En un departamento con cajas empaquetadas en lugar de muebles y el amplio espacio que dejaba ver la ausencia de fotografías en las paredes y decoraciones como macetas y alguno que otro adorno, entre los pasillos podían escucharse quedos gemidos provenientes de la habitación perteneciente a Ochaco, quien aun en vísperas de su boda seguía haciendo "eso."

Eso era el tocarse pensando sin pudor en otro hombre que no era su prometido y ese hombre tenia nombre, una muy conocida reputación tan evidente como sus ojos jade y mejillas salpicadas en pecas, no era un secreto el que Ochaco estaba enamorada de Izuku desde el primer curso; lo que si era un secreto era que nunca dejo de estarlo.

—Mmmm... Izuku— gemía mientras una de manos se auto complacían entre sus piernas y la otra acariciaba uno de sus senos.

No era un secreto que trataba de ser la mujer que Izuku deseaba, no podía evitar el pensar que él estaba enamorado de ella y nunca pudieron ser nada, no era un secreto el que Ochaco lloro por que Izuku se volvió su enemigo, pero si era un secreto el que Ochaco estuviera esperándolo noche y día a que viniera por ella.

¿Y que si era un villano? Eso lo hacia más excitante —¡Izuku, no! Ahh, ¡Es-toy estoy comprome... aah! — nunca nadie lo sabría, ni siquiera Asui su mejor amiga, pero su deseo, su esperanza era que Midoriya viniera por ella, que le dijera que siempre la deseo como ella lo deseaba.

Ochaco no sabia si eso era simplemente deseo o amor, pero lo que si sabia era que no podía —ni quería — deshacerse de esos sentimientos, la velocidad que ejercía en sus dedos incremento al imaginarse como Izuku la sometía mientras le susurraba a su oído cosas vulgares en clara amenaza; mientras que para ella seria un deleite el que las cumpliera.

Pronto las piernas de la chica temblaron, así como la sensación de cosquilleo en su vientre le invadió dejándose caer bocabajo en la cama mientras se mantenía de rodillas —¡Izuku, no, aun no! — una corriente eléctrica la recorrió desde su cadera hasta el cuello, así como la sensación que tanto le gustaba sentir cuando su cuerpo estaba sobre Tenya y su mente apoderada de la visión de Izuku.

El cansancio hizo que se desplomara sobre las sabanas y los jadeos aparecieron con la intención de recuperar el aliento, se sentía afortunada de que su prometido viniera a ayudarle hasta más tarde, pues no imaginaria la vergüenza que sentiría de ser descubierta; Ochaco odiaba admitirlo quería a Tenya pero deseaba a Izuku. El problema era que Izuku ya no estaba, al menos ya no a su alcance y Tenya era ese chico que siempre estuvo y cuando no había nadie más solo se enfocó en él.

Era malo pensar así y ella lo sabía, pero cuando menos se percato ese "clavo saca a otro" se transformo en algo formal —al menos para Tenya— y dentro de poco se casaría, tendría a los hijos del de cabellos añil, tendría un matrimonio largo y envidiable y sus fantasías con Izuku Midoriya el villano más peligroso y desalmado seguirían siendo eso.

Una fantasía y un secreto.

—¿Y bien? — pregunto el de cabellos verduzcos a su mano derecha y sucesor.

—Busque en los hospitales de maternidad y pediatría y no hay nada, lo único que pude encontrar fue enfermeras que ayudan a la fertilidad, pero nada que pueda crear un bebé para dos hombres— reporto con aparente desinterés, pero eso solo significaba que al no haber una solución existente ellos debían de crear una.

Izuku rezongo molesto y frustrado mientras dirigía sus manos a su cabeza tratando de controlar su frustración y tratando de aclarar sus ideas —Bien, necesitaremos aterrizar mejor el plan B— dijo sin mucho problema.

—¿Tenemos que secuestrar a Hatsume Mei? — pregunto Dabi, a lo que Izuku respondió asintiendo la cabeza —¿Y cómo planeas que coopere? — cuestiono burlón y casi obvio al inconveniente de que trabajaba para los héroes.

La sonrisa de Izuku se ensancho, todo estaba perfectamente planeado —Despierta a camaleón, necesitare utilizarla otra vez.

Dabi acato la orden y una vez de vuelta Izuku estaba vistiendo la muda de ropa con la que había llegado el día del incidente —Camaleón, tengo una tarea para ti, pero esta será divertida. — dijo mientras entregaba un sobre a la chica.

Camaleón lo tomo y esta lo miro sin expresión alguna —Suena genial— sonó seca —¿Qué necesita jefe? — pregunto mientras abría el sobre encontrándose con la foto de dos personas.

­—En el sobre encontraras dos fotografías e itinerarios de dos de tus objetivos, el primero es Shinso Hitoshi, tu misión es sencilla roba el don de Shinso— ordeno y la chica le miro.

—¿Solo eso? — aunque su voz ni su rostro lo expresaban se sentía decepcionada, esperaba más.

Izuku rio —por supuesto que no, esa es la parte sencilla, lo que sigue es lo interesante, — aclaro acercándose y cambiando de pagina a los documentos, esta vez haciendo énfasis en la foto de Hatsume Mei —ella es tu objetivo importante— señalo la fotografía —una vez robes el don de Hitoshi, lo utilizaras en ella.

El experimento le miro sin entender —¿Qué hace el don de mi victima? — preguntó inocente.

Midoriya se estrello la palma de su mano contra su frente —Perdón soy tan descuidado, estoy ansioso por salir. — confeso avergonzado.

—Por coger— pensó Dabi.

—Shinso posé "lavado de cerebro" lo que harás será utilizarlo con Hatsume, le dirás que esta bajo mis ordenes, por lo que cada vez que digas "Deku te ordena" ella deberá hacerlo— explico feliz, realmente era muy sencillo.

—Oh— dijo la chica.

—Pero— llamo la atención nuevamente de la rubia parecida a Himiko —aún no hemos perfeccionado tu don del todo, por lo que solo podrás utilizarlo una vez con una garantía del 100%— explico — aunque estés transformada en Shinso, cada que utilices su don ira perdiendo efectividad, es por eso que después de hurtarlo debes utilizarlo lo más pronto posible en Hatsume, ¿Entiendes?

El rostro inexpresivo de Hatsume por fin cambio a una sonrisa tan terrorífica y sádica como poseía Himiko Toga cuando vivía —Sera divertido— declaro.

Midoriya asintió con una sonrisa confiada —Una carrera contra reloj. — y al instante Camaleón salió en dirección a la salida.

—¿Y tú a dónde vas? — pregunto Dabi con las manos en los bolsillos.

Deku rio y le miro de una forma en la cual Dabi no pudo descifrarlo —No solo yo, los dos. — dijo caminando a la salida —hay ropa allí, cámbiate no hay mucho tiempo— dijo señalando un escritorio mientras salía para darle privacidad.

—¿A qué te refieres? — pregunto mientras tomaba un conjunto similar al que traía Midoriya.

Antes de cerrar la puerta Izuku le lanzo un teléfono móvil desechable el cual Dabi atrapo sin problema con la mano izquierda, antes de poder revisarlo Izuku le dijo —Es hora— y salió.

Dabi miro el teléfono, el cual estaba en los mensajes, había un único mensaje y este decía:

Donde siempre, es hora de planearlo Deku.

Cortito lo sé, pero el siguiente sera muy bueno 7u7