Capítulo XXI: 💋"Wish you were here"💋

Gian me había citado en la oficina al salir de clases. No era raro que lo hiciera, como no era raro que me mandara a buscar con el chofer, como no era raro que Stefano se disgustara, Chiara se emocionará y yo me sintiera muy avergonzado de que me vieran todos en un auto de lujo.

Cómo de costumbre Bianca no está feliz de verme y como de costumbre no me importa. Paso a la oficina donde veo que Gian está hablando por teléfono de espaldas a la puerta mirando a través del ventanal. Yo entro sin hacer ruido, cierro la puerta sigilosamente, me acerco a él despacio me pongo de puntillas para darle un beso en la mejilla, lo veo sonreír. Me siento en su silla detrás del escritorio y abro la gaveta de este donde hay una bolsa de dulces que siempre tiene ahí para mí.
En el escritorio me fijo que hay tres paquetes envueltos en papel de regalo. No sé para quién son, no puedo asumir que son para mí ya que no es ninguna fecha especial, pero me muero por saber que hay dentro y para quien van dirigidos. Soy muy curioso así que intento mirar "disimuladamente" si tienen una nota o algo. Por disimuladamente me refiero a ponerme de pie y mirar los regalos en busca de alguna señal.

—¿Espiando baby? —dice detrás de mí.

—Tengo curiosidad.— dije simplemente.

—Dicen que la curiosidad mató al gato.—comentó poniendo sus brazos alrededor mío.

—Pero yo no soy un gato.— me volví en sus brazos para verlo a la cara.

—No, eres un conejo.- me dio un pequeño beso. — Los regalos son para tí obviamente.

—¿Para mí? Pero no es ninguna fecha en especial.

—¿No puedo regalarte solo porque quiero?

En eso Gian tenía algo de razón, digamos que a él le gusta siempre darme algún detalle. A pesar de eso no acabo de acostumbrarme, de la misma forma que no me acostumbro a tener acceso a todo ese dinero en una tarjeta. Siempre le informo cuando la voy a usar.

Nunca he creído que tú pareja tenga responsabilidad monetaria contigo... Pero con Gian es un caso distinto quiere encargarse de todo al punto de querer poner un chófer a mi disposición las veinticuatro horas o comprarme una cámara fotográfica profesional, sí la necesito para la universidad pero yo la podía comprar directamente, para algo me dio la tarjeta.

—Adelante baby boy ábrelos.

Los paquetes tienen tres tamaños distintos, pero todos son pequeños así que tome el que me quedaba más cerca. Lo desenvolví con cuidado y dentro encuentro un Funko Pop de Freddy Krueger, personaje principal de "A nightmare on Elm street", es mi segunda película favorita, la primera es "La bruja de Blair"

—Espero que te guste no hay mucha mercancía relacionada a la bruja de Blair... así que decidí que ya que Freddy está en tu puesto número dos te gustaría.

—¡Claro que me gusta! Es más decoración para mi habitación.

—Abre los demás.

En el segundo paquete que abro hay nada más y nada menos que una pequeña falda de cuadros escoceses negros, fucsia y blancos, con una medias y mangas a juego... pero no era solo eso también había un vibrador diseñado para hombres, se les conoce como estimulador de próstata, de color negro.

—OK— digo me apena un poco abrir esto en su oficina con la posibilidad de que entre alguien.

—Para que lo uses cuando no esté. Aún falta uno.

El último era un reloj de pulsera, no un sencillo reloj de pulsera, un reloj Cartier blanco. No voy a entrar en una discusión con Gian acerca de que no debe comprarme cosas de este tipo porque sé que no llegaremos a nada.

—Es hermoso gracias.

Me lo pongo porque sé que es lo que espera que haga. No es que no me guste, es muy lindo, es sólo que... ¿Saben el precio de esa cosa? Cada vez que me da algo así recuerdo la voz de Stefano diciendo que quiere comprarme.

Bianca entra en ese momento sin tocar la muy... no puedes odiarla Danny me repito mentalmente.

—Jefe necesito que firme estos documentos antes del viaje— dice ella con una carpeta en las manos, Gian toma la carpeta de sus manos, la vista de Bianca recorre los objetos del escritorio deteniéndose en uno en específico, disimuladamente me mira y yo sin disimulo enrojezco de la vergüenza.

Gian se sentó para firmar los documentos, la oficina estaba incómodamente silenciosa. Terminó su firma y se los pasó.

—¿Algo más Bianca? ¿Bianca?

Ella se había quedado estática con la vista clavada de nuevo en cierto objeto.

—Lo siento jefe, no nada más por el momento.—dijo tomando los documentos.

—Bien, un pequeño detalle Bianca ¿Podrías tocar la próxima vez?

—Lo lamento es que era urgente la firma y como la puerta no estaba asegurada no pensé que...

—Esta bien, pero para la próxima si estoy con Danny toca por favor.

—Bien, Ok, disculpe de nuevo.— dice retirándose casi chocando con la puerta ya que iba de espaldas algo muy poco común que podría ser cualquier cosa menos torpe.

—Ay no que vergüenza que viera eso. Debí de cerrar la puerta cuando entre.

—No te preocupes baby, Bianca está consciente de la relación que tenemos.

Eso no evita que me avergüence.

—En todo caso hay algo importante que tengo que decirte.—me sienta a horcajadas en sus piernas poniendo sus manos en mi cadera. —¿Recuerdas que te dije que me iba de viaje?

Yo asentí, me había comentado la semana pasada que se iría por una semana a Corea del sur.

—¿Sabes que es por una semana?

—Sí

—El viaje se adelanto.

—¿Qué? ¿Cuándo te vas?

—Mañana.

—¿Qué? ¿Por qué?—dije a modo de queja.

—Situaciones con la otra compañía.

—Pero si te vas por una semana eso quiere decir que...

—No estaré aquí para nuestro aniversario.

No dije nada, me sentía mal era nuestro tercer aniversario y no estaría aquí. Ahora lo de los regalos cobraba sentido.

—En verdad lo siento baby.

—Es tu trabajo, está bien.— dije más para convencerme a mí mismo.

—No te desanimes mi conejito. Dime ¿Qué quieres que te traiga?

—No tienes que traerme nada.

—Lo que sea mientras no sea una persona. Bella me pidió que le trajera al integrante de una banda.

Yo sonreí, me imaginaba a Bella haciendo planes de secuestro.

—En verdad nada, solo te quiero a ti de regreso conmigo sano y salvo. —dije tirando mis brazos en su cuello.

Me dio un corto beso.

—Por cierto tienes permiso.— dijo separándose solo un poco de mi.

—¿De qué?

—De jugar con tus juguetes mientras daddy no esté.

Yo escondo mi cara en su cuello.

—Me gusta más jugar con daddy.

—Pero si los necesita úsalos. Quiero que te quedes conmigo esta noche, mi vuelo sale mañana a las siete y primero debo pasar a recoger a Bianca.

—¿Qué? ¿Bianca va contigo? — dije levantando mi cabeza para mirarlo directamente a la cara.

—Es mi asistente baby siempre va conmigo.

Bueno sí tenía sentido, pero eso no me hacía sentir mejor. Tengo que controlarme me estoy convirtiendo en un celoso horrible. Los celos son un monstruo que te consume. A quedado más que demostrado que entre ellos hay un interés unilateral.

—También tengo que darte esto. - en sus manos tiene unas llaves.

—¿Esas son..?

—Las llaves de mi apartamento.

Estoy mudo, eso es un compromiso mayor. ¿No? No le das las llaves de tu casa a cualquiera, eso requiere cierto grado de confianza.

—Así puedes ir mientras no esté...Si no quieres estar en la casa.

—Gracias. —dije conteniendo mi emoción.

Guarde los regalos en sus respectivas cajas. El resto de la tarde me quede en la oficina. No paso nada entre nosotros, Gian estaba muy ocupado ya que tenía un viaje al día siguiente, aproveché mi tiempo para mis asignaturas, después de todo no puedo darme el lujo de perder la beca.

Me quedé a dormir en el apartamento de Gian, obviamente no nos quedamos a leer el periódico durante la noche. La forma en que lo hicimos fue diferente, se sintió distinto, fue como en nuestro primer aniversario. No hubo esposas, premios o castigos, fue dulce, fue tierno, fue hermoso. Tantos sentimientos demostrados en sus actos, en sus caricias, en sus manos... tanto... amor, pero de sus labios seguían sin salir esas palabras.

Me despertó antes de irse, nos despedimos con un beso en la puerta. Se negó a que le prepara algo antes de irse.

—Vuelve a dormir, yo comeré algo de camino al aeropuerto.

—Te voy a extrañar daddy.

—Igual yo baby, te llamaré desde que llegue.

Nos besamos apasionadamente en la puerta intentando preservar el sabor del otro por la semana que estaremos separados y después se fue, dejándome una extraña sensación que debía de preocuparme, mas no lo hizo en el momento. 

Daniele parecía triste se veía distraído, llevaba desde ayer con el semblante abatido estaba seguro al cien por ciento que su "pareja" algo tenía que ver con eso. Por eso decidí invitarlo a la cafetería de las malteadas monstruo que se había convertido en su favorita. Chiara nos acompañó, aunque ella parecía saber lo que le sucedía a Danny. Tan mal estaba que solo movía ausente la pajilla de su malteada contrario a su costumbre de atacar la bebida desde que la tenía enfrente.

—¿Estas bien Danny? Te las has pasado distraído todo el día.

—No... para nada.

—No has tomado tu malteada. — dije señalando el hecho de que los chocolates de encima se estaban cayendo hacia un lado.

—¿Ah? Sí... —la miró con desinterés.

—¿Tuviste algún tipo de problema en casa?

—No,no es nada. —dijo con una sonrisa forzada

—Está así por su daddy, está de viaje.—intervino Chiara robándose unos de los chocolates que casi caen.

¿Por qué Chiara tenía que referirse así a ese señor?

—Oh, es por eso. Podías decírmelo. —dije mirándolo.

Sé que Danny se guarda algunas cosas para él cuando se refiere a su relación ya que conoce mis sentimientos, pero aún así sigo siendo su amigo si algo lo pone triste me lo puede decir.

—Así que Danny baby estará así por una semana hasta que regrese daddy.— agregó Chiara.

—Chiara me estas avergonzando. —dice en voz baja.

Y a mí me enferma imaginarlos. Espera... ¿Una semana? ¿Danny estará sin el señor ese por una semana? Me hace sentir bien, no que esté triste obviamente no quiero verlo así... pero yo puedo darle mi apoyo emocional en esa semana.

—¿Qué tal si hacemos una noche de películas? — propuse de pronto.— Así Danny se distrae un poco.

—Mientras no sea en mi casa no hay problemas—dice Chiara.

—No la iba a proponer, tu hermano está poseído por el demonio —dije refiriéndome a la última vez que fuimos a la casa de Chiara y su hermano de ocho años uso las palomitas como un arma.

Danny se rió ante mi comentario.

— Sí tu hermanito es un poco intenso. — agrego Danny.

—No lo voy a negar pero les dije que no le dieran chocolate.

—Es que me miro con ojitos de perrito no me pude negar. —se defendió Danny ya que él fue que le dio chocolates al niño demoniaco.

—En fin iremos a mi casa.

—¿Podríamos no ver películas de terror? Aún no puedo dormir con la luz apagada desde la última vez. —sugirió Chiara .

—Esta bien ustedes elijan esta vez— cedió Danny.

Todos estamos de acuerdo en no más películas de terror.

—Yo elijo— comenté —Vemos películas y cenamos en mi casa. Puedo cocinarles algo.

—Bien — dijo Danny con una leve sonrisa lo que me hizo sentirme inmensamente mejor.

💖💖
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—¿Entonces qué vamos a ver?—Pregunto Chiara sentándose en el mueble de la sala.

—Dije que eligiría así que tengo preparado una noche de películas románticas.

—¿Qué?— ambos me miraron como si tuviera algo en la cara.

—¿Por qué me miran así?—pregunte confundido.

—Es solo que por lo general te gustan las películas de acción

—Las malas películas de acción.— añadió Chiara.

—También me gusta el romance. Veremos "The notebook"

—¿En serio?— preguntó Danny como si le hubiera acabado de proponer comer queso Casu marzu*

—¿Qué? ¿Que tiene?

—Es solo que The notebook es muy... dulce... muy romántica, cursi diría yo.—respondió él

—Tóxica diría yo. Si vamos a ver algo tóxico que sea super tóxico como Cincuenta sombras de Grey. —propuso Chiara.

—Prefiero The notebook.— dijo Danny —¿Cuál veremos después?

—Pensaba en "The fault in ours Stars"

—Nos vas a endulzar para que luego nos suicidamos, es un plan macabro. ¿Así quieres alegrar a Danny?

—Déjalo Chiara siempre somos nosotros que elegimos.

Pusimos las películas, yo como les prometí cociné antes de poner la segunda. No seré el mejor cocinero de la historia pero por lo menos no envenena lo que cocino. Cenamos frente al televisor de la sala con nuestros grandes platos de Espaguetis a la boloñesa.

—Esta delicioso Stef de verdad. —dijo Danny lo que me hace sentir el mejor cocinero de la historia, con tal de que le guste esta todo bien.

—Esta comible.

Vimos la otra película donde Chiara soltó sus lágrimas ¿Y para qué negarlo? Yo también.

—Son las nueve treinta debería irme. —dice Chiara al terminar la película.

La madre de Chiara es muy amable y cariñosa pero su padre es bastante estricto. Los días de semana no puede estar fuera después de las diez, eso es si saben con quién anda y es en alguien en quien confían.

-Vamos a acompañarte a casa. - propongo.

💝💝
💝

Después de dejar a Chiara en su casa Danny y yo caminábamos despacio sin rumbo fijo dado que no sabía si quería regresar a su casa o ver alguna otra película en la mía.

—Espero haberte podido animar aunque creo que mi selección de películas no fue la mejor.

—No, estuvieron bien... The Notebook es linda... Debe ser lindo tener a alguien que te ame aunque pase todo ese tiempo... — se quedó en silencio un rato luego esbozo una leve sonrisa —Cosas así solo pasan en películas.

Se veía triste de nuevo.

—¿Sabes? Yo nunca pensé en vivir un romance, estaba muy asustado para arriesgarme. Siempre soñé con irme de mi casa y así no esconderme más.... pero al final de cuentas terminé en una relación clandestina podríamos decir. Y siempre se mantendrá así porque hay personas que nunca se van a poder enterar, es como ser el amante de un hombre casado.

—Danny...

—Porque podía aceptar ser sincero con mi papá en un futuro, comprobé que mi tía prefiere ignorar lo que no puede cambiar, pero si se enteran ahora y con quién estoy puedo considerarme hombre muerto. Mucha gente se ha enterado ya.
Tengo tanto miedo de que se enteren más personas, no todo el mundo lo va a tomar bien —tomó un largo suspiro—¿Y sabes que es lo peor? Antes me preocupaba que lo supieran porque podía perder la beca, mis primos me odiarían y no sé lo que fuera a hacerme mi papá... Ahora me da más miedo por perderlo a él. No quiero imaginarme terminando con Gian y sí sé que las personas terminan todo el tiempo por múltiples razones, entenderlo es parte de ser un adulto, no nacimos pegados de los demás. — estaba hablando muy rápido — Pero yo no quiero imaginarme sin él y eso suena muy preocupante porque la verdad es que me enamoré de él porque soy un idiota.

Eso me dolió, Danny lo ama...
Hay mucha frustración en sus palabras no era el plan al invitarlo a ver películas, era distraerlo no ponerlo así. Tampoco era mi plan salir herido.

—Me enamoré de alguien que no sé si me ama... Y tengo miedo, miedo de este sentimiento que crece en mi pecho, miedo del rechazo por parte de las personas que no lo saben.—siguió él — Y me pregunto cosas en su mayoría contradictorias. ¿Se hartara porqué estamos ocultos o es precisamente la emoción de lo clandestino lo que lo atrae? ¿Seré yo lo suficiente para él? Él ha salido con supermodelos y gente más interesante que yo.
Me he convertido en mentiroso, le miento Alex, a mi tía a mi papá y siempre tendré que mentirles... —se detuvo al decir esto— Me estoy arriesgando más que antes por una relación que no sé si es solo un pasatiempo para él. Y Gian está de viaje con su asistente en un lugar exótico pasando tiempo juntos mientras que en pocas horas sería nuestro aniversario y me estoy convirtiendo en una odiosa persona celosa de esas que caen en patrones tóxicos y no quiero y..

Yo lo abrace fuertemente cortando sus palabras, no podía seguir escuchándolo martirizarse.

—Tienes que calmarte Daniele. Es mejor que vayamos a un lugar donde podamos hablar tranquilos. Vamos a mi casa, pediré un taxi.

—Creo que no me gustan las películas de romance por los finales felices... no sé si yo podré tener uno. — dijo en mi pecho puesto que aún lo tenía abrazado.

Tomamos un taxi en silencio, Danny no volvió a pronunciar palabra durante el trayecto. Se veía triste. No tengo idea qué puede estarle sucediendo para ponerse de pronto así. Debe de haber algo que no me dice.

Nico estaba en la cocina calentando los espaguetis cuando llegamos a la casa.

—Buenas noches Nico.—dije al verlo

—Hey chicos. ¿Como están?

—Todo bien. Vamos a mi cuarto — le sugerí a Danny que seguía en silencio.

La razón por la que le propuse mi habitación es porque el apartamento es pequeño, la cocina está justo al lado de la sala-comedor haciendo imposible tener privacidad para hablar.

—Disculpa el desorden—dije quitando unas ropas de la cama y unos cuantos libros de la silla.—Adelante siéntate ¿Quieres algo Danny? ¿Un café? ¿Un chocolate caliente?— pregunte.

—Un café estaría bien, gracias.

—Enseguida lo traigo—dije saliendo de la habitación.

No sé porque tuve ese estallido repentino de sentimientos, supongo que llevaba todos esos sentimientos atorados en el pecho y finalmente salieron mis inseguridades de estos tres meses a flote. También el hecho de que nunca me he enamorado,siempre he escuchado que la primera vez pega fuerte. Y es que Gian se llevó mis primeras veces en todo lo relacionado al amor, mi primera relación, mi primer amor, mi primera experiencia sexual, la primera vez que hice el amor...

Pensando en primeras veces esta era la primera vez que estoy en la habitación de Stef. Es mucho más pequeña que la mía, aunque más pequeña que en la que duermo es cualquiera, pero es acogedora. Me agrada ver que tiene pequeñas bombillas en la pared rodeando el cuarto igual que yo, también tenía pegadas fotos en la pared. Tenía fotos de su infancia lo que me hizo sonreír, había una con una señora joven en lo que parecía una fiesta de cumpleaños. Estaban también las fotos de la feria y otras más.

Seguí curioseando en la habitación, sus libros de la universidad estaban en un estante, sus materiales organizados en la mesa de dibujo y descubrí una guitarra acústica en una esquina.

—Hace mucho que no la toco, una vez pensé en estudiar música. — dijo Stefano desde la puerta con dos tazas humeantes de café.

—Gracias—dije tomando la taza de sus manos. —¿Por qué no lo hiciste? — pregunté mientras me sentaba en su cama.

—El negocio de la música es complicado. No todo el mundo triunfa. ¿Cuantos rubios no hay que canten, bailen y toquen algún instrumento?- preguntó sentándose en la silla del escritorio.—Muchos, yo tengo que comer y pagar cuentas... Además siempre he soñado en casarme con alguien y tal vez tener un niño o dos, para eso necesito estabilidad.

—Sí cierto— dije mirando mi taza fijamente. —Es lindo tener un plan para el futuro. Yo no tenía planes a tan largo plazo. Mi plan era estudiar, graduarme, conseguir un buen trabajo... Tal vez una relación... Pero ahora estoy envuelto en esto.

—¿Qué está pasando Danny? ¿Qué no me quieres contar?

—No es nada en realidad... Es solo que supongo que he estado guardando todo esto en mí. Las cosas han pasado tan rápido que no me he parado a pensar... Bueno cuando estoy con él no pienso. —me quedo en silencio, no es justo para Stefano hablarle de mis problemas con Gian. Me tomé un pequeño sorbo de café.

Stefano solo me mira sin decir nada..

—Conocí al ex de Gian.— dije finalmente. —No pude evitar compararme y ponerme celoso. Cómo lo nuestro es oculto tuve que aguantarlo coqueteando con Gian en la fiesta de Halloween... Me dió una rabia.

—¿Y él como actuó?

—Lo rechazó al final el muchacho se enteró de que estamos juntos, pero tenía su número guardado bajo baby boy.

Veo como levanta las cejas, no debí decírselo.

—¿Y tú sigues con él aun después de eso?

—Me explicó que hace mucho que lo tenía así.

—Claro, él siempre tiene una excusa.

—También lo borró de su teléfono. —No sé si busco excusar a Gian por eso o a mí por aceptarlo.

Stefano deja salir un largo suspiro.

—También me cansa el hecho de tener que inventar excusas y el hecho de que Gian tire todos mis esfuerzos de ocultarnos con cosas como irme a buscar a la universidad y darme regalos muy costosos. Se le olvida que yo no soy rico como ellos, eventualmente asumirán que alguien me está comprando esas cosas. Tengo un miedo terrible a que todo esto explote.

—Comprendo tu miedo.

—A veces siento que Gian no comprende cómo me siento, sus padres lo apoyaron, me he dado cuenta que las personas prefieren estar en buenos términos con los di Castello que cuestionar la sexualidad de sus integrantes. Yo no tengo un apellido rimbombante ¿Y mi papá? Sé que nunca me aceptaría. Siempre ha sido muy claro sobre qué piensa de los homosexuales.- hice una pausa apretando la taza entre mis manos -No tienes idea de lo que era escucharlo cada vez que en las noticias hablaban sobre la comunidad, cosas como que un país aprobó el matrimonio igualitario lo mantenían toda la tarde hablando sobre que el mundo esta como esta por culpa de los malditos maricas y de que todo era culpa de los padres, eso se quitaba con una buena paliza, luego me miraba con esos ojos amenazantes... era horrible.

—Te entiendo, yo me llevaba muy bien con mi padre, compartíamos muchas cosas de "hombres"—dice haciendo comillas con los dedos. —Desde que supo que era bisexual dejé de ser un hombre ante sus ojos... Dejé de ser su hijo, me echó de la casa mientras mi madre lloraba desconsolada de porque Dios la castigaba con un hijo como yo. Mi mama termino aceptandolo, hablamos de vez en cuando.... pero mi padre.... mi padre no ha vuelto a dirigirme la palabra, no diré que no lo extraño, extraño las cosas que hacíamos juntos... y todo se perdió porque él no puede aceptar que puedo enamorarme de un chico tanto como de una chica.

Me puse de pie, me acerque a Stefano y le puse una mano en el hombro.

—Tu sintiéndote mal y yo hablándote de mis problemas.—dijo con una pequeña sonrisa.

—No importa así nos apoyamos mutuamente.—le respondí agachándome para mirarlo y darle una sonrisa.

—Eres un chico tan especial Danny. Me duele verte sufriendo, esa relación te está provocando mucha ansiedad, estás bajo mucha presión. Los estudios, el miedo que te genera ser descubierto más los problemas normales de una relación... Todo eso te está afectando.

—Tienes razón, debería intentar calmarme.

—Y no te guardes las cosas, siempre puedes contar conmigo.

—Yo... Yo solo no quiero herirte.

—Es verdad que me he enamorado de ti, obvio me duele que ames a otro, pero me duele más verte triste. Y te he visto triste varias veces por la misma persona, no mereces eso. 

—Tengo suerte de tenerte en mi vida Stef.

—La suerte la tengo yo Danny.

¿Por qué no me enamoré de Stefano? Todo hubiese sido más fácil. El ambiente se puso muy tenso, demasiado cargado de sentimientos. Él se inclinó hacia adelante y por un momento pensé que me besaría por lo que me puse de pie, él también se puso de pie.

—Por ti haré algo que tengo mucho sin hacer.

Me eche para atrás y caí en la cama, me estaba poniendo muy nervioso, pero no sé tiró encima de mí ni nada por el estilo tomó su guitarra y se sentó dónde estaba.

—No esperes mucho que estoy oxidado. 

Sentí que se me estrujaba el corazón al escuchar la canción. "Treat you better" de Shawn Mendes. Su voz era muy bonita y había mucho sentimiento en la interpretación y yo no sabía que hacer ya que todas esas palabras eran para mí. Las veces que sus ojos se encontraban con los míos, diciéndome lo que pensaba tan directamente yo no tenía idea de cómo actuar.

—Eso fue muy hermoso. Cantas muy bien. — dije para obviar el hecho de que me acaba de decir que el era mi mejor opción.

—Todo lo que dice es cierto.

—Stefano yo...

—Lo sé, no hace falta que lo digas. Solo quiero que lo sepas.

Me sentía un poco incómodo en aquella situación.

—Me voy ahora es muy tarde.—dije poniéndome de pie.

Él también se puso de pie, nos quedamos mirando por unos segundos que a mí se me hicieron eternos, puso su mano en mi mejilla y me acarició el rostro despacio. 

—Es muy tarde y estoy esperando una llamada.

Él retiró su mano de mi rostro.

—Dejame llevarte.

—No hace falta tomaré un Uber.

—Por lo menos te acompaño abajo.

—Bien.

Me acompañó hasta que llegó el Uber. Nos despedimos como de costumbre aunque el ambiente entre nosotros seguía sintiéndose incómodo. 

Subí a mi habitación con todos mis emociones a flor de piel. Soy el protagonista de un triangulo amoroso, me parecía tan ridículo cuando los leía y de repente se ha vuelto realidad, parece un chiste cruel de la vida.

Me tiré en la cama con un brazo por encima de mi cabeza, Stefano estuvo a punto de besarme, suspire pesadamente, eso no hubiera ido bien. Mire la hora, eran las once y quince de la noche ,es decir que eran las siete en corea.

Había hablado poco con Gian por la diferencia horaria. Hablamos ayer hasta que tuvo que atender los asuntos de la empresa. Recibí un mensaje suyo a las once hora Italia para felicitarme por nuestro aniversario, pero yo estaba en clase en ese momento.

Siete de la mañana en Corea... Seguramente debe estar despierto.

Me doy una ducha pensando en llamarlo, no debería esperar que sea él quien siempre haga el contacto. Puede que esté muy ocupado... salgo de la ducha aún pensando en que debería de ponerme en contacto con él, es casi nuestro aniversario aquí en Italia. Pienso en enviarle un video aunque aun tengo tantas cosas dándome vueltas en la cabeza que siento que lo hago más porque quiero darle algo que por verdadero deseo. 

Me pongo la ropa que me regaló la última completandolo con el chocker que me regaló para nuestro segundo aniversario, me miro en el espejo comprobando que todo se vea bien. Antes de terminar de tomar las cosas que voy a usar recibo su llamada.

—Baby boy— Su sonrisa, su maldita sonrisa que me encanta y me desarma. Es imposible creer que con solo verlo sonreír me sienta mejor, no me gusta hacia dónde se dirige esto. 

—Daddy estaba pensando en ti ahora mismo. Mira—digo posicionando el teléfono para que me vea.

—¿Por eso la ropa?

—Pensaba mandarte un video como regalo de aniversario.

—¿Un video? ¿De qué tipo?

—Pues ya sabes... —dije con un pequeño sonrojo.

—¿Puedes hacerlo en vivo?

—Creo que sí... espera un poco.

Busque los juguetes que tengo guardados bajo llave, pongo música sensual de fondo y comienzo. No tenía ningún baile en mente, de hecho lo del video lo pensé en último minuto. Así que solo me muevo de la forma en que la música me lleva. Si algo me gusta de mí es mi facilidad para perderme en la música y olvidar todas esas cosas que rondan mi mente.

No me limito solo a bailar de ser así no hubiera sacado los juguetes. Después de un pequeño baile sensual me subo a la cama donde me acuesto de manera "sexy" acariciándome despacio sin quitarme nada ante su atenta mirada, me quito la ropa interior despacio y me pongo de espaldas a él para darle una buena vista moviéndome de forma sugestiva, subo la corta camiseta que llevo acariciando mis pezones con una mano mientras la otra baja a mi entrepierna donde también me acaricio despacio. Es hora de los juguetes, nunca los había usado, solo cola de conejo y los que Gian uso conmigo aquella vez, pero nunca he tenido la necesidad de usar el dildo que me compró. Me lubrico bien, utilizo mis dedos primero y cuando siento que ya estoy listo lo introduzco despacio.

Al principio la sensación es extraña estoy demasiado acostumbrado a tener algo distinto ahí. Por un momento olvidé que se suponía que estaba haciéndolo para él, porque independientemente de que no es igual que él, se siente bastante bien. Lo muevo a mi ritmo mordiendo mis labios para no delatarme con los sonidos que salen de mí. Termino mirando directamente al teléfono donde puedo ver su expresión.

—Baby boy eso fue... demasiado excitante ¿Cómo es que haces para ser tan increíblemente sensual?

—No hice nada... —digo intentando recuperar mi aliento. —...que no haya hecho contigo... Pero tú no... —Me refería a que no se había tocado.

—No, estoy guardando todo para tí, cuando regrese vas a tener que pedir un permiso en la universidad.

—No vayas a ser malo conmigo daddy.—digo dulcemente sentándome en la cama pues ya me había quitado lo que tenía dentro.

—No seré malo, seré muy bueno.

—Te extraño

—Igual yo baby, ya verás que éstos días pasarán rápido, cuando te vengas a dar cuenta ya estaré allá.

—No lo creo.

—No te desanimes... recuerda no descuidarte mientras daddy no esté. Me encantaría estar ahí para besarte. ¿Me regalas una sonrisa?

Yo sonrío ampliamente.

—Eres hermoso.— dice sonriendo también. —Tengo que irme baby boy y tú tienes que dormir.

—Esta bien daddy.

—Descansa baby.

Hubiera querido que me dijera algo más. Al terminar la llamada todos los sentimientos de la noche regresaron. 

Gracias a mi trabajo conozco mucha gente, gente que pueden servirme en un momento determinado. Por eso invité a una amiga a almorzar en este hermoso día. Una amiga bailarina que ha trabajado conmigo en eventos, una amiga que va a Soundwave academia y estudio de baile, una amiga que graba todas las coreografías originales para practicarlas.

Tuvimos una agradable conversación que terminó en sus prácticas de baile.

—Ya que mencionas el baile ¿Conoces a este muchacho?—digo enseñándole una foto de Daniele—Baila en el estudio al que vas. 

— Sí Danny baila increíble para ser amateur.

—En un video sale una coreografía hecha por él, es muy sexy de "Please me". Es raro que no salga el bailando.

Se preguntarán Emanuele eres psíquico. No, investigo, un pequeño resumen; lo sigo en Tiktok, vi que tiene dos videos bailando con el mismo chico, bailes usuales de Tiktok, pero tiene fotos en Instagram con él, incluso fotos en la academia, el chico tiene videos de los bailes en sus redes en uno de ellos menciona a Danny acreditandolo de una coreografía muy sexy aunque no hay videos de él.

—No sé, se negó tal vez porque el baile lo hizo con un chico... Y ya viste como es.

—Me hubiera gustado verlo... Qué mal que no hay video.

—Yo tengo sabes que grabó las coreografías originales.

—¿Me lo muestras?

—Claro.— dice ella buscando el video en su teléfono.

Sensual, es de la única palabra para describir este baile. Gian no lo ha visto, lo conozco y sé cómo se pondría si lo ve... por lo que yo haré el favor de enseñarselo él merece que lo traten con respeto.

—Vaya ese chico es fuego. —digo. —¿Me lo pasas?

— Sí, pero ¿Para que la quieres?

—Tengo un evento y la coreografía me encantó, me gustaría enseñarselas a las bailarinas, entre las que te cuento aunque ya lo viste, si les gusta podemos usarla. Claro pediríamos permiso en el estudio.

—Bien— dijo y yo conseguí mi video.

No se lo enviaré de forma anónima, iré en persona. 

Dos horas después hacía mi entrada triunfal por las puertas del grupo di Castello, vestido con ropa que hace resaltar mis mejores atributos, pero no demasiado, lo necesario para hacer que Gian tenga que mirarme más de dos veces. Ya que voy a enseñarle algo que lo va a enojar yo puedo darle consuelo. Sé que no le tengo mala voluntad a Danny, sé que el video lo va a perjudicar, pero no hay de otra que enseñarselo, si Danny quisiera pudiéramos ser ambos los babys de daddy, yo apoyo las relaciones poliamorosas, aunque creo que él no estaría de acuerdo, Gian solo necesita un empujoncito para apoyar la idea. 

 Por cierto no es que todo el mundo pueda entrar como si nada a este edificio, pero están acostumbrados a verme por lo cual nadie me pregunta a dónde voy...

—¡Emanuele!— exclama la chica de recepción poniéndose de pie.

Yo me acerco la saludo con un beso en cada mejilla.

— Tenía mucho sin verte. ¿Tienes una cita con alguien?

—¿Perdón?— No entiendo porque demonios me pregunta. ¿Desde cuando yo necesito cita?

—Bueno es que el señor di Castello está de viaje como supongo que sabes.

—Sí, cierto. ¿Me llamarías cuando regrese? Sabes que suele llegar antes para sorprender. —Es cierto le encanta hacer eso para saber si todo el mundo está haciendo lo que se supone. 

—Claro.

—Por cierto estás más linda que la última vez que te vi. Me encanta ese color de cabello.

—Gracias.— dice acomodándose el pelo. 

—Nos vemos linda.

Strike uno Gian no está, pero no importa en mi próximo turno al bate anotaré un home run.

Estoy saliendo de mi segunda clase cuando recibo un mensaje de Bella.

B: Mi tío cumpleaños el día 20 de este mes para que lo tengas presente.

La amo, si no me lo hubiera dicho no me entero.

D: Gracias Bella. 

No tenía idea de que se le regalaba a alguien como Gian él siempre me regalaba cosas muy costosas o que significaran mucho para mi. Yo no le he regalado nada hasta ahora. Regalar en cumpleaños nunca había sido difícil para mí, ahora no tengo idea. Faltaban seis días para su cumpleaños y cuatro para que regresara

D: Me ayudarías con el regalo? no tengo idea de que regalarle. 

B:Claro, cuando quieras. 

D:Podrías hoy ? salgo a las 5 

B:paso por ti a las 5:30, esperame en la universidad. 

Se que aun faltan dias, pero quiero comprar su regalo con tiempo. Después de que regrese dispondré de menos tiempo para buscarlo. 

—Por eso le pedí ayuda ¿Qué se le regala a una persona como él?— hablaba con Chiara a la salida de la universidad. 

—Puedes regalarle algo que no se pueda comprar como una experiencia... Que tal si le haces un baile, eres muy bueno en eso. 

—No lo se, ya lo he hecho... quiero darle algo más, algo no sexual. 

—¿Algo personalizado?

—Suena bien. ¿Vendrías con nosotros? Asi tambien me ayudas.

—Sí, solo dejame avisar en casa. 

Mientras Chiara se comunicaba con su madre Bella llegó, yo me acerque al auto. 

—Invité a mi amiga Chiara espero que no te moleste. 

Chiara venía caminando hacia nosotros en ese momento noté que Bella la miraba de arriba abajo. 

—Claro que no me molesta. — la forma en que lo dijo y en que la miro fue muy estilo Gian, no pueden negar que son familia, debo de admitir que son muy parecidos y por lo que veo no solo en el físico sino en los gestos. De hecho todos en la familia se parecen, menos Alex que se parece a mi tía y en nada a su padre. 

—Hola— saludó agitando la mano Chiara.

Nos subimos al auto, Bella ajusta el retrovisor para mirar a Chiara a través de este. 

—¿Me recuerdas? Nos conocimos en la cena de caridad hace unos meses. 

—Claro que te recuerdo, eres la prima de Danny Isabella. 

—Llámame Bella, todos me llaman así. No te recordaba tan bonita, eres muy linda Chiara.

OK Bella está en Gian mode coqueteando con Chiara sutilmente. No se si esta última se daba cuenta o no.

—¿Has pensado en algo Danny? 

—No tengo idea, es que Gian está acostumbrado a cosas tan costosas y prácticamente lo tiene todo , no tengo idea de que darle. 

—Algo que debes saber es que mi tío es una persona sencilla. No por se adinerado está esperando regalos de cientos de euros. Cuando tienes tanto dinero las cosas costosas pierden importancia. Es mejor algo que tenga un significado especial. 

—Te lo dije baile sexy. 

—Eso es una buena idea. 

—Quiero darle algo más. No todo es sexo en esta vida.

—No, pero es importante. — dice Bella mirando nuevamente a Chiara por el retrovisor. 

¿Es sonrojo lo que noto en la cara de mi amiga? Parece que sí. 

Anduvimos unas cuantas tiendas, descarto todos lo posibles regalos. ¿Perfumes? Tiene un montón. ¿Corbatas? Siempre me han parecido un mal regalo. ¿Gemelos? No he notado que use. ¿Relojes? Tiene un cajón lleno de unos ridículamente costosos.

—Hazle algo personalizado Danny.— dice Chiara con la voz que usa cuando está  harta de caminar. 

Bella toma a Chiara por los hombros. 

— Vamos. ¿No es lindo ver a Danny tan concentrado en buscar el regalo perfecto? Yo creo que es muy dulce. 

Chiara deja escapar un suspiro. 

—Es lindo sí, pero llevamos horas. 

Algo personalizado, algo personalizado... Pasamos por una tienda de puros, recuerdo que en la fiesta lo vi fumar uno, no lo he vuelto a ver, pero se que  fuma a veces. 

—¿A Gian le gustan los puros? 

— Sí, lo he visto fumar un par de veces.— dice encogiéndose de hombros. 

Eso puede ser una buena idea. Entramos a la tienda, ninguno tenemos experiencia en comprar puros, pero ponemos cara de entendidos 

—Estos son los que he visto fumar a mi abuelo y a mi tío.— me indica Bella enseñándome una caja. Es bastante costosa. 

—Excelente elección jóvenes—nos dice el típico vendedor, con la típica sonrisa de vendedor. 

—¿Hay posibilidad de que me pueda conseguir un estuche que venga con esas cosas para tabacos? ¿Ya sabe la cosa para cortarlos y eso? 

Hasta ahí llegaba nuestra actuación de entendidos en Tabacos habanos. 

—Claro, disponemos de kits completos. 

—¿Cree que lo puede personalizar? Es para un regalo. 

—Por la naturaleza de los estuches no los podemos personalizar. 

Fue un poco decepcionante. 

—Como quiera los llevaré. — dije resignado. 

Escogí uno de cuero negro y madera de cedro ya que según el vendedor eran de los mejores. Pague pensando que aún no era suficiente. 

—No lo sé, siento que esta bien pero aun falta algo personalizado. 

Busquemos una tienda donde hagan objetos personalizados. 

— Sí eso creo. 

De camino hacia los estacionamientos pasamos por una licorería, se que Gian es afecto a tomar whisky... hay una botella con la etiqueta verde... verde de ¡Slytherin! Podía regalarle algo que tuviera un significado especial como el hizo por mi. Entre sin decirles a las chicas o fijarme si me seguían. Compre el  whisky de etiqueta verde y sali. 

—Danny te perdimos por un minuto. 

—Lo siento es que vi este Whisky me hizo pensar en Slytherin. Como Gian también es fan de la saga. 

—Si mi tío es Slytherin igual que yo, Alex es hufflepuff.— dice Bella nosotros guardamos silencio solo mirándola. —¿Qué? Me gusta Harry Potter no es raro. 

—No, para nada, en fin es que pensé en comprarle algo relacionado a la saga, lo compraré online. 

Fuimos luego de eso a una repostería donde venden unos deliciosos cupcakes de diversos toppings. Nos sentamos y ordenamos cupcakes y frapuccinos. 

—Me encantaria tener el poder de Danny de comer sin engordar yo no puedo comer mucho o subo rapido de peso. — dijo Bella tomando su Frapuccino solo se había comido un pequeño cupcake. 

—A mí me sorprende su capacidad de comer tanta azúcar. 

—No me critiquen soy un chico dulce. ¿Sí? 

—Y bien Chiara ¿Qué me dices de ti? 

—No soy adicta al azúcar.

—¿Y tienes novio?

Chiara se sorprendió ante la pregunta tan directa 

—No, es soltera— respondí yo ya que ella se quedó muda por un momento. 

—Interesante. 

Chiara la pobre estaba todo sonrojada. Nunca hemos hablado de sus preferencias sexuales, pero hasta donde yo tengo entendido es hetero. Eso no evitó que Chiara terminará dándole su número.

Bella nos llevó a ambos a casa.

Por primera vez en mucho tiempo cene en casa con mi tía y mis primos.

—Daniele sales tanto que ni siquiera te veo.

— Estoy muy ocupado con los estudios es todo.

—Por lo menos no es tomando con estos irresponsables.

Alex solo gira los ojos y no dice nada.

— Por cierto he estado pensando en hacer una cena por el cumpleaños de su padre.

—No va a venir.— dice Carlo. 

—El año pasado asistió a la fiesta que organice.

—No la organízaste, la empresa la organizó tu solo sugeriste hacerla en la casa, él asistió por compromiso social y odio estar aquí.— intervino de nuevo Carlo. 

— Ustedes mal interpretan todo.

—Se fue temprano porque no quería estar en primer lugar.

—Nosotros le organizaremos una fiesta a papá.— dice Alex.

—¿Por qué no lo dejan en paz?— pregunta Carlo. — ¿No se han puesto a pensar que tal vez no quiera fiesta?

—Tonterías. — dice mi tia. 

—Yo me encargaré de la fiesta, Paulo abrió un nuevo club y tengo un  conocido que puede organizarla. 

Yo guardo silencio escuchándolos, no puedo intervenir por varias razones. En un momento la cena se ha vuelto una batalla entre los tres, mi tia empeñada en organizar una cena, Alex insistiendo en que ella la haría  y Carlo empeñado en que no hagan nada. 

—¿Tu que opinas Danny? ¿Que seria mejor?

—En realidad no se.  Deberían consultarlo con el que es lo que mas le gustaría.

—Si lo consultamos no sería sorpresa. — anuncia Alex como lo más lógico del mundo. 

—Pueden insinuarselo.

—Le haremos una fiesta. 

—Su cumpleaños es un dia de semana. 

—El sábado después. 

—El viernes haremos la cena. 

Al final nadie se puso de acuerdo. Yo estaba más concentrado en mis propios regalos para él.  Compré unos bonitos vasos uno de Slytherin y otro de Ravenclaw para compartir. ¿Lo mejor? Los personalizan con tu nombre. Por puro impulso compré velas aromáticas que pensé que me vendrían bien en el momento de mi baile... si llenar la habitación de velas.  

Al día siguiente desde que salí de clases fui hacia el estudio, pero a diferencia de las veces anteriores pedí un salón de baile individual. En el estudio hay unos salones con su gran espejo y sonido propios aislado de los demás sonidos con puertas supongo que para el que quiera practicar de manera privada. Giulio muy solicito me facilitó uno. 

Entré, cerré la puerta luego de agradecerle. Me miré en el gran espejo, por lo general bailo con ropa deportiva, joggers, sudaderas y por el estilo y aunque tengo esa ropa puesta me cambio para poder ver mejor como se verá todo cuando baile. Me quito el jogger debajo tengo un pantalón corto de ejercicio, me retiro la sudadera y quedo con un crop top* un poco holgado. Lo último que añado a mi indumentaria es un par de stilettos negros, si fue uno de esos impulsos. 

Pongo la música, fue mucho lo que pensé antes de decidirme por una, así que  de tanto buscar tope con una perfecta: "Birthday sex" vi coreografías inspiradoras. Me estiré un poco y empecé.

Cuando llegué aquí me consideraba buen bailarín y muchos de los estudiantes me elogiaban por saber hacerlo solo viendo y practicando solo, pero al venir más a menudo me di cuenta que era bueno para mi condición, pero estaba lejos de los bailarines como Giulio y el mismo Stef, ahora que he practicado con ellos veo que mis movimientos son mejores y poseo más flexibilidad. 

Los pasos son muy sensuales, más de los que he hecho hasta ahora, solo espero que Gian vea el baile hasta el final... Tal vez si lo ato... No ya me he imaginado todo en mi cabeza, no lo quiero atar para nada.  Práctico la coreografía hasta que creo que tengo la que haré por lo que bailó la canción con los pasos que ya tengo unidos.
Lo concentrado que estaba y el hecho de que la puerta quede de lado en sentido del espejo hace que no me percate de que Stefano estaba ahi mirándome hipnotizado. Lo note cuando termine de bailar. Me asusté al verlo porque no hacia ningún ruido es como si estuviera conteniendo la respiración todo el rato. 

—¡Stef casi me matas del susto!— dije llevando la mano a mi pecho. 

—Lo siento no era mi intención, es que Giulio me dijo que estabas aquí y como no tenía echado el cerrojo entre... pero Danny... Wow, esa coreografía está que arde, wow. 

Yo me sonroje por el comentario. 

—¿Estas más alto?— preguntó mirándome inquisitivamente.

—No es por...— ¿Le dará cringe que me haya puesto stilettos? 

Su vista recorre mis piernas hasta posarse en los zapatos. Yo me frotaba los brazos un poco incómodo. La mirada en su rostro era de cualquier cosa menos de cringe. Volvió a subir la mirada.

—Te ves... Te ves... Wow.

Yo estaba muy apenado.

—¿Le vas a enseñar eso a los muchachos? Porque de ser asi tendrá que ser solo a los mayores de edad. 

—No, me daría mucha pena. Es un regalo.

—¿Hiciste la coreografía como un regalo para alguien? ¿Quien te pidió una coreografía así? 

—No, es el baile es para... es... Gian cumpleaños en unos dias... y... 

—Ah. debí imaginarlo. No sé porque pregunto.

El ambiente estaba un poco incómodo nuevamente. 

—Deja me cambio y los ayudo con lo que necesiten.— dije apresuradamente. 

—No descuida termina. 

—No, ya terminé. Volveré en la semana. 

—OK, pues te espero afuera. 

Stefano salió, aproveche para ponerme la ropa que traje. Salí para ayudarlos. Nota no es que llegué y me dieron un puesto en la academia ni nada, mucho menos le doy clases a personas mas experimentadas que yo... no soy un prodigio. Los ayudo con los formularios, las inscripciones, enseñarle el lugar a los nuevos, lo que pueda, mientras que yo aprendo más de baile. Claro lo hago cuando puedo. 

💋💋

💋

Dos días antes de la llegada de Gian decidí quedarme en su apartamento, después de ir a la academia no quise volver a la casa porque mi tía estaba empeñada en hacer una fiesta en la casa por lo que estaba patas arriba como la vez de la cena de caridad. Dormí en la casa de Gian, en su cama, con una de sus camisas imaginando que estaba conmigo... Una cosa llevó a la otra por lo que termine autocomplaciedome con los juguetes, supongo que mi subconsciente ya tenía la idea de lo que sucedería de lo contrario no los hubiera llevado conmigo.  

La mañana siguiente amanecí de mejor humor, Gian se suponía llegaría el domingo en la tarde. Yo decidí limpiar el apartamento ya que el equipo de limpieza tenía dos sábados sin venir, por lo que pensé que yo podía encargarme de eso, ya lo hacía en mi casa hacerlo aquí no sería diferente.
Hacer la limpieza con música era mucho más divertido así que busqué entre la colección de discos de vinilo de Gian para encontrar que poner. Grandes éxitos de los ochenta, tenían canciones pop famosas de los ochenta, en los títulos reconozco varias que solía escuchar mi mamá, así que pongo manos a la obra. 

En la casa no hay mucho que limpiar, por lo general es solo desempolvar y pasar un paño húmedo por algunas superficies. Mientras hago esto último suena una canción que escuchaba mucho de niño y que mi mamá ponía cuando hacía la limpieza a pesar de que mi padre no le gustaba que yo escuchara ese tipo de música. La canción es "Karma Chameleon" de la banda Culture Club, su cantante, Boy George, siempre ha sido abiertamente homosexual. Yo me emociono mucho con la canción tomando el plumero de micrófono.

Voy limpiando y cantando al mismo tiempo. Estoy de lo más inspirando cantando el coro cuando al moverme para seguir limpiando lo veo en el umbral de la entrada mirándome divertido. Tantas cosas llegan a mi mente que no se que hacer, dejo caer el plumero de mis manos mientras lo miro fijamente sin moverme. 

—¿No le das la bienvenida a daddy baby boy? 

Mi  daddy estaba de regreso. 

*Crop top: Es básicamente una camiseta corta que enseña el ombligo. 

Una aclaración sobre el capítulo anterior que quería hacer. 

Piero inventa que Danny tiene una cita porque él conoce el método de Bella para descubrir secretos; ella finge saber la verdad para que el otro al sentirse descubierto empiece a revelar información. Como Piero se crió con ella y la conoce sabía que ella no sabía nada. El problema es que no pensó en llamar a Danny e informarle, de todos modos de nada le hubiera servido porque Danny cayó en la trampa de Bella. 

Finalmente el capítulo que prometí hacer antes y por razones de que no me convencía no lo había terminado. 

Una aclaración cuando Stefano le canta la canción a Danny cambia las partes donde dice girl (chica) por guy (chico) Tan lindo el Stef. UwU

Por cierto el video esta con todo y letra en español, escuchenla esta muy linda y va mucho con la situación de Stefano. 

Danny parece sentirse inseguro de su relación. 😱 y con Emanuele en el panorama... no diré más. 

Espero que lo de los stilettos no les haya dado cringe, no pude evitar ponerlos... 😅🙏

Quiero darles un gran beso y abrazos virtuales a todos ustedes bellos lectores. 😍😘😘😘🤗

Gracias por sus votos, sus comentarios que me animan a seguir.... Ya tenemos 5K 🎊🎉

¿Qué opinan del capítulo?

¿Qué tal los regalos? 

¿Llegará el video a manos de Gian?

¿De ser así cual será su reacción?

En mi Instagram subí las películas de terror favoritas de Danny y en FB imágenes relacionadas con este y otros capítulos. Como el apartamento de Stef.

Por cierto para hacerse una idea de la coreografía que Danny está preparando en FB pondré dos vídeos que me inspiraron.

Bye personas hermosas 😘~
Hasta el próximo capítulo: "Birthday sex"

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