VI [Kirishima]
Nadie puede reescribir las estrellas
¿Cómo podemos decir que serás mía?
Bakugo subió las escaleras y no volvió, Denki y Eijiro cruzaron miradas ruborizados, aun así la seriedad en sus expresiones volvió rápidamente, como si ambos se leyeran el pensamiento salieron al patio.
La madrugada era fría, aunque sus cuerpos en ese momento no lo sentían. - ¿Qué haremos?- pregunto Kaminari mirando el cielo y dando la espalda a su compañero.
- ¿Planeas informarlo?- pregunto Eijiro mientras frotaba sus manos entre sí, no por frio, sino tratando de controlar el constante temblor en su cuerpo.
Kaminari le miro apenas un segundo y regreso su mirada al cielo. -Nunca dije eso.
- ¡Carajo, mírame!- elevo la voz sin importar si Bakugo desidia asesinarlos esta vez.
El rubio negó aun sin mirarle, Kirishima por un momento se tranquilizó y le miro detenidamente, las manos las mantenía en sus bolsillos, pero se veía como las mantenía cerradas en puño con fuerza, aunque se le notaba despreocupado sus hombros no dejaban de temblar y las puntas de sus orejas que escapaban de su cabello estaban rojas, y dudaba que fueran por el frio.
-Oye, - Kirishima camino hasta su lado tomándolo por el hombro, corroborando al menos que el temblor de su cuerpo no era imaginación suya. -Denki.
Dándole vuelta de manera delicada por el hombro este logro verle el rostro lloroso, con una mueca que lejos de dar tristeza causaba gracia, parecía un pequeño regañado por tomar un dulce antes de cenar, sus ojos ámbar comenzaba a ser invadidos por lo rojizo de las lágrimas.
Por reflejo se unió en un abrazo con su compañero, maldición estaba jodidamente frustrado. -Aquí estoy amigo, aquí estoy. - consoló el pelirrojo mientras dejaba que el otro llorara.
Sollozos heridos, traicioneros y desesperantes salían de la boca del rubio casi al grado de volverse gritos, empero Kirishima se cercioraría de que nadie más que él los escuchara, oprimía con fuerza la nuca de su amigo contra su pecho aminorando el sonido.
- ¡Maldita sea!- grito sin ser escandaloso gracias a que su boca estaba completamente cubierta por la ropa de su compañero; golpeo los hombros de Eijiro tratando de expulsar la frustración.
Y es que no podía evitarlo, ¿Por qué?, ¡Rayos! ¿Por qué?, Maldición ¿Qué se había perdido? Y peor aún ¿En qué momento?; Pronto las piernas le fallaron, sintió como estas lo soltaron, pero no caería contra el húmedo césped, pues los brazos de Kirishima lo sujetaron en todo momento.
-Viejo... ¿Por qué?- pregunto dolido mientras sujetaba los hombros de Kirishima sin dejar de llorar.
Kirishima le abrazo como si de su hermano menor se tratara y acaricio sus cabellos lleno de conmiseración -No lo sé amigo, te juro que no lo sé.
Ambos se abrazaron con fuerza sentados en el césped, ahora estaban metidos en un embrollo, ambos lo sabían y no hacía falta decirlo en voz alta, Bakugo era su amigo, pero Midoriya era su enemigo.
- No podemos convencerlo de nada, sabes que Bakugo siempre ha sido terco, lo único que podemos hacer es ayudarlos para que se larguen a otro lugar, y con un poco de suerte esperar que ambos encuentren la felicidad sin que nadie salga herido.
Denki aun lagrimeaba, oculto su cabeza entre el cuello y el hombro de Kirishima, le resultaba muy reconfortante. -Mierda... -suspiro.
-Y de la grande.
Más tranquilos pero aun sin tener mucha confianza en dormir bajo el techo de Bakugo, Kirishima levanto a un adormilado Kaminari, lo llevo hasta la habitación que Bakugo les había ofrecido, dejo recostado al rubio sobre la cama y este estaba dispuesto a irse al sofá.
Empero nunca lo hizo, pues existía la posibilidad de que pudieran atacarlos durante la noche y asesinarlos, por lo que del armario saco un futon y una almohada para él dormir en el suelo.
- ¿Qué ocurre?- pregunto Kaminari.
Kirishima quito sus pantalones y los dejo arrugados justo al lado de la almohada para poder estar más cómodo y después se recostó -Precaución- dijo y aunque no lo pareció eso le causo un nudo en el estómago, nunca pensó necesitarla en el hogar de un camarada.
Denki le imito, pero este se retiró la chaqueta y la playera, dejándolas cuidadosamente dobladas al borde de la cama. -Bien, entonces, buenas noches.
Agradeció y le deseo también un descanso agradable, pero ninguno pudo dormir, seguramente eran poco más de las 4:00 a.m. cuando Kirishima decidió romper tan agonizante silencio.
-Hey, - llamo a su compañero - ¿Puedes dormir?
Desde lo alto de la cama se escuchó una risa sarcástica - ¿Qué crees tú?
Eijiro miro el techo -Creo que Bakugo tiene razón.
Denki dio vuelta y se acercó al borde de la cama para mirar mejor a Eijiro - ¿De qué hablas?
-Podríamos salir tú y yo. - dijo como si nada.
Kaminari le miro por unos momentos y después negó - ¿Justo ahora?
Se encogió de hombros y miro a su compañero - ¿Por qué no?
Hubo un silencio y después Denki sonrió dolido - ¿Sabías que es más probable encontrar pareja cuando se pasa por un estado emocional bajo?- Eijiro arqueo una ceja, por lo que Denki decidió explicarle mejor -Me refiero a que, si pierdes a un amigo, un funeral, incluso una depresión hace que al primer gesto de compasión lo confundas con amor, es algo muy común; y es porque solo quieres dejar de sentir dolor.
- ¿Quieres decir que el tratar de intentarlo contigo es porque me siento dolido por lo que está pasando?
Denki negó -Quiero decir que por todo esto nuestras intenciones pueden ser malinterpretadas muy fácilmente, hace un rato allá afuera, si me hubieras besado lo que hubieras conseguido es que mi adrenalina y dopamina incrementaran dejando de lado la tristeza.
Kirishima se sentó sobre el futon y le miro - ¿Me estás diciendo que querías que te besara?
Denki se sonrojo y desvió la mirada - ¿Ves? Confundiste mis intenciones muy fácilmente.
No muy conforme con la respuesta hizo una mueca - ¿Qué me dices de Bakugo?- Denki le miro como contestación por el extraño ejemplo -Él dijo que comenzaron por las vísperas del funeral de la señora Midoriya.
-Eso solo refuerza lo que digo... - suspiro -Midoriya había perdido a su madre, al símbolo de la paz y después la piel de su madre le llego en un paquete a la puerta donde él vivía, su mundo estaba inundado de dolor, un simple abrazo o incluso una sonrisa torcida de Bakugo pudo haberlo echo olvidar ese jodido infierno por un momento.
-Entonces, si tú y yo tenemos ese tipo de afectos y no reaccionamos como tú dices, ¿Significa que mis intenciones son genuinas?
El rubio se rio por tan extraña hipótesis -Pues creo que sí.
El sonido de las sabanas arrugarse y un golpe fue lo único que Denki pudo distinguir antes de tener a Kirishima sobre él, aprisionando sus muñecas con delicadeza al costado de su cabeza, reforzando el agarre con la cadera vestida únicamente con el bóxer -sensual de abuelito-azul marino sobre su cintura.
- ¿Eijiro... qué?- su pregunta no la pudo completar, pues su cerebro no lograba maquinar las cosas a la velocidad que ocurrían.
El pelirrojo acorto toda distancia entre las narices, empero había una pequeña línea que aún no revesaba, pues quería averiguar si Denki sería capaz de cruzar esa línea llamada amistad.
Denki se burló -Me recuerda a nuestros años de roomies.
Pues cuando aún no eran sustentables económicamente, compartían gastos, haciendo todo mucho más llevadero, esta situación no era desconocida. -Y dime, ¿Terminara igual que la vez anterior?- pregunto Kirishima.
Pues bien, aquella vez estaban lejos de estar en la cama, pero si en un sillón, no estaban a medio vestir, pero si traían ropa del otro y aquella vez se besaron por probar y después se alejaron uno del otro diciendo que fue culpa del alcohol, -Si a la gelatina con rompope se le podía llamar así. -
Esta ocasión Denki no rehuyó -Suéltame- pidió tranquilo, Kirishima no estaba muy satisfecho con su petición y después de una mueca acepto, retiro ambas manos pero no las alejo de donde en un inicio se encontraban. -Si no sientes nada con esto, considerare tu oferta, de lo contrario solo me demostraras que tenía razón.
Tratando de responder sus labios se mantuvieron abiertos sin que se percatara, Denki al instante cerro sus ojos y elevo levemente sus labios, Kirishima sintió todo su cuerpo palpitar, no creyó que accedería tan fácilmente -Para- tartamudeo, haciendo que Denki le mirara de nuevo -Para serte honesto, creí que tendría que seducirte. - miro en cualquier otra dirección que no fuera el rostro serio de su compañero. -No sería lo mismo si solamente me dejas hacerlo para que deje de molestar.
- ¿Entonces tiene que ser más natural?-preguntó
Eijiro asintió, nuevamente el rubio suspiro y casi al instante los brazos desnudos le rodearon el cuello haciendo más íntimo y realista el momento - ¿Qué-qué haces?- susurro las ultimas silabas al ver como Kaminari cerraba los ojos nuevamente y se aproximaba a los labios con tranquilidad.
Suave, esa fue la primer impresión de Kirishima al sentirlo, nada comparado con el otro beso de años atrás donde sus labios estaban partidos por falta de agua, por otro lado Kaminari lo califico como cálido, no como el recuerdo de ese beso torpe y brusco.
El beso fue un simple "toque boca a boca" haciéndolos sentir como unos niños de primaria confesándose en la graduación antes de ir a la secundaria, dejaron de rosar sus labios, pero no se alejaron, era buena señal, ¿no? - ¿Sentiste algo?- pregunto Kaminari, aflojando el agarre de sus brazos.
- A decir verdad, nada que no sintiera antes- confeso un tanto inconforme.
- ¿Pero?
-No tengo suficiente con eso- volvió a besarlo, no hubo rechazo dándole la suficiente confianza como para cambiar de posición, hábilmente dio un giro donde Kaminari quedo recostado sobre su torso, siendo sujetado por sus cintura desnuda, aunque su cuello fue liberado pues al estar tan cerca de la orilla Denki tuvo que sujetarse de la cabecera para evitar caer.
El dulce beso de primaria paso a ser un beso más animado, donde ambas bocas sin ser aun desesperadas interactuaban con la otra, mordidas y jadeos por falta de aire aparecieron poco a poco, hasta ser bruscamente detenidos.
El corazón le latía tan fuerte que era incapaz de escuchar sus pensamientos aunque lo sonoro de su respiración agitada tampoco ayudaba, Denki separo su pecho del torso ajeno quedando sentado sobre la cintura de Eijiro - ¿Sentiste algo?-volvió a preguntar mientras regulaba con dificultad su respiración.
Torpemente se quitó la camisa mientras se sentaba al igual que Kaminari, causando que se exaltara, en un impulso de alejarse con temor de ir más allá de lo necesario, Eijiro lo sujeto nuevamente por su cintura. -cuando termine responderé.
Aprisionó sus preguntas con un beso vehemente, apretó con fuerza las manos que estaban en la cintura tersa de su compañero acortando la poca distancia que había entre ellos, Denki sujeto la nuca de Kirishima, quien le mordió y jalo el labio. -Eijiro- jadeo, tratando de separarse de él colocando ambas manos en sus hombros empujando sin ganas - no trates de pasarte de listo.
Kirishima soltó una risa apenas audible, olvidando sus labios un momento, dirigió sus besos a la quijada, donde se dio cuenta al instante por el temblor que sintió, era bastante sensible -solo estoy conociéndote, no haré nada más que besarte...- apretó su trasero, logrando que se subiera aún más en su cuerpo por el pequeño salto que dio por instinto al tratar de alejarse -y quizá tocarte, para ver tus reacciones.
Kirishima cumplió lo dicho, pues a lo más que llegaron aquella noche fue a que ambos quedaran en bóxer, con el cuerpo repleto de besos, una que otra leve marca enrojecida por culpa de las mordidas y con una respuesta a la pregunta de Kaminari. -Curiosidad, eso siento.
Los rayos del sol llegaron más tarde que pronto y Kirishima abría los ojos pesadamente, encontrándose acostado sobre la cama en lugar de Kaminari, quien por cierto no se encontraba en ningún lado a la vista.
El miedo sustituyo el sueño restante en su cuerpo, invadido de temor se levantó deprisa - ¡Denki!- al levantarse, noto que este estaba vistiendo su ropa del día anterior y el futon donde había dormido no estaba.
Abrió la puerta casi partiéndola al azotarla y corrió hasta la sala de estar, donde el aroma de unos filetes, huevos, pan recién tostado y otras cosas le invadieron el olfato de inmediato, no podía creerlo. -Ah... ¿Si? ¿Qué pasa Kirishima?- pregunto el rubio con una expresión extraña.
No podía creerlo, frente a sus narices estaba Kaminari cargando un par de platos con lo que parecían waffles cubiertos de miel, huevos fritos con tocino y guarnición de patatas molidas, sin embargo casi imperceptible detrás de él estaba Katsuki mirándolo con el ceño alzado y una mueca de burla completa -Buenos días para ti también, pelo de mierda.
Kirishima estaba con la quijada a casi dislocar del asombro, ¿Cómo podían estar tan tranquilos después de ayer? - ¡¿Dónde está Midoriya?!- pregunto el pelirrojo buscando en todos los rincones, haciendo de Kaminari respingara tan solo al escuchar ese nombre.
- ¿De-de que hablas?- pregunto Kaminari dejando ambos platos en el desayunador.
Katsuki gruño en molestia -Bastardo, sabes que eso no se habla más que en la agencia, - sentencio Katsuki girándose nuevamente para seguir preparando el desayuno -cállate y siéntate a almorzar.
El asombro no cabía en la mueca pálida de Kirishima, no entendía que pasaba, Denki camino lento hasta donde se encontraba y tomo su hombro - ¿Te encuentras bien?- pregunto y luego río -Si no te conociera parecería que hasta has visto un muerto.
El pelirrojo le sujeto por los hombros con fuerza - ¡Tienen que estas chingando me ambos!- grito zarandeando al rubio.
- ¡Basta Eijiro esto ya no es gracioso! ¡Estas lastimándome!-grito Kaminari zafándose del tosco agarre.
Katsuki llego hasta ambos separándolos -Haber tú- refiriéndose a Eijiro -suficiente, ¿Qué carajo te ocurre? No llevas ni 10 minutos levantado y ya estas jodiendo, ¿Qué te pasa?
Ambos le miraban sin entender, por lo que Kirishima llego a dudar ¿Lo de ayer fue real? - ¡Ayer llegamos y estas besando a Midoriya sobre tus piernas!- ambos rubios abrieron sus ojos como platos, mirándose entre sí.
-Eijiro...- hablo Denki con voz tranquila -Ayer volvimos a casa de Katsuki por unos documentos que olvidaste, pero te quedaste dormido en el coche...
- ¿Qué?- pregunto Kirishima - ¡No me quieras ver la cara! - Grito y señalo a Katsuki - ¡Este bastardo casi nos asesina ayer por pensar que lo íbamos a delatar! ¡Juramos ayudarlo! ¡¿O es que ya lo olvidaste?!
Pero la farsa no desaparecía, ambos rubios se miraban como si frente a él les hubiera hablado un italiano tratando de similar ser japonés y uno muy malo -Viejo, Katsuki te cargo desde el coche hasta la habitación de invitados, yo dormí en el sofá, mira- señalo mostrando el sofá de la sala con unas cobijas sin acomodar, realmente parecía que había pasado la noche en esos cojines en lugar de en sus brazos.
-Pero... pero- Kirishima no entendía, todo parecía real.
Katsuki suspiro -Solo fue un sueño, uno muy cabrón, ahora siéntate y desayuna.
Al darse vuelta Eijiro no desistió - ¡No! ¡Me están viendo la cara!- corrió hasta las escaleras y subió hasta la habitación de Katsuki donde no había nada, solo una cama perfectamente hecha, escuchando gritos de sus compañeros siguió registrando todas las habitaciones sin encontrar a nadie.
-Pero... pero yo to vi, estaba aquí ayer- dijo al aire creyendo que esta era una pesadilla.
- ¡Pelos de mierda, si no te sientas a comer te juro que voy a meterte los huevos yo mismo para que te largues!- Kirishima miro a sus compañeros, no había nadie.
Después del desayuno, pelirrojo y rubio se fueron, en el coche Kaminari hablaba de cosas que honestamente Eijiro no escuchaba, estaba confundido, no pudo haber sido un sueño.
-Llegamos- aviso Denki con su típica sonrisa, lucia tan natural, despreocupado, parecía ser el único que no entendía nada.
-Oye- llamo la atención del rubio, recibiendo un "umm" como contestación -La noche de ayer tú y yo nos besamos- Kaminari le miro de inmediato con los ojos confusos, casi pareciendo que escucho mal.
- ¿Qué?- pregunto.
-Lo que oíste - extendiendo su mano directo al cuello de su camisa con la única intención de quitarlo.
-Pero que...
-Si lo de ayer fue un sueño, está de sobra decir que no habrá ninguna marca.
Ambos se miraron unos longevos y tortuosos segundos, donde Eijiro mantenía la mirada firme y seria, Denki termino por suspirar resignado -No, no debería de haberla.
Kirishima bajo el cuello de la playera dejando al descubierto parte de su clavícula caucásica y libre de toda marca y mordida que él estaba seguro había dejado, sus ojos se ensancharon sin comprender - ¿Y bien?- pregunto Denki.
- ¡En la espalda!
- ¡Oh por todos los malditos cielos!- grito molesto mientras torpemente se quitó la playera mostrando su torso limpio de cualquier marca. -Eijiro, no sé qué rayos te pase, pero te garantizo que hoy estas insoportable.
-Lo siento...- susurro -Parece, que solo fue un sueño.
ACTUALIZO PORQUE ME VO DE VACACIONES :V
POR SI ACASO, FELICES FIESTAS! NO SE EMBORRACHEN TANTO! OJALA QUE SANTA LES TRAIGA TODO LO QUE PIDIERON.
Y UN CONCEJO, SI TOMAN, APAGUEN EL TELÉFONO XD
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