Nota del autor: Lo que seguiria del capitulo 2: Cuando el sol se ponga a medio día; deberia ser el capitulo 3: La batalla de los perdedores, pero en este caso la parte dos ya se encontraba escrita con anticipación, así que por eso decidi publicarla antes que el cap 3, y además tiene un poco más de historia, así que podríamos considerarlo importante.

Perspectiva de: -Redactado-

No tenia una descripción todo lo que paso en el planeta en un solo día. Mientras muchos hacian sus actividades cotidianas, el mundo se iba declinando de manera inevitable a un derrumbe sin presedentes.

Aunque.

¿Realmente era tan malo?

El unico afectado seria Japon. Aunque no lo parezca el resto de paises ya empezaban a ser completamente independientes, si Japon desapareciera, si, seria un golpe muy fuerte desde el punto de vista économico y de avances tecnologicos.

Pero, al mismo tiempo sería evitar una tragedia posterior.

Dejame contarte como funciona la vida.

Tenemos en un extremo a la esperanza y en el otro a la desesperación. Los dos se complementan mutuamente para evitar que uno sea más dominante que el otro. Simple, ¿verdad?

Pues no tanto.

Digamos que la esperanza y desesperación definitivas siempre han existido para equilibrar el mundo donde vivimos.

Era necesario que Junko Enoshima destruyera a gran parte de la población, como también era necesario que Makoto Naegi la detuviera y reestableciera el orden.

Lo que no estaba en los planes era la muerte de Junko Enoshima, eso era algo que no debía pasar.

Ambas partes estan destinadas a coexistir en el mismo tiempo, la misma generación.

Pero Junko murio mucho antes de lo que debia, o Makoto vivio mucho más de lo que estaba predestinado.

La respuesta sigue sin llegar a mi mente aún después de casi 1000 años de buscar alguna posible solución al enigma. Mejor no nos adelantemos al futuro, de todas formas no tengo ganas de terminar amargando mi tarde hablando de como son las cosas ahora y de lo molesto que es lidíar con "Frankenstein" cada miserable segundo de mi existencia.

Pero regresemos al punto, porque creo haberme desviado demasiado. La idea basica de todo esto es que siempre debe existir una esperanza definitiva y una desesperación definitiva; en la misma generación

Y la época que estamos revisando tiene un grave defecto:

Existen dos esperanzas definitivas al mismo tiempo.

Si el equilibrio no se reestablece, las cosas se saldrian de control, de formas muy... pero muy bizarras.

Asi que tienes dos opciones:

1) Eliminas a las dos esperanzas definitivas.

Si logras sacar del camino a los dos individuos que estan interfiriendo con el orden natural; entonces permitiras que el ciclo de reencarnación entregue una nueva desesperación definitiva y esperanza definitiva.

A si, no lo he mencionado antes.

El hecho de que Makoto Naegi y "la esperanza extra" esten con vida no permite que nazca una nueva desesperación en el mundo. O al menos eso es lo que yo se, nunca entendí muy bien eso.

2) Consigue una nueva desesperación definitiva, y elimina a la esperanza definitiva sobrante.

Ya se, ya se, dije que si las dos esperanzas siguen con vida no puede nacer una nueva desesperación, pero, puedes crearla.

La diferencia entre los dos encargados del equilibrio, nacidos de forma natural y de forma artificial, radíca en un cosa: las virtudes.

El positivismo de Makoto Naegi, y la incapcidad de sentir esperanza de Enoshima Junko, fueron vestigios de la personalidad que los acompañaron desde su nacimiento, y en el caso de Junko hasta su muerte.

Mientras que una esperanza o desesperación artificial, no nace con las caracteristicas, pero puede conseguirlas a traves del tiempo y las experiencias de vida.

Entonces, si vas comprendiendo lo que digo, sabras que si consigues una desesperación definitiva artificial, solo te faltaria sacar del camino a la esperanza definitiva sobrante en la ecuación.

¿Se comprendio?

¿No?

Maravilloso, sigamos. Al final yo tampoco entendi mi explicación.

Ya sabiendo todo esto, es que la idea de acabar con Japon y por consecuente con Makoto Naegi ya no suena tan mal.

Ya solo te faltaria eliminar a "la esperanza sobrante", y listo, el equilibrio universal esta arreglado y nadie tendra que sufrir un destino peor que ser deborado por el mismisimo infierno.

Claramente nadie sabe esto, así que la idea de desaparecer un pais entero y al salvador del mundo no les agrada, por obvias razones.

De todas formas, ya me alargue con las explicaciones, mejor sigamos con la narración.

Localización: Estados Unidos, Washington D.C.

Fecha: Miercoles, 12 de enero del año 2,053.

Hora: 2 de la tarde, zona horaria Estado Unidense. ( horas después de la distracción del lanzamiento de misiles.)

Nos encontramos en uno de los 5 paises más grandes del planeta, de los pocos que se recuperaron en gran medida de la primera gran guerra contra la desesperación, especificamente estamos en el interior de una reconstruida "Casa Blanca", donde deveria estar sentado el presidente de los Estados Unidos, habia otro individuo, recostada en la gran silla reclinable, con los pies cruzados encima de la mesa, era una mujer con un balde en la cabeza que ocultaba su rostro, pelo rubio y largo callendo por su espalda, usando una blusa rosada algo desgastada y con manchas de dudosa prosedencia, con una falda y medias que acompañan su vestimenta.

Un rostro que nadie ha visto hasta el momento, la mente detras del grupo terrorista que opera a nivel mundial, una mujer de cuya existencia se tienen pocos sino es que casi nulos datos.

"Estas sillas son de lo mejor..." Dijo mientras se reclinaba aún más en su asiento.

Se reclino tanto que se termino cayendo, creando un fuerte estruendo por el impacto.

"¡¡¡ESTOY BIEN!!!" Grito desde el suelo y se levanto rapidamente para no quedar en ridículo, aunque no hubiera nadie más en la habitación. "Demonios, que solitario se siente... ¿cuanto ha pasado desde que estuve en este país?"

La chica se asomo a la ventana más cercana, y miro al exterior, donde pudo observar soldados estado unidenses protegiendo el recinto, todos formados y haciendo patrullajes de un lugar a otro, obviamente iban fuertemente armados.

Puso su mano sobre el cristal, mirando más haya de la cerca que separaba el exterior del recinto presidencial.

"¿Cuanto más tengo que hacer? ¿Cuantas vidas más deben perderse solo para que mi estupido objetivo se cumpla?"

No estaba feliz, y se demostraba en como su mano se pego a la ventana con gran resentimiento, talvez hacia el mundo por obligarla (según su punto de vista) a causar tanto desastre, o quiza a si misma por ser incapaz de detenerse.

Sin importar cuál de las dos fuera, los lamentos no le devolveran la vida a aquellos que murieron por su causa. Una causa sin fundamento, y aún así, sabiendo que sus posibilidades de ganar son nulas, va a seguir, porque mantiene una forma de ver las cosas de manera optimista, aunque las cosas esten en su contra. No queria causar daño a otros, pero al mismo tiempo no quiere perder un guerra donde la mayoria de esos otros seran dañados, la hipocresia en su maxima expresión.

"Señora, ellos ya llegaron." Un soldado entro por la puerta de la habitación, anunciando a losninvitados que la mujer tanto esperaba.

"Diles que pasen."

"Si, señora." El hombre solo obedecio, y salio al pasillo, para indicarle a 4 personas que podían entrar.

Entonces entraron al salon presidencial 4 individuos muy diferentes entre sí, desde la forma de vestir, la altura, la complexión fisica, e incluso la edad.

Lo unico que los 4 tenían en común era que llevan puesto un balde identico al de la lider.

"Mis niños... los extrañe tanto."

Sin decir una sola palabra los 5 en el cuarto se acercaron solo para darse un abrazó, un abrazo cargado de sentimientos fraternales genuinos, donde se expresaba claramente el cariño de una familia, aunque ninguno de ellos compartiera lazos de sangre.

"Mamá creo que me estan asfixiando..." El más pequeño de todos se quejo al sentir que se estaba quedando sin oxigeno debido a la fuerza de la muestra de cariño y al quedar atrapado en el medio.

Los 4 se alejaron al ver que el chico después de 10 segundos ya estaba con un tono azulado en la cara.

"Perdon, perdon, estaba muy emocionada de verlos." Otra chica se disculpo, y al igual que la lider de todos ellos; poseía un uniforme escolar de preparatoria, además de pelo rubio y largo. Ella tomo al niño y empezó a abrazarlo y a moverlo de un lado al otro como si de un juguete se tratase. "¡Mi pequeño hermanito, cuanto te extrañe!" Dijo antes de lanzarlo hacia el cielo y atraparlo antes de que callera, esto lo repitio varias veces hasta que alguien la detuvo.

La chica es No. 4, muy energica y alegre a la hora de interactuar con sus "hermanos y madre", y sabe alguno que otro truco muy interesante.

"Oye deja a No. 5 en paz, no se como el balde en su cabeza no ha salido disparado, pero seguramente ahora tenga ganas de vomitar." El hombre más viejo le corrigio por su conducta, no de una manera agresiva o amenazante, solo le hizo una recomendación como lo haria un familiar cualquiera.

"Número 2 tiene razón, además, no quiero pedirle a mis muchachos que limpien el piso después de que el niño saque su desayuno de esta mañana." Otro hombre apoyo lo dicho por el llamado: "No. 2"

Este hombre, utilizando un traje completo de color marron, alguien muy egocentrico y poco amable con otros, es No. 3, quien justamente fue el responsable de sub yugar a todo el pais Norte Americano en donde se encontraban reunidos. Así que actualmente tras la derrota de los Estado Unidenses, ahora el ejercito de ese pais sirve exclusivamente a él, sin contar también a los soldados de la Unidad Revolucionaria, que ahora ya no son considerados terroristas, sino miembros oficiales de la nueva milicia.

"C-Creo que enserio deberian alejar a No. 4 de mí." El niño, al que se referian como No. 5, se aparto lo más rapido que pudo de la chica que lo estaba persiguiendo para seguir jugando con él.

El ambiente no era para nada tenso, era agradable y cordial, con No. 2 y No. 3 hablando entre ellos, ambos se llevan especialmente bien al ser los mayores del grupo, y quienes se encargan de la mayoria de asuntos importantes.

No. 4 y No. 5 al ser los menores son bastante cercanos, ambos se entienden mutuamente y cuando se ven suelen pasar horas jugando, con esto me refiero que es No. 5 a quien lo obligan a jugar durante horas.

Los más pequeños estaban corriendo por toda la habitación, con No. 5 ingeniandoselas para que su hermana no lo atrapara.

Aunque los mayores quizieran detenerlos, saben que lo mejor es dejarlos ser, de todas formas, mientras No. 1 no se moleste; no hay problema.

"Creo que es suficiente charla sin sentido, ahora tenemos un tema más importante entre manos."

La líder levanto la mano y les hizo una seña, indicandole al resto que tomaran asiento, al rededor del escritorio donde antes ella solo estaba olgazanenado.

Los 5 se sentaron, con No. 1 en el medio, entrelazando sus dedos haciendo una forma de diamante, No. 2 a su derecha; poniendo sus manos sobre sus piernas, dispuesto a escuchar lo que su lider quiziera decirle aunque en realidad ya lo supiera, No. 3 se sento a la izquierda, cruzando las piernas y dando golpesitos a la mesa con los dedos de forma impaciente, para finalmente No. 4 y No. 5 sentarse enfrente de No.1, con No. 4 abrazando al niño pequeño, y este último luchando por no morir asfixiado o que se cayera el balde de su cabeza.

"Saben porque estoy aquí, ¿no es así? Desde que la guerra comenzó oficialmente hace 5 años, no me habian visto de otra forma que no fuera por una pantalla, desde hace 5 años, me quede en Japon sin oportunidad de escapar de una manera que no pusiera en riesgo todo el plan." La mujer empezo a jugar con sus pulgares mientras relatava todo.

"Lo sabemos perfectamente, y por eso nos alegra volver a verte, además..." No. 2 intento seguir la conversación, pero ella solo puso su dedo indice en la parte del balde del hombre que simbolizaria la boca, para luego solo quitarlo lentamente, y ahora poner ese mismo dedo en la sonrisa dibujada de su propio balde.

"Han pasado 5 años, y parece que lo han olvidado. Cuando yo hablo; todos ustedes deben hacer silencio, se los pido porfavor, en cuanto terminen dejare que opinen todo lo que quieran." Se dirigio al resto de sus 'hijos', ellos solo asintieron.

Ese era el nivel de devoción que le tenian, sin necesidad de hacer una amenaza, gritar, o usar la fuerza, todos ellos la obedecerian por el respeto que sienten hacia la mujer que les dío un proposito en la vida.

"Bien, parece que no lo han olvidado. El punto es, que después de 5 años, estamos listos para dar inicio al protocolo: Lost Hope. Ustedes, hijos mios, saben más que nadie lo que eso significa, así que ahora hare la pregunta más importante, ¿quien desea tomar el control de Japon? Ahora que abandone el país, uno de ustedes debera tomar mi puesto como líder de operaciones en ese lugar."

No. 1 observo a los 4 integrantes de su organización, esperando que gustosamente uno de ellos se ofreciera de forma voluntaria, eso es lo que normalmente deberia de pasar, o al menos eso pensaba.

Ninguno contesto a la oferta que hizo.

Bajo ese balde con una sonrisa dibujada, ahora habia una mujer consternada ante lo que presenciaba.

"¿Que pasa? ¿Estan tan emocionados que no saben que contestar?" Bromeo un poco, esperando que al fin alguien respondiera.

Pero las cosas no cambiaron, simplemente ninguno dijo una sola palabra, guardandose totalmente sus comentarios.

Esto ya empezó a irritar a No. 1, pero no lo suficiente como para llegar a molestarla.

"¿...porque no contestan?" Ya no hablo con el tono bromista de antes, sino que solo pregunto de forma seria y seca el porque del silencio general.

Entonces No. 2, hizo el mismo gesto que su lider habia hecho antes, poner su dedo indice sobre la comisura donde estaria su boca en señal de silencio.

Solo con ver eso, la mujer se dío un golpe en la cabeza que fue amortiguado por el balda que traía puesto.

"Perdon, perdon, olvide decirles que ya podían hablar."

Los otros 4 no habian hablado debido a que esperaban a que ella diera la orden, ni más ni menos, a veces esa obediencia puede resultar tonta e infantil que incluso le impresiona a la misma No. 1, para bien o para mal así son ellos.

"¿¿¿¿MAMÁ ESTAS BIEN??? EL VUELO TE AFECTO EL CEREBRO, NO PENSAMOS IR A ESE LUGAR, CREIMOS QUE EL PLAN ERA ELIMINARLOS POR COMPLETO." No. 4 se puso de pie, golpeando la mesa con ambas manos por la sorpresa.

No. 2 siguio sin decir nada, el ya sabia que sucederia, así que era mejor no perder el tiempo fingiendo sorpresa.

"Por mi no habria ningún problema, sin importar el peligro no podría resultar herido aunque quisiera." No. 3 a diferencia del resto de sus hermanos no le dío muchas vueltas al asunto, el estaba sumamente confiado de que podría encargarse de Japon incluso con el caos en el que ese pais se sumergio en las últimas 24 horas.

"A-A-A mí me da b-bastante miedo ese mounstro cucaracha, s-su rostro me aterra..." El pequeño número 5 se encogio en su asiento temblando al recordar esas imagenes que les llegaron desde Japón, con esa cosa destruyendo todo a su paso y masacrando a miles a su paso.

Pero de todos en la habitación, No. 1 era la que menos estaba entendiendo las cosas.

¿Mounstro cucaracha? ¿De que hablan?

El unico mounstro que tuvo que surgir era el armadillo.

¿O acaso es que el arma biologica se mezclo con una cucaracha en lugar del animal?

No, no, eso no tuvo que pasar.

No. 3, 4 y 5 empezarón a hablar entre sí con referencia al mounstro cucaracha, con la chica afirmando que es un problema una bestia tan descontrolada, el niño diciendo que le daba miedo encontrarselo de frente, y número 3, bueno, el realmente estaba algo indiferente aúnque también intrigado sobre la criatura.

"Número 2... quiero que me digas que paso, ahora." La lider estaba molesta, esto no se encontraba en los planes, y su mano derecha, el hombre al que ella crio desde su niñez, al que moldeo para volverlo lo que es hoy en día, habia omitido contarle sobre esto.

Número 1 ya sabia que su hijo mayor solia no contarle algún que otro detalle con referencia a como acabaran las cosas, pero ella llego a comprender que a veces lo hacia para mantener la intriga o porque es estrictamente necesario.

Pero nunca, habia omitido algo tan importante.

"Bueno, señora, el arma biologica Epsilon, fue lanzada después del bombardeo de distracción, cayendo en el distrito 7 de Japon, como estaba en los planes el patogeno se fusiono con el armadillo y..."

"Ve al grano, ve al momento en que aparece una cucaracha en esta puta historia." Número 1 detuvo a su segundo al mando, ella ya conocia esos detalles, todo eso estaba previsto, lo que en ningun momento fue mencionado, era lo de un mutante cucaracha.

"Bien, lo resumire de forma simple. El armadillo fue exterminado por Tetsuno Togami y Sayaka Naegi. Después de una batalla que duro 4 horas, acabaron con él, con ayuda de unas armas no identificadas, el problema radica en que ambos terminaron en un terrible estado, la comandante Sayaka Naegi practicamente estaba al borde de la muerte, y..."

No. 2 se quedo callado un momento, el ya sabia como terminarian las cosas deapués de contarle a su lider lo que sucedio, y lo furiosa que se pondria.

"Termina..." La mujer ya estaba empezando a emfurecer más, solo queria terminar de escuchar el relato.

"Sayaka Naegi entro en contacto con el arma biologica Epsilon, tal parece que también en el momento de la union genetica con el patogeno; una cucaracha estaba involucrada, creando al que denominamos: "La mutante cucaracha" o "Arma biologica 2-1". Ahora es una bestia descontrolada sin razocinio aparente y que destruye todo a su paso, no solo enemigos, sino también aliados."

Número 1 se levanto, dando un fuerte golpe a la mesa, y apretando los puños, ahora si que estaba molesta.

Sus 4 hijos se estremecieron un poco porque ella no solia perder los papeles frente a ellos con tanta frecuencia... pero cuando pasa, realmente las cosas se ponen un poco violentas.

"Cuantos..."

Su voz estaba quebrada, podria confundirse con alguien sollosando en silencio, pero enrealidad era alguien con gran rabia en su pecho.

"Cuantos..."

Su voz se rompio aún más.

"¿Cuantos murieron...?"

La pregunta que más lleno su cabeza en cuanto escucho del mounstro imparable que habia cobrado vida.

"65% del ejercito japones, 0% de la población civil." No. 3 fue el que contesto a la pregúnta, sabía que número 2 incluso mentiria en las cifras solo para apasiguar el descontento de No. 1, después de todo, lo que más le falta a su hermano es el caracter a la hora de enfrentar a su madre.

"65% dices... aproximadamente 80,000 muertos..."

La mujer se dío la vuelta, dandole la espalda a sus hijos, sumergiendo su mente por unos breves momentos en un lugar que no le gustaba visitar a menudo.

Un lugar llamado remordimiento.

"Número 4, hija mía, por favor podrías hacer un pequeño ritual para mí."

Sin voltear solo le ordeno a la única mujer a parte de ella que hiciera uso de su talento.

"Claro... madre... solo necesito una muñeca..."

No. 3 es una chica joven, sin mucho a destacar, pero lo que es caracteristico en ella es que no le gusta llevar bolsos o mochilas, ya que para ella no es algo comodo, sin mencionar que siempre usa falda, la cual no trae bolsillos.

¿Entonces como lleva cosas importantes consigo?

Eso es un pequeño secreto que no le cuenta a nadie.

Con un ligero movimiento metio su mano derecha dentro de la manga de su sueter del brazo izquierdo, y saco un muñeco, un muñeco de paja, con pequeños botones negros en la cara que representaban los ojos.

"¿Que deseas que haga...? madre." Sin esperar respuesta hizo el mismo movimiento que antes, solo que a la inversa, introduciendo su mano izquierda en la manga de su mano derecha, ahora sacando un martillo y 5 clavos.

"Espera." No. 1 la detuvo. "Los clavos no son necesarios, esta vez solo... solo el muñeco."

"Comprendo..." No. 4 guardo el martillo y los clavos en su manga de nuevo. "Entonces, ¿que deseas que haga?"

"Solo... dales descanso, a todos, sin excepciones." Respondío sin muchos animos.

La hija solo asintió y tomo el muñeco entre sus dos manos, entendiendo el deseo de su madre, empezó a recitar unas palabras en voz baja.

"Rezo por el descanso de las almas, de aquellos que murieron por nuestra imprudencia, rezo por el perdón de todos aquellos que no tuvieron oportunidad de redimirse de sus errores y sus pecados... rezo porque nos perdonen a nosotros, por haberles arrebatado lo más valioso... sus vidas."

Al terminar sus plegarias el muñeco empezo a incinerarse, de forma espontanea, sin que alguién usara fuego de algún tipo para generar esa reacción, y a pesar de que el objeto empezara a rodearse en abrazadoras llamas, la chica no lo solto, y tampoco parecian estar provocandole daño, ella lo apreto con fuerza, hasta que el muñeco en cuestion de 3 segundos se volvio cenizas, una pila de cenizas que quedaron sobre la mesa.

"Listo..." Hablo la misma mujer que habia realizado esta especie de ritual.

"Carajo, sigue siendo escalofriante..." No. 3 hablo para si mismo, los metodos de No. 4 siempre le han desagradado, le dan escalofrios cada que ella hace un ritual o algo por el estilo.

"Probre muñequito..." No. 5 parecia estar más afectado por el hecho de haber quemado un potencial juguete frente a sus ojos.

"Bien..." No. 2 ignoro todo y se preparo para lo que se venia. "Creo que debo moverme antes de que..."

Sin poder terminar su frase; se levanto tranquilamente de la mesa, dando un paso atras, pero esto no lo hizo solo porque sí.

Al moverse evito un golpe que iba dirigido hacia su abdomen, un golpe que si no hubiera sido esquivado probablemente seria mortal, la persona que buscaba herirlo habia sido su misma lider, que lanzo una patada en su dirección a una velocidad que ningún humano promedio podria siquiera ver.

"Te... he dicho... que no te guardes los temas importantes... No. 2... pense que eso estaba claro."

Simplemente exploto, le pasa a menudo a la pobre número 1, pero no frente a sus hijos, todos ellos pocas veces han presenciado este tipo de momentos.

"!!!INSOLENTE DE MIERDA¡¡¡" Le grito para lanzarse contra su mano derecha con la intensión de herirlo, o incluso peor, de matarlo.

"Ah... demonios, aquí vamos de nuevo, me avisan cuando termine. Y número 5, cierra los ojos, tapate los oidos y... no se, tararea algúna de esas canciones infantiles que les gustan a los niños, yo que se, yo fumare un poco." No. 3 saco del bolsillo de su saco una cajetilla de cigarrilos y luego de su pantalon saco un pequeño encendedor, con el cual prendío un cigarro, e instintivamente empezo a llevarlo a su boca. "Mierda... con el balde puesto no puedo fumar." Habia olvidado ese pequeño detalle.

"¿Deberia detenerlos?" No. 4 pregunto a su hermano mayor, el cuál lucia frustrado por no poder complacer su vició más caracteristico como lo era el cigarrillo

"¿Que? No, no, dejala, se le pasara en 5 minutos, quiza, probablemente, no lo se. Como ella no puede agredirme aunque lo deseara pues no se cuanto le tome volver a estar cuerda." El hombre solo se encogio de hombros desinteresado ante lo que ocurria, realmente la emoción del peligro y de sentirse amenzado la perdió desde el momento que entendío su talento.

"Creo que... mamá estara bien en cuanto recapacite." No. 5 habia ignorado la recomendación de su hermano de cerrar los ojos y taparse los oidos, apreciaba el hecho de que se preocupén por él, pero le molestaba un poco que lo trataran como a un niño.

Mientras ellos 3 hablaban aún sentados en la mesa, No. 1 seguia atacando con todo a No. 2, lanzando patadas y puñetazos a toda velocidad, con intenciones mortales sobra decir.

Pero el hombre con movimientos muy sutiles pero precisos estaba esquivando todos los ataques con increible elegancía y facilidad, como una coriografía de danza impecable, que fue ensayada y estudiada durante meses.

"30 segundos." Dijo número 2. "29..." siguio contando mientra más golpes seguían intentando alcanzarlo, pero el solo esquivaba sin dificultad, sin intenciones de realizar un contrataque.

Ambos individuos estaban llendo de un lado al otro de toda la oficina.

"!!!!MALDITA PUTA, TE BURLAS DE MI, TE BURLAS DE MI COMO ESE DÍA EN QUE ME ARREBATASTE A MI FAMILIA¡¡¡¡"

Su mente ya no estaba centrada en la realidad. No. 1 ella tiene un grave problema que la vuelve violenta sin desearlo, debido a ciertos sucesos de su pasado, y justo ahora esta teniendo la misma alucinación, la misma que le atormenta en sus sueños, en su día a día, en lo más profundo de su conciencia.

La imagen más horrenda que ha visto.

"Ja...ja...ja... eres tan fastídiosa, como tú hijo, tú y él son tan parecidos, y eso... eso hace esto aún más divertido."

"Tú... tú me lo arrebataste todo..."

No. 1 seguia atacando a la sombra que la atormentaba, atacaba desesperadamente, pero sentía que sus golpes no alcanzaban a su objetivo, como si sus puños solo estuvieran saboreando el aire.

"¿YO? NO... si alguién tiene la culpa, es el malnacido al que diste a luz, esto es un ojo por ojo, diente por diente..."

"!!!NO TE ATREVAS A METERLO EN ESTO¡¡¡¡" La mujer saco una pistola que tenia escondida dentro de un chaleco anti balas que traía bajo la ropa.

Saco el arma en un parpadeo, apunto hacia la voz que la atormentaba, y sin pensarlo dos veces jalo el gatillo.

Una rafaga de 5 disparos en línea recta.

La figura sombria ni se inmuto.

Pero el problema no era la alucinación, el problema era que le estaba disparando a uno de sus aliados sin darse cuenta.

Por suerte No. 2 esquivo los disparos solo moviendose 2 pasos a la izquierda, practicamente movio su cuerpo incluso antes de que ella apretara el gatillo.

"20..." Mientras evadia otros 3 disparos, No. 2 seguia contando tranquilamente.

Y su lider seguia atacando sin piedad, haciendo ahora otros 2 disparos apuntando a las piernas, una bala para cada una, y el hombre solo hizo un ligero salto en el momento adecuado, saliendo de la amenaza de forma efectiva.

Y entonces No. 1 tuvo que recargar, al usar 10 balas se habia quedado sin munición, y para seguir usando su pistola tendria que agarrar otro cartucho.

El inconveniente en eso es que le tomaria 2 segundos realizar esa acción.

2 segundos que No. 2 podria aprovechar perfectamente y sacar su propia arma y dispararle en este momento de abertura, pero él no haria eso, ya que no deseaba lastimar a la mujer que había salvado su vida en antaño, cuando aún no comprendía su talento y no entendía como aprovecharlo.

"15..." El conteo continuo.

"A VER SI PUEDES HABLAR CON PLOMO EN LA BOCA" Termino de recargar, y volvio a disparar

"14..." Y nuevamente esquivo las balas sin problema No. 2

Mientras todo esto sucedia, las otras 3 personas en la habitación estaban con diferentes reacciones.

Por su lado No. 3 estaba más preocupado en que siempre que trae el balde en la cabeza no puede fumar un cigarro.

No. 4 se habia lanzado al suelo, tomando a No. 5 entre sus brazos, poniendo a ambos a salvo de cualquier proyectil perdido que pudiera haber, aunque no fuera necesario para ninguno se los dos esconderse, sabía que a No. 5 el dolor de una bala no le era muy grato.

Y el niño pequeño habia tapado sus oidos y en cuando su hermana mayor lo tomo en brazos también cerro los ojos.

La sensación de ser impactado por una bala no era algo muy agradable para él, ya tenia experiencia en eso... demasiada, más de la que le gustaría.

"5..." El conteo casí llegaba a su final, y los ataques de número 1 no llegaban a su fin.

"TE MUEVES DEMASIADO RAPIDO PARA SER UNA MALDITA MODELO."

"4..."

"CUANDO TE MATE TOMARE TU CABEZA Y LA USARE COMO PELOTA DE PLAYA"

"3..."

"Y LUEGO IRE A JAPON, METERE ESA CABEZA EN UNA CAJA Y ME CAGARE EN ESA CAJA."

Los comentarios de odio de la mujer comenzaban a perder sentido.

"2..." Pero eso no afecto la concentración de número 2 que seguia esquivando con extrema facilidad los golpes, patadas e incluso disparos.

"LUEGO DE CAGARME EN LA CAJA, YO VOY... VOY A... EH... HARE CON ELLA ALGO SEGURAMENTE, PERO NO SE QUE."

"1..."

"Y DESPUÉS IRE CON MI HIJO, Y LO MATARE DE PASO... no espera... no deberia querer matarlo a él."

"0..."

Al terminar el conteo, el hombre esquivo un último golpe que intento acertar su camarada usando la empuñadura del arma, pero por su ira ciega la mujer termino tropezando con su propia pierna, callendo al suelo y golpeando su cabeza después de rodar bruscamente unos metros. No fue un golpe fuerte ni nada que ella no pudiera aguantar, pero, fue suficiente para sacarla de su propio trance.

"Mierda... ¿paso otra vez?" Dijo desde el suelo, corroborando que el balde de su cabeza seguia en su lugar.

"Si, no es la primera vez, y no sera la última, ¿no es así?" No. 2 replico, extendiendo su mano para poder levantar a la mujer, gesto que ella acepto.

"Bueno... detalles minusculos, solo no me vuelvas a ocultar información tan importante."

Ya finalizada esa pequeña disputa, número 4 y número 5 pudieron levantarse al saber que ya no habia peligro, y número 3 seguia pensativo, ahora no recordaba si habia dejado la estufa encendida antes de llegar a la reunión.

"Bien, perdonen por... eso. Pero ahora debemos dejar en claro, ¿quien desea quedarse Japón?" Número 1 termino de levantarse y volvio algo apenada a su asiento, solo para hacer la pregunta importante a sus subordinados.

Y de nuevo ninguno de sus hijos contesto.

"Hijos de puta... PENSE QUE DECIAN SER 100% LEALES." Entonces la lider empezo a golpear su cabeza contra la mesa por la frustración.

"Y lo somos, pero... madre, Japon justo ahora debe ser un caos, y con esa... cosa suelta, creo que sería un poco contraproducente ir, quiza solo deberiamos dejar que ellos se maten solos, y cuando los civiles empiezen a huir a otros paises abriremos nuestras fronteras." No. 4 explico la razón de porque no queria tomar Japón, al inicio penso que el plan era rematarlos cuando se debilitaran, pero ahora sabiendo que su hermano mayor se guardo para si mismo la información fundamental, y esto no habia sido previsto por su madre, ahora preferia mantenerse más cuidadosa con el asunto.

No dudaba de sus habilidades, para nada, si ella fuera ahí, Japon estaria en graves problemas, seguramente le tomaria 4 meses tomar el territorio completo, incluso con el mounstro cucaracha vagando sin control por ahí.

"Yo no tendría problemas en ir, pero sinceramente no tengo deseos de abandonar mi país, y tengo que velar por mis intereses personales en este lugar." No. 3 fue ahora el que expuso sus razónes, aunque él diga que quiere velar por sus intereses personales, enrealidad no desea abandonar a su gente, ya que no confía en nadie más para cuidarlos.

No. 3 es una persona muy sensible cuando se trata de las personas a su cargo, aunque no lo parezca. Ese narcisismo que tiene oculta muy bien esa faceta

"Yo... le tengo miedo a las cucarachas." No. 5 fue el de la explicación más simple.

"..." No. 2 guardo silencio, de todas formas ya sabia quien terminaria quedandose con Japón.

Todos empezaron en debatir quien deberia ir a Japon, nadie queria abandonar los países a su cargo, ya que tenian la obligación de proteger a su gente.

Claro, ellos tecnicamente también empezaron una guerra mundial contra la 2da mayor potencia del mundo, lo cual ya de por sí pone en peligro a su gente, pero... detalles.

"Opino que deberiamos empezar a replegar a los soldados de Japon, y evacuarlos a nuestra sede más cercana que es Rusia. No soy mucho de decir esto, pero estoy de acuerdo con lo que dijo No. 4, dejemos que ellos se maten entre sí." No. 3 concluyo.

"Yo podria... darles asilo en china, creo que sera más facil que se trasladen a otro país asiatico que a nuestras bases en Rusia..." El pequeño No. 5 también apoyo la idea de la retirada tactica de las tropas.

"Mis hermanos entienden la situación." Número 4 se puso la mano en el pecho. "La union Europea tambien tendra sus puertas abiertas para evacuar civiles y soldados, no solo de nuestro bando, sino también soldados Japoneses que quieran huir y unirse a nosotros, claro a cambio de información." La chica estaba dejando muy en claro que no deseaba ir a ese país solo para intentar ganar un territorio que justo ahora ya no es importante debido a su inestabilidad actual y proxima.

"¿No eras tú la que decia que los dejaramos morir...?" No. 3 cuestiono el comentario de su hermana menor referente a que antes estaba dispuesta a dejar que las fuerzas militares japonesas se destruyeran a si mismas en el caos.

"Callate, que tu también estuviste de acuerdo." Contesto con un tono molesto.

La discusión siguio por otro rato sin un rumbo especifico o una solución a la cuestión.

Hasta que No. 1 volvio a poner su dedo sobre su balde en señal de silencio.

"Bien, creo que tendre que decirlo de una vez, ¿recuerdan cuál es el protocolo Lost Hope?" Cuestiono a sus hijos.

No. 5 levanto la mano para pedir permiso y contestar.

"Si, el chico de la primera fila, ¿usted sabe la respuesta?" Como una presentadora de un concurso de televisión, No. 1 le dio la palabra al pequeño No. 5

"E-E-Eh... !!!SI¡¡¡ El protocolo Lost Hope es luz verde para permitirnos usar nuestros talentos con el fin de asesinar a Makoto Naegi."

"DING, DING, DING, !!!CORRECTO¡¡¡"

La lider victorio que le dieran la respuesta correcta.

"Ahora... ¿ustedes creen que yo les permitiria usar sus talentos sin una razón importante y no solo el mero hecho de querer asesinar a la esperanza definitiva?"

Todos menearon la cabeza, negando.

"Bien, pues tienen razón. Y lo que no les conte del protocolo Lost Hope, es que marca el inicio del éxamen para encontrar a la nueva desesperación definitiva."

Isla Javerwook.

Localización: -Desconocida-

Fecha: -Desconocida-

Hora: -Desconocida-

Un hombre de pelo negro y de ojos de distinto color se encontraba viendo una pantalla, donde se podia apreciar la reunión de los 5 lideres terroristas de la "Union Revolucionaria" o también llamados "Cabezas de lata" de una manera más coloquial.

"Parece que ya esta empezando." Dijo el hombre mientras le daba un sorbo a una taza de té que tenia a la mano.

Él se encontraba solo, en un laboratorio creado por él mismo, y al cúal solo 3 personas en el mundo a parte de si mismo pueden llegar a entrar.

Este era Hajime Hinata, el cual mantenia una apariencia identica sus ya pasados 20 años, gracias a cierto procedimiento que hizo para evitar el envejecimiento de sus propias celulas.

Esto no lo volvia inmortal (aunque podria hacerlo si quiziera) pero era para mantener la vigorosidad de su juventud sin tener que sufrir los estragos de la vejez.

Aunque fuera el hombre con cientos de talentos en su arsenal, si hubiera permitido que la edad lo consumiera; quiza en el peor de los casos eso lo habria debilitado.

Pero eso es un tema diferente. Lo importante es que justo ahora se encontraba en este sitio observando detalladamente como esos 5 se reunian, después de todo, la curiosidad le era fuerte, incluso teniendo el talento de analista definitivo.

"Lo más prudente es que envien a número 5 si quieren ganar con facilidad..." Como si fuera fanatico de algún deporte le hablaba a la pantalla, aún sabiendo que nadie lo escucharia. "Pero claro, nunca has sido una persona prudente, ¿verdad No. 1? Así que quiero verlo... a quien de ellos 4 enviaras primero."

Hinata entrelazo los dedos, y clavo sus ojos en la pantalla, para no perderse ningun detalle, ni el más minimo.

Ring... Ring....

Y de manera inoportuna el inter comunicador de su bolsillo empezo a sonar, un aparato redondo que funcionaba como un telefono pero con la ventaja de no poder ser rastreado ni registrado en ninguna parte, uno de los artilugios que él mismo construyo en tantos años.

"Así que al fin me llamas." Sin apartar los ojos de la pantalla atendio la llamada.

"C-C-Creo... que estoy perdiendo mucha sangre."

Al otro lado de la línea se escuchaban las palabras y jadeos de alguien en terrible estado, de una mujer que pareciera estar en sus últimos momentos, algo que asustaria a cualquiera, de no ser porque Hinata ya habia previsto la situación.

"Oye pues creo que era obvio, te dije que huyeras de esa cosa, pero eres terca, como tu madre."

"Maldito viejo..."

La mujer seguia a duras penas articulando palabras, pero Hajime estaba prestandole poca sino es que nula atención.

"El traje esta realizando su trabajo de forma espectacular, el hecho que sigas respirando es una muestra de ello."

"... callate..."

"Te dije 7 veces que ya no podrias con ese mounstro, y aún así decidiste luchar, sabia que no moririas, pero realmente te oyes bastante mal, de todas formas estaras de nuevo en una pieza en una hora o dos. Pero dejemos eso de lado, díme porque me llamaste estoy en medio de algo, y se que no lo hiciste para pedir ayuda, preferirias morir a pedirme ayuda."

"Ja...ja... anciano de mierda realmente me conoces. Te llame porque quiero saber... ¿quien es Shin?"

Hinata estaba a punto de llevarse otra vez su taza de té a los labios, pero esa pregunta detuvo el recorrido de su mano.

"Que raro que estes interesada en el hijo adoptivo de Makoto Naegi, alguna vez te conte de toda la familia Naegi y dijiste que eran aburridos, entonces ¿de donde viene el cambio repentino de opinion?"

"Oh no lo se... quiza sea porque esa cucaracha de mierda antes de dejarme con 208 huesos rotos pego un grito que casi rompe mis timpanos; diciendo exactamente ese nombe."

"El cuerpo humano de un adulto solo tiene 207 huesos."

"Exactamente, me rompio hasta un hueso que ni siquiera existe, así de mal estoy ahora..."

"Escucha, normalmente estaria dispuesto a escuchar como te quejas de haber perdido contra una amenaza que claramente te sobrepasaba, pero justo ahora hay un tema del que debo estar pendiente."

"Maldito hijo de puta... ¿que es más importante que yo?"

"Los 5 lideres de la U.R. estan reunidos justo ahora."

La unica respuesta que hubo fue silencio. La mujer al otro lado de la linea sabia lo que significaba que esos 5 esten juntos en persona, y solo pueden ser problemas.

"Bien... puede que eso si sea más importante en este momento, entonces no te seguire interrumpiendo... el traje terminara de arreglar mi cuerpo en un rato... cuando termine de reparar mis pulmones al 100% te llamare de nuevo..."

"Me alegro que entiendas la situación, no te sobreesfuerces, y activa el maldito rastreador, hace bastante que lo apagaste."

"¿Encenderlo? No, paso. No tengo ganas de que me veas en este estado, es... humillante

"Ese mismo orgullo te dejo en ese estado, debes aprender a controlarte, y saber cuando es más de lo que puedes masticar."

"¿Eso no va también para tí...? Porque estoy enterada... de que ciertas personas te hicieron pasar un mal rato en el pasado..."

"Ahi te equivocas, no sufri por confiarme, sufri porque ellos realmente son peligrosos, yo sabia a lo que me enfrentaba, a diferencia de tí, que te lanzaste de cara contra una piscina, solo que en lugar de agua, estaba llena de ladrillos."

"Bueno... debo decir que habria preferido lanzarme contra una piscina llena de ladrillos, en lugar de... esto."

"Tienes razón... al menos la piscina de ladrillos te habria dejado menos huesos rotos."

Hinata tomo un sorbo de su té, aunque estaba hablando con esa mujer por telefono, no habia perdido de vista la reunion de esos 5, podia hacer sin problema ambas cosas al mismo tiempo.

"Bueno, voy a colgar, no mueras, tu madre se enojaria mucho si lo hicieras."

"Muy gracioso... te llamare después, creo que tenemos aún algo de lo que hablar."

La llamada se corto, dejando a Hajime de nuevo solo, con la pantalla en frente de su rostro observando lo que sucedía.

Al parecer ahora estaban peleando por quedarse con Japon, cuando la lider menciono algo relacionado a un "examen" el ambiente se torneo totalmente diferente, ahora los 4 generales empezaron a ofrecerse voluntariamente.

"Bueno ya saben lo que dicen, las damas primero, creo que... yo tomare Japon, después de todo no sera tan dificil si puedo usar mi talento ahora sin restricciones." Dijo número 4, pero no parecia tan segura de su respuesta, parecia estar dudando.

"No, no... creo que yo... creo que yo debo hacerlo, soy el segundo mayor, seria... irresponsable de mi parte dejarle una carga como esta a uno de ustedes." Número 3 fue el que ahora se postulo como voluntario, y al igual que su hermana menor; su voz denotaba gran duda, y además mostro abiertamente amabilidad, lo cual ya es raro de por sí.

"N-N-N-No... y-yo lo hare... yo tomare el lugar de mis hermanos, yo tomare el control de Japon... y y-yo !ME ENFRENTARE A ESA CUCARACHA DE SER NECESARIO¡" El pequeño número 5 también se ofrecio voluntariamente, aunque previamente dijera que le tenia miedo a la mutante cucaracha.

¿Esto era una discución?

No.

Seria más facil clasificarlo en 3 personas queriendo ofrecerse voluntariamente para tomar el control del pais asiatico, pero como si esto fuera un sacrificio, como si aquel que sea elegido no volvera jamás, o si lo hace... sera alguien totalmente diferente.

Hinata comprendio eso al instante, y al mismo tiempo se creaban más dudas que el mismo se contestaba gracias a su analisis mejorado.

Y llego a la conclusión de quien iria en tan solo 10 segundos.

Era tan obvio.

Este "examen" es de un concepto facil de entender, y él supo que no iria la artilleria pesada de primero.

No, iria la persona que preevio todos los acontecimientos, aquel que es el verdadero cerebro detras de todo lo relacionado a la estrategia y a la logistica, y que si no fuera por las limitaciones que le impuso su "madre" y otras que se impuso el mismo; sin duda venceria a cualquiera.

Después de todo.

No puedes vencer a alguien que ya sabe lo que haras, incluso años antes de que lo hagas.

Aunque... eso es exagerado, el tipo no es 100% invatible, y eso Hinata lo tenia muy claro, quiza de los 5 no es el más fuerte, tampoco el más habilidoso, mucho menos tiene el talento más extraño o más peligroso.

Pero era el más meticuloso a la hora de actuar.

<<< 24 años en el pasado
Localización: Rusia, ciudad de Rostov.

Para entender quien es este hombre devemos remontarnos 24 años al pasado, en una ciudad practicamente abandonada y cubierta de nieve, totalmente helada.

En medio de todo ese campo cubierto por el invierno, habia un chico caminando totalmente solo sin un rumbo aparente, silbando al ritmo de una antigua canción de su patria que se paso a traves de las generaciones, incluso después de la tragedia de la desesperación, con ropa que lo protegia del frio y lo más llamativo, traía una venda blanca sobre sus ojos, lo que normalmente, le haria imposible a cualquiera moverse, para este indivuduo era casi como si no existiera.

Este joven de 16 años habia nacido antes de que Enoshima Junko pusiera al mundo entero al borde de la extinsión, pero no recuerda absolutamente nada antes de la era de la desesperación.

Su madre y su padre murieron a manos de un hombre armado, que ni siquiera estaba bajo los efectos de algún video de lavado de mente, simplemente los mato por la poca comida que ellos tenian y se habian negado a compartirle. Eso fue cuando el tenia tan solo 4 años.

Por suerte una mujer lo salvo de morir congelado y hambriento.

Pero eso es una historia para otro día.

Tuvo suerte... o quiza fue el destino como este joven le llamaba, después de todo cuando su madre estaba agonizando él solo se limito a decirle: "Tranquila mamá... una mujer vendra a salvarnos."

Lamentablemente habia interpretado mal lo que a su mente habia venido un día antes en un sueño, porque realmente esa mujer solo lo salvaria a él, pero por su falta de conocimientos e inocencia, no sabia que los humanos mueren desangrados en poco tiempo.

Por una noche entera... abrazo a su madre con fuerza, repitiendole con gran alegria: "No te preocupes mamá... una mujer vendra con comida, ropa... agua... estaremos bien..."

Es triste pensar que su madre ya no lo escuchaba desde hace mucho tiempo, y mientras más se aferraba a ella intando encontrar calor por el inmenso frio que habia... por algúna razón extraña para él; el cuerpo de su madre era como un tempano de hielo, pero aún así no la solto...

"Debes estar cansada mamá... descansa, estas muy fria, pero eso es normal ¿no? No me has hablado en un rato pero, debe ser porque hoy fue un día largo para tí... papá también debe estar cansado... porque tampoco ha hablado... debe tener el sueño muy profundo... descansa, mañana... ella vendra, te lo prometo."

Y antes de dormir, el niño le dio un beso en la frente a su madre, sin saber que ya solo era un cadaver que no podía devolverle las muestras de afecto.

Todo lo que te he contado son recuerdos de este chico, el cual justo ahora acababa de llegar a un edificio en ruinas, el mismo donde paso todo lo que he mencionado.

Cubierto por la nieve el joven camino a un costado del lugar, exactamente a un par de cruces de madera enterradas en el suelo, que cada cierto tiempo el tenia que cambiarlas porque las incesantes tormentas las rompian o las soterraban.

Estas cruces representaban la tumba de sus padres.

"Hola papá, hola mamá, perdón por no haber venido antes, pero las cosas en Rusia han estado mejorando, el gobierno volvio a instituirse, Moscú esta en reconstrucción al igual que varias ciudades... el clima... el clima ha mejorado... y pronto... pronto esta ciudad también empezara a recontruirse, se vera hermoso, se que a tí te habria encantado verlo mamá."

El chico con cada palabra intentaba no derramar lagrimas, pero no podia evitarlo, todas las veces que visita la tumba de sus padres termina de forma demasiado sentimental para él, aunque solo los conocio por 4 años, realmente los amo como no tenian idea.

"Mamá... papá... tengo miedo..." La voz del muchacho se rompia mientras su llando se hacia más notorio. "Hoy debo enfrentar algo que me aterra... se supone que no morire... pero sabiendo que me espera, no se si estar seguro de esto... tengo miedo... tengo miedo de mi destino."

Cayo de rodillas, golpeando el suelo con gran frustración, mientras sus lagrimas se mezclavan con la nieve alguien estaba detras de él, o mejor dicho 2 personas estaban paradas, esperando a que él volteara.

"Oh Dios... perdonenme, debe ser patetico verme llorar de esta forma, enserio lo lamento, pero ustedes se esforzaron tanto en seguirme de manera discreta, que no queria arruinarlo diciendoles que ya lo sabía." Sin darse la vuelta se levanto nuevamente, sacudio sus rodillas por la nieve que habia quedado en ellas, y con su antebrazo limpio las lagrimas de sus ojos.

Las personas que lo seguian eran un hombre y una mujer, el hombre rubio de estatura pequeña y con un parche que cubria su ojo derecho, y la mujer era albina, usaba gafas y traia consigo el estuche de una espada.

"Como nos habian dicho, tú debes ser el objetivo." El hombre le hablo en un tono neutro, sin mostrar molestia o ira hacia su persona, después de todo no se conocian para nada.

"Oye, ¿porque llevas puesto un parche? Si tienes un ojo completamente sano debajo." El chico ignoro el hecho de que lo llamaran 'objetivo'.

El rubio y la albina se sorprendieron ante esto, pero al mismo tiempo entendieron porque este sujeto era una amenaza latente.

"Bien, Hinata me habia dicho que llevara el parche puesto, y si notabas que era solo un accesorio... entonces eso seria luz verde para eliminarte."

El hombre se saco ese parche inutil del rostro y desenfundo una pistola que traia guardada en su ropa, al mismo tiempo la chica desenfundo su espada y se coloco en posición de ataque sin pensarlo.

"Fuyuhiko Kuzuryu y Peko Pekoyama, ex remanentes de la desesperación y miembros de la clase 77-B."

"Lamentablemente debemos eliminarte, potencial desesperación definitiva." Dijo apuntando su arma en dirección del adolecente que seguia de espaldas.

"Si no te mueves haremos esto de la forma más piadosa posible." Pekoyama al fin hablo, solo para dar una especie de consuelo al chico a quien buscaban asesinar.

"Demonios... solo tengo una pregunta para ustedes." El chico se dio la vuelta, quedando cara a cara con aquellos que amenzaban acabar con su vida. "Acaso ustedes..."

No lo dejaron terminar de hablar cuando se escucho un disparo y el arma del rubio se encontraba soltando algo de humo.

Y para una ligera sorpresa de Fuyuhiko, la bala no habia alcanzado a su objetivo, el proyectil iba dirigido a la cabeza, pero el chico se movio ligeramente evitando el disparo, fue un movimiento tan preciso y en el momento más exacto; que si se hubiera tardo un milisegundo más o se hubiera movido medio centimetro menos... justo ahora su cerebro estaria adornando el suelo nevado.

"Dios... creo que a partir de ahora sere interrumpido muchas veces antes de terminar mis frases." Se quejo.

Pero no tuvo tiempo de seguirse lamentando, ya que ahora era la mujer quien lo atacaba a la corta distancia.

Una rafaga de 5 espadazos fueron hacia él, cada uno buscando rebanar zonas vitales del cuerpo, o simplemente arrancarle uno de sus miembros

Pero como habia hecho con la bala, ahora estaba esquivando los ataque de la mujer de una manera inhumana, la hoja metalica del arma paso a escasos milimetros de su cuerpo.

Debido al frio llevaba puesta ropa muy abrigada, especificamente su sueter en estos momentos era un desastre, aunque su cuerpo no presento una sola herida, su ropa ahora estaba totalmente destruida.

"!EY, EY, TIEMPO FUERA, TIEMPO FUERA¡" Grito al ver como en solo 7 segundos ya habia evitado la muerte 6 veces.

Pero no hubo tregua, y ahora eran los dos individuos atacandolo en conjunto, ahora 3 disparos y 6 espadasos fueron los que tuvo que esquivar con una precisión exacta.

La cordinación de estos 2 sujetos era algo sorprendente, en solo 12 segundos ya lo habian puesto contra las cuerdas, y de ser posible lo matarian en menos de 20 si la cosa seguia así.

"Te estas limitando a esquivar, ¿acaso no puedes atacar?" El rubio le pregunto sin dejar de dispararle sin exito.

El muchacho estaba más concentrado en salvar su vida que en contestar, pero sabia que en 2 segundos podría hablar.

Ya que la albina se lanzo nuevamente contra él, ahora buscando separar su cabeza de su torzo, pero el chico lo esquivo de una forma poco ortodoxa, inclinando su cuerpo hacia atras de tal manera que su agresora simplemente paso de largo.

"!!!JA¡¡¡ Sabia yo que jugar al limbo me seria de utilidad algún día..." Río victorioso al saber que su entrenamiento jugando limbo le sirvio para mantener su cabeza en su cuerpo.

(Nota: Para quien no conozca el "Limbo", es un juego en que él competidor busca pasar por debajo de una vara inclinando su espalda hacia atras y caminando en esa posición por debajo de dicha vara.)

"Ufff... Dios... no ha pasado ni un minuto y esto esta empezando a cansarme." Jadeo un poco, aprovechando el pequeño lapso de descanso que le dio la expresión de sorpresa que pusieron sus dos agresores al ver como esquivo ese espadazo mortal con un paso de baile. "Y respondiendo a tu pregunta, no soy idiota, si intento contratacar estare muerto, así que de momento... me limitare a solo mantenerme con vida."

"Escapar no te servira para siempre..." Le dijo el hombre, para luego apuntar con su arma y jalar el gatillo, pero a diferencia de antes, el chico no esquivo o hizo el más minimo movimiento.

"Oye, parece que se te olvido recargar." Le dijo, haciendo una pequeña seña con las manos como si estuviera recargando un arma.

"Enserio eres más problematico de lo que pensabamos..."

El rubio empezó a recargar el arma rapidamente, y para no darle más chances de recuperarse a su objetivo, la mujer volvio a lanzarse contra él, pero ahora lanzando ataques más erraticos para que no haya ningun tipo de patron, y así volver cada estocada de su espada dificil de preveer.

Ahora 10 espadazos fueron dirigidos al chico vendado, y también todos fueron esquivados por un muy pequeño margen, ahora tuvo que hacer esquives algo más acrobaticos ya que los ataques fueron mucho más complejos, el último que fue lanzado a sus piernas lo evito con una voltereta hacia atras.

"Tus capacidades fisicas tampoco son las de una persona común." La chica de lentes comento, antes de volver a ponerse en posición para lanzar su siguiente estocada.

"Gracias... estuve preparandome para este momento por casi 13 años, que me alaguen de esa forma me hace feliz... creo, aunque preferiria que dejaran de probarme, y si lo se, ustedes en realidad no quieren matarme... son buenas personas y..." Una bala estuvo a punto de perforar su pecho pero se movio antes de que sucediera, al parecer el otro sujeto ya recargo la munición.

"Y tienen un buen corazón, además..." Otra bala, esta vez iba a su pierna, pero la quito de ese lugar por muy poco

"Son amables..." Otra bala, ahora a su cabeza.

"Y..." Otra bala.

"Pues..." Otra bala.

Otra bala, otra bala, otra bala, otra bala, otra bala, otra bala, otra bala...

"!!!AMIGO CALMATE¡¡¡ Uno intenta decir algo conmovedor y tu no dejas de disparar..."

"Lo lamento, pero que las esquives hace que quiera dispararte aún más"

Recargo su arma nuevamente y volvio a disparar.

"¿Sabes porque tarde más en necesitar recargar mi arma que antes?" Le pregunto sin dejar de atacar, y su compañera lo acompaño en las acciones ofensivas, ahora no solo una bala, sino tambien un espadazo al mismo tiempo tuvo que evitar

"Porque traias menos de la mitad del cargador lleno." Respondío sin perder la concentración en mantenerse con vida.

"Correcto, sin duda con esto ya estamos un 87% seguros de cual es tu talento."

"Y eso solo hace que eliminarte sea aún más necesario." Remato la chica.

Entonces Peko se lanzo de frente de nuevo, haciendo algunos amagues para intentar engañar a su presa, pero esta ni se inmuto.

"Suficiente..." Dijo el chico vendado.

En lugar de esquivar como habia hecho hasta el momento se quedo totalmente quieto, esperando a lo que sucederia sin miedo algúno a la muerte.

Y la mujer... ya llevaba su espada hasta el cuello del muchacho, pero se detuvo abrupatamente, dejando el sable filoso a un centimetro de la carne de su victima.

"Porque no lo esquivaste..." Pregunto la chica, al ver que esta vez el joven no hizo el menor esfuerzo en evitar el ataque.

"Ya lo dije, se que no desean matarme..." Respondío, dando un paso hacia atras, ya que la fria hoja metalica le estaba incomodando al estar tan cerca.

"95%, ahora sabemos en un 95% cual es tu talento." Fuyuhiko no bajo el arma pero tampoco se veía con intenciones de disparar, simplemente se quedo apuntandole por si acaso.

"Bien pues creo que es hora del jefe final de este videojuego..." El joven volteo en dirección a uno de los edificios abandonados. "Sal de ahí, ya se que te escondiste en ese lugar." Levanto la voz dirigiendose a la supuesta estructura vacia.

Entonces empezaron a sonar aplausos a donde él habia hablado, y pateando la vieja puerta metalica de ese edificio salio un hombre para nada habrigado, vistiendo solo un pantalon, una camisa, una corbata verde y unos zapatos formales.

"Al inicio no me dejaron terminar la pregunta, pero... ¿ustedes acaso no sienten frio? Estamos en una temperatura bajo cero...." Pregunto al sentirse muy desconcertado porque sus agresores no traian ropa más abrigada.

"No fingas que no sabes la respuesta." El hombre que recien aparecio y termino de aplaudir, ahora se unia a la conversación con una cara de pocos amigos, totalmente serio.

"Siento que el buen humor es importante para una primera impreción... señor Hinata."

"No perdamos el tiempo. Tu ya sabes a que vinimos, ¿cierto?" Le cuestiono Hajime sin cambiar su expresión facial.

"Si lo se, y..." se movio un poco a la derecha antes de acabar su frase. Esto seria raro, sino fuera porque literalmente acababa de evitar la muerte nuevamente. "Y se que con esto ya sabes en un 100% cuál es mi talento."

El hombre de ojos de distinto color le habia tirado una pequeña piedra, que habia recogido y lanzado tan rapido que nadie se habia percadato, ni el rubio ni la albina fueron capaces de ver que sucedio hasta momentos después. Si no se hubiera movido, esa piedra habria atravesado su corazón, matandolo muy dolorosamente.

"También se una cosa más."

Otro movimiento a una velocidad practicamente imperceptible para el ojo humano acababa de suceder. Hinata se lanzo de frente contra el adolecente, y al final este se movio hacia atras, salvando su vida otra vez con un movimiento extremadamente sutil.

"Mierda.... enserio eres demasiado rapido." Pero algo habia sido diferente a la veces anteriores.

"Use una velocidad de 2500 km/h, por mucho que te movieras sabiendo perfectamente como esquivarme... te habria matado igualmente." Ahora, en la mano Hajime Hinata estaba la venda de los ojos del joven que previamente parecia intocable.

Peko y Fuyuhiko no pudieron evitar asombrarse, ellos no pudieron ni ver a Hinata cuando paso de estar a varios metros del chico a en menos de 1 segundo estar enfrente de él.

Con esa venda fuera de su cara se podían apreciar los ojos del chico, pero estos eran diferentes a los de una persona normal. Sus ojos estaban en blanco, sin tener la vista fija en algo aparente... como si realmente no viera nada.

"También se que eres ciego." Hajime apreto la venda en su mano, y la enrollo cuidadosamente para evitar ensuciarla.

"Vaya... me prepare casi una decada de mi vida para llegar a este punto, y sigo sin creerme que siga con vida." El chico ignorando lo que comento el hombre solo empezo a darse golpecitos en el pecho al saber que enserio llego tan lejos.

"Otra cosa que se, es que no eres malvado, ni mucho menos, no puedo sentir que quieras dañar a otros..." Hinata continúo con su monologo.

Hajime vio la venda en su mano, y se quedo pensando brevemente, ya tenia una respuesta.

"Fuyuhiko, Peko. Vamonos, la prueba ha concluido." Hajime le indico a sus compañeros que se retirarian, ya no tenian nada más que hacer en ese lugar.

"Entendido." Peko envaino su espada.

"Tsk, yo queria ver si podía al menos atinarle con una bala." Fuyuhiko rechisto un poco pero realmente no tenia ganas de continuar, asi que guardo su arma al igual que su acompañante.

Y sin más, los 3 dieron media vuelta y empezaron a marcharse. Y el muchacho al que intentaron agredir, los estaba despidiendo muy sonriente, moviendo de izquierda a derecha su mano.

"!Adios¡ !No sera la última vez que nos veamos¡" Él chico siguio despidiendose muy alegremente mientras esos tres seguian caminando por la nieve a paso lento.

Pero entonces Hinata se detuvo y volteo la mirada en la dirección de aquel sujeto. Miro nuevamente la venda en su mano por una última vez y la solto, dejado que el viento se la llevara.

Pero la corriente del aire tenia otros planes de solo llevarse esa venda blanca sin algún rumbo aparente, sino que con el viento se dirigio en dirección de su dueño, el cual solo abrio la mano como si supiera que caeria en ella sin importar que pasara, y así fue.

La venda regreso al chico, el cual se la volvio a colocar en los ojos, ocultandolos nuevamente.

"Enserio lo lamento chico. Junko Enoshima nacio condenada a un mundo supuestamente predecible, pero, si comparo su situación con la tuya, tú tienes una maldición aún peor. El mundo para tí realmente es predecible, pero aún así no te importa, vives cada día como si no supieras que pasara, y eres feliz teniendo una existencia predeterminada, espero no cambies, me has mostrado que enrealidad era Junko la que se condeno a si misma, y no fue solo su talento." Hajime le dedico esas palabras al muchacho para luego seguir con su camino.

Y cuando alfín los 3 ex remanentes de la desesperación se marcharon, el chico se dejo caer de rodillas en el suelo nevado, se sentia cansado, abatido, pero estaba feliz de estar con vida, ya sabía que sobrevivira, ya sabia todo lo que le diria Hinata antes de irse...

Pero aún así, vivirlo en carne propia era muy diferente para él.

Otro día más, donde no pudo burlar al destino, otro día más para el vidente definitivo.

Sus ropas rotas y dañadas empezaban a incomodarle, asi que se quito un poco el sueter dejando ver su cuello, mostrando una gran cicatriz en el y otras heridas por esa misma zona.

Heridas que se causo al prepararse durante años para ese momento, pero que no evito porque eran un recordatorio de que a pesar de vivir en un mundo predecible, el se esforzaria por cumplir con su rol en el ciclo de la vida.

Sabiendo que no hay forma de salvarse de su condena, solo empezo a llorar aún estando de rodillas, sin importarle que el frio empezaba a entumeser sus piernas. Sus lagrimas solo caian hasta salirse de su venda y llegando hasta la cicatriz de su cuello.

El chico que luego se volveria hombre, aquel que seria conocido como "No. 2"

"No. 2, él condenado del destino"

Alexey Ivanov, 16 años.

Archivo:

Alexey Ivanov, nacido en Rusia antes de la tragedia causada por Enoshima Junko.

Edad actual: 40 años.

Lider de la rama Rusa de la "Union revolucionaria"

Nivel de amenaza: En su juventud se le catalogaria como una amenaza de nivel medio, en la actualiadad es un nivel de amenaza desconocido, no se sabe con certeza el alcance de su talento pero para fines practicos se le cataloga en amenaza alta.

Nombre en clave: No. 2

Talento: Vidente definitivo.

Datos extra: Al parecer es una persona carente de vista (ciega) sus ojos realmente no funcionan, este es un defecto de nacimiento. Ciertamente ironico, considerando que su talento se basa en "ver" el futuro.

El resto del archivo se encuentra redactado.

De regreso al presente>>>

"Ire yo" No. 2 hablo interrumpiendo a sus hermanos.

"!!OYE ESPERA TÚ TURNO PARA OFRECER...¡¡" No. 4 regaño a su hermano mayor, pero no pudo terminar al sentirlo... el aire estaba pesado, y su hermano mayor parecia... más imponente de lo normal.

Todos lo notaron, incluso Hinata que seguia viendolo todo desde su laboratorio mientras daba otro sorbo a su té.

"No vamos a elegir a nadie, yo sere el primero." No. 2 se paro en el medio de la habitación, haciendo que todos lo voltearan a ver. "Madre, sere el primero en ser examinado." Le hablo con total respeto a la mujer que ostentaba el cargo de lider entre todos ellos.

"Entonces esta hecho, No. 2 sera el primer examinado. Esto es una sopresa para cualquiera... excepto para él ¿no es así?"

No. 2 solo asintio.

"Entonces dire los dos requisitos para ganar el exámen." No. 1 extendio dos dedos para enúmerar los requisitos. "Primero, debes tomar el control de Japón y segundo; debes matar a Makoto Naegi."

"Ya conocía los requisitos." No. 2 respondio encogiendose de hombros haciendo ver que ya lo sabia.

"!!!!!LO SE IDIOTA¡¡¡¡¡ !Pero esto es para fines practicos y que los demás sepan los requisitos del éxamen¡"

Hinata se rio un poco en su asiento, esos 5 son personas de diferentes edades y nacionalidades, a pesar de ser tan distintos se complementan bastante bien en ese rol familiar que ellos mismos se inventaron.

"De todas formas, para iniciar el examen. Quitate el balde, muestranos tu rostro y di tú nombre."

Hajime se soprendio por muy breves instantes al escuchar esto, se supone que todos los que pertenecen a las celulas terroristas renunciaron a sus nombres, como una forma de mostrar su compromiso con la causa por la que luchan... y también porque es más facil identificar a muchas personas con solo números en lugar de nombres enteros, además que ayuda a mantener el anonimato, pero esos ya son detallitos.

"P-Pero... ¿no va en contra de las r-reglas? N-No podemos mostrar nuestros rostros a nadie, ni siquiera a otros miembros de la organización..." El más pequeño de todos fue el que pregunto muy desconsertado, a pesar de ser tan joven, número 5 era bastante disciplinado con las reglas.

"Esta sera una excepción. Yo ya conozco el rostro de número 2 desde unos 36 años en el pasado, pero ustedes aún no. Y este es el simbolo de que han decidido examinarse, estan dispuestos a ser vistos por el mundo como enemigos publicos o salvadores, como heroes o villanos, ya no se ocultaran tras el anonimato, ahora enfrentaran al mundo dando la cara. Y si algúno de ustedes no esta listo para luchar sin un balde de mierda que oculte sus rostros, entonces no merecen ni ser examinados."

Los demás entendieron el punto y no presentaron ninguna objeción.

"Bien entonces, esta decidido, ire yo."

No. 2 confirmo su decisión, y se quito aquello que mantenia oculta su identidad al mundo, incluso para sus hermanos.

Su rostro era el de un hombre al que él tiempo ya le ha tomado un poco de factura, con 40 años las pequeñas arrugas en la piel eran notorias para cualquiera, y con una frondosa pero bien cuidada barba que ocupaba buena parte de su cara. Y el rasgo más caracteristico desde su nacimiento, unos ojos en blanco, claramente los de una persona incapaz de ver... en teoria, no deberia de poder ver.

La primera en reaccionar fue su hermana menor, que se acerco rápidamente y empezo a mover su mano enfrente de su rostro de un lado al otro.

"Vaya... así que eres ciego... jajaja, que maldita ironia, un vidente ciego."

"Te ves justo como te imaginaba, se nota que de los mayores yo soy el más atractivo." No. 3 no pudo evitar hacer un comentario para adularse a si mismo, incluso en esta situación

"No te rías, cuando llegues a mi edad desearias verte tan bien como yo." No. 2 se defendio con respecto al comentario de su hermano.

"Callate, tu no sabes como me vere en 10 años... oh Dios, enrealidad si puedes... estas bromeando, ¿verdad...?" No. 3 se preocupo por la simple idea de que su rostro se viera incluso peor que él de su hermano.

"Yo también... quiziera dejarme la barba, o quiza el bigote nada más." El pequeño No. 5 medito la posibilidad de tener una barba parecida a la de su hermano mayor, un sueño lejano pero posible.

Mientras los 4 se encontraban bromeando con respecto a la revelación del rostro de No. 2, la lider se aclaro la garganta para llamar la atención de todos.

"Regresemos a lo importante." No. 1 puso la mano sobre el hombro de su hijo mayor. "Ahora, eres el lider indiscutible de la rama Japonesa, todos los recursos, armamento, soldados, etc. Te pertenecen, usalos como te plazca, pero si fallas en tu misión de tomar Japon y matar a Makoto Naegi... habras reprobado el examen, ¿entendido?"

"Entendido. Tomare el cargo que me has cedido, para realizar este éxamen."

"Perfecto entonces... hagamos este éxamen totalmente justo, ¿que les parece?"

La lider le hizo un pequeño gesto con la mano a su hijo menor, y No. 5 metio su mano dentro del balde de su cabeza, para sacar 3 muñecos parecidos a los de su hermana, solo que estos tenian unos detalles más interesantes.

Detalles que Hinata noto inmediatamente.

"Santo cielo... estos son..." La chica fue la más sorprendida al ver los muñecos.

Los 3 tenian una apariencia definida, cada uno diferente. El primero poseia pelo café con una forma de antena, un traje elegante de color negro, y los botones que tenia en lugar de ojos eran de color verde. El segundo tenia un pelo de color blanco bastante descuidado, pero vestido de forma más casual con una sudadera verde, unos pantalones negros y una playera blanca con un simbolo rojo en el medio. Y el último, tenia pelo negro con una antena algo diferente al primer muñeco, una camisa blanca, una corbata negra y unos pantalones de ese mismo color, y los botones de sus ojos eran de dos colores distintos; uno rojo y otro verde.

"!!!!ERES EL MEJOR No. 5¡¡¡¡" La chica empezo a abrazar a su hermano pequeño al ver lo que habia conseguido. "Yo no podia hacer muñecos de estos 3 pelmasos solo porque sus suertes los protegian... pero ahora..."

"Sabia que te gustaria, hija. Ahora, hagamos que esta lucha sea justa, porque no tendriamos chances de ganar si pelearamos contra un talento tan molesto como la suerte." No. 1 volteo a ver en una dirección donde aparentemente no hay nada, pero justo donde clavo sus ojos era donde estaba la microscopica camara oculta de Hinata. "Se que me estas escuchando Hinata, hizimos un trato y pienso cumplirlo, así que yo cumplire mi parte y más te vale a tí cumplir la tuya."

Hinata se sorprendio levemente, pero después solo pudo soltar una sonrisa de complicidad.

"Vaya, recuerdo cuando me dijiste hace tantos años que habias encontrado una manera de poder enfrentar en igualdad de condiciones a Makoto Naegi, pense que solo exagerabas, pero ahora, creo que lo entiendo." Hajime le dio otro sorbo a su tasa. "Realmente tienes muchos trucos bajo la manga, número 1."

Hinata termino su monologo solitario para seguir observando.

"Bien, entonces comencemos por él..." No. 4 tomo el muñeco albino entre sus manos y empezo a recitar unas palabras. "Nagito Komaeda... te libero de tú talento, para que vivas de forma prospera sin temer dañar a otros, a cambio de mi tiempo de vida dejare en este recipiente al causante de tú miseria y al mismo tiempo tú salvadora."

Al concluir el muñeco se prendio en llamas como habia pasado previamente cuando No. 4 hizo algo similar.

La gran diferencia recayo en que el muñeco no se quemo hasta las cenizas, sino que se quedo intacto, pero las manos de No. 4 ahora sufrieron todas las consecuencias.

Gritando de dolor cayo al suelo junto con el peluche, abrazo sus manos intentando calmar el dolor, algo que fue totalmente en vano, ya que las concecuencias estaban hechas.

"Mierda... que carajo hiciste ahora." No. 3 fue el primero en correr hacia su hermana para intentar ayudarla, pero viendo sus manos practicamente carbonizadas su primer instinto fue abrazarla, este no era su campo y el lo sabia mejor que nadie. "Puta madre... calmate, calmate, aquí estoy..."

No. 3 apreto su agarre mientras escuchaba a su hermana llorar por el sufrimiento que estaba experimentando.

"¿...y ustedes porque no hacen algo?" No. 3 volteo a ver a los demás que no habian movido un dedo desde que No. 4 habia caido contra el suelo.

"Si pusieras más atención a como funciona el talento de No. 4, sabrias que esto era algo normal." Su hermano mayor fue el primero en contestarle.

"Maldita sea... !!!NÚMERO 2 TU SABIAS QUE ESTO PASARIA Y AÚN ASÍ LA DEJASTE HACERLO¡¡¡"

"En primera, ya no debes llamarme No. 2, mi verdadero nombre es Alexey Ivanov, y en segunda, deja de gritar tanto y mira sus manos." Alexey le señalo a número 3 para que observara como sus manos habian vuelto a la normalidad.

"Demonios... siempre duele cuando tengo que hacer un sellado. Pero gracias por el abrazo No. 4" La chica se lavanto como si no hubiera pasado nada, le dio unas palmaditas en el balde a su hermano y levanto el muñeco que habia caido junto con ella.

Si pudieran ver por debajo del balde de No. 3, podrian observar un notorio enrrojecimiento de vergüenza.

"Bueno, con eso ya nos libramos de uno, ahora toca el siguiente." No. 4 tomo de las manos de su hermano menor el peluche con la apariencia de Hinata.

"Hajime Hinata, Izuru Kamakura, separen sus consiencias y vivan como individuos sin tener que preocuparse por el mundo, sello en este momento el talento que se les dío de forma artificial hace tantos años..."

Y como habia sucedido antes el muñeco se prendio en llamas instantaneamente y sus manos se volvieron a calcinar por completo dolorosamente.

"!!!!AHHHHHH MIERDA MIS MANOS¡¡¡¡" Grito la chica.

Pero esta vez, nadie se acerco a ella para intentar consolarla o ayudarla. No. 3 habia aprendido por las malas que no valia la pena preocuparse por ella.

Y después de unos segundos de retorcerse en el suelo sus manos volvieron a su estado original.

Y el peluche a diferencia del de Nagito Komaeda, se dividio en dos, uno que tomo la forma de Izuru Kamakura antes de entrar al programa Neo World y otro con la apariencia de Hajime Hinata, pero este último era notoriamente más pequeño que los otros muñecos.

"Oye, No. 4 creo que lo hiciste mal, dejaste este muñeco más pequeño que el resto." No. 3 le indico esto mientras tomaba el peluche en sus manos y lo veia muy confuso.

"Oh... eh... todo es parte del plan hermano... porque..." No. 4 intento justificarse.

"Te equivocaste, no lo disimules." El ruso no queria perder el tiempo con excusas, de todas maneras ya se las sabía.

"Mejor continua con el último." No. 1 decidio ignorar la conversación y prefirio ya terminar con esto.

"Ehhhhh... creo que... eso no sera posible." No. 4 dijo eso con un tono algo preocupado.

"¿Porqué no?" La líder pregunto.

"Porque el muñeco esta brillando..."

Y el último que debia ser sellado empezó a lanzar un brillo cegador, y además empezó a flotar.

"¿Eso es normal?" No. 3 pregunto al notar que el muñeco con la apariencia de Makoto Naegi estaba haciendo algo extraño.

"Eh... no... eso no es normal." No. 4 estaba claramente desconsertada, eso no estaba previsto.

Los cinco se quedaron viendo el muñeco, cuatro de ellos estaban desconsertados ante lo que presenciaban.

"Todos al suelo." Alexey les dijo a todos, mientras se tiraba al suelo.

"Hijo de puta siempre omitiendo lo importante." No. 1 algo molesta solo le lanzo al piso al igual que el resto de sus hijos.

El muñeco brillo aún más y con un gran sonido de explosión salio volando atravesando el techo a una velocidad que ningun Jet de combate podría alcanzar en toda su existencia.

Cayeron escombros del techo destruido, algunos cayendo directamente en los baldes de los cinco lideres de la U.R., cabe decir que dichos baldes quedaron intectos, Alexey aunque ya se habia quitado lo que protegia su cabeza; gracias

"Puta madre mi cabeza..." No. 1 se levanto después de recibir un golpe considerablemente fuerte.

"¿A donde mierda fue ese muñeco?" No. 3 se levanto sacudiendo el polvo de su traje.

"¡¡MALDICIÓN!!" No. 4 grito muy irritada por lo que paso. "Ese tipo tiene tanta suerte que incluso el muñeco se lleno de energia espiritual para sobrecargarse y salir volando..." la chica se morido las uñas muy enojada. "Alexey, tú sabias que esto pasaría, ¡¡DEVISTE AVISARME!!"

El Ruso simplemente se encogio de hombros sin dar una explicación.

"Bueno, eso fue una buena reunion chicos, ahora me ire a Japón, tengo un país que conquistar." Ivanov simplemente se despidio silvando como si nada importante hubiera pasado.

Todos lo vieron irse como si nada.

"A veces me pregunto... ¿si omite cosas a drede porque es necesario, o solo porque quiere?" El pequeño número 5 se quedo algo perplejo ante el comportamiento de su hermano mayor. "Dios... el sin duda puede ser parte de la raza superior." El niño hablo con una voz más grave de lo normal, lo cuál sorprendio a sus otros dos hermanos en la habitación.

"¿Que...?" Su hermana mayor se quedo muy confundída al escuchar eso.

"N-No nada, el polvo hizo que mi garganta se lastimara, jajajaja..." No. 5 se rio nerviosamente y regreso su voz a la normalidad.

"Odio a esta familia..." No. 3 saco otro cigarrillo, y volvio a recordar que no podía fumar con el balde en la cabeza.

"Bueno, esta reunion fue... interesante." No. 1 lanzo un gran suspiro al cielo. "Mmmmm... me pregunto a donde habra ido ese muñeco."

De regreso a la isla Jaberwook:

Hajime se quedo un poco decepcionado, sabia que sellar la suerte Naegi seria muy poco probable, pero que incluso el muñeco donde sellarian su suerte saliera volando; sobrepasaba lo absurdo.

Hinata tomo su intercomunicador y llamo a alguien en especifíco.

"Oye." La otra persona contesto su llamado. "Nagito, ¿como te sientes?"

Al otro lado de la linea el albino se extraño de la pregunta tan repentina, el justo en ese momento se encontraba en la playa disfrutando del aire fresco y el sol.

"Hola Hinata, ¿sucede algo? Te fuiste a tú laboratorio sin explicar nada, y si me encuentro bien."

"¿No sientes nada extraño? ¿Algún cambio?" Hajime insistio.

"Eh... no para nada, me siento igual que siempre, jajaja, otra vez dices cosas extrañas."

El hombre se río, sin darle tanta importancia a las preguntas de su viejo amigo.

"Esta bien, si sientes algo extraño avisame lo más rapido que puedas."

"¿Ok...? Esta bien, lo tomare en cuenta."

Hinata simplemente corto la llamada.

Se supone que el y Nagito si que perdieron perdieron su talento de suerte, pero no ah sentido ningun cambio en particular y sl parecer Komaeda tampoco.

¿Talvez ese ritual de No. 4 no funciono?

Hinata se puso a pensar, pero un sonido lo interrumpio de forma algo sorpresiva, era una alarma que el nunca penso que llegaria a escuchar, o almenos no ahora.

"ALERTA, UN PROYECTIL SE ENCUENTRA EN DIRECCIÓN A LA ISLA, UN PROYECTIL SE APRÓXIMA A UNA VELOCIDAD INCALCULABLE PARA EL SISTEMA. DESPLEGANDO EL SISTEMA ANTIMISILES."

Era la alarma de algún misil aproximandose.

Pero eso era demasiado extraño.

¿Quien se atreveria a lanzar un misil contra la Isla?

¿Japón? Imposible, ellos son los que mejor conocen la existencia de la clase 77-B, no se animarian a atacarlos de forma tan desprevenida.

Y el resto de paises tampoco, practicamente ningúno conoce siquiera esa ubicación.

¿Acaso sería un error?

Tantas preguntas que Hajime realizo con ayuda de su analisis definitivo, descartando cada una de las posibilidades.

"Espera... no puede ser."

"ALERTA, EL SISTEMA ANTIMISILES FUE INEFICAZ, EL OBJETIVO ES DEMASIADO RAPIDO, CALCULANDO AREA DE IMPACTO Y POSIBLES DAÑOS."

La computadora hizo su trabajo lo más rapido que pudo, y logro establecer donde caeria el proyectil, su objetivo era justo el laboratorio de Hajime.

Hinata dio un suspiro gigsntezco.

"Odio los talentos sobrenaturales." Dijo para si mismo.

Usando su velocidad maxima tomo todo lo importante y salio del laborstorio lo más rapido posible, en cuanto ya estaba afuera reviso que ninguno de sus compañeros se encontrara cerca del area, confirmando eso vio como una luz aparecia en el cielo y se estrellaba contra el suelo, incluso utilizando su maxima velocidad el proyectil a sus ojos se movio extremadamente rápido, apenas y pudo verlo de forma borrosa.

Una explosión se formo, no una de gran tamaño, pero con una potencia abrumadora. Muchas cosas volaron por el aire, se lleno de polvo y escombros el ambiente.

"Genial esto es..." Hajime hablo, pero se detuvo al darse cuenta de algo, y era que su voz se escuchaba más aguda, como la de un niño pequeño.

Debido a todo el polvo que se formo a su alrededor apenas y podía ver algo, puso sus manos frente a sus ojos y las noto... más pequeñas de lo normal.

"Oh demonios... es por eso que el muñeco se dividio en dos." Hajime se dio un golpe en la frente.

Y al disiparse todo el humo, sus sospechas se hicieron realidad.

"Como le explicaremos esto al resto..." Hinata tomo asiento en el suelo y viendo a su contraparte a su lado, simplemente empezó a jugar con un mechon de su pelo.

"El laboratorio esta destruido." Izuru hablo, con su voz monotona que lo caracterizo en el pasado.

"Y a nosotros nos dividieron en dos cuerpos." Dijo Hajime.

"Al parecer el ritual de No. 4 no salio exactamente como deseaba, y nos dejo de esta forma." Kamakura siguio la conversación.

"Mmmmm... sientes algo diferente." Hajime le pregunto.

Aunque la situación sea rara, Hinata al parecer no se sorprendio demasiado, y hasta lo acepto rápidamente.

"Si... creo que... me siento... feliz." Izuru contesto cerrando uno de sus puños frente a su rostro y luegro abriendolo para observar la palma de su mano.

Ls declarsción de Kamakura hizo que Hinata abriera un poco los ojos por la sorpresa, escucharlo decir que se siente feliz era algo muy extraño.

Y fue aún más extraño cuando lo vio formar una sonrisa en su rostro.

"No hagas eso... es espeluznante." Dijo Hajime.

"Perdon, perdon." Izuru solto unas leves carcajadas, lo que hizo que su contra parte se sintiera aún más confundido. "Tal parece que tú tienes el cuerpo de un niño, ¿aparte de eso sientes algún cambio?" Kamakura pregunto.

"Yo... me siento un poco aburrido." Dijo mientras observaba a su alrededor, viendo la destrucción que causo el objeto no identificado que impacto contra su laboratorio. "Espera voy a revisar algo." Hinata se levanto y corrio en dirección a su laboratorio en ruinas, pero algo raro paso... se movia muy lento, su velocidad era la de un niño pequeño común y corriente.

"Espera, lo hare yo." Izuru empezo a correr, y a diferencia del pequeño Hajime él si logro una buena velocidad, pero incluso para sus estandares se estaba moviendo lento, aunque estaba usando su 100% apenas alcanzo los 500 km/h.

Hizo un salto hacia el crater donde antes estaba su laboratorio y al llegar al suelo encontro el objeto que causo todo, era nada más y nada menos que el muñeco con apariencia de Makoto Naegi que los lideres de la U. R. Tenian hace poco tiempo en su poder.

"Increible..." Izuru dijo, para tomar el muñeco con cuidado entre sus manos y dar un salto para regresar a la superficie. "Llego desde Estados Unidos hasta este lugar en menos de un minuto." Izuru al salir del crater le mostro el muñeco a Hinata.

"Y además destruyo el laboratorio, impresionante sin duda." Hajime comento.

Tanto Hinata como Izuru hablaban con naturalidad, como si se conocieran de toda la vida, era extraño, pero sentian confianza el uno en el otro, incluso cuando era la primera vez que hablaban fisicamente como seres diferentes y no en el mismo cuerpo.

Este día muchas más cosas pasaron, y la mayoria de paises nisiquiera se dieron cuenta, como fue el caso de Japón.

Ahora Alexey Ivanov, o conocido como número 2 se dirigia al que en un momento de la historia fue conocido como el país del sol naciente.

Ahora Japon debe enfrentarse al vidente definitivo de la U. R. Veremos si seran capaces de enfrentarlo, o si simplemente sucumbiran ante el hombre que lo ve todo... bueno enrealidad no "lo ve todo" porque es ciego, pero el punto se entiende.

Yo ya se como resultara todo.

Pero sin duda me causa ilusión rememorar la primera batalla importante entre la U. R. Bajo el liderazgo de Ivanov, y Japón.

¿Como se llamo esa batalla...?

A sí, ahora lo recurdo. Era la batalla de los perdedores.

Fin del capitulo 2, pate 2.