Parte 2

- ¿Estás seguro de que te la entregaría por las buenas? Si me amenazas de nuevo, te volveré a cenizas. Tu subir a espalda de mí, nos marchamos de aquí de inmediato- me dijo con una tranquilidad que parecía que no estaba consciente del peligro que enfrentábamos en aquel instante y su forma de hablar era peculiar. En aquel instante, solo pude hacer lo que me dijo, no quería que me ingiriera él. Subí a su espalda y oculté mi rostro entre su cabello de escamas. Incluso pasé mis manos por su cuello con un poco de fuerza para sentirme más segura, y eso que me quería ingerir unas horas atrás.

En cuanto él observó que ya estaba subida, comenzó a volar dando un gran salto para impulsar, sin antes destruir un poco de aquel lugar con su gran cola, ya que tenía una fuerza desmedida.

Cuando nos encontramos en el cielo, percaté cómo la brisa del viento acomodaba mi cabello, y parece que me quedé dormida. No tuve idea de cuándo llegamos al lugar al que se dirigió. Al aterrizar, observé cómo el hombre con quien estuve conversando en primer lugar, le echó un regañón de primera mano.

-Eres un estúpido, aparte de ser un estúpido, ¿qué remedio? Asimismo, la muchacha se ha refugiado en tu espalda. Cuéntame que te has enamorado de lo que odias con todas tus fuerzas, ¿o me equivoco? Además, no puedes engañarme - dijo el hombre con una sonrisa llena de humor, aunque un tanto descontento si estaba.

En aquel instante, me encontraba dormida con una calma que me olvidé de todo. En aquel momento, él observó a su espalda, sorprendido de cómo yo dormía, lo cual a él lo tranquilizó o lo hizo comprender. Dado que estaba muy tranquilo, cuando vino a rescatarme estaba muy y con furia. Con un gesto de cautela, me bajó de su espalda para incorporarme en la cueva conmigo en los brazos. La noche estaba cayendo y me produjo la sensación de que hacía frío. Al despertar, me encontraba en la cueva y ¿viva?

¡Qué extraño era! Pensé que me quería comer. Asimismo, no comprendo por qué me salvó de aquellos lobos, y lo más curioso, ¿por qué tenía dos apariencias? La mitad era de ser humano y la otra era de dragón.

Bueno tampoco iba a preguntar, pero cuando tuve la oportunidad me levanté del suelo y salir claro mi cuerpo estaba estremecido por el frío que hacía.

En aquel instante, percibí una voz que percibí.
Agradezco profundamente su labor anterior. Era una melodía magnífica, aunque la tararearas. dijo con tranquilidad, pero no pudo terminar de hablar, ya que una bocanada de fuego pasó de largo que incluso desapareció el frío que tenía. ¿Acaso el dueño de ese fuego me quería quemarme, y luego comerme? que locura.

En ese instante, se aproximaba a nosotros el responsable de ese fuego, sin embargo, a mí no me hirió de milagro, aunque si experimenté el calor que era agradable, hubiera deseado expresar mi gratitud por quitarme el frio. Mientras tanto, Gabriel lo esquivó con una sonrisa en su rostro.

- Por favor, Gabriel, abstente de decir tonterías. "No esperes que de las gracias por una canción- expresó con una voz gruñona, además de expresar su enojo con aquellos ojos que manifestaban una sensación de inquietud.

Por el contrario, a mí me produjo otra sensación de que no era un gruñón, me refería a las dos cosas una voz y la otra sus ojos era cierto que causaba miedo, pero era su forma de darme las gracias, sin duda a su forma un tanto extraña.

En ese instante, aprovecho la oportunidad de sonreírle, sin embargo, con una sensación de temor, ya que era habitual después de la ocurrencia y las circunstancias que podrían surgir. Lo cual él observó y arrugó el ceño. Le comunicó que no me importaba en absoluto que me expresara su gratitud y desvió su mirada hacia Gabriel. ¿Por qué es así? No me importaba en absoluto que me diese las gracias o había otro motivo oculto.

No tenía idea de por qué estaba incómodo mirándome o había algo más pero tampoco iba a preguntar, solo quería saber por qué me salvo de los lobos. En aquel momento, abandonó la cueva debido a que tuvo que entrar para dejarme dentro la noche anterior, además no me percaté de nada, solo lo que sucedió con aquellos lobos. Solo pude comprender que necesitaba moverse. Quizás necesitaba un poco de actividad, pero creo que me equivocaba. Solo se salió para contemplar el cielo nocturno con una expresión melancólica.

Lo que me llamó la atención fue cómo la luz de la luna iluminaba su cuerpo solo para eliminar la parte de dragón, pero no de manera definitiva, ya que alguna vez volvería a tener esa apariencia que solo la utilizaba para defenderse de sus atacantes, pero esas áreas de su cuerpo las que desaparecían eran cara, brazo y abdomen. El individuo no era un dragón gigante, aunque sí, debido a su capacidad de modificar su tamaño a un tamaño más habitual, en referencia a la de una persona, y al hacerlo, Cuando lo hacía, me sacaba una cabeza, ya que yo era algo baja. Al observar cómo se encontraba sin su parte de dragón, experimenté una sensación de hipnosis, dado que no me agradaba ningún joven, sin embargo, él era una excepción.

-se te cae la baba, es habitual en los jóvenes. ¿Te has enamorado verdad? – me preguntó con una sonrisa en la cara, algo que no tenía idea de qué responder, pero al dar mi respuesta, mi cuerpo se había movido solo para dirigirse al joven que tenía delante de mí, es decir, a unos pasos algo alejado.

- Hola, mi nombre es...- no tuve la oportunidad de decirlo, ya que él me observó con una mirada que era incómoda.

Saber cómo tu llamar ser hermoso- dijo mientras me miraba a los ojos, como si pudiera observar a través de ellos como si pudiera comprender lo que estaba a punto de preguntar, pero me volvió a silenciar, poniéndome un dedo en mis labios para luego escribir su nombre en el suelo.

-Ese ser nombre mío, nombre maldito- dijo tristemente en su voz. Se llamaba Nikishimo. De acuerdo con él, este hecho no le agradaba en absoluto, y considero que se debe a su significado. No iba a cuestionarle, pero no me percaté de que seguía mirándome con esa mirada que podría incluso poner nervioso al ser más malvado.

- Gabriel decir que tu saliva caerse al mirarme al mirarme, ¿eso es verdad, Lina? "Desconozco la veracidad de la afirmación- inquirió con curiosidad, mientras yo observaba a los ojos como si fuera una tonta.

-Lamento mucho. No he tenido oportunidad de conocer a un joven como tú. Asimismo, lo de la baba es un decir. En realidad, no se me estaba cayendo la luna es hermosa- dije con la expresión colorada tratando de apartar mi mirada de la suya, además, no quería que mi rostro pareciera un tomate y que además revelase que era verdad lo de la baba.

Más o menos se percató de lo que pretendía llevar a cabo sin éxito, pero desvió su mirada hacia el cielo, yo también hice lo mismo. Había transcurrido un par de horas hasta que oí un sonido de lloriqueo, volví mi rostro para determinar de quién era y resultó que era él.

En aquel momento, por impulso le rodeé en un abrazo, lo cual él no tenía idea de qué hacer ante ese contacto, además parecía que nadie le hubiera dado un abrazo en su larga vida, incluso podía asegurar que sus ojos se pusieron como platos porque no se movía en absoluto. Mientras yo ocultaba mi rostro en su pecho, permanecí así durante unos instantes que, para mí, se me hicieron eternos hasta que me percaté cómo los brazos de él me tocaban ambos hombros. Pero fue con el propósito de que me alejase de él.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top

Tags: #amores