Michael
Gracias a Dios vino a tiempo, un segundo más y el desgraciado de Derek ya nos había puesto una bala en el cráneo a cada uno.

-¿Quién eres idiota? -dice molesto.

-Soy un fantasma. -contesta sonriendo de costado.
Carajo ¿Por qué es están confiado?

-¿Qué? -Derek mira lo mira y comienza a acercarse -¿Eres un amigo de Michael? Si es así, te voy a matar maldito. -agrega apretando con fuerza sus puños.

-No soy amigo del señor Clifford, además ya intentaste matarme. -contesta quitándose la gorra de lana -¿O ya lo olvidaste? -él, por último, se quita la bufanda y sonríe.

-Eres... eres...

-No eres bueno matando, idiota. -habla él. Espero que nada salga mal.

Audrey
Ese chico se quita la gorra y luego la bufanda que cubre parte de su rostro. Quedo paralizada al ver que se trata de...

-Zac. -digo poniéndome de pie -¡Zac! -corro hacia él pero Derek me toma de la cintura.

-¡No tan rápido Audrey! -me toma con fuerza y coloca un cuchillo en mi cuello.

-No te acerques ni un paso más. -dice serio -O tu novia morirá. -lo amenaza.

-Zac, e-estás vivo. -digo sorprendida.

-Sí, dije que ni la muerte nos separaría. -habla sonriendo, en este momento quiero correr y abrazarlo con todas mis fuerzas pero recuerdo que tengo un cuchillo en mi cuello y, ante cualquier movimiento, me cortaría.

-Ay que lindo y conmovedor. -interrumpe Derek sujetándome con fuerza.

-¡Será mejor que la sueltes ahora! -habla Zac firmemente.

-¿O qué? Estoy a punto de cortar el cuello de la linda de Audrey. -contesta ese desgrasiado.

-Yo no voy a hacer nada, mi amigo el agente sí. -contesta sonriendo ¿Cómo puede ser que sonría en un momento como este?

-¿Agente? -Derek frunce el ceño y oprime el cuchillo con más fuerza por mi cuello.

-Sí. -en ese momento las luces se apagan por completo.

-¡¿Dónde estás?! -exclama Derek sosteniéndome.

-¡Ya déjame! -de doy un golpe con mi cabeza haciendo que me suelte, en cuchillo cae al suelo y lo tomo.

Las luces vuelven a prenderse y mis padres estás liberados como Zayn y Mariam.

-¿Dónde está Zac? -pregunto buscandolos al rededor.

-¿Y Derek? -dice mi papá molesto.

Zac
Las luces se apagan y corro hacia mis padres para liberarlos, corto las cuerdas con un cuchillo y hago lo mismo con los padres de Audrey.

Luego me ocupo de Derek, Audrey golpéa al maldito con su cabeza, obligándolo a que lo suelte.

Yo aprovecho ese momento para tomarlo del cuello de su ropa para golpearlo.

Él se arroja al suelo y me patéa el estómago lanzándome hacia un contenedor de escombros, al encontrarnos en el primer piso, ambos caemos hacia abajo y quedamos tendidos en el suelo.

-Ay, mi cabeza. -digo levantándome como puedo, sacudo mi cabeza y limpio un poco mi ropa que está cubierta de polvo. Las luces volvieron y tengo a ese asesino frente a mí.

-Zac... -Derek me mira teniendo un hierro en su mano -¡Te mandaré al infierno ahora! -agrega molesto corriendo hacia mí.

Intenta golpearme con el hierro pero yo lo tomo de un extremo y forcejeamos.

-¡No lo harás! -giro bruscamente el hierro haciendo que lo suelte y luego golpéo su estómago y rostro con mis puños.

-¡Intentaste matar a Audrey! -exclamo caminando hacia él, quien permanece en el suelo.

-Aun muerto te amaba. -habla escupiendo un poco de saliva con sangre.

-Esa es mi chica. -murmuro sonriendo -No quise dejarla todo este maldito tiempo y fuiste el responsable de eso. -hablo frunciendo el ceño.

-Ya no... -murmura Derek apoyándose sobre sus rodillas y manos -¡No volverás a verla! -él encuentra el arma que le había quitado y me dispara en el pecho.

Derek
Encuentro el arma y la tomo sin que Zac se de cuenta, entonces le disparo en el pecho y él cae al suelo.

Me acerco a Zac y le disparon tres veces más para asergurarme de que el desgraciado muera de una vez.

-¡Zac! -grita Audrey del primer piso, entonces disparo hacia ella, Michael la quita del borde y no la pude matar. Todo esto ya me está hartando, mataré a todos de una vez.

Las luces se vuelve a apagar y saco una linterna que llevo en mi bolsillo. Con la luz de la misma, miro el lugar donde está Zac, pero desapareció.

-¡Carajo, el maldito no está! -exclamo furioso. En ese momento escucho ruidos en la oficina donde están los controles de las maquinarias, las luces, camino hacia allí teniendo mi arma en alto y mi linterna debajo de la misma, alumbrado lo que tengo enfrente.

Veo la puerta gris entreabierta. Lentamente abro la puerta y miro a mi alrededor -No hay nadie. -pienso.

-No vas a ganar esto idiota. -escucho a alguien hablar, volteo y nada, miro de nuevo hacia adelante y todo está oscuro.

-Estoy aquí. -dice haciendo que lleve mi vista hacia una silla que se encuentra cerca de un escritorio.

Me acerco teniendo firmemente mi arma y rápidamente me coloco frente a la silla, me sorprendo al encontrarme con un cactus que tiene una cara enojada dibujada en la maseta.

-Al fin nos conocemos personalmente. -la voz sale de un radio, el cual se encuentra junto a la planta.

-¿Qué? ¿Quién eres? -le digo a la persona que habla por el radio con un tono agresivo.

-Soy el Agente "C". -contesta haciendo que me irrite y tomo el radio -¡Escucha idiota!

-No, tú escucha. -me interrumpe, Zac es quien habla fingiendo ser la asquerosa plata -Intentaste matarme, eso no es lo peor hasta creo que puedo perdonarte pero... casi matas a Audrey y eso no te lo perdonaré. -la comunicación se corta y las luces vuelven a encenderse.

-Maldito. -digo entre dientes. En ese momento alguien salta sobre mi espalda y me obliga a soltar el arma.

-¡Desgraciado! -es el maldito de Zac -¡¿Por qué no te mueres?! -Yo giro teniéndolo sobre mí y lo arrojo sobre la mesa haciendo que la misma se parta.

-¡Agr! -suelta un grito y vuelve a ponerse de pie.

-Con que este es tu amigo "agente" ¿Cierto? -le digo en un tono burló refiriendome al cactus.

-Sí, es él y no lo subestimes. -contesta Zac serio.

En ese momento me da una fuerte parada y me lanza sobre la maldita plata haciendo que las espinas se claven en mi pecho, cuello y parte se mi cara. Duele mucho y ese maldito lo lamentará.

-¡Ah! -suelto mientras quito las espinas de mi rostro que comienza a sangrar.

-Te dije que no lo subestimes. -retipe Zac.

Miro el arma el cual está en el piso y a una distancia de 2 metros más o menos de mí.

Zac también la ve y se prepara para tomarla al igual que yo.

Audrey
-Derek le disparó a Zac. -me digo aterrada.

-N-No... te preocupes hi-hija. -me dice mi papá. El señor Malik lo ayuda a matenerse de pie, lo sostiene pasando el brazo de mi padre por sus hombros.

-¡¿Cómo quieres que no me preocupe?! ¡Acaban de dispararle varias veces! -escupo estando llena de rabia.

-Mi hijo ya sobrevivió a la muerte, además un chaleco antibalas lo protege. -habla Zayn.

-¿Chaleco? -repito conprendiendo.

-¿Ustedes ya sabían que él estaba vivo? -les pregunta Mariam a ambos.

Ambos asienten y Mariam al igual que mi madre y yo nos ponemos muy serias.

-¿Por qué no lo dijeron antes? -digo sintiendo cómo las lágrimas amenazan con salir de mis ojos.

-Si lo hacíamos, Derek ya nos hubiera matado a todos juntos. -contesta Zayn agachando la mirada.
Solo espero que Zac pueda con ese asesino.