento quemándose en una hoguera o en las pailas del infierno!

Ese comentario no le agrado porque se puso rojo como un tomate cargado de ira, todavía señalándome.

—¡Atrápenla!—grito furioso y los otros tres soltaron a mi hermano y a Hero corriendo hacia mí.

No podía usar mis poderes, pero si tenía mega fuerza y agilidad en todo. Como pude corrí hacia una escalera mientras que ellos intentaban llevarme el paso, no eran veloces como yo pero si tenían fuerza que jode. Subí hasta el último peldaño y busque la forma de salir invita en esta pelea, cuando ellos llegaron e intentaron capturarme pero al primero le lance un patada en el estómago que lo vi rodar llevándose a los dos que tenía atrás rodando a bajo por las escaleras. Ya en el suelo corrí a otro extremo ganándome tiempo para llegar abajo y salir por la puerta.

Todo se fue al desagüe cuando abrí la puerta, habían más de seis hombre y mujeres que eran del ejercito de Lux afueras con armas en manos he intentado entrar. Volví a retroceder con el corazón en la boca, porque solo tenía una sola oportunidad si quería salir viva

—¡La reina la quiere viva!—dijo una mujer con una sonrisa macabra.

No sé qué paso pero todo paso en un abrir y cerrar de ojos, ellos intentaron dar un paso al frente cuando lo vi pasar como un rayos veloz desarmándolos y matando con un solo golpe. Yo no sabía muy bien pelear pero nunca intente matar a alguien y él lo logro en un abrir y cerrar de ojos. Retrocedí asustada todavía sin apartar la mirada de los cadáveres del suelo, cuando sentí una mano en mi hombro pero no duro mucho porque de igual forma mi luz se incendió tan fuerte que el hombre que había dado las ordenes en el principio se consumió por la luz tan potente.

—Sabes que puedo sentir tu rastro a kilometro ¿verdad?—me dijo limpiándose las manos llena de sangre acercándose a mí.

<<¿Y él no era un Ángel de la guardia, pues?>>

Negué, no podía creer lo que mis ojos estaban viendo. Ese ángel era casi como un semidiós con su cabello negro oscuro como la noche y vestía con la misma ropa que lo conocí aquella vez en el bosque.

—Tanto huir y viniste a parar de nuevo en los brazos de las personas que amas.—me susurro con coquetería cuando se acercó.

—¡Nathan aléjate de ella!—escuche la voz de John asustado y Nathan solo retrocedió para evaluarme de pies a cabeza.

—¡Es peligrosa!—dijo Hero y eso me partió el corazón.

—Que peligrosa y que peligrosa nada.—se burló dándome un abrazo que yo anonada no pude responder.—Esta chica que ven aquí es mi ex novia que me pateo el trasero por un largo tiempo cuando el mundo se fue al traste.

No entendía nada, ellos tampoco porque no me recordaban y me aparte de Nathan para lárgame pero él me sostuvo la mano con mucho agarre.

—No vas a huir otra vez.—susurro para los dos cuando Hero y John se acercaban asustado sin dejar de mirarme.

—Ella es el enemigo. ¿Cómo puedes salir con el enemigo?—las palabras de John me parte en dos que tengo que ser fuerza de mi auto control para no darle una buena patada a Nathan y salir corriendo otras vez.

—¿Que enemigo? esta chica que ustedes ven aquí es más bien un pan de Dios.—me palmea el hombro burlándose y eso no me causa gracia.—Es la hermana de Lux, la gemela.

Ellos se miran la cara confundido y esto apunto de decir que esa bruja no es hermana mía aunque ella me quiera encadenar a cadena perpetua.

—¿Es la chica buena que nos contaste?—pregunta John y él asisten.— ¿Cómo? Si nadie sabía de su existencia, dijiste que estaba muerta.

—Se acerca una guerra y solo por eso está aquí ¿verdad?—me mira y yo niego molesta apartándome.

—¡Esta demente Nathan, llevo años ocultándome de esa loca desquiciada y no me voy a enfrentar a una guerra!—me suelto molesta cuando percibo movimiento afueras y aprovecho la distracción para huir otra vez.

Él puede ayudarlos, yo no. Y sé que me jure no volverlos a ver pero hoy rompí ese juramento cuando los vi en problemas. Creí que alejándome las cosas se solucionaría pero no, las cosas empeoraron y Lux se hizo más fuerte cada vez, ya no era bruja que manipulaba, era más un camaleón y una serpiente engañosa. En los dos largos años que llevo ocultándome aprendí a no confiar en nadie y solo porque en la primera esa loca cambio de piel que me dejo con un trauma a la hora de matarme mientras que huía del pueblo haciéndose pasar por mi madre.

La he visto cambiar de piel tanta veces que ya no se quien trabaja para ella y quién no. Solo me toca cuidar de mi familia a lo lejos, disfrazar mi aroma de ángel/Humana con pestilencia de animales muertos que encuentro en el camino. Estaba muy bien huyendo sin que me rastreara hasta ayer que se presentó la tormenta y probo mis poderes, porque llevaba años sin utilizarlo. Solo lo perfeccionaba cuando estaba quilómetro del pueblo y que ella no pudiera encontrarme.

Encuentro un edificio abandonado y subo hasta el último piso, detecto poco humanos y solo me dejo llevar a la única habitación que nadie revisara o sabrá de mi existencia. 

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top