VI

70 votos, 100 comentarios

.

-Sunoo- Ni-ki llamaba desde afuera de la habitacion del menor de 17 años. 

-¿Si?

-¿Puedo pasar?... traje helado- y la puerta fue abierta dentro de pocos segundos.

Sunoo fue regañado, salio a comprar al supermercado y acepto llevar a un señor aparentemente "ciego" de 40 años hasta su casa, solo quería ayudar, pero por poco cuando llego a su destino, el señor lo mete a fuerza a su casa, si no fuera por Jay que pasaba por ahi convenientemente, seguro Sunoo hubiera sido secuestrado, y aunque se hubiera librado y escapado con facilidad, sus Hyungs le dijeron incontables veces que no debe confiar, incluso en las personas discapacitadas.

Luego de que Jay lo llevara en sus brazos a casa, Jungwon eventualmente se enteró de lo sucedido, regañando a Sunoo, cuando Jungwon se molestaba no era nada bonito, era un gato enojado que arañaba a todo lo cercano.

Flashback

-¡Te dije tantas veces que cuando salgas solo no debes hacer caso a nadie!

-Si, pero él--

-¡Pero nada! ¡¿A caso no sirve de nada las incontables veces que te contamos los peligros de afuera?!- miraba muy molesto a Sunoo -¿Qué pasaba si Jay no estaba ahi?

Sunoo no respondió. 

-¡Pero responde!

-El hombre me habría llevado...- sentia tantas ganas de llorar.

-¡Sí! ¡Te habrían llevado muy lejos!- Jungwon tambien tenía ganas de llorar -lejos de nosotros...

Y Jay llego tratando de apaciguar el ambiente.

-Won, está bien, Sunoo está  bien- lo abrazó.

-Hyung, yo--

-¡A tu habitación!-sin mirarlo lo mandó a su recámara. 

-Jay Hyung...- Sunoo miró al alfa.

-Ve, ya despues hablaremos ¿si?- sostenía a Jungwon en un abrazo.

Sunoo sin decir nada más, con los ojos llorosos se fue a su habitación, empezando su sesión de lágrimas de aproximadamente dos horas.

Mientras que en la sala seguian estando Jay y Jungwon, el omega lloraba desconsoladamente aun con la simple idea de no tener cerca a Sunoo, le daba tanto miedo que ese pequeño niño este en peligro y sea dañado.

-¿N-no sirven las precauciones que le damos?- Jungwon se aferraba a Jay.

-Claro que lo hacen, pero Sunoo es un niño, quiere ayudar, no puedes regañarlo por querer ayudar.

-P-pero y si se lo llevaba..  yo...

-Lo unico que nos queda es esperar que Sunoo aprenda a quienes ayudar y a quienes no ¿Si?

-Pero ¿y-y si falla y se lo llevan?- miró a Jay.

-Sunoo es fuerte, el mismo nunca dejaría que lo encarcelen o lo aten, tu mismo lo entrenaste para toda clase de situaciones.

-Yo solo quiero protegerlo...

Fin del flashback.

Sunoo estaba sentado en su cama, con su bote de helado en brazos y una gran cuchara en mano mientras que Ni-ki comía de a poco con una cuchara de tamaño normal.

-No te enojes con el, a veces es muy protector, especialmente contigo- Ni-ki estaba sentado a su lado, apoyado en el espaldar de la cama.

-No estoy enojado... estoy decepcionado de mi mismo- paró de comer su helado.

-¿Porque estarías decepcionado por querer ayudar?

-Porque no puedo ayudar a todos, no todos necesitan ayuda, algunos solo quieren dañarme.

-Okey..  entonces, pongamoslo así,  si nunca nadie ayudaría a las personas ciegas ¿como causarían la calle? ¿O cómo llegarían a sus casas? ¿Siquiera podrian subierse a un automovil?

-No podrían...

-Exacto, a veces no tienes que ayudar, pero a veces si, la cosa es analizar a las personas, no dejar de ayudarlas, cuando quisiste ayudar a ese señor ¿te fijaste en el color de bastón?- se refería a que cada color significaba un nivel espeficico de cegera que el gobierno daba a los incapacitados de la vista.

-No...

-¿Ves? Y ¿te fijaste en el credencial?- era otra de las cosas que tenian sellos del gobierno para los incapacitados de un u otro aspecto.

-Tampoco.

-Esos son loa detalles que debes analizar, tienes que ser mas cuidadoso, lo que tu hiciste, es muy bueno, solo que debes hacerlo con mas calmita ¿Si?

-Si....

-Ahora ¿Qué película quieres ver?- Ni-ki sostenia el control remoto -de Disney o de Netflix, dime tu.

-Disney- Sunoo sonrió,  a sus 12 años fue cuando vio su primera pelicula animada, en la television de un centro comercial, esa pelicula fue "la princesa y el sapo", desde ese momento quiso ser como esa princesa, fuerte, determinado y que ponga orgulloso a su familia.

-¿Alguna película en específico que quieras?

-Mmm... Coco- y sus palabras fueron atendidas, la pelicula cargaba mientras ellos dos acomodaban la cama.

-¿Quieres que traiga algo para comer?- Ni-ki sonrió mirando a un feliz Sunoo que acomodaba almohadas y frazadas.

-¿Podemos pedir comida?

-Claaaro que si- sacó su teléfono para poder darle opciones a Sunoo -Elije lo que quieras, yo pago.

-¡Pollo!- su dedo fue directo a su restaurante preferido.

-Con barbacoa- Ni-ki continuó. 

-Y papitas con orégano- Sunoo finalizo ordenando dos, solo para ellos. -llegará en 10 minutos.

-Perfecto, traere gaseosa ¿o quieres refresco?

-Noup, gaseosa está bien.

-Okey, esperame un momento ¿si?- estaba por salir de la habitacion cuando Sunoo sujeto su chaqueta.

-Gracias, Ni-ki- se puso de puntillas besando su mejilla, asi era como solia agradecer a sus mayores, pero Ni-ki se sintió algo extraño esta vez.

-N-no es nada... ya vuelo- el área donde los labios de Sunoo habian tocado era cálida,  sentía como sus mejillas se calentaban y sus manos empezaban a sudar.

Hace tanto que se sentía especial con Sunoo, pero era su compañero, era su amigo, no habia oportunidad para él ¿verdad?

-Ay... Sunoo... si supieras como me siento...

 .

.

-Recuerdame... hoy me tengo que ir mi amor... recuerdame- Sunoo cantaba entre lágrimas-no llores por favor.

-Te llevo en mi corazón y cerca me tendrás- Ni-ki cantaba a coro junto con Sunoo, pasando su mano sigilosamente encima de sus hombros para abrazarlo.

-A solas yo te cantaré so-soñando en regresar- secaba con dificultad sus lágrimas.

-Recuerdame, aunque tenga que emigrar, recuerdame... si mi guitarra oyes llorar- ahora solo cantaba el solo, Sunoo se calló para escucharlo. -ella con su triste canto te acompañará- acariciaba el brazo de Sunoo -hasta que en mis brazos tu estés- Sunoo se levanto un poco hasta estar a la altura del rostro de Ni-ki, como a unos 20 cm.

-Recuerda...me.-parecia que hubiera sido encantado por su voz.

Era un momento que parecía congelado, Sunoo estaba encima de Ni-ki, con sus manos en el rostro contrario, acercandose a su rostro al mismo tiempo de  cerrar sus ojos, Ni-ki se quedo estatico en su lugar, sintiendo ese momento como si fuera eterno, cerrando sus ojos lentamente.

Por favor... solo un poco más. 














Cami~

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top