Todas las cosas que hice
Solo para poder llamarte mío
Las cosas que hiciste
Bueno, espero haber sido tu crimen favorito

Es agridulce pensar en el daño que hacemos
Porque me estaba hundiendo, pero lo estaba haciendo contigo
Sí, todo lo que rompimos y todos los problemas que hicimos
Pero digo que te odio con una sonrisa en mi rostro

Manjiro Sano

Desperté totalmente asustado y aturdido después de tener la peor pesadilla que había tenido en años, no quería abrir mis ojos con el susto que tenía pero debía hacerlo, mi cuerpo estaba mojado del sudor, tenía una temperatura elevada y me dolía la parte inferior de mi estómago.

Levante mi cuello lentamente sintiendo un dolor latente en la parte izquierda de cuello, abri mis ojos con lentitud y lo poco que pude observar debido a mi poca visión fue mi pequeño apartamento, decidí tranquilizarme por un momento y tocar mi cuello de manera lenta.

Mis dedos sintieron una herida grande y es cuando me doy cuenta de que esto no se trataba de un sueño, una pesadilla o una parálisis de sueño, aquello que había pasado en la noche había sido demasiado real.

—Hasta que despiertas, creí por un momento habías quedado en coma—Dice una voz grave desde la entrada de mi habitación mientras que su cabello negro caía en sus hombros.

Esto no podía estar pasandome.

Mi respiración aumentó rápidamente mientras que mi mente trataba de procesar toda la información, el no podía encontrarme, no debía hacerlo.

—Cálmate Mikey, tarde o temprano sabias que esto pasaría—Responde el mirándome con la misma expresión cínica con la que anoche me observaba—Todos estos años buscarte fue un caso perdido, ahora que no perdí tiempo en marcarte todo será más fácil.

—Te adverti que no me buscaras, que protegieras a Emma ¿que haces aquí Ryuguji?—Le contesto tratando de calmar mi respiración.

No quería que mis pulmones fallaran en estos momentos, si tenía que huir de nuevo lo haría pero antes de todo esto tenía que tener a Takemichi y su hija a salvo, antes era más fácil, poseía la fuerza necesaria, mis sentidos saludables y mucha seguridad.

Ahora era un alfa débil, recién marcado y probablemente mi celo llegará en menos de una horas.

Mi lobo estaba comenzando a despertar del sueño inducido y si sale estará muy feliz de tener una lucha por dominación, en las parejas de alfas los lobos tenían que luchar por saber quien dominará y marcará.

En este caso Draken se adelantó en marcarme con mi forma humana, si lo hacía con mi lobo sabría que terminaría perdiendo por el estado tan débil en el que mi lobo se encontraba, pelear ahora no era una solución.

Tenia que encontrar el momento perfecto para escapar y proteger a Takemichi y a Haru.

—Eso sirvio cómo excusa por un tiempo hasta que mi lobo enloqueció, sufrí problemas físicos y todo esto me afectó gravemente —Responde el mirándome esta vez con más dureza.

Cómo si fuese mi culpa.

—¿Que quieres llegar con todo esto? Esta marca en unos días desaparecerá—Dije levantandome lentamente de la cama para no perder el equilibrio.

No podía enfocarlo bien pero sabía que se encontraba mirándome.

—No te hagas el inocente Manjiro, sabes que pasará cuando dentro de unas horad te llegué el celo, supongo que estos años la pasaste solo o ¿no?—Responde de manera cínica Draken acercandose cada vez más hacia donde me encontraba.

Cómo si el no lo hubiese hecho con mi hermana.

—Deten esto de una vez por todas Ken Ryuguji, no podemos estar juntos—Digo enfrentandolo mientras trataba de mantener el equilibrio.

Necesitaba ganar tiempo para después huir, cualquier persona en la carretera me ayudaría y a Takemichi no le pasaría nada.

—Ahorra tu discurso para otra ocasión, nos iremos mañana de nuevo a Tokyo—Dice el sentándose en la cama.

¿Tokyo?

En ese momento tocan el apartamento y mi cuerpo se congela al sentir el tenue olor de Takemichi, miro con nerviosismo la puerta mientras que las feromonas de Draken comienzan a esparcirse por el aire de manera territorial.

Decido ignorar esto y con rapidez camine hasta llegar a la puerta pero las feromonas fuertes de Draken me hacen caer al suelo totalmente mareado mientras que Takemichi sigue tocando la puerta.

—¿Mikey-Kun estas en casa?, te dejé las llaves del restaurante debajo de la puerta, ¿te encuentras bien?—Pregunta Takemichi detrás de la puerta mientras trato de tapar mi nariz.

—Ni se te ocurra abrirle la puerta, es un omega y si se mete en nuestro territorio tendrá que morir—susurra Draken con su voz de alfa llegando hasta donde estaba y mirando la puerta—Es mejor que pongas tu mejor excusa, si no quieres que ese chico muera.

Me paralice del miedo en pensar que podría llegar a hacerle daño a Takemichi pero eso solo hizo enfurecerme más.

No tiene el mas mínimo derecho en reclamar cuando menciono muchas veces durante conversaciones que mataría a quien fuese su pareja destinada, que no importaba quien fuese.

—Atrevete a ponerle un solo dedo a el y no responderé ante las consecuencias, con lo últimos segundos que me quede de vida lo protegere hasta la muerte—Le susurre levantandome del suelo y mirándolo.

—Es mejor que te tragues tus palabras Manjiro, por mi no hay ningún problema en que entre por esa puerta, mi lobo es con quien tendrá un grave problema si cualquier persona entra—Responde el tranquilamente dejándome aún más peor.

—¿Mikey estas bien?¿Estas otra vez enfermo? dime por favor que no sucedió lo de la última vez, si no entraré por la fuerza—Dice Takemichi tocando la puerta más duro.

Suspire cansado sintiendo que mi cuerpo había perdido nuevamente el coraje, no podía permitir que el le hiciera daño.

—Takemichi es mejor que te alejes, me acaba de llegar el celo y no quiero que se repita lo que sucedió hace unos años—Le digo detrás de la puerta sintiendo su olor—Estaré bien, tengo medicina y supresores.

Todo aquello era una gran mentira pero lo quería salvar, salvarlo de todo este desastre.

—Esta bien Mikey-Kun, mañana te traeremos sopa de algas—Dice takemichi efusivo mientras sentía su aroma alejarse.

Decidí esperar unos minutos más hasta que su aroma ya no se encontraba en el aire, no lo pensé ni dos veces y abrí la puerta para después correr escaleras abajo.

Todo iba bien o eso creía en mi mente hasta que antes de bajar las escaleras un gran peso se abalanzó sobre mi espalda dejándome caer sobre el suelo y hiriendome inmediatamente.

—Te dije de buena manera que no escaparas maldita sea, si no quieres por las buenas, por las malas será Manjiro—Dice Draken encima de mi mientras que sentía la sangre salir de mi nariz y probablemente mi cabeza.

El me toma de mi camisa y se levanta arrastrándome hasta la entrada de mi apartamento, me tira en el suelo y cierra la puerta con fuerza.

Mi mente se llena de miedo y el peligro es latente en el ambiente, sus feromonas se vuelven más fuertes hasta el punto que me maree, no me encontraba en mi mejor estado, estaba ardiendo de fiebre, mi visión empeoraba, mis pulmones se estaban quedando sin oxígeno, estaba muy herido y la marca palpitaba con dolor.

Decidí dar mi última pelea arrastrándome hacia mi habitación de invitados, era la única que tenía una ventana de emergencia por la cual podría escapar.

Pero Draken me detiene y con su mano inmoviliza mis manos, trato de liberarme de su agarre pero el es más fuerte y decide romper mi camisa, pataleo lleno de miedo y terror por lo que planeaba hacer pero nuevamente el dolor en mi estómago se hizo más fuerte y ahora solo era cuestión de segundos para dejarme llevar por mi celo.

Arranca mis pantalones con fuerza dejándome solo en mi ropa interior, trato nuevamente de liberarme de su agarre pero mis fuerzas se agotan.

—Ahora solo serás mío—

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Espero que les guste el capítulo, se que contiene escenas fuertes pero se pondrá peor, tal vez en el próximo capítulo comience con el pasado o lo que sigue.

Preguntas----- >>>>>

Nos vemos pronto

Byeee