Dai vio a los dos ancianos rugir de dolor con la perspectiva de Karma y sonrió sádica ante su dolor. Aunque ella jamás había matado a nadie estaba determinada a hacerlo.

- Gracias Karma, por encargarte de lo peor. Déjame a mi lo siguiente. - dijo para el bijū frente a ella.

- ¿Estas segura? Jamás has terminado con la vida de nadie, ni en tu vida anterior, ni en esta. - dijo un tanto preocupado por ella.

- Tranquilo, no haré nada que me afecte. Además, que no puedo seguir adelante con mis planes sin antes haber enfrentado esta etapa. Gracias por tu preocupación amigo. - dijo dándole una palmada a una de sus tantas colas.

- Como quieras, si necesitas ayuda cambiemos. - dijo sonriendo y acariciando la cabecita rojiza.

Al mirar a los dos ancianos en el suelo jadeando Dai sonrió, agito su dedo y los dos cuerpos se giraron para mirarla.

Al ver que volvía a la normalidad los dos la miraron con miedo y odio. Dai vio esto y se rió entre dientes.

- No pensé ver a los dos ancianos de Konoha, discípulos de Tobirama Senju en un estado tan miserable y degradante jaja, ahora mírense están en las manos de una exiliada de Konoha. Veo que ustedes desprecian a los exiliados ¿no? ¿Cómo se siente estar bajo el control de algo que odian? Jajaja ya era hora de que alguien detuviera sus absurdas decisiones. - dijo Dai sonriendo cruelmente.

- H-H-Hiruzen jamás t-te lo perdonará una vez que se enteré. - dijo Koharu resentida.

- Gracias por preocuparte por mí relación con Hiruzen, déjame decirte algo. - dijo Dai sonriendo mientras se acercaba a ellos mientras susurraba.

Hiruzen jamás se enterará, ya que a ustedes jamás les paso algo. Una vez que termine de hablar con ustedes caerán bajo mi control. Es algo inevitable.

Dai sonrió acomodando un mechón del cabello de la anciana con una sonrisa satisfecha, luego se volvió.

Ella sabía perfectamente que los ancianos en ese momento querían cortarla en miles de pedazos con odio, pero a ella le daba igual sus pensamientos internos.

No pasaran de ese día después de todo. Una vez que ellos dejen este mundo Dai los manipulara con ayuda del poder dado por Karma.

Ella se aseguraría que Konoha este bien a cualquier precio, aun si ella no estaba cerca.

Después de todo es su futuro hogar.

- Muy bien ya es hora de dejar de jugar, es mejor que digan sus últimos ruegos. Tengo asuntos que atender mas tarde con Jiraiya y necesito dejar todo listo antes de irme.

Les agradezco una sola cosa, gracias por dar sus cuerpos a una gran causa, serán de gran utilidad para mí en Konoha. - Saco una paleta de su bolsillo mientras los miraba asombrados e impotentes mientras se desangraban rápidamente.

Activo su Mangekyō y pronto los dos cuerpos cayeron como muñecos sin cuerda, los dos miraban hacia ella con una mirada espantada.

- Fue tan sencillo lidiar con ellos, no se como en el anime nadie trato con ellos. Ante su muerte no siento nada. - dijo Dai indiferente mientras los miraba.

Dai movió su mano y un hilo dorado salió de sus dedos de jade, a mitad de camino se dividió en dos entrando a ambos cuerpos.

Pronto estos se levantaron y se arrodillaron frente a ella.

- Manejen bien Konoha hasta que yo regrese, infórmenme las decisiones de Tsunade. -

- Si. - ambos dijeron con una mirada devota mientras Dai se transportaba de nuevo.

[...]

Dai se transportó a una habitación sencilla, miro alrededor de esta cómodamente.

Por el rabillo del ojo vio un portarretrato, camino hacia el con una sonrisa y lo agarro mientras acariciaba la foto con cariño.

- Me pregunto qué cara pondría si se entera que sabe que vi nuestra foto en su habitación. - dijo sonriendo, luego camino hacia la sala.

Encima de la mesa estaba una botella con un liquido rojo. Dai sonrió y lo tomo al verlo a la mitad.

- Veo que disfrutas mi regalo. - dijo mientras lo dejaba de nuevo en su posición original.

Dai suspiro y hecho un ultimo vistazo al apartamento transportándose a otras habitaciones haciendo un recorrido.

- Lo lamento mucho chicos. No nos veremos dentro de un rato. - dijo sonriendo melancólica para luego transportarse de nuevo, esta vez para luego regresar a la guarida de Orochimaru.

- ¡Dai-chan regresaste! Anda estábamos por cenar, te estábamos esperando. - dijo Kushina mientras empujaba a Dai para sentarse junto a todos en el comedor.

- Se ve delicioso todo Kushina. ¿Qué festejamos hoy? - dijo Dai sonriente mientras miraba a todos.

- Como pasará un tiempo para que todos estemos reunidos de nuevo, prepare una cena junto a Kabuto-kun para todos. - dijo Kushina sonriente mientras le entregaba su plato lleno de comida a Dai.

- Aquí tienes Dai. - extendió Deidara a Dai una barra de chocolate con una sonrisa.

- Gracias, cariño. - dijo sonriente mientras le guiñaba un ojo y mordía el chocolate juguetona.

A todos ya le parecía normal el comportamiento descarado de Dai, así que comenzaron a comer con una sonrisa.

Incluido Sasori e Itachi tenían un atisbo de ella.

Luego de la cena Dai guardo en su mochila varios pergaminos y luego miro a su pared con el retrato.

- Vuelvo en unos meses. - dijo sonriendo y luego salió con su mochila a cuestas hacia el laboratorio.

En el laboratorio se encontraban todos. Cuando Dai entro escucho las risas de todos y al verla sonrieron mientras apuntaban a Suigetsu que insistía a Sasori que lo llevara en su mini espalda.

- Anda Sasori, un segundo. - dijo Suigetsu rogando.

- No. -

- Anda. -

- No. -

- .... - Suigetsu aprovecho su descuido y se arrojo a su espalda, cuando de pronto una patada llego a su costado arrojándolo a Itachi que se reía entre dientes y lo atrapaba.

- Consíguete tu transporte Suigetsu. Sasori solo me cargara a mi ¿verdad Sasori? - dijo pestañeando a este, Sasori la vio y bufo molesto sin verla.

Dai sonrió malvada y se arrojó a sus brazos arrojando todo su peso en él. Este vio a través de su acto y la sostuvo mirándola molesto con la punta de sus orejas sonrosadas.

- Dai... - dijo molesto queriendo soltarla, pero esta como un koala se pegó a él.

- Sasori... - dijo Dai sonriendo.

*suspiro*

- Dai-chan ¿en el momento que pase todo esto volveremos a Konoha? - pregunto Kushina preocupada.

Todas las miradas estaban en Dai curiosos, ella los miro sonriendo.

- No. Konoha no me permitirá permanecer ahí sin vigilancia y ustedes saben perfectamente que yo no puedo vivir en un lugar como criminal. - dijo mientras acariciaba el cabello de Sasori mientras pensaba.

- Ya veo... - dijo Kushina triste.

Para Kushina Dai era quien la había traído de nuevo a la vida, el estar en Konoha para ella sin Dai era imposible. Así que estaba un poco triste el no poder estar junto a su hijo aún.

- Tranquila Kushina, una vez que la guerra termine podrás estar junto a Naruto, también podrás ir a Konoha si quieres. Nadie te dirá nada si lo haces, lo prometo y podrás visitarme cuando lo desees. - dijo Dai mientras se bajaba de los brazos de Sasori y caminaba hacia su mochila con una sonrisa.

- Una vez estemos en el Bosque Shikkotsu entrenando Orochimaru iniciara con los planes. Cuando acabemos con el entrenamiento nosotros iremos a su ubicación. - dijo Dai mientras caminaba a Itachi, Karin y Jiraiya.

Todos sonrieron y agitaron sus manos a los cuatro. Dai abrió un portal hacia el Bosque y les sonrió yéndose.

[...]

Una vez que Dai y su equipo se marcharon la guarida se sumergió en un estado de seriedad.

Todos comenzaron a partir para cumplir con sus roles establecidos.

En todos lados se podía sentir la tensión de la guerra. En Konoha, Tsunade junto a los demás Kages organizaban los preparativos de los ejércitos.

El equipo Yamato se encontraba dividido mientras entrenaban, cada uno con propósitos iguales, pero tan diferentes.

Obito se encontraba serio mientras se estaba preparando, reuniendo a los bijū con sus jinchūriki.

Zetsu se encontraba preocupado mientras recordaba el extraño sujeto que de vez en cuando se aprecia en su radio sin poder detenerlo.

Dai mientras tanto se estaba junto a Katsuyu observando a Itachi intentando dominar la energía natural y Karin se encontraba estudiando unos pergaminos junto a ella.

- Katsuyu espero no hayas informado a Tsunade nuestra ubicación y mucho menos el que Jiraiya está vivo. Es importante guardarlo como una sorpresa para el final. - dijo Dai sonriéndole a la enorme babosa junto a ella.

- Claro Dai-sama, no revelare sus ubicaciones. Aunque tengo un contrato con ella no revelo los detalles de mis demás invocadores a nadie. - dijo seria a Dai.

- Gracias Katsuyu. - dijo Dai mientras le sonreía.

- Estoy para servirle Dai-sama. - dijo Katsuyu amable.

- Admiro mucho tu habilidad de protección. Tú poder será de gran ayuda. - dijo Dai mientras pensaba.

- Yo Admiro su capacidad en el control de chakra, el como fácilmente es capaz de controlar enormes cantidades de chakra sin siquiera pensarlo. Eso demuestra un enorme talento, es admirable. - dijo Katsuyu emocionada mientras veía a Dai.

- Gracias. - dijo Dai sonriendo.

Dai veía como Itachi sudaba mientras trataba de acumular energía natural.

- La energía natural necesita mucha concentración, pero sobre todo habilidad. Me sorprende un poco que aun puedas persistir. - dijo Dai mientras caminaba hacia Itachi susurrando en su oído.

Itachi abrió sus ojos mientras la veía profundamente. Dai sonrió mientras se alejaba de ahí con una sonrisa satisfecha.

Dai paso el tiempo molestando y acosando a Itachi mientras entrenaba.

- Itachi-chan acompáñame a un lugar. Karin quédate con Katsuyu mientras volvemos dijo mientras sonreía.

- Si Dai-chan. - dijo Karin sonriéndoles.

Dai se teletransportó a un desierto, lejos de las 5 naciones. En el aire con sus alas Dai miraba el gran espacio.

Itachi estaba a su lado invocando a susano'o mirándola.

Dai descendió y con el impulso de su puño una gran área de arena se retiró revelando ruinas antiguas.

- Dai ¿Qué es aquí? - pregunto mientras descendía tras ella.

- Vengo a buscar una cosa importante que estuve buscando durante un rato. Por fin pude llegar a ella. - dijo sonriendo mientras caminaba quitándose la capucha de la cabeza adentrándose a las ruinas.

Los dos caminaron dentro del lugar vacío, Dai se guio siguiendo su instinto hasta que se toparon con una habitación y en el centro de esta estaba un collar brillando mientras flotaba expulsando un chakra purpura cobrizo.

Dai camino hacia el sin miedo y lo tomo, el chakra se fusiono con ella cuando ésta se lo puso.

Dai sonrió al ver que este se fusionaba a su piel a modo de tatuaje en el centro de su pecho.

- Vámonos querido, ya no hay nada que me interese aquí. - dijo sonriendo mientras abría un portal cruzando de nuevo hacía el Bosque Shikkotsu.

Después de esa búsqueda y al volver al entrenamiento pasaron unos meses y por fin la cuarta guerra comenzó.

Finalmente, el día de la reunión de la alianza ninja llego, Gaara tenía que dar el discurso para alentar a todos los Shinobi para comenzar la movilización.

A lo lejos se podían observar varias figuras encapuchadas mientras observan a el ejercito inquieto.

- Dentro de otro rato Dai-chan regresará ¿no? - pregunto uno de los encapuchados.

- Si. - dijo otra voz fría respondiendo.

- Ya la extraño. - dijo la primera voz.

- Mm -

- Dejen de parlotear y comiencen a moverse Suigetsu, Sasori. - dijo otro encapuchado a Suigetsu y Sasori.

- Si Konan-chan. - dijo Suigetsu mientras tomaba su gran espada y saltaban por el precipicio detrás de ellos atravesando un portal.

Konan miro al ejercito reunido y después se giro saltando igual que ellos.

- Orochimaru-sama, el ejercito se a reunido. Kushina-san ya ha ido ha ido a comprobar la situación de las marionetas a su señal las liberaremos. - dijo Suigetsu mientras se acercaba contento a Orochimaru.

- De acuerdo. Una vez el ejercito se disperse comenzaremos a liberales. - dijo Orochimaru sonriendo.

Continuará...

Hermosos Kohai por fin les traigo una nueva actualización, pero comprenderán que hay a veces contratiempos.

Ahora mismo estoy escribiendo el siguiente capítulo y lo publicare a mas tardar mañana a la madrugada.

Estaré publicando spoiler pequeños en mi Instagram para los que les interese.

Espero les haya gustado el nuevo capítulo y si es así no olviden dejar una estrellita.

Comenten sus opiniones y/o dudas y yo las responderé si es posible.

Gracias por leer, su autora y Senpai.

- Smer(๑•̀ㅁ•́ฅ✧