•Capítulo 59•
Narrador
9:00 am (11 hrs para el vuelo)
Madison se despertó rodeada por unos brazos, los de Stefan, la castaña suspiro y trato de convencerse de que aquello no era una locura
Dejó que el rubio siguiera durmiendo y ella se metió a la ducha. La parte más difícil sería decirle a su familia, era domingo por lo tanto estarían reunidos para el desayuno
Salió del baño ya arreglada, y se encontró a Stefan mirando sus maletas
— ¿Ya tienes todo listo?
— Si, sólo falta meter mi necer, los documentos y la cartera.
Maddie le entregó una muda de ropa que tenía guardada y el chico entró a cambiarse. Entre tanto la castaña, metió lo que hacía falta a su bolso de mano, el celular lo guardo en el bolsillo de sus jeans.
Camino hasta el buró y lo abrió despacio, de él sacó una cajita de terciopelo donde estaba el anillo y sin pensar mucho lo colocó en su lugar, su dedo.
20 minutos más tarde Stefan y Maddie bajaron a la cocina, de donde provenía el olor a café recién hecho y los murmullos de las conversaciones. El primero en verlos fue Peter
— ¡Hey chicos! Vengan a desayunar
Stefan y Maddie se sentaron, con los gemelos enfrente, los cuales evitaron mirar a la castaña.
El hambre se le había esfumado. Sintió a Stefan entrelazar sus dedos con los de ella y le daba un ligero apretón.
— Tengo una noticia que darles— su padre, Doreen, la abuela, Melissa y los gemelos la miraron— se que es demasiado apresurado, pero no me decidí hasta ayer mismo... yo, he decidido irme a París con Stefan... esta noche...
Todos guardaron silencio mientras miraban a Maddie y Stefan de manera alternada. La primera en recomponerse fue su abuela, quien le dijo que si era lo que quería ella la apoyaba, que la extrañaría y que podía contar con ella para cualquier cosa. Después Melissa y Doreen, repitiendo lo mismo, Maddie miró a los gemelos esperando que dijeran algo.
— Si piensas que vamos a fingir como ellos, que todo está bien y que no estás cometiendo la mayor estupidez de tu vida, estás muy equivocada Madison— James fue el primero en salir seguido de su hermano.
— ¿No es una decisión muy apresurada?— preguntó Sarah
—De hecho... Stefan me lo pidió cuando me propuso matrimonio y yo le dije que lo pensaría, me decidí, los planes cambiaron, tiene que estar antes en París, así que no tuve tiempo de avisarles.
— Bueno, bueno, qué les parece si nos olvidamos del desayuno aquí y aprovechamos tus últimas horas con nosotros.
Maddie sabía que su padre estaba quitándole hierro al asunto pero que lo decía de dientes para afuera. Sabía que le dolía que ella decidiera irse, pero respetaría su decisión en eso se basaba su relación.
La mayor parte de la mañana se la pasaron juntos, en familia, hasta que Stefan se despidió para ir a arreglar los últimos detalles.
Cuando regresaron a casa, las 3 mujeres Black desaparecieron dejando a Maddie sola con su padre.
— ¿No piensas decir nada?
— Hay muchas cosas que quiero decir Maddie, sabía que en algún momento esto iba a suceder pero no pensé que sería tan pronto, apenas te recupere, pero no por eso quiero que te sientas mal, me alegra que sea con alguien que te quiere y tú lo quieres— su padre le abrazó, era mucho más alto en comparación con ella y le hacía recordar cuando era niña— y aunque me parezca lejos, tal vez es lo que necesitas, un lugar nuevo donde te puedas sanar de todo lo ocurrido aquí y seas feliz. Y no se, Doreen y yo podríamos ir a visitarte, ¿Quien no quiere ir a París? Ya sabes a lo mejor te conseguimos un hermanito...
— ¡Papa!— se deshizo de su abrazo— ¡Imágenes no deseadas en mi cabeza!
Peter Black se rió, no le parecía descabellada la idea pero sólo lo había dicho para hacer sonreír a Maddie, él era la última persona que quería que se fuera, pero era su decisión.
— ¿Ya tienes todo listo?— la castaña asintió— ve a descansar, dile a Stefan que nosotros te llevamos al aeropuerto.
Maddie subió las escaleras, sin ver el rostro de su padre. Doreen se acercó y abrazó a su marido.
— ¿Estas bien? ¿Crees que sea buena idea que se vaya con Stefan?
— Estoy bien y no lo se, por momentos se ve muy segura pero en otros, sabes que no quiero que se vaya, pero no puedo detenerla si ella quiere— Peter miró a su mujer— supongo que no dirías lo mismo si fuera Zach ¿cierto?
— Sabes, si Zach quisiera llevarse a Maddie a otro continente, así de pronto. También estaría dudando. Pero tú y yo sabemos, que ese chico jamás sería capaz de alejarla de nosotros a menos que ella se lo pidiera.
Doreen ya no dijo más y se llevó a Peter a su habitación, se notaba que le habían agotado las últimas horas.
12:45 pm (7:15 hrs para el vuelo)
— ¿Donde demonios esta Zach?— preguntó James. Oliver y él llevaban parte de la mañana buscándolo y pasaba de medio día
— ¿Por qué están tan alterados?— escucharon la voz de Eileen tras de ellos y se toparon con Ryan, Eileen y Nathan
— Buscamos a Zach, pero no está y no lo encontramos en ningún lado, ni contesta su celular.
—¿Por qué tanta urgencia?
— Es el único que puede detener a Maddie de hacer semejante locura— exclamó Oliver
— ¿Locura que locura?— preguntó Eileen preocupada.
— Se quiere ir con Stefan a París, corrección se va esta noche con Stefan a París— los tres chicos se quedaron como piedra al escuchar a James.
— Tal vez este con Chelsea
— Ya le hemos llamado pero no contesta
— ¿Se puede saber que hacen afuera de mi casa?
Todos miraron a Natalie quien tenía una falsa sonrisa plantada en el rostro.
— No te incumbe
— Si buscas a Zach. No está
— Tal vez Nat pueda hacer algo— todos miraron a Eileen como si hubiera perdido la cabeza— Natalie tú puedes convencer a Maddie de que no se vaya con Stefan a París
La pelinegra se puso seria por unos instantes, después una sonrisa se extendió por su rostro
— ¿Por qué habria de hacerlo? ¿No lo ves Eileen? Es lo mejor para Maddie, se irá a París y será muy feliz con Stefan y después se casaran.
Nadie dijo nada ante las palabras de pelinegra.
— Podríamos ir a casa de Chelsea haber si están ahí— Todos asintieron ante las palabras de Eileen y partieron rumbo a la casa de la pelirroja.
Natalie corrió a su auto y comenzó a seguirlos, no pensaba detenerlos, al contrario quería ver la cara de Zach cuando se lo dijeran.
Todos iban en el auto de Oliver y no tardaron mucho en llegar a la casa de Chel. Eileen fue la encargada de preguntar por ella, pero de nuevo tampoco estaba.
— ¡Demonios!
3:00 pm (5 hrs para el vuelo)
— ¿Tiene caso seguir buscando? ¿cuantos días llevamos?— Zach salió del último salón que faltaba por registrar — Stefan ya está aquí de nada servirá, no dejará que me acerqué.
— ¡Dios, Zach! ¡No te des por vencido! Aún tenemos tiempo ¿vale?
— Es que no entiendes Chelsea, siento como si lo que menos tuviera fuera tiempo— La pelirroja miro a su amigo
— Vale, vayamos a comer algo y regresamos
Zach asintió y salieron de nuevo por la verja, no les tomó mucho llegar al restaurante al que siempre iban a comer.
Estaban terminando su comida cuando los interrumpieron
— ¿Donde demonios han estado?— los dos chicos se toparon con 4 chicos y una chica muy sudados— hemos estado— Ryan revisó su telefono— como 3 hrs buscándolos.
Chelsea y Zach aún no salían de su asombro pero la pelirroja contestó.
— Hemos estado en la universidad, tratando de hallar la maldita carta de la beca
Los ojos de Oliver y James se iluminaron
— ¿La encontraron?— el rostro de Zach les dijo todo
— Tenemos que encontrarla ya Zach, Maddie está a punto de irse a París con Stefan, está noche.
El chico se quedó en blanco, por eso sentía que no le quedaba tiempo
— De hecho...— todos miraron a Natalie quien venía con su típica sonrisa burlona— por si no han notado son la 4 de la tarde y su vuelo sale a las 8, peeeero es internacional tiene que estar 2 hras antes, eso les deja con menos de dos horas para convencerla, dudo que lo hagan.
Por suerte la pelinegra no había escuchado lo referente a la carta, Zach se levantó mirando a su hermana
— No te metas en lo que no te incumbe Natalie
— De echo querido Zach, hay algo que se me pasó decirte, ayer Maddie fue a verte, pero no estabas ¿sabes? se topó con Lisa y tuvieron esta plática muy interesante sobre tu hijo ¿otro hijo Zach? Sólo espero que no termines matando a la mamá de nuevo. Lisa le dijo sobre sus bellos momentos mientras estabas ebrio y como la viste la semana pasada
Natalie salió del restaurante, mientras todos veían a Zach.
— ¡Eso es mentira! No me he acostado con ella desde que volví.
— Si bueno... pero al parecer Maddie no piensa eso
Zach miro a Nathan y sabia que tenia razón, Maddie habría creído las palabras de Lisa, ya después se arreglaría con ella
— Ustedes vayan a buscar la carta. Si es necesario destruir algo, háganlo. James y yo trataremos de razonar con ella
Todos asintieron ante la idea de los gemelos. Zach, Ryan, Nathan, Chelsea y Eileen corrieron de nuevo a la universidad.
Zach les saco ventaja por mucho, cruzó la verja sin fijarse demasiado cortándose varias partes por brincar sin cuidado la concertina que tenía en la parte más alta. Llegó a las oficinas sin aire, tuvo que esperar a que los demás lo alcanzarán
— ¿Cual es la oficina de Stefan?— pregunto en cuanto vio a Chelsea, pero esta negó
— ¡Yo se cual es!— Dijo la rubia y corrió por el pasillo seguida de los cuatro chicos. Cuando llegaron comprobaron que estaba igual de cerrada que todas. Zach en su desesperación comenzó a aporrearla, sin conseguir nada.
— ¡Espera!— Nathan lo detuvo— sólo vas a lastimarte y hacer el suficiente ruido para llamar la atención del guardia
Nathan miro a Ryan y este se acercó a la puerta, le dio una patada junto al picaporte pero no cedió
Después de varios intentos lograron aflojarla y con un empujon de los tres juntos derribaron la puerta.
Los 5 comenzaron a buscar por toda la oficina sin fallar nada. Zach noto que el último cajón del escritorio estaba con llave
— Eh chicos, debe ser aquí— y tenía que ser no había otro lugar en toda la habitación
5:45 pm (2:15hrs antes del vuelo)
El carro iba en completo silencio, Peter y Doreen en la parte delantera, Maddie en el asiento trasero.
Su abuela y tía venían a su lado, James y Oliver se habían negado a ir con ella.
Con cada metro que se acercaba al aeropuerto su estómago se contaría más.
El camino se le hizo demasiado rápido, no tardaron en llegar y bajar las maletas, una vez adentro buscaron a Stefan, el rubio se acercó y la beso en cuanto la vio.
Su familia se reunió alrededor de ellos, y mantenían una amena conversación con Stefan, hasta que llegó la hora de despedirse.
El aeropuerto estaba bastante lleno y la fila para embarcar era demasiado grande, si querían estar a tiempo tendrían que formarse de una vez.
Stefan se alejó un poco para dejarla despedirse.
Abrazo a su tía y abuela primero. Doreen estaba en un mar de lágrimas y prometió convencer a su padre para ir a visitarla
— Maddie, aunque estés en otro continente puedes contar conmigo en cualquier momento y si Stefan se atreve a hacerte infeliz no dudes en llamarme sabes que tengo contactos— la castaña miro a su padre con lágrimas en los ojos.
— Lo se papi— Maddie se alejó, si no, no seria capaz de irse. Vio como su padre contenía las lágrimas.
Stefan la tomó de la mano y la juntos fueron formarse a la fila de embarque, sus padres se quedaron ahí, observándolos, sabia que no se irían hasta que la vieran desaparecer por esa puertas.
La fila avanzaba demasiado rápido, Maddie entendió cuando decían que cuando querías que el tiempo corriera lento, este se ensañaba y parecía que volaba.
Una persona, faltaba una persona para que fuera su turno, sintio y miro su mano temblar mientras le entregaba sus papeles a la señorita.
FIN
(Nahhhh sigan leyendo xD)
— ¡MADISON!
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Pueden lincharme si quieren, pero se quedan sin final,ni epilogo xD
¿Soy Mala? Nooooo, soy un pan de Dios,
¿Les gusto? esta mucho mas largo y el que viene igual
Como habrán visto ya comencé a editar la historia ya tenemos el reparto perfecto, en mi opinión, para DITD, pero ustedes pueden imaginar a lo que quieran.
Otro noticia, ya les había dicho, cuando termine aquí, reanudare La Música que nos Unió y comenzare con otra que sera La Parte Mas Dura es Dejarte xD ya tengo bastantes cosas escritas de esta historia y ya hice 2 portadas, ya luego se las enseño.
Bien déjenme sus votos y comentarios
Les♥
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